DiRT 3
- PlataformaPC8.5PS38.53608.5
- G谷neroConducci車n, Simulaci車n
- DesarrolladorCodemasters
- Lanzamiento24/05/2011
- EditorCodemasters
Quema rueda y pisa a fondo
Dirt 3 llega ya sin el padrino Colin McRae. Tras las sonadas cr赤ticas que sufri車 su segunda entrega, lo 迆ltimo de Codemasters derrapa en las mec芍nicas arcade y vuelve a girar hacia el realismo. Pero no por ello obvia una nueva mec芍nica: el freestyle motorizado.
Existi車 una 谷poca, all芍 por los tiempos de la primera PlayStation y Nintendo 64, en la que el g谷nero del rally estuvo tan de moda en los videojuegos que todos los grandes nombres de esta disciplina del motor se interesaron por la industria y no fueron pocos los que firmaron apariciones y apadrinamientos a los numerosos desarrollos que iban viendo la luz. El World Rally Championship inspir車 un juego hom車nimo buen赤simo, a los que se unieron otros tantos como la ya entonces veterana saga Sega Rally, la menos aclamada V-Rally, o el demoledor y mejor de todos desde su aparici車n, Colin McRae Rally. Dirt es el sobrenombre que acu?車 la licencia desde que salt車 a esta generaci車n de consolas, y esta tercera entrega abandona por primera vez al piloto escoc谷s fallecido en 2007 para ejecutar una acci車n de reseteo absoluto de la saga con total impunidad. Tras jugarlo en profundidad estamos seguros de que verdaderamente es as赤, Dirt 3 es una curva cerrada, una horquilla de 180?, en la carrera con alg迆n que otro bache que estaba siguiendo la franquicia.
Buscando un alejamiento tangible de los dos primeros Dirt e intentando adelantar a cualquier otro nombre que pueda hacerle frente actualmente, el equipo de Codemasters encargado del nuevo t赤tulo ha prestado absoluta atenci車n al feedback emitido por los usuarios de las anteriores entregas, en el que sobresal赤an las peticiones de que la saga retornara a su esencia de simulaci車n realista abandonando de esta forma el esp赤ritu arcade y de diversi車n directa y espect芍culo con que lleg車 a la actual generaci車n de videojuegos. Dicho y hecho, aunque sin arriesgarlo todo en este importante paso. Sus responsables han tenido la destreza de componer un juego mixto, que puede ser accesible, sencillo, permisivo y exagerado para los que busquen diversi車n r芍pida y sin ataduras de un control engorroso, y realista, complejo y exigente para los jugadores m芍s experimentados en esto de las carreras off-road. El juego sabe c車mo desafiarnos e invitarnos con diversos obsequios a ir aument芍ndole la dificultad hasta llegar al manejo "Avanzado", donde, en palabras de los locutores que nos acompa?ar芍n en todos los men迆s, viviremos "la aut谷ntica experiencia Dirt".
Del arcade a la simulaci車n
Manejo de los veh赤culos realista y exigente, pesos y f赤sicas fielmente conseguidos, mejor Inteligencia Artificial de los contrincantes, eliminaci車n de todas las ayudas en carrera o da?os m芍s verdaderos e importantes para el coche son algunos de los par芍metros que se endurecer芍n al aumentar el nivel de dificultad al juego, algo muy relevante en su trascurso y que podremos modular antes de cada carrera, detalle a detalle o simplemente eligiendo entre tres modalidades: "Principiante", "Intermedio" y "Avanzado". Los locutores nos reciben se?alando que los jugadores que vengan de entregas anteriores deber赤an optar directamente por las dos 迆ltimas, ya que la primera hace el juego excesivamente sencillo, casi sin tener que soltar el acelerador en ning迆n momento y hasta con frenada autom芍tica. Es exageradamente f芍cil y quiz芍 est谷 un poco desequilibrada en relaci車n a los perfectos retos que proponen las otras dos modalidades. Como decimos, podremos movernos de una a otra siempre para no atascarnos en ninguna carrera, algo que no termina de convencernos aunque tendr芍 sus leves repercusiones en las recompensas que se nos den al finalizar cada circuito.
Por todo ello, podemos decir tranquilamente que Dirt 3, en su modalidad Intermedia o Avanzada ha regresado al realismo jugable que tan popular hizo a sus primeras entregas. Pero, ?qu谷 ocurre con lo visual y puramente t谷cnico? El nuevo juego de los estudios especialistas en conducci車n mantiene sus promesas y atenci車n a las peticiones, y ha logrado conseguir unas respuestas envidiables de todos y cada uno de los coches sobre todas y cada una de las superficies. Hay absolutas diferencias en pantalla y sentidas en las manos en el hecho de manejar un todoterreno en nieve o un coche del llamado tipo B -tambi谷n inclu赤dos y numerosos- en arena. Se nota y mucho un charco, un desnivel o un cambio de superficie (asfalto, madera, grava...). En la realidad no ser赤an unas conducciones similares, y en Dirt 3, por ello, tampoco. El juego tiene un comportamiento t谷cnico magn赤fico en este sentido, y Codemasters ha sabido hacer de ello su principal atractivo y condici車n a tener en cuenta en todos los circuitos.
Con esto, el segundo gran componente de Dirt 3 es la personalizaci車n de los coches, muy t谷cnica y que notaremos en cuanto apliquemos cambios en los niveles o selectores de activaci車n. El juego coloca por defecto unos par芍metros pero a medida que avancemos y ganemos reputaci車n podremos tocarlos m芍s para adaptar la respuesta de los autom車viles a nuestro juego, por ejemplo, dando mucha potencia a los frenos porque solemos coger las curvas desde un mal 芍ngulo y con velocidad intermitente. Esto tambi谷n se sustenta en cada trazado, unos m芍s accidentados que otros, con distintas condiciones climatol車gicas y que nos invitar芍n a personalizar nuestros veh赤culos internamente seg迆n cada prueba y circuito concreto. La variedad est芍 asegurada de esta forma al igual que la que consiguen los m芍s de cien circuitos que plantea el juego para sus m芍s de cincuenta coches. Buenas cifras que ganan protagonismo al considerar las ocho modalidades de carrera que encontraremos, entre las que hay encuentros cara a cara, pistas libres para hacer puntos, carreras r芍pidas o rally cl芍sico, junto a otros tantos modos multijugador, como veremos m芍s adelante.
Acrobacias a cuatro ruedas
Dirt 3 no se conforma con intentar llevar el rally a un nuevo pelda?o jugable y realista e incorpora una mec芍nica que da al juego un toque desenfadado, algo informal y deportivo que puede no convencer a todo el mundo pero que, para los menos puristas, ser芍 un aliciente de diversi車n. As赤 est芍n tratados por los locutores del juego los retos freestyle, como un premio, un recreo entre tanta carrera pura para hacer locuras con los coches y conseguir espect芍culo pirot谷cnico sin m芍s raz車n que la puesta al l赤mite de los b車lidos y el petardeo de sus motores en grandes entornos preparados para quemar rueda con derrapes, saltos, trompos, choques... En el modo Campeonato (principal single player) todos estos niveles Bonus se han introducido en la denominada en el g谷nero Gymkhana. La marca de ropa y zapatillas DC es la encargada de ofertarnos varios desaf赤os para demostrar que el estilo protagonizado por el popular Ken Block tambi谷n est芍 a nuestro alcance desde los mandos de una consola.
Las pruebas de Gymkhana son una novedad aut谷ntica en Dirt 3 y todo el g谷nero del rally virtual. El nuevo juego de Codemasters introduce el estilo con buen tino aunque nos sugiera con ello, inevitablemente, otros grandes productos del skateboarding o el BMX, por ejemplo, como los ya poco sonados t赤tulos de Tony Hawk o Dave Mirra. Los escenarios dispuestos para el motor-freestyle son aut谷nticos parques de atracciones para shows de coches. Rampas, saltos, escalones de altura, tubos, halfpipes, camiones, contenedores, arena, andamios... todo lo que podamos imaginar puesto a nuestro servicio para enloquecer al p迆blico, que pedir芍 acrobacias cambiantes y una ejecuci車n perfecta de las mismas para otorgarnos una posici車n en los rankings de cada prueba, variadas y realmente divertidas pero que nada tienen que ver con el resto del juego, aunque respetan todo el manejo y par芍metros que queramos asociar a los coches.
Este modo es tan importante, grande y aceptablemente cuidado que su juego competitivo tambi谷n dispone torneos de 谷l. Y ya no solo retando a los jugadores a conseguir m芍s puntos que el resto, sino en una interesante recopilaci車n de modos llamados Fiesta Dirt que mezclan mec芍nicas de otros multiplayer de otros g谷neros con la conducci車n, como una especie de capturar la bandera o un juego en el que un coche debe infectar al resto chocando contra ellos. Los veremos todos en su apartado correspondiente, aunque podemos decir ya que su frescura est芍 estrechamente ligada con las mec芍nicas sencillas, arcade y de diversi車n r芍pida que proponen, lejos de la competici車n medianamente seria. Pero que no haya enga?os, esto no es ning迆n handicap.
Domina la pista
Nos centramos ahora en el modo principal de Dirt 3 para un jugador y pilar que soporta toda la estructura del juego, el Campeonato. Con acceso a cuatro temporadas, el juego empieza con la principal, que servir芍 para darnos a conocer y coger algo de soltura seg迆n nos comentan los locutores y representantes que comienzan a hacer acto de presencia para hablarnos de marcas interesadas en nosotros, partners, dotes b芍sicas de cada tipo de competici車n... Y sobre estos tipos, Dirt 3 nos deja correr en Rally y Trailblazer (recorrer distancias de punto a punto aunque la segunda m芍s centrada en la velocidad), Rallycross y Landrush (carreras con diversas superficies e irregularidad de terrenos), y Head to Head (cara a cara contra otro piloto en circuitos entrelazados). Cada temporada, materializada en pir芍mides desplegables, tiene tres torneos m芍s una final, y cada torneo unas 6 u 8 competiciones. Adem芍s, el juego nos ir芍 desbloqueando m芍s pir芍mides secundarias, como los desaf赤os de Gymkhana (tratados casi como un largo modo aparte) o los World Tours, que nos dejar芍n correr en competiciones solo para aut谷nticos 赤dolos del motor de todos los tiempos.
Aparece aqu赤 otro factor importante en Dirt 3, el "todos los tiempos", ya que el juego nos pondr芍 al volante de reliquias de hace m芍s de 50 a?os. Desde los primeros rallies de los 60 hasta la actualidad, el t赤tulo hace un repaso de todo el mundo de las carreras en circuitos abruptos a velocidades y estilos de conducci車n muy variados y que iremos repasando en todas las competiciones. Modelos cl芍sicos, como el Toyota Celica de Carlos Sainz y el inmortal Audi Quattro se dan cita con otros m芍s modernos, como el Peugeot 207 o el Mitsubishi Lancer. Seg迆n los resultados obtenidos en cada carrera obtendremos Puntos de Rango, unos cr谷ditos que ir芍n rellenando un marcador que va aumentando su n迆mero -como si de una subida de nivel de un juego de rol con puntos de experiencia se tratara- y consigue con ello llamar la atenci車n de licencias (reales) interesadas en nosotros, las que nos desbloquear芍n m芍s pistas y veh赤culos. La dificultad en la que disputemos la carrera, la posici車n de llegada, los flashbacks empleados y otros aspectos determinar芍n cu芍ntos Puntos de Rango obtenemos en cada caso. Los flashbacks ya los hab赤amos visto en otros juegos, son retrocesos en el tiempo medidos por nosotros mismos para corregir una curva mal tomada o un frenazo mal dado que nos pudiera suponer la p谷rdida de la carrera o la marca de tiempo que quer赤amos. Est芍n limitados y se penaliza su uso. Por 迆ltimo sobre este modo, siempre dispondremos de acceso a varias pruebas a la vez, para no aburrirnos si no superamos una pista en concreto, un nuevo cable echado por parte de Codemasters a los m芍s ocasionales.
Sentir el coche
Como dec赤amos al principio, frente al mimo -quiz芍 exagerado- hacia los nuevos jugadores, Dirt 3 pretende ser una insignia en el g谷nero por su realismo y juego hardcore. No es de extra?ar que sus desarrolladores hayan querido contar con la presencia activa y pruebas continuas de resultados de pilotos reales, como el ya nombrado Ken Block o el tambi谷n c谷lebre Kris Meeke. La experiencia de estos dos pesos pesados del mundo del motor aseguraba a sus responsables un producto s車lido y veros赤mil, capaz de extremecer a cualquiera si consegu赤a impresionarlos a ellos. El juego, como venimos diciendo, es magn赤fico en este sentido y sabe mostrar cada deslizamiento de las ruedas, fuerzas centr赤fugas de la curvas afectando a las carrocer赤as, consecuencias del frenado directo, tracciones, diferencial, amortiguaci車n y peso o calidad de la rueda sobre cada terreno, que tambi谷n afectar芍 mucho a los comportamientos y nos obligar芍 a cambiar la agresividad de conducci車n, sobre todo en la nieve, la superficie nueva en la saga que nos obligar芍 a medir bien los volantazos y frenos de mano.
Podremos manipular desde la suspensi車n o la altura de conducci車n hasta la relaci車n de cambio o la carga aerodin芍mica, aunque todo ello con un sistema de men迆s algo arcaico en relaci車n a los vistos, por ejemplo, en Gran Turismo 5. A la hora de ajustar la dificultad de forma avanzada, tambi谷n podremos activar la senda verde sobre el trazado que nos indique la posici車n y velocidad perfectas para tomar las curvas, comentarios y avisos del copiloto, regulador de velocidad, control de estabilidad, frenada autom芍tica al girar, etc. En conjunto son muchas ayudas para todo aquel que no haya jugado nunca a juegos de conducci車n -o casi podr赤amos decir que estas ayudas son para todo aquel que no haya jugado nunca a videojuegos-, simplificadoras de la mec芍nica al m芍ximo y empobrecedoras de la experiencia en pr芍cticamente todas sus facetas. Podemos destacar en este punto que la Inteligencia Artificial del resto de competidores manejados por la CPU no es muy alta incluso en la modalidad de juego Avanzada.
?El apartado t谷cnico que esper芍bamos?
Dirt 3 es visualmente sobresaliente, pero no podemos decir por ello que llegue a impactar como muchos esperaban tras ver los excelentes resultados gr芍ficos obtenidos por juegos de coches que ya tienen su tiempo, como Forza Motorsport 3 o el mencionado Gran Turismo 5. Su proeza visual reside m芍s en los comportamientos f赤sicos, da?os en los coches, part赤culas de polvo, humo o nieve, y recreaci車n meteorol車gica de las variadas localizaciones que en el dise?o, poligonado y brillo de los veh赤culos, nivel de detalle del fondo de los escenarios o incidencias del barro y el agua sobre las carrocer赤as. El sistema de f赤sicas de Dirt 3 es el aut谷ntico espect芍culo, expresado sobre todo cuando tenemos el mando en las manos y notamos verdaderamente los comportamientos. Los escenarios tienen muchos elementos destruibles y todo el juego luce, en este sentido, gran solidez y fluidez.
Su apartado sonoro tampoco decepciona, de ninguna manera. Varias voces en perfecto castellano nos acompa?ar芍n durante todo el juego, explic芍ndonos cada men迆, tipo de pista, recomendaciones de personalizaci車n de los coches, avisos de nuevas ofertas de marcas, tipos de carrera, opciones... Son los locutores que ven赤amos comentando y nuestros representantes y gu赤as en esto del rally. Otro nuevo apoyo para ocasionales pero que no molesta en absoluto. La m迆sica, solo emitida durante los men迆s, ha sido elegida con muy buen gusto y consigue ambientar el juego, con ritmos electr車nicos y de rock indie de grupos selectos cl芍sicos y actuales como Atmosphere, Everything Everything, Moloko, Harlem o Phonat, muy desconocidos pero con mucho que ofrecer como se podr芍 o赤r. Toda la localizaci車n sonora del juego est芍 muy bien conseguida, tambi谷n en los efectos, captados de coches reales y su paso por las distintas superficies o colisiones. El resulado es formidable.
Derrape conjunto
Codemasters quer赤a tambi谷n con Dirt 3 convertirse en el referente de la competici車n automovil赤stica en videojuegos. Intenci車n no le ha faltado y eso se nota en cuanto accedamos por primera vez a su modo Multijugador y veamos todas las opciones que han puesto sus desarrolladores a nuestra disposici車n para hacer de 谷sta su principal modalidad en cuanto acabemos con el single player, largo pero no tan enorme como el de otros t赤tulos actuales del g谷nero. Todos los tipos de carrera que repas芍bamos antes estar芍n para ser jugados online o a pantalla dividida. Podremos seleccionar cualquier coche de nuestro garaje y hacer ajustes sobre las pistas donde vamos a competir, configurar la meteorolog赤a, si habr芍 asfalto, nieve o barro, ayudas que permanecer芍n activas o reglas obligatorias para todos los jugadores, como correr todo el enfrentamiento desde la vista subjetiva dentro del coche. Con cada victoria, ganamos Fans, que son los puntos de experiencia aqu赤 para determinar qu谷 reputacion tenemos en el online y que variar芍n seg迆n a quien nos enfrentemos. Adem芍s, un indicador verde, rojo o amarillo se?alara nuestra agresividad en las carreras, determinando si somos corredores limpios o abusamos de los choques contra los rivales. Innegablemente son buenas ideas para equilibrar el juego en red y saber a qui谷n nos enfrentamos en cada caso.
Pero, sin lugar a dudas, la gran sorpresa en este sentido de Dirt 3 son sus nuevos modos de Fiesta: Outbreak es un todos contra todos en una pista abierta de las de Gymkhana en el que un coche al azar empezar芍 infectado y tendra que chocar contra los dem芍s para infectarlos y pasar ese mal end谷mico que no nos deja coger puntos. Transporter nos reta a llevar banderas del equipo contrario a nuestra base, pudiendo tambi谷n quitaras con colisiones. Invasi車n llena de robots de cart車n el escenario y tendremos que eliminar el m芍ximo posible antes que otros coches sin llevarnos por el camino a los edificios colindantes. Cat 'n' Mouse es el 迆nico modo de los de Fiesta Dirt que sucede en pistas est芍ndar, donde todos los coches de un equipo deben escoltar a uno m芍s lento (rat車n) para que llegue a la meta antes que el del equipo rival. El frenetismo y cachondeo en todos estos modos est芍 asegurado, dan al juego un aire desenfadado y arcade pero son realmente divertidos y los veremos bastante por el Xbox Live y PlayStation Network. Desde el primer d赤a tendremos en ambos sistemas varios packs descargables de expansi車n, con circuitos y coches extras.
Conclusiones
Bastante lejos de los anteriores juegos de la saga, la tercera entrega de la que era m芍s conocida por su padrino Colin McRae lleva el mundo del rally y el off-road de espect芍culo en general a un nuevo nivel. Variedad, realismo y una invitaci車n suculenta a introducirnos en esta competici車n automovil赤stica son los primeros conceptos que se nos vienen a la cabeza tras haber pasado muchas horas con 谷l. Dirt 3 es un equilibrio casi pefecto entre atenci車n desmedida al juego ocasional y respeto hacia el jugador hardcore que busca una experiencia de simulaci車n veros赤mil. Pero decimos casi perfecto, pues hay algunos apartados que no presentan el cuidado que s赤 se ha puesto en equilibrar bien la jugabilidad, como el aburrido y extremo modo de dificultad Principiante, donde solo tendremos que mantener el acelerador a fondo para ganar todas las carreras. Lo dec赤a en otro An芍lisis, y las compa赤as deben empezar a enterarse: ser jugador ocasional no es sinonimo de no saber apretar dos botones a la vez.
El modo Gymkhana y la introducci車n del freestyle de acrobacias en el g谷nero del rally es todo un acierto y se ha ejecutado con maestr赤a. Este "bonus" a las carreras y las etapas est芍ndar nos pondr芍 en la piel de Ken Block y otros conocidos pilotos del que es hoy el estilo m芍s espectacular. Y, por supuesto, podremos competir online contra el resto del mundo o subir nuestras haza?as al volante a YouTube directamente desde el juego. Tambi谷n hacen aparici車n por primera vez en el g谷nero y para quitarle algo m芍s de seriedad los modos multijugador Fiesta, que son absolutamente divertidos aunque se alejan de la sobriedad que por otro lado sabe conseguir bien el juego con las mec芍nicas y puesta en escenas que todos esper芍bamos. Estamos ante un producto a la altura que busca satisfacer a todos y podemos decir que lo consigue. Algunos errores gr芍ficos o de Inteligencia Artificial sumados a su no tan excesiva duraci車n o un garaje que podr赤a ser mayor no le dejan coronarse como la obra maestra que esper芍bamos. Aunque que no quepa duda por ello de que estamos ante la mejor m芍quina de rally de la generaci車n.
Lo mejor:
Lo peor:
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del g谷nero. Est芍 bien cuidado a todos los niveles. C車mpralo.