Max Payne 3
Cuando parec¨ªa haber ca¨ªdo en el ostracismo, Max Payne demuestra que sigue vivo tras los abundantes retrasos que est¨¢ sufriendo su tercera aventura. La nueva informaci¨®n que se ha dado a conocer demuestra que el desarrollo sigue a paso lento, pero seguro.
Si de algo se puede acusar a Max Payne, desde luego no es de no ser un luchador empedernido, con garra y una voluntad de hierro. As¨ª lo ha demostrado en dos juegos que han marcado una ¨¦poca, t¨ªtulos de una calidad excelente que han dejado una huella imborrable en el mercado de los videojuegos. La soberbia narrativa, la magn¨ªfica e innovadora jugabilidad, la atractiva presentaci¨®n visual? y un Max Payne herido f¨ªsica y mentalmente, cansado de la vida y del mundo pero que, al mismo tiempo, era capaz de sacar fuerzas de flaqueza y luchar una y otra vez por sus propios intereses o por lo que ¨¦l consideraba que era justo. Qu¨¦ poco se esperaba ¨¦l que su nueva aventura estar¨ªa cargada de sufrimiento desde antes de empezarla.
Ha pasado mucho tiempo ya desde el anuncio de Max Payne 3, un t¨ªtulo que deber¨ªa haber llegado al mercado den 2009, posteriormente en 2010, luego retrasado a 2011 y hasta hace muy poco ausente del calendario de lanzamientos de Rockstar para 2011-2012. Esta abundancia de retrasos hizo suponer lo peor a muchos, hasta el punto de que se lleg¨® a escuchar incluso la palabra cancelaci¨®n en alg¨²n momento, posiblemente motivada por las cr¨ªticas al cambio de aspecto del personaje. Pero si por algo se caracteriza Max es por levantarse en las situaciones m¨¢s dif¨ªciles, y cuando nadie daba un duro por ¨¦l y muchos cre¨ªan que hab¨ªa desaparecido para siempre, ha vuelto a dar se?ales de vida: unas im¨¢genes nuevas y nuevos datos de la revista brit¨¢nica Edge demuestran que Max Payne sigue vivo, aunque sin fecha de lanzamiento todav¨ªa.
El cambio de la pol¨¦mica
Desde que se anunci¨® el juego y se vieron las primeras im¨¢genes, los foros de todo internet fueron un hervidero de comentarios, quejas y especulaciones sobre el motivo de un cambio tan dr¨¢stico en el aspecto del propio personaje y de la ambientaci¨®n en s¨ª. Desde Rockstar lo dejaron siempre bien claro, este juego supone el inicio de un nuevo cap¨ªtulo en la vida de Max Payne, y seg¨²n parece todos los cambios estar¨¢n perfectamente motivados y explicados. Tal es as¨ª, que la aventura se nos presenta en forma desordenada y atemporal, intercalando momentos del presente y del pasado con una precisi¨®n total con el fin de mantener el inter¨¦s del jugador y que todo vaya cobrando sentido poco a poco.
La base narrativa b¨¢sica nos cuenta c¨®mo doce a?os despu¨¦s del segundo juego Max Payne abandon¨® nueva York para desplazarse hasta San Paulo, en Brasil. All¨ª trabaja para Rodrigo Branco y sus dos hermanos, una familia local bastante adinerada que necesita de sus servicios para distintas actividades (seg¨²n parece, hay un secuestro en medio). Es el Max que ya hemos visto en im¨¢genes, con el pelo rapado y barba, m¨¢s propio de un guerrillero callejero que del h¨¦roe atormentado que conoc¨ªamos. Sin embargo, este es el Max del futuro, cuyas secuencias de juego se ir¨¢n intercalando con otras en el pasado, protagonizadas por el hombre con el que compartimos dos largas e inolvidables aventuras (es decir, con el mismo aspecto antes del radical cambio de imagen).
Seg¨²n parece, la historia del pasado avanza y la del presente retrocede hasta alcanzar al final el cl¨ªmax en el que conoceremos el motivo por el que el h¨¦roe de la aventura se rapa la cabeza, en el momento en el que ambas l¨ªneas temporales convergen. Es dif¨ªcil saber a estas alturas qu¨¦ tal funcionar¨¢ el sistema narrativo y si la historia satisfar¨¢ a los aficionados del personaje, pero si por algo destacaron las entregas anteriores fue, precisamente, por su bella, compleja y muy satisfactoria narrativa, as¨ª que es de esperar lo mejor en este aspecto. Adem¨¢s, parece que no solo estaremos en Brasil, sino que viviremos algunas fases en Nueva York e incluso se rumorea que es posible que la secta del primer juego vuelva a hacer acto de presencia en alg¨²n momento.
No s¨®lo eso, sino que haciendo tambi¨¦n un gui?o al pasado, las tradicionales vi?etas de c¨®mic volver¨¢n a hacer acto de aparici¨®n. Eso s¨ª, con una importante incidencia del motor gr¨¢fico del propio juego que las convierte no tanto en un c¨®mic en s¨ª, sino m¨¢s bien en un cap¨ªtulo de 24, con diferentes paneles que se superponen para presentarnos algunos momentos de gran dramatismo que no nos alejan de la acci¨®n aparentando ser algo distinto a lo que estamos viviendo en ese momento. Desde luego, no se puede negar que se est¨¢ poniendo mucho mimo en cuidar hasta estos peque?os detalles que son un elemento clave del legado de Max Payne y que muchos cre¨ªan que se iban a perder para esta tercera entrega.
De hecho, tambi¨¦n se ha comentado que el objetivo es que toda la aventura sea una aut¨¦ntica experiencia cinematogr¨¢fica, de tal modo que esas vi?etas se conviertan en una mera extensi¨®n del espect¨¢culo que se vivir¨¢ en todo momento durante el juego. Tal es as¨ª que se est¨¢ trabajando mucho con la t¨¦cnica de motion capture, para lograr el m¨¢ximo realismo posible y pulir al m¨¢ximo las animaciones gracias al sistema Euphoria, el cual ya se emple¨® en otros t¨ªtulos de Rockstar como GTA IV o Red Dead Redemption. Y en este aspecto llega una gran y satisfactoria sorpresa para los aficionados, y es que James McCaffrey est¨¢ involucrado en las labores de captura de movimientos.
McCaffrey fue el doblador de Max Payne en los dos primeros juegos, y pese a que se especul¨® que no repetir¨ªa en la tercera entrega, finalmente s¨ª lo har¨¢, e incluso dar¨¢ vida al personaje con su interpretaci¨®n f¨ªsica. Todo ello para aprovechar una jugabilidad que volver¨¢ a apostar por la acci¨®n intensa y cruda, tiroteos que parecen no tener fin contra oleadas de enemigos mejor armados que nosotros. Y es que por mucho que la est¨¦tica haya cambiado en algunos aspectos de la aventura, parece que la jugabilidad seguir¨¢ apostando por las mismas directrices, aunque a?adiendo algunos nuevos detalles como el nuevo sistema de cobertura que ayudar¨¢ a que Max no sea un blanco tan f¨¢cil como pod¨ªa serlo en su primera aventura.
Y por supuesto, regresa el afamado tiempo bala que populariz¨® en los videojuegos la primera entrega y que a d¨ªa de hoy se convirti¨® en un recurso muy empleado por otros t¨ªtulos. En esta ocasi¨®n, parece que el tiempo bala se recargar¨¢ matando a enemigos, por lo que no estar¨¢ tan accesible como en otras ocasiones y tendremos que ganarnos a la fuerza el derecho a poder utilizarlo. A nivel de armamento, parece que Max podr¨¢ portar al mismo tiempo tres armas de una mano o dos armas a dos manos. No faltar¨¢, tal y como se confirm¨® desde el principio, un elemento bastante importante en la actualidad y por el que Rockstar suele apostar en todas sus ¨²ltimas producciones: el multijugador. Eso s¨ª, de momento no se han dado muchos detalles al respecto de en qu¨¦ consistir¨¢ dicho modo.
Vivo, pero con inc¨®gnitas
Lo que hemos visto durante estos ¨²ltimos d¨ªas con Max Payne es una prueba de vida que tan solo viene a asegurar que el proyecto sigue en marcha, a¨²n cuando se desconozcan muchos detalles, algunos tan importantes como la posible fecha de lanzamiento. Pese a todo, el regreso de James McCaffrey y los gui?os a un gui¨®n que nos presentar¨¢ a dos Max diferentes, explic¨¢ndonos los motivos de su cambio de aspecto, prometen un trabajo a conciencia para que los aficionados no se vean defraudados con esta nueva entrega. Tal es as¨ª, que est¨¢n colaborando los estudios de Rockstar en Vancouver, Londres, Toronto y Nueva Inglaterra. Es muy posible que los retrasos se deban a esa b¨²squeda del juego perfecto de Max Payne, conscientes del calado de las primeras dos entregas, lo cual no hace sino invitarnos a presagiar lo mejor para este cap¨ªtulo. Esperemos que no defraude y que podamos disfrutar de ¨¦l lo antes posible.
- Aventura
- Acci¨®n
Tercera entrega de las aventuras del detective Max Payne. Max est¨¢ ahora atrapado en una ciudad llena de violencia y derramamiento de sangre, en la quedeber¨¢ usar sus armas e instintos en una b¨²squeda desesperada por la verdad y una salida.
