Majin and The Forsaken Kingdom
- PlataformaPS33607.5
- G¨¦neroAventura, Acci¨®n
- DesarrolladorGame Republic
- Lanzamiento26/11/2010
- TextoEspa?ol
- VocesEspa?ol
- EditorBandai Namco Entertainment
El poder de la amistad
Namco Bandai y Game Republic nos invitan a adentrarnos en un mundo fant¨¢stico en el que dos h¨¦roes deber¨¢n combinar sus fuerzas para acabar con la oscuridad que asola el reino. Un bello cuento de hadas que no termina de explotar todo su potencial en el terreno jugable.
En una ¨¦poca de grandes shooters, de t¨ªtulos de acci¨®n desenfrenada y del predominio de tonalidades gris¨¢ceas y marrones, t¨ªtulos como Majin and the Forsaken Kingdom se convierten en rarezas que apelan a un p¨²blico que busca otro tipo de cosas en un videojuego. Se trata de un t¨ªtulo que, ante todo, quiere ser un bello cuento, una tradicional historia de amistad con magia, fantas¨ªa y sentido del humor, obra de Game Republic, quienes ya nos mostraron su buen hacer en este sector con t¨ªtulos como Genji, Dragon Ball Origins o Folklore. De hecho, no son pocos los momentos en los que Majin deja vestigios de calidad propios de t¨ªtulos como ICO, adem¨¢s de esa sensaci¨®n de estar ante uno de esos juegos m¨¢gicos que pueden calar muy hondo en el usuario.
Tal vez por eso mismo, es una pena que el juego no consiga explotar plenamente todo su potencial, ya que las buenas maneras que apunta en muchos momentos se ven eclipsadas por ciertos aspectos que, como veremos a continuaci¨®n, desvirt¨²an y deslucen el resultado final. Estamos ante un juego de gran belleza narrativa, un cuento de hadas en el que la amistad y el compa?erismo son el eje central y en el que el gran enemigo, la oscuridad m¨¢s absoluta, no deja de ser una moraleja sobre el propio coraz¨®n del ser humano. Una aventura que por momentos tambi¨¦n nos deja algunas pinceladas de Zelda, pero que deber¨ªa haberse centrado m¨¢s en seguir la l¨ªnea inicial del juego de ser ¨¦l mismo, no dejarse llevar por emular a otras producciones. Una belleza narrativa que deja un buen sabor de boca, al mismo tiempo que deja entrever que deber¨ªa haber tenido aspiraciones mayores.
Tanto la civilizaci¨®n como los habitantes del reino desaparecieron, convirti¨¦ndose en parte de las criaturas de la oscuridad. Los pocos supervivientes de la cat¨¢strofe huyeron como pudieron a zonas des¨¦rticas y lejanas, con la esperanza de estar a salvo de la amenaza. Unos pocos rebeldes, armados de valor y confianza en s¨ª mismos, intentaron acabar con la oscuridad, pero esta est¨¢ bien armada y no tard¨® en eliminarlos. Un siglo m¨¢s tarde, aparece una nueva figura de un h¨¦roe, un joven ladr¨®n criado por animales que busca ayuda para recuperar el reino: el Majin, una figura mitol¨®gica de la que se dice que posee un poder incre¨ªble y que es la ¨²nica que puede a los seres de la oscuridad. Nos meteremos en su piel y nos adentraremos en lo m¨¢s hondo del castillo, donde se dice que reside la fant¨¢stica criatura.
Huyendo como podemos de los esbirros de la oscuridad, que son inmortales e inmunes a nuestros ataques, llegaremos hasta la jaula donde est¨¢ encerrada la criatura. El Majin, que pese a su colosal aspecto parece un ni?o peque?o en lo que respecta a su mentalidad, est¨¢ atrapado y muy d¨¦bil, por lo que deberemos liberarlo. Al hacerlo, no solo habremos ganado un fiel amigo y compa?ero de aventuras, sino que adem¨¢s obtendremos un arma con el que s¨ª podremos da?ar a los enemigos (aunque solo el Majin puede erradicarlos definitivamente). Comienza as¨ª una larga aventura cargada de sorpresas argumentales, con momentos memorables y, sobre todo, con una gran belleza narrativa que puede llegar a encandilar y se convierte en la principal virtud de la producci¨®n.
El h¨¦roe protagonista ser¨¢ muy h¨¢bil con la espada y podr¨¢ hacer frente a las huestes enemigas sin grandes problemas, sobre todo si le ordena al Majin que le ayude; pero estas ser¨¢n tambi¨¦n muy poderosas y suelen atacar en grupo, por lo que el enfrentamiento directo no siempre es lo m¨¢s recomendable, ni siquiera con la gran bestia de nuestro lado. Es por eso que tendremos tambi¨¦n la alternativa de jugar con la infiltraci¨®n, movi¨¦ndonos ocultos y estudiando bien los movimientos de los enemigos para avanzar sin que nos vean. Dado que le podremos dar diversas ¨®rdenes al Majin (seguirnos, esperar, atacar, acci¨®n con elementos del escenario?), en ocasiones ser¨¢ recomendable decirle que nos espere en un sitio seguro mientras investigamos la zona.
No solo eso, sino que el juego tambi¨¦n nos pondr¨¢ en situaciones en las que el Majin no podr¨¢ acompa?arnos y se quedar¨¢ esper¨¢ndonos fuera de la zona. Dado que la criatura es nuestra gran baza en la fuerza bruta y es quien nos restaura la energ¨ªa vital, no son buenas noticias y estas zonas nos obligan a un cambio de estrategia dr¨¢stico. Afortunadamente, tendremos la opci¨®n de utilizar el sigilo para acercarnos por la espalda a las criaturas y realizar muertes silenciosas. Pero es que, desgraciadamente, el sistema de combate es demasiado sencillo, anodino y repetitivo. Con una escasez alarmante de opciones para atacar (b¨¢sicamente, pulsar repetidamente el mismo bot¨®n) y con la ¨²nica alternativa de realizar un combo final con el Majin cuando el juego nos lo permite, el sistema de combate es tan extremadamente simplista que no satisface y anima a evitar los enfrentamientos.
Gana un poco en inter¨¦s cuando utilizamos las habilidades especiales del Majin, como el grito que aturde a los enemigos o las magias que va aprendiendo (viento, rayo, fuego y convertir la oscuridad en cristales), pero estas acaban estando m¨¢s enfocadas a la resoluci¨®n de puzles que a ser ¨²tiles en los propios enfrentamientos contra enemigos. La monoton¨ªa y la poca profundidad del sistema de combate contrastan sobremanera con unos puzles que alcanzan un nivel mucho m¨¢s satisfactorios. No son excesivamente complejos, ya que suelen ser de resoluci¨®n sencilla, pero s¨ª que tienen un punto de razonamiento muy agradable, sin resultar frustrantes pero con esa sensaci¨®n de estar haciendo las cosas bien tras un profundo escrutinio del entorno y las posibilidades.
Lo malo es que el avance en el juego vive por y para esos puzles, hasta el punto de que nos encontramos con situaciones extremadamente exageradas en las que la din¨¢mica nos invita a ir a un rinc¨®n del mapa para destruir una m¨¢scara que nos permitir¨¢ abrir una puerta en el rinc¨®n opuesto, para all¨ª destruir otra m¨¢scara que nos abrir¨¢ otra puerta en una zona todav¨ªa sin explorar. Esto nos obligar¨¢ a dar muchas vueltas, ya que salvo que reconozcamos mentalmente todas las m¨¢scaras, no habr¨¢ indicaciones claras de los lugares que se van desbloqueando, lo cual nos obligar¨¢ a dar vueltas por el mapa una y otra vez, una tarea que se acaba haciendo repetitiva y, hasta cierto punto, algo aburrida. Una bajada de ritmo importante que juega mucho en contra de la jugabilidad del t¨ªtulo.
Afortunadamente, la excelente belleza narrativa, la sensaci¨®n de progresar y los fant¨¢sticos combates contra jefes finales ayudan a suavizar dicha sensaci¨®n y animan al usuario a seguir avanzando en la aventura. As¨ª pues, la din¨¢mica de juego es muy sencilla, centrada fundamentalmente en la resoluci¨®n de puzles (aunque sean tan simples como darle ¨®rdenes al Majin en el momento adecuado), en la que hasta los jefes finales son un puzle en s¨ª mismos y no se pueden derrotar por la simple fuerza bruta. Encontrar el camino, resolver el puzle de rigor y buscar ese nuevo camino que se nos abre ser¨¢ la din¨¢mica que seguiremos de forma casi constante, aumentando entre medias el nivel del protagonista, del Majin y de la amistad que une a ambos compa?eros de aventuras.
La belleza de los entornos es, por momentos, casi paradis¨ªaca, con algunos lugares francamente inolvidables y muy detallados. Por su parte, los personajes tambi¨¦n est¨¢n muy cuidados, y se fusionan a la perfecci¨®n con esos entornos, logrando que entre todos se transmita esa sensaci¨®n de estar en un mundo fant¨¢stico en el que todo es posible, hasta que el protagonista hable con los animales o que no muera al caer desde alturas extremadamente elevadas. Menci¨®n especial requiere el dise?o y aspecto de los enemigos, tanto los normales como los grandes jefes finales, ya que son viscosos, oscuros y grotescos, todo por igual y al mismo tiempo; tambi¨¦n es digno de menci¨®n el ciclo noche/d¨ªa que ofrece la aventura, con cambios din¨¢micos muy bellos de hora del d¨ªa. Destacan especialmente las buenas animaciones de los personajes y la suavidad con la que se mueve todo el juego, salvo por momentos en los que las texturas tiemblan incomprensiblemente, desluciendo mucho el acabado general de la producci¨®n.
Adem¨¢s, la c¨¢mara no siempre acompa?a (pudiendo complicarnos mucho las cosas en determinados momentos y combates) y algunos niveles tienen un dise?o que deja de desear, en el que se nos puede enga?ar haci¨¦ndonos creer que hay caminos donde no los hay. Pese a todo, visualmente Majin cumple su cometido con bastante solvencia al convertirse en un aut¨¦ntico cuento en movimiento. El apartado sonoro sigue unas l¨ªneas muy similares, con melod¨ªas muy agradables y un completo trabajo de doblaje a nuestro idioma que mejora de forma sustancial el audio original. Buenas voces, varias de ellas f¨¢cilmente reconocibles, aunque no todas mantienen el mismo nivel. Ayudan a potenciar la sensaci¨®n de estar en un cuento (sobre todo el narrado) y realizan una gran labor en dicho aspecto.
Sobre su jugabilidad, es donde nos encontramos la mayor parte de los problemas del juego. El protagonista se controla con bastante solvencia, aunque no siempre haga lo que queramos al llegar al borde de una estructura. Las ¨®rdenes al Majin pueden ser una aut¨¦ntica odisea si estamos en medio de un ataque enemigo, ya que puede llegar a ser muy complicado apuntar al objetivo que deseamos. Si a esto le sumamos el extremadamente sencillo sistema de combate y lo poco satisfactorio que resulta dar vueltas por el mundo, nos encontramos con una jugabilidad que lastra la genialidad de la narrativa y el buen hacer de los abundantes puzles. Adem¨¢s, el juego dura unas 15 horas, pero no hay nada m¨¢s all¨¢ del modo historia, por lo que salvo rejugar para conseguir todos los cofres secretos o sacar todos los logros/trofeos, no hay nada m¨¢s por hacer.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.