Emergency 2012
- PlataformaPC7
- G¨¦neroEstrategia
- DesarrolladorQuadriga Games
- Lanzamiento01/11/2010
- EditorDeep Silver
Estamos en crisis
Por fin nos llega la ¨²ltima entrega de la saga Emergency. Much¨ªsima gente la esperaba para poder aparcar el anterior t¨ªtulo y hundirse de lleno en las novedades. Quiz¨¢s debamos esperar un poco m¨¢s y no aparcar del todo anteriores entregas.
Cuando una saga dura bastante tiempo siempre se le pueden criticar mil cosas, pero sin temor a equivocarnos si algo tiene ¨¦xito que se repite entrega tras entrega. En caso contrario simplemente se cierra el grifo. Para muchos la serie de videojuegos 'Emergency' no les dir¨¢ gran cosa, pero estamos hablando de la quinta entrega desde que se iniciara por all¨¢ el 1998, y si bien no han arrasado en el mercado, siempre han contado con un fiel ej¨¦rcito de seguidores, sobre todo en el norte de Europa. Gracias a esa fidelidad Ralph Stock, creador de la serie, ha podido ir mejorando cada dos a?os aproximadamente su criatura.
De hecho, Ralph Stock, uno de los veteranos dentro de nuestro mundillo en Alemania (ya lanz¨® al mercado Philosopher's Stone para el a?orado C64) cre¨® su estudio Sixteen Tons Entertainment para dar forma a la saga Emergency y alg¨²n juego no tan conocido como es MadTV. El caso es que cuando planificaba la ¨²ltima entrega de la saga decidi¨® fundar y pasar el desarrollo a Quadriga Games Entertainment para cambiar lo que ser¨ªa 'Emergency 5' a 'Emergency 2012', dando as¨ª un aire renovado a la franquicia. As¨ª pues los desarrolladores de Quadriga, afincados en Postdam cerca del bell¨ªsimo parque de Babelsberg, podr¨ªan dedicarse de lleno a un ¨²nico t¨ªtulo que seg¨²n Stock necesitaba todos sus sentidos para llevar a buen puerto.
Para aquellos que no est¨¢n familiarizados con la saga Emergency, se trata de un juego de micro gesti¨®n de servicios de emergencia. Tambi¨¦n podr¨ªamos catalogarlo como estrategia en tiempo real aunque no tendremos ning¨²n tipo de unidad de combate (a excepci¨®n de la polic¨ªa). Nuestras unidades forman parte de los cuerpos de los servicios de emergencia ante cualquier desastre, desde bomberos, ambulancias o m¨¦dicos de urgencia entre otros. El juego sigue la estela de sus predecesores y nos pondr¨¢ delante de cat¨¢strofes de todo tipo, algunas m¨¢s originales que otras para ver si tenemos el temple necesario para coordinar todas las tareas de rescate.
El primer modo de juego que sin duda atrae nuestra atenci¨®n es el modo campa?a. La verdad es que a medida que van saliendo nuevas ediciones de 'Emergency' el n¨²mero de misiones va decreciendo. En los primeros t¨ªtulos ten¨ªamos treinta, en el ¨²ltimo 'Emergency 4' cont¨¢bamos con veinte y en este tenemos doce misiones m¨¢s tres adicionales si tenemos la edici¨®n Deluxe. Algo que sin duda no pasar¨¢ inadvertido a los seguidores de la franquicia. En este modo tomamos las riendas de coordinador jefe en determinados eventos catastr¨®ficos en todo el mundo.
Las dos primeras misiones nos llevan a Colonia donde una torre de la catedral se ha venido abajo y a Londres, donde una ola de hielo a provocado que un cami¨®n cargado de combustible choque sobre un puente. Estas dos misiones iniciales son pr¨¢cticamente un tutorial aparte del tutorial y las puedes resolver en pocos minutos. Es un poco decepcionante que con tan pocas misiones incluidas, las dos primeras sean tan sencillas y sin ning¨²n aliciente para rejugarlas. No hablamos de empezar con una macro misi¨®n incontrolable y frustrante, pero si tenemos en cuenta las pocas misiones que tiene el juego, las primeras misiones m¨¢s sencillas pod¨ªan haber dado m¨¢s de si.
A partir de la tercera misi¨®n la cosa mejora y bastante. Las misiones no se limitan a atajar el problema principal, como por ejemplo rescatar a los heridos del accidente, sino que adem¨¢s tendremos que solucionar los efectos siguientes como apagar el fuego que ha provocado dicho accidente. Otro ejemplo es en 'Anarqu¨ªa en Paris' donde adem¨¢s de los incendios, tendremos que detener a los cabecillas de una revuelta mientras salvamos las vidas de heridos y m¨¢s adelante tenemos que detener a unos saqueadores en unos grandes almacenes. Se crea ese efecto domin¨® tan impredecible que ayuda a mantenernos en tensi¨®n con una buena dosis de adrenalina desenfrenada.
A partir de 'Anarqu¨ªa en Paris' el tiempo de duraci¨®n de las misiones se ver¨¢ incrementado enormemente y necesitaremos de buenas dosis de coordinaci¨®n para completarlas. Tenemos varios tipos de cat¨¢strofes que resolver en las siguientes misiones, desde una avalancha que entierra la ciudad de Innsbruck, un avi¨®n que cae sobre la plaza roja de Mosc¨², un desastre nuclear en Frankfurt o la no menos original secta de fan¨¢ticos religiosos que siembra el caos en Mallorca. Las misiones son variadas y la posibilidad de abarcar todo tipo de situaciones no esconde el principal problema: que hay pocas.
Como coordinador dispondremos de diferentes unidades de cada tipo de cuerpo que interviene en el juego. B¨¢sicamente son las mismas unidades que ya conoc¨ªamos en anteriores entregas con alg¨²n a?adido o funci¨®n extra. Para los que desconozcan el mecanismo de la serie, si por ejemplo usamos un bombero, est¨¦ tendr¨¢ disponibles varias funciones, como coger un extintor, una manguera, o herramientas para sacar a heridos de entre los restos de sus veh¨ªculos entre otras. En 'Emergency 2012' hay nuevas funciones como la posibilidad de que nuestros polic¨ªas acordonen zonas para evitar visitas inesperadas o camiones de bomberos con ca?ones de agua, e incluso un avi¨®n de vigilancia no tripulado. A¨²n as¨ª, que nadie espere cambios sustanciales. Uno de los cambios, negativos en este caso, es que en las misiones el programa elige los veh¨ªculos que participaran por ti.
Dispondremos tambi¨¦n de un modo de juego libre, donde podremos escoger tres tipos de mapas: zona de calor, de fr¨ªo o de tormentas. Con un presupuesto limitado trataremos de ir resolviendo los percances que ir¨¢n ocurriendo en nuestra ciudad. Es un atractivo modo de juego, algo m¨¢s relajante, sobre todo en el modo partida interminable donde los sucesos no pondr¨¢n a prueba a nuestros nervios y el grado de dificultad ser¨¢ siempre el mismo. Existe otro modo en juego libre, el modo reto, donde los sucesos que ocurrir¨¢n en nuestra ciudad se complicar¨¢n progresivamente hasta extremos realmente dif¨ªciles de superar. En general, este modo con m¨¢s mapas es todo un acierto.
El modo multijugador nos plantea la posibilidad de jugar un cooperativo para cuatro jugadores que intentar¨¢n por todos los medios cumplir las tareas que aleatoriamente se vayan produciendo. Aparte del cooperativo tendremos la posibilidad de jugar 'paso a paso' teniendo cada jugador un equipo, sea bomberos, polic¨ªa, m¨¦dicos o ingenieros, y cada uno actuar¨¢ en el momento que el procedimiento exija. El multijugador es divertido porque requiere una sincronizaci¨®n perfecta entre jugadores lo cual a?ade un plus de durabilidad al juego. Por supuesto que al igual que ocurri¨® en t¨ªtulos anteriores de la saga la aparici¨®n de clanes ser¨¢ cuesti¨®n de poco tiempo.
Gr¨¢ficamente, 'Emergency 2012' est¨¢ un pel¨ªn por encima de su anterior entrega, pero no lo suficiente para justificar todo este tiempo. El entorno en 3D esta detallado y nos permite movernos por las ciudades y zonas conflictivas sin ning¨²n tipo de problema, adem¨¢s juegan muy bien con las transparencias para dejarnos ver en todo momento los lugares conflictivos. Se notan ciertos adelantos gr¨¢ficos como es el uso de bump mapping o efecto de part¨ªculas en el humo, pero donde se nota m¨¢s mejor¨ªa es en la iluminaci¨®n. Los efectos de luz din¨¢micos realzan los incendios y los tonos azulados de los coches de emergencia ayudan a conseguir una mejor ambientaci¨®n. El juego por otra parte viene con textos y doblado al espa?ol, cosa que es de agradecer. Los efectos sonoros son los adecuados en una situaci¨®n de emergencia y siguen estando a un buen nivel.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.