Arte bidimensional

Arc System Works comenz¨® su mete¨®rico ascenso al estrellato con Guilty Gear (PS1, 1998), juego lanzado en el momento en que la lucha versus se encontraba en el c¨¦nit de su popularidad. Dicho t¨ªtulo era pr¨¢cticamente un homenaje a los uno contra uno m¨¢s afamados de la ¨¦poca, todos ellos provenientes de las factor¨ªas de Capcom y SNK (de hecho, en los escenarios de aquel primer Guilty Gear puede atisbarse alg¨²n que otro personaje que recuerda a luchadores m¨ªticos de las mencionadas compa?¨ªas). Pero dicho homenaje pose¨ªa una arrebatadora identidad propia que lo convirti¨® en un mito por s¨ª solo. Animados y espoleados por el arrollador ¨¦xito de cr¨ªtica y p¨²blico alcanzado, Arc System Works ech¨® el resto y nos brind¨® ya en el a?o 2000 el inconmensurable Guilty Gear X, juego programado bajo la placa Naomi (en esencia, una Dreamcast para salones recreativos) que tuvo el honor de convertirse en el primer t¨ªtulo de lucha versus cuyos gr¨¢ficos alcanzaban una definici¨®n y resoluci¨®n digna de la por entonces reci¨¦n estrenada generaci¨®n de los 128 bits.

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En a?os sucesivos llegaron innumerables (m¨¢s bien demasiadas) expansiones de aquel rompedor Guilty Gear X, siendo la ¨²ltima de ellas el ya pr¨¢cticamente perfecto Guilty Gear XX Accent Core Plus (PSP, PS2 y Wii, 2008). Tras esto, lleg¨® la hora de un m¨¢s que agradecido cambio de aires. Arc System Works se deslig¨® de Sammy Corporation, empresa que hasta entonces hab¨ªa sido su mecenas, para emprender una aventura en solitario que deb¨ªa tener un nuevo estandarte. Puesto que los derechos sobre la marca Guilty Gear dejaron de pertenecerles, Arc System se sac¨® de la manga una nueva franquicia de lucha que era obvia heredera espiritual de la saga que tantas alegr¨ªas le hab¨ªa brindado a lo largo de toda una d¨¦cada. Hablamos, como no, de BlazBlue, que ya con su entrega inicial (lanzada a finales de 2008 en salones recreativos) dej¨® bien claro que aquellos genios del p¨ªxel y el sprite estaban m¨¢s que preparados para convertirse de nuevo en referentes del g¨¦nero.

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Tras su debut en recreativas, el primer BlazBlue (subtitulado Calamity Trigger) irrumpi¨® en plataformas dom¨¦sticas con conversiones destinadas a Xbox 360, PlayStation 3, PC y PlayStation Portable (la versi¨®n que ahora nos ocupa). La distribuci¨®n de dichos juegos en territorio europeo ha sido, en el mejor de los casos, bastante err¨¢tica, dando bandazos que van desde notables retrasos (los Calamity Trigger de 360 y PS3 llegaron de manera pr¨¢cticamente simult¨¢nea a Jap¨®n y Estados Unidos, mientras los europeos tuvimos que esperar la friolera de diez meses para poder catarlos) hasta una comercializaci¨®n paup¨¦rrima (debido principalmente a un ca¨®tico baile de distribuidoras como no se ha visto en a?os) que ha hecho que tanto este Calamity Trigger como su reciente secuela (Continuum Shift) tengan poca o nula presencia en un buen n¨²mero de tiendas especializadas en videojuegos.

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El caso de este BlazBlue Portable es, si cabe, a¨²n m¨¢s sangrante. El juego debut¨® en el mercado japon¨¦s el 25 de febrero del reci¨¦n finiquitado 2010, lanz¨¢ndose en territorio estadounidense tan solo unos d¨ªas despu¨¦s. A los europeos, c¨®mo no, nos tocaba esperar, en este caso un total de siete meses, ya que estaba previsto su lanzamiento en territorio PAL junto a la versi¨®n PC de Calamity Trigger. Tras la llegada del lanzamiento, los aficionados acabamos encontr¨¢ndonos con que el BlazBlue PC s¨ª ten¨ªa presencia en las estanter¨ªas, mientras la versi¨®n PSP no se ve¨ªa por ning¨²n lado. Esto puede ser debido tanto a la llegada de un escas¨ªsimo n¨²mero de unidades como a la posible renuncia de la distribuidora espa?ola a la hora de lanzar el juego en la Pen¨ªnsula Ib¨¦rica (nos consta que la versi¨®n PAL UK existe, as¨ª que esta segunda posibilidad quiz¨¢ sea la m¨¢s acertada). Sea como fuere y cansados ya de aguardar noticias, os ofrecemos un an¨¢lisis de tan esperado juego usando como plantilla la versi¨®n estadounidense de este BlazBlue Portable que tan buen sabor de boca nos ha dejado.

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Y es que los chicos de Arc System Works no son ni mucho menos unos novatos en esto de programar para la port¨¢til de Sony. Su afamada franquicia Guilty Gear ya cont¨® con dos entregas para PSP (Guilty Gear Judgment -2006- y Guilty Gear XX Accent Core Plus -2009-), las cuales no eran sino ports 1:1 respecto a lo visto en consolas de sobremesa. Eso s¨ª, con BlazBlue el desaf¨ªo era mucho mayor, dado que hablamos de un t¨ªtulo programado en su inicio para un hardware de la actual generaci¨®n, con gr¨¢ficos en alta definici¨®n a 720p y unos elaborad¨ªsimos fondos en tres dimensiones poseedores de unas soberbias texturas que le brindan ese aspecto anime que le ha hecho destacar a nivel est¨¦tico por encima de sus principales competidores. ?C¨®mo trasladar todo eso al ya m¨¢s que veterano hardware de PSP? Pues con mucho mimo, inteligencia y buen hacer.

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Ragna y compa?¨ªa se van de paseo

Para los que no conozcan el juego que nos ocupa, o la saga Guilty Gear de la que proviene a nivel, digamos, ap¨®crifo, mencionar que nos encontramos ante un t¨ªtulo de lucha versus elaborado en unas completas dos dimensiones a nivel tanto de jugabilidad como de personajes, que presta especial atenci¨®n a los combates a¨¦reos y los juggles (combos a¨¦reos). De entrada contamos con cuatro botones de ataque, siendo los tres primeros reservados para los cl¨¢sicos golpes r¨¢pidos, medios o fuertes; completa el cuarteto el denominado bot¨®n Drive, en el que entraremos en detalles m¨¢s adelante. Este BlazBlue Portable (que tal y como mencionamos en la introducci¨®n es una conversi¨®n de BB: Calamity Trigger, la primera entrega de la franquicia) cuenta con un total de 12 personajes a elegir, que podr¨ªamos tomar como una cifra m¨¢s que escasa si la comparamos con los otros referentes de PSP en la lucha 2D (Guilty Gear XX Accent Core Plus cuenta con 24, mientras el inmenso Street Fighter Alpha 3 Max sube la apuesta a 36). BlazBlue elimina de un plumazo dicho problema merced a una parcela en la que Arc System son aut¨¦nticos maestros a un nivel muy por encima del resto de desarrolladoras especializadas en la programaci¨®n de juegos de lucha: la diferenciaci¨®n de personajes.

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Cada uno de los 12 caracteres de BlazBlue son realmente personajes ¨²nicos, radicalmente distintos uno de otro. No encontramos luchadores con t¨¦cnicas m¨¢s o menos similares (como s¨ª sucede con Ryu, Ken o tantos otros), o que posean una serie de caracter¨ªsticas que les inviten a ser encuadrados dentro de este o aquel grupo (lanzadores de proyectiles, expertos en presas y agarres?). El cuarto bot¨®n de ataque con el que cuenta el sistema de control de BlazBlue, el anteriormente mencionado Drive, es precisamente la llave que abre las puertas de la radical diferenciaci¨®n existente entre uno u otro personaje. Dicho bot¨®n puede servir para ejecutar ataques que suman una pizca de salud a nuestra barra de energ¨ªa (caso de Ragna), controlar un bast¨®n Bo como si tuviera vida propia (Litchi), congelar a los enemigos (Jin) o simplemente invocar r¨¢fagas de viento que pueden dar lugar a las m¨¢s diversas ventajas (Rachel).

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Pero las diferencias no terminan aqu¨ª. Pr¨¢cticamente cada personaje cuenta con su propia barra de energ¨ªa personalizada para realizar ataques especiales, adem¨¢s de un estilo de lucha propio que va desde lo cl¨¢sico que podr¨ªamos esperar en un juego de Capcom o SNK (Ragna y Jin) hasta una compleja y elaborada puesta en escena que hace que pr¨¢cticamente luchemos con dos personajes de manera simult¨¢nea (Litchi y su bast¨®n Bo o Carl y su marioneta Nirvana). As¨ª, lo que en principio puede parecer una plantilla de personajes bastante corta acabar¨¢ dando tanto o m¨¢s juego que un t¨ªtulo con 40 luchadores, dado que en BlazBlue cada personaje es m¨¢s que nunca un mundo, hasta el punto que al cambiar de luchador tendremos la sensaci¨®n de estar jugando a algo completamente diferente.

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Las virtudes de BlazBlue respecto a sus competidores no acaban aqu¨ª. La actual vor¨¢gine enfebrecida que vivimos en la que el juego online se ha convertido en lo ¨²nico importante tanto para compa?¨ªas como para usuarios ha generado como da?o colateral el arrinconamiento total o parcial de todo lo que tenga que ver con la cl¨¢sica vertiente monojugador. Ello nos lleva a encontrarnos con t¨ªtulos como Super Street Fighter IV, en los que a la hora de jugar online se nos ofrecen innumerables posibilidades mientras para las partidas monojugador nos tenemos que conformar con lo m¨ªnimo indispensable, y encima sufriendo una IA vergonzante cuyo nivel de desaf¨ªo brilla por su ausencia, not¨¢ndose a la legua que ha sido un aspecto poco o nada trabajado por parte de la compa?¨ªa de turno. En definitiva, son muy malos tiempos para los usuarios que gustan de disfrutar del cl¨¢sico juego en solitario, aunque afortunadamente este BlazBlue es uno de esos t¨ªtulos que a¨²n apuestan claramente por el equilibrio en las parcelas offline y online, ofreciendo un n¨²mero id¨¦ntico e incluso superior de posibilidades en el terreno monojugador.

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De entrada dispondremos de una IA completamente configurable que puede brindarnos desde un paseo relajado para usuarios inexpertos hasta un aut¨¦ntico desaf¨ªo para jugadores m¨¢s avezados. Esta IA se encuentra m¨¢s que bien acompa?ada por un sinf¨ªn de modos de juego para disfrutar en solitario, entre los que destacan Historia, Arcade y el modo Legi¨®n del que pronto daremos m¨¢s detalles. Desgraciadamente dicha profundidad en la parcela monojugador no se ha visto acompa?ada por una oferta competente en el juego online y es que, a diferencia del BlazBlue destinado a consolas de sobremesa, en esta versi¨®n PSP no podremos jugar por Internet contra usuarios ubicados en cualquier parte del globo terr¨¢queo, encontr¨¢ndose implementada ¨²nicamente la parcela Ad-Hoc, por lo que solo podremos competir de modo local contra otros usuarios.

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Quiz¨¢ fue esta carencia de un modo verdaderamente online la que llev¨® a Arc System a desarrollar la gran novedad ofrecida por este BlazBlue Portable respecto a lo visto en las versiones lanzadas en consolas de sobremesa: el Modo Legi¨®n. Dicha modalidad es, en esencia, similar a los Modos Survival que ofrecen otros t¨ªtulos, aunque aqu¨ª se encuentra infinitamente m¨¢s elaborada, dando lugar a una profundidad salpicada con leves toques estrat¨¦gicos que es muy de agradecer. El Modo Legi¨®n comienza sobre un tablero dividido en varias casillas. Nuestro objetivo ser¨¢ conquistar dichas casillas (existen diversos tableros a elegir, cada uno correspondiente a un nivel de dificultad), para lo que entraremos en una serie de combates uno contra uno similares a los existentes en el resto de modalidades de BlazBlue Portable. Cada casilla puede estar defendida por uno o varios luchadores, y as¨ª mismo nosotros contamos con nuestro propio grupo de personajes para hacerles frente. Antes de elegir la casilla que queremos conquistar hay que tener en cuenta muchos y diversos factores. Si uno o varios de nuestros personajes caen en la refriega los habremos perdido de manera definitiva, siendo la ¨²nica v¨ªa para hacernos con nuevos efectivos la de quedarnos con uno de los luchadores que defend¨ªan la casilla reci¨¦n conquistada. As¨ª, para obtener el ¨¦xito en los tableros de este Modo Legi¨®n es indispensable conocer a fondo a los 12 luchadores del juego, dado que tendremos que echar mano de todos ellos tarde o temprano, por lo que se convierte en el apartado ideal al que acudir cuando ya hayamos exprimido al m¨¢ximo los modos Historia y Arcade que nos brinda este BlazBlue Portable.

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Ya que hemos dejado claras todas las virtudes jugables del t¨ªtulo, es hora de centrarnos en la parcela audiovisual. Como ya hemos mencionado en un p¨¢rrafo anterior, conseguir en PSP una conversi¨®n 1:1 de lo visto en el Calamity Trigger de consolas de sobremesa era virtualmente imposible. A nivel de resoluci¨®n, la pantalla de nuestra port¨¢til (el aspecto del hardware que peor ha envejecido, sobre todo si admiramos las actuales pantallas de los terminales m¨®viles m¨¢s punteros) ni mucho menos es capaz de poner en escena los sprites en alta definici¨®n de la versi¨®n original, por lo que Arc System los ha reescalado para que as¨ª cumplan las especificaciones t¨¦cnicas de PSP. Al haber sido reescalados en lugar de redibujados es inevitable encontrarnos con una p¨¦rdida de definici¨®n en el conjunto general, e incluso con una ligera pixelaci¨®n que se hace claramente perceptible en los contornos de los sprites. Sin embargo no nos llamemos a enga?o: los luchadores de BlazBlue lucen extraordinariamente bien en la pantalla de PSP, y solo notaremos la bajada de calidad si ya hemos sido testigos de c¨®mo lucen en las plataformas de sobremesa. Eso s¨ª, vaya por delante que lo mejor de todo es que no se ha quedado por el camino ni un solo frame de animaci¨®n de la versi¨®n original.

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En el tema de los escenarios tambi¨¦n exist¨ªa para Arc System Works un importante escollo a superar. Solo hay que echar un vistazo a cualquier decorado de la versi¨®n original de BlazBlue para darse cuenta de que aquello solo pod¨ªa haber sido creado en una plataforma de sobremesa de la actual generaci¨®n. El n¨²mero de elementos m¨®viles en pantalla; el asombroso nivel de detalle alcanzado en cada uno de los rincones de cada zona de batalla; el maravilloso colorido del que hacen gala sus sobresalientes texturas? Conseguir algo as¨ª en PSP era tan imposible como mantener los sprites a 720p. El baj¨®n de calidad aqu¨ª s¨ª habr¨ªa sido m¨¢s que perceptible en el caso de haber intentado trasladar los decorados tal cual a la pantalla de la port¨¢til de Sony, por lo que Arc System, en una m¨¢s que acertada decisi¨®n, ha acabado por convertirlo todo a 2D. Con ello obviamente se reducen dr¨¢sticamente los elementos m¨®viles, pero se mantiene el colorido, la definici¨®n y el enorme nivel de detalle del que hacen gala los campos de batalla del BlazBlue original. Eso s¨ª, para que no se perdiera demasiada profundidad, los grafistas de Arc System han dotado a cada escenario de m¨²ltiples planos de scroll.

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?Y qu¨¦ decir de los apartados tanto sonoro como musical? De la banda sonora se ha encargado, como no pod¨ªa ser de otra manera, el miembro m¨¢s relevante de Arc System Works, que no es otro que el genial Daisuke Ishiwatari. Dispondremos de melod¨ªas fren¨¦ticas, de impecable y elaborad¨ªsima puesta en escena, creadas no solo espec¨ªficamente para cada uno de los personajes, sino tambi¨¦n para los combates en los que seg¨²n el hilo narrativo del juego los participantes mantienen una especial relaci¨®n de amor u odio. Como es habitual en el compositor, destaca especialmente el insuperable trabajo llevado a cabo con las guitarras el¨¦ctricas, aunque tambi¨¦n existe mucha m¨¢s profundidad instrumental claramente perceptible en cada una de las notas y acordes que llegar¨¢n a nuestros extasiados o¨ªdos. Simple y llanamente, una banda sonora de matr¨ªcula de honor. En cuanto al sonido, adem¨¢s de los efectos t¨ªpicos de esta clase de juegos contamos con voces digitalizadas en una cantidad superior a lo que suele ser habitual en el g¨¦nero, encontr¨¢ndonos con que los luchadores no solo nombran a grito pelado el nombre de las t¨¦cnicas ejecutadas, sino que adem¨¢s conversan entre ellos en medio de la refriega, sobre todo aquellos que m¨¢s se conocen seg¨²n el gui¨®n del juego.

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En definitiva, ahora que nuestra querida PSP est¨¢ a punto de jubilarse para dejar paso a su sucesora, no se nos ocurre mejor manera de despedirla con todos los honores que disfrutando de este BlazBlue Portable, lo mejor que puede brindarnos la port¨¢til de Sony en lo que a lucha se refiere junto a pesos pesados de la talla de Street Fighter Alpha 3 Max o Tekken 6. La conversi¨®n por parte de Arc System Works ha sido ejemplar, manteniendo intactas todas las virtudes de la versi¨®n original destinada a plataformas de sobremesa junto a la agradecida implementaci¨®n del Modo Legi¨®n, cuyo ¨¦xito propici¨® su inclusi¨®n en el reciente BlazBlue: Continuum Shift de 360 y PS3. No es posible jugar online, ya que solo se ha implementado la modalidad Ad-Hoc, pero gracias a la m¨¢s que competente IA y al gran n¨²mero de modalidades monojugador tendremos m¨¢s que suficiente para pas¨¢rnoslo en grande.

-Absorbente jugabilidad en solitario gracias a una de las mejores IAs que se han visto en el g¨¦nero en los ¨²ltimos a?os.

-Apartado audiovisual que conserva intacta la espectacularidad de la versi¨®n original.

-El Modo Legi¨®n, la gran estrella entre las numerosas modalidades del juego.