Killzone 3, Impresiones
La Beta de Killzone 3 nos ha desvelado su modo cooperativo a pantalla partida, ni siquiera anunciado oficialmente por Guerrilla. Tambi¨¦n hemos tenido ocasi¨®n de probar el desempe?o de PlayStation Move para enfrentarnos a un engendro mec¨¢nico gigante en la continuaci¨®n de la guerra contra los Helghast. Uno de los platos fuertes para PlayStation 3 el a?o que viene tiene un aspecto inmejorable.
Sony nos ha hecho llegar una versi¨®n preliminar de lo que va a ser Killzone 3. La Beta no permite profundizar mucho en la campa?a, pues en realidad es de muy corta duraci¨®n, pero s¨ª da la oportunidad de conocer el potencial t¨¦cnico del producto y otros elementos como el mejorado control, adem¨¢s de servirnos de inigualable aperitivo de lo que est¨¢ por venir. De hecho, aunque es algo que ya se intu¨ªa seg¨²n lo que se ha ido viendo hasta ahora, lo primero de lo que nos hemos percatado de la obra de Guerrilla es lo mucho que ha progresado en todos estos aspectos paralelos al modo historia en s¨ª, resolviendo algunas de las principales cr¨ªticas de la segunda entrega de la saga. Realmente no sabemos mucho acerca de lo que ha pasado hasta ese momento y lo ¨²nico que podemos llegar a intuir es que nuestro objetivo es evitar que los Helghast despegan hacia una invasi¨®n del planeta Tierra. Estamos, por tanto, de regreso en su planeta natal.
La misi¨®n se desarrolla en lo que podr¨ªa ser una factor¨ªa abandonada y medio en ruinas que recibe a¨²n m¨¢s da?os si cabe tras nuestra incursi¨®n. En primer lugar hemos de ascender una colina en la que los Helghast est¨¢n parapetados, apoyados por un numeroso grupo de soldados y algunos tanques. Tras entrar en lo que hemos decidido llamar f¨¢brica, se eleva sobre la tierra una enorme mole met¨¢lica a la que le dan el nombre de MAWLR, una especie de cuadr¨²pedo fuertemente armado y pr¨¢cticamente imposible de derribar. S¨®lo sus conductos de ventilaci¨®n dan la sensaci¨®n de ser un punto d¨¦bil cuando se abren y ah¨ª es cuando entra en acci¨®n un nuevo arma, el WASP, un lanzamisiles que es capaz de disparar una r¨¢faga de proyectiles teledirigidos a donde apuntemos. Cuenta tambi¨¦n con un modo artiller¨ªa que provoca una explosi¨®n de amplio rango en un punto dado, perfecto para acabar con un gran n¨²mero de soldados juntos o con engendros blindados de toda clase.
Nos dirigimos entre trincheras hacia una zona situada en el flanco de dicho monstruo, esquivando a duras penas sus misiles, sus r¨¢fagas de metralleta o su devastador l¨¢ser, para hacernos con nuestro WASP. Por la zona nos esperan lanzallamas que dificultan enormemente el avance. Una vez llegamos, y de nuevo teniendo cuidado de no ser alcanzados por el pesado armamento, vamos disparando a los distintos objetivos que nos va exponiendo el MAWLR. Entre medias hay varias escenas cinem¨¢ticas que lo ¨²nico que nos dejan es que la historia en Killzone 3 seguir¨¢ siendo tan intrascendente como en las anteriores entregas, pues las discusiones entre cu¨¢l es la mejor t¨¢ctica y qu¨¦ deben hacer entre los oficiales no es que sea precisamente digna de un Oscar. Al menos entretendr¨¢n, eso s¨ª.
Otro tema podr¨ªan ser las escenas de acci¨®n pura en las que, por fortuna, no tenemos que aguantar ning¨²n di¨¢logo. Aqu¨ª quiz¨¢ si logren dejarnos con la boca abierta alguna vez, con momentos en los que los protagonistas escapan por los pelos de algo que se les viene encima o acaban con alg¨²n enemigo de forma espectacular. Especialmente rese?able es un punto en el que por fin vemos Helghast realmente nuevos, armados con cuchillos y especialmente ¨¢giles, que consiguen vencer cuerpo a cuerpo a Sev. Sus compa?eros llegan para ayudarle en deslizadores y vemos c¨®mo los mencionados Helghast saltan hasta ellos y se resisten a morir, hasta que el ¨²ltimo es atravesado de forma especialmente sangrienta por un arp¨®n, que penetra en su cr¨¢neo. Si vemos m¨¢s de esto y menos de ch¨¢chara disfrutaremos m¨¢s de las cinem¨¢ticas.
Prosiguiendo con la misi¨®n, conseguimos derribar la mort¨ªfera arma de los Helghast pero el resultado no es tan positivo como esper¨¢bamos, pues no tarda en levantarse de nuevo y liquidar a gran parte de las tropas, dejando a un gran grupo incomunicado. Los que a¨²n est¨¢n en pie, en otra zona del mapa, inician entonces la continuaci¨®n del asalto, con Sev a la cabeza. Hemos de llegar a una zona en alto alcanzando un ascensor para poder atacar desde all¨ª. En ese momento empieza una secci¨®n del nivel aut¨¦nticamente espectacular. Subidos en un deslizador, volamos alrededor suyo, disparando una vez m¨¢s en aquellos puntos donde se le puede provocar m¨¢s da?o, haciendo especial hincapi¨¦ en las metralletas y la torre de control. Logramos acabar con ¨¦l, y con esto termina nuestra demo.
Y¨¦ndonos a lo visual, no se puede decir que haya una gran evoluci¨®n en cuanto al nivel de detalle como s¨ª la hay en cuanto al n¨²mero y la tama?o de elementos mostrados en pantalla, aunque no es algo que precisamente escasease en Killzone 2 en ciertos escenarios abiertos. El tama?o del MAWLR es para quedarnos ojipl¨¢ticos y el despliegue que hace de artiller¨ªa, con todos los efectos de luz y las explosiones son dignos de ver en directo. Una pena que Sony a¨²n no nos deje ense?¨¢roslo en v¨ªdeo, con lo que tendr¨¦is que conformaros con las capturas que acompa?an a este texto. La expresividad de los rostros, no obstante, s¨ª que parece haber sido un factor en el que se han centrado y sorprender¨¢ ver a Rico y Sev con unas creciditas barbas y un aspecto ajado tras los duros meses o a?os de guerra que les preceden. Por otro lado, esta versi¨®n ya tiene soporte completo para 3D, pero no hemos tenido ocasi¨®n de ponerlo a prueba a¨²n, con lo que lo estudiaremos m¨¢s adelante.
La imagen se divide verticalmente, situando a cada jugador a un lado de la pantalla y a?adiendo una banda negra debajo en la izquierda y arriba en la derecha, dejando un rango efectivo de visi¨®n de un cuadrado aproximadamente. Esto es lo que menos nos ha gustado, dando que se limita mucho el campo visual y en ning¨²n momento da la sensaci¨®n de que el juego sufra ralentizaciones que obliguen a estas restricciones. Sumamos a eso que la capacidad de renderizar en 3D es similar a esto (pintar dos im¨¢genes en vez de una), esperamos que en Guerrilla rectifiquen y hagan la divis¨®n de forma horizontal para que no perdamos tanto espacio.
El control con el mando normal seguir¨¢ siendo, por tanto, la elecci¨®n predilecta de la mayor¨ªa y aqu¨ª s¨ª que podemos decir que han logrado aumentar la velocidad de respuesta, dando una mayor agilidad a los enfrentamientos. Realmente es lo mismo que notamos con la Beta multijugador, s¨®lo que lo hemos certificado nuevamente. Los golpes "Melee" toman prioridad situ¨¢ndose en el "L1" por defecto, para que sea m¨¢s sencillo acabar con los enemigos en el cuerpo a cuerpo de maneras realmente singulares y escabrosas. Por suerte, el juego da la opci¨®n de intercambiar el bot¨®n con el zoom, colocado en el R3, y es que estando acostumbrados a otros FPS como Call of Duty parece bastante m¨¢s natural tenerlo ah¨ª.
Dos entornos bien distintos, como son la blanca estaci¨®n helada que se dio a conocer en el E3 y esta factor¨ªa de tonos m¨¢s pardos han demostrado planteamientos y mec¨¢nicas bien distintos en Killzone 3. Parece que ¨¦sta ser¨¢ la t¨®nica de la tercera entrega, como tambi¨¦n se aprecia en el multijugador, mayor variedad de situaciones debiendo resolverlas de muy distintas formas. Poder contar con un compa?ero es un gran acierto y algo que si bien no podemos decir que realmente faltase en Killzone 2, hubiera encajado tan bien como lo hace ahora. Qu¨¦ podemos decir que no hayamos dicho ya, nos encanta c¨®mo avanza este juego y esperamos que Guerrilla nos siga sorprendiendo.
- Acci¨®n
La saga Killzone lleva la guerra de Helghast e ISA a su tercera entrega con Killzone 3 para PlayStation 3 a cargo de Guerrilla Games.