Impresiones con Wii U
Despu¨¦s de la conferencia Nintendo ha habilitado un sal¨®n en el que ha sido posible probar de primera mano las virtudes de la nueva plataforma. El sistema de control se ha llevado la totalidad de las miradas, aunque la potencia gr¨¢fica mostrada no se queda atr¨¢s en cuanto a relevancia. As¨ª es Wii U.
Se esperaba como agua de mayo el anuncio de una nueva consola. Nintendo hab¨ªa elegido, desde hace ya alg¨²n tiempo, el suelo de Los ?ngeles como cuna para que el mundo viese nacer a su ¨²ltimo reto?o, del que se hab¨ªa rumoreado largo y tendido con toda clase de especificaciones t¨¦cnicas. A la hora de la verdad unas se han cumplido, otras no. Las principales p¨¢ginas especializadas se hab¨ªan hecho eco de la posibilidad de que Nintendo diese una nueva vuelta de tuerca al concepto de ?revolucionar el mercado', tal y como hizo hace apenas un lustro, a?adiendo una pantalla al pad convencional. Esta afirmaci¨®n implicaba una doble bomba de relojer¨ªa: no s¨®lo se dejaba atr¨¢s el sistema impuesto por Wii, sino que se apostaba por un formato completamente nuevo, una de esas veleidades de la tecnolog¨ªa que al p¨²blico tanto le gustan.
La presentaci¨®n se realiz¨® a medio camino entre Satoru Iwata, CEO de Nintendo Japan y m¨¢ximo responsable de la compa?¨ªa, y Reggie Fils-Aime, un viejo conocido del sector que no gusta de adornos innecesarios a la hora de presentar sus productos. Sumidos entre la confusi¨®n y el desorden, se present¨® una consola de forma subliminal, solapaba bajo el peso de un nuevo pad que confirmaba parte de los rumores al tiempo que desment¨ªa otros. Se equivocaban en los mentideros al decir que Nintendo dejaba atr¨¢s su etapa de Wii. Nada m¨¢s lejos de la realidad, los de Kyoto han querido ir un paso m¨¢s all¨¢, realizando un h¨ªbrido entre una actualizaci¨®n de la capacidad t¨¦cnica de la consola y una revoluci¨®n en toda regla, al incluir un ?tablet' como sistema de control.
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Hasta aqu¨ª todo bien: nada fuera de lo normal. Lo que nadie esperaba -al menos, a juzgar por la sorpresa general que se palpaba en la pista- fue la versatilidad de este perif¨¦rico -al que nadie sab¨ªa muy bien c¨®mo dirigirse hasta que lleg¨® el tan ansiado momento de hincarle el diente-. Su utilidad supera, ciertamente, todo lo que se pudo haber previsto en la antesala de la conferencia, con un tablet multifuncional que permite cambiar de canal mientras se seguimos jugando tranquilamente desde el pad. Primero se expuso como una ventana alternativa para controlar el lanzamiento de una pelota de beisbol, para luego servir como base a la hora de realizar un swing perfecto en un campo de golf. Despu¨¦s, Iwata muestra el pad haciendo las veces de segundo monitor, ampliando la imagen original del televisor. Sin pausa, se confirma la posibilidad de utilizar el pad como un tablet propiamente dicho, o al menos -a¨²n circula la duda en nuestra mente- como una especie de consola port¨¢til en la que disfrutar de juegos de mesa. Unas damas ejemplificaron sobre la marcha algo tan dif¨ªcil de concebir como un pad que redirige la atenci¨®n del jugador en el sentido m¨¢s amplio de la palabra.
| Wii U - La imagen de la consola |
En cuesti¨®n de minutos hemos pasado de no conocer nada a manejar una cantidad de informaci¨®n tan cuantiosa que resulta casi imposible concebir el curso natural de los acontecimientos -presentar varios juegos de peso para calentar motores-. Sobra a?adir m¨¢s informaci¨®n sobre la conferencia (que pudimos ver alegremente en riguroso directo a trav¨¦s de la se?al de esta casa). A su t¨¦rmino, pudimos acceder a una sala separada de la multitud en la que se pudo probar, tras infinitas divagaciones, el verdadero potencial de esta m¨¢quina corriendo en tiempo real. ?bamos sobre aviso: Reggie hab¨ªa se?alado en varias ocasiones que estas demostraciones no son exactamente ?juegos', sino m¨¢s bien ?pruebas t¨¦cnicas' que sirven para comprobar la utilidad del pad en seg¨²n qu¨¦ circunstancias.
Nuestra mirada se clava en el pad. Los controles incluyen la cl¨¢sica disposici¨®n A/B/X/Y a la que se le suma la presencia de los botones superiores, L/R, adem¨¢s de dos gatillos en la parte trasera ZL/ZR. Del mismo modo hace uso de dos sticks anal¨®gicos y de una cruceta direccional, de tal modo que es posible combinar dos estilos de juego totalmente contrapuestos. El mando es muy manejable, pese a que rompe todos los est¨¢ndares habituales para un pad -si puede llamarse as¨ª- tiene un dise?o en el que nuestras manos descansan sin sentirse inc¨®modas. Los dedos coraz¨®n se colocan sobre los gatillos principales, los ¨ªndices sobre los secundarios, y los pulgares, sobre los dos anal¨®gicos. Esto termina estabilizando el mando contra las palmas de nuestras manos.
La consola se apoya en una pantalla de 6,2 pulgadas (15,7 cent¨ªmetros) y en una pantalla t¨¢ctil de 16x9. El tama?o no se percibe excesivamente grande. Es mucho m¨¢s peque?o que un iPad, aproximadamente tres pulgadas menos. El ¨¢rea de la pantalla es bastante m¨¢s reducido, ya que incluye un reborde o marco exterior bastante grueso. En ese marco se encuentran los cuatro botones principales a la derecha, la cruceta a la izquierda y el resto de controles, con el bot¨®n Home. La pantalla tiene un acabado brillo en el cristal que permite ver con claridad, pero hemos de decir que PS Vita en este aspecto era capaz de transmitir mayor luminosidad. En cualquier caso, el propio Satoru Iwata comentaba durante la conferencia que el pad no estaba 'pensado como una consola port¨¢til', algo que deber¨¢ ser tenido en cuenta en el futuro.
Adem¨¢s de lo expuesto, en su interior esconde un aceler¨®metro, un sensor de movimiento, soporte para vibraci¨®n, c¨¢mara, micro y un sensor acompa?ado de un stylus. No tiene un peso prominente, es ligero, pese a que incluye bater¨ªa y es inal¨¢mbrico. Ciertamente resulta curioso ver por primera vez un dispositivo tan at¨ªpico que se abre paso por encima de otros modelos bastante m¨¢s estandarizados tras la popularidad de los tablets en general. Su rendimiento es id¨¦ntico o incluso mejor, ya que pese a ser t¨¢ctil, los controles son tradicionales. La consola ser¨¢ compatible con los accesorios de Wii, tal es el caso del mando cl¨¢sico, el nunchuk, el perif¨¦rico Wii Zapper o el Balance Board.
Los juegos
O mejor dicho: las demostraciones t¨¦cnicas que, como bien enfatizaba Reggie Fils-Aime, son estrictamente necesarias para comprender la nueva perspectiva hacia la que se encamina Wii U. El cuarto donde se celebra la presentaci¨®n alberga cinco pruebas de distinta ¨ªndole, cada una claramente destinada a probar la capacidad del mando -o tablet- a la hora de someterse a distintas mec¨¢nicas. Nuestra mirada se centra en ?Chase Mii' (Persigue al Mii), un t¨ªtulo pensado en el disfrute de cinco jugadores. Mientras que tres de ellos aparecen en la televisi¨®n, otro se queda en el pad, de manera que podemos controlar sin el menor problema el curso de los acontecimientos. Aqu¨ª se permite hacer uso del control tradicional o del giroscopio, ambos perfectamente adaptados.
Shield Pose lleva un paso m¨¢s all¨¢ el concepto del pad al obligarnos a cambiar la perspectiva m¨¢s all¨¢ de la pantalla para bloquear las flechas enemigas que tratan de herirnos. Es un juego eminentemente musical, bastante vistoso, de aspecto infantil. Parece la base de un hack ?n slash multitudinario. Sobre New Super Mario Bros. Mii poco se puede a?adir a lo expuesto durante la conferencia, ya que transmite la sensaci¨®n de ser un Mario tradicional al que ahora se le puede a?adir la presencia de nuestro avatar virtual. Una de las demos m¨¢s interesantes lleva el sobrenombre HD Experience. En ella se mostraba a Link batallando con una ara?a gigantesca (lo que ha llevado a rumores sobre la presencia de un posible nuevo de juego, algo que no se ha confirmado). La parte m¨¢s interesante, obviando el contenido, pasa por el nivel de calidad gr¨¢fica expuesta: nada que envidiar a los referentes m¨¢s importantes de esta generaci¨®n. Battle Mii cierra el c¨ªrculo siendo probablemente el m¨¢s interesante de todos, con dos jugadores controlando un wiimote a los mandos del arsenal de una nave espacial y un tercera, pad de Wii U en mano, pilotando la nave. Sencillamente impresionante.
Reflexi¨®n a pie de pista
Las primeras impresiones con la consola son, en suma, positivas. El manejo del mando aprueba con nota tanto en juegos de corte tradicional, con New Super Mario Bross Mii a la cabeza -se maneja exactamente igual que su versi¨®n Wii-, como en algunos de los nuevos minijuegos disponibles, por ejemplo Shield Pose. Esta demostraci¨®n obliga a usar la pantalla del mando de Wii U para rastrear el ¨¢rea m¨¢s all¨¢ de la televisi¨®n, en busca de enemigos y de sus sensores de movimientos para bloquear las flechas que tratan de herirnos. Lo curioso es que no s¨®lo resulta sorprendente, sino tambi¨¦n divertido. No cabe la menor duda que la jugabilidad se enfoca desde un punto de vista que no se ha visto en esta generaci¨®n, con lo que se abre una puerta hacia nuevos -y queremos pensar, muy interesantes- horizontes. Como de costumbre habr¨¢ que esperar al menos hasta 2012 para confirmas estas buenas impresiones.
