The 3rd Birthday, Impresiones

La franquicia Parasite Eve dej¨® un buen sabor de boca a todos los que tuvieron el placer de probar su calidad, en plena explosi¨®n de los juegos de rol japoneses, hace ya algunos a?os. Fue el primer cap¨ªtulo el que mayor ¨¦xito atesor¨® en su d¨ªa, en tanto un¨ªa elementos de survival horror con toques de RPG y cinem¨¢ticas espectaculares para la ¨¦poca, todo ello en escenarios reales (nuestro mundo real invadido por monstruos), lo que hac¨ªa que se alejar¨¢ bastante de los RPGs tradicionales. Aqu¨ª en Jap¨®n fue visto como una adaptaci¨®n de una famosa novela de terror que mutaba, por decirlo de alguna manera, para convertirse en toda una aventura por salvar la ciudad de Nueva York. Era, qu¨¦ duda cabe, algo totalmente distinto a lo que est¨¢bamos acostumbrados a ver en aquel entonces.

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Por motivos comerciales, Europa se qued¨® sin disfrutar oficialmente de la primera entrega. La segunda correr¨ªa mejor suerte, aunque son muchos los que piensan que su calidad quedaba por debajo de la obra original. Hasta hace poco, parec¨ªa que la tercera no saldr¨ªa de Jap¨®n, parte por la ausencia absoluta de informaci¨®n respecto a su desarrollo (algo preocupante, ya que no suele ser habitual en Square Enix dejar de lado la campa?a publicitaria de uno de sus videojuegos, y menos de uno capital en el comercio con Occidente, como es el caso), parte por el hecho de haberse anunciado para tel¨¦fonos m¨®viles en un principio. La compa?¨ªa se dar¨ªa cuenta de su error y mover¨ªa inteligentemente el desarrollo a PSP, m¨¢s potente y adecuada para jugar (junto a FFXIII Agito, anunciado tambi¨¦n en un principio para m¨®viles).

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La estrategia que se sigue en esta ocasi¨®n para promocionar el t¨ªtulo es m¨¢s o menos la de siempre: a base de teasers, peque?os v¨ªdeos y demostraciones de corta duraci¨®n, la compa?¨ªa ha ido ense?ando sus cartas poco a poco, as¨ª como algunos detalles de la historia. Parec¨ªa que la fecha que originalmente estaba prevista para albergar el lanzamiento no iba a poder cumplirse despu¨¦s de no existir nada parecido a una demostraci¨®n en el E3, aunque poco m¨¢s tarde la situaci¨®n cambiar¨ªa en la Gamescom, donde s¨ª hubo ocasi¨®n de probar el juego en primera persona y a puerta cerrada. Con la esperanza perdida, asistimos al Tokyo Game Show con la mirada puesta en la posibilidad de ver a Aya Brea en acci¨®n tal y como lo har¨¢ en el mes de diciembre, concretamente el 22, d¨ªa en el que se ha confirmado que ver¨¢ la luz en Jap¨®n.

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Esta ser¨¢ una de las claves para entender la mec¨¢nica de juego, as¨ª como uno de los elementos m¨¢s ilustrativos sobre el nuevo esp¨ªritu del argumento. Ahora Aya pertenece a una asociaci¨®n que recibe las siglos CTI, destinada a controlar un sector concreto de la sociedad, y que ahora toma las riendas de la situaci¨®n ante un ataque de monstruos llamados Twisted. La poblaci¨®n parece aterrorizada sin una forma concreta de detener el avance de esta especie de plaga que hace recordar tiempos pasados, aunque todav¨ªa no se explica de qu¨¦ manera encaja con lo que hemos vivido hasta ahora en la franquicia. De hecho, la preocupaci¨®n de los ac¨¦rrimos es, precisamente, la falta de coherencia entre estos sucesos que aqu¨ª relatamos y el verdadero origen de Parasite Eve. De ah¨ª que se suprima esta licencia del nombre con el que ver¨¢ la luz en Jap¨®n.

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El nuevo poder de Aya es una virtud y un defecto a partes iguales: levanta las suspicacias de sus propios compa?eros de agencia, que consideran que su don podr¨ªa jugarles una mala pasada. Intentan, por lo tanto, deshacerse de ella y de sus servicios, algo que complica a¨²n m¨¢s la situaci¨®n. Uno de los datos m¨¢s caracter¨ªsticos de esta entrega, cuyo valor desde aqu¨ª cuestionamos, es el hecho de que la protagonista haya perdido la memoria, una forma de justificar la nueva perspectiva de la entrega. ?Nunca se cansa la industria japonesa de que sus h¨¦roes sean personajes que siempre se ven condenados por el mismo mal, la amnesia? Con esta pregunta en mente, se termina el v¨ªdeo de introducci¨®n, abri¨¦ndose casi a continuaci¨®n la posibilidad de probar la demostraci¨®n, todav¨ªa con demasiadas inc¨®gnitas en mente.

Son varios los niveles en los que podemos comenzar a jugar, aunque decidimos empezar por el principio. El v¨ªdeo de introducci¨®n parece cualquier cosa menos eso, una introducci¨®n, ya que son fragmentos inconexos que transmiten la sensaci¨®n de estar ante una obra inacabada. Se comenta entre el p¨²blico que es muy posible que el v¨ªdeo en cuesti¨®n, que presenta una especie de concierto que es atacado por un monstruo gigantesco, no est¨¦ a¨²n finalizado, y de ah¨ª que el cacao mental de esta escena sea inclasificable. La escena termina, en cualquier caso, con la hero¨ªna batallando al monstruo entre varios compa?eros de la ley y el orden. Justo en este momento el jugador deja de ser un mero espectador para convertirse, por fin, en el aut¨¦ntico protagonista de esta historia. Es momento de ver d¨®nde est¨¢ el tan cacareado cambio de este 3rd Birthday.

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El control es asequible, aceptable. Permite el uso del auto-apunte, una caracter¨ªstica para muchos fundamental ante las carencias de PSP en este sentido. Adem¨¢s, se confirma as¨ª la veracidad de las palabras del propio Nomura al afirmar que esta obra estar¨ªa 'abierta a todos los p¨²blicos', dando a entender as¨ª que el nivel de dificultad se reduce. Con el bot¨®n R fijamos los objetivos, movi¨¦ndose la c¨¢mara en consecuencia, sin necesidad de apuntar a mano. En determinados momentos se activa una especie de opci¨®n al estilo de los Quick Time Events que tan de moda se han puesto en esta generaci¨®n, pulsando R y el bot¨®n tri¨¢ngulo, causando algo m¨¢s de da?o por impacto a nuestros enemigos.

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Por ¨²ltimo es conveniente destacar la presencia de la barra ?Liberation', que una vez activada permite a Aya esquivar todos los ataques enemigos de forma autom¨¢tica, fortaleciendo aun m¨¢s si cabe sus ataques. Es cuesti¨®n de minutos vencer al enemigo con todas estas ventajas de por medio, por lo que una vez fuera de nuestro camino es menester seguir avanzando. Una cantidad ingente de enemigos se abre ante nuestro paso aunque por primera vez tenemos opci¨®n de explorar los entornos a nuestro antojo. No hay mucho que hacer, as¨ª que tratamos de agilizar la marcha para probar un poco de lo que ofrece cada escenario. Llegados a este punto insistimos en la buena optimizaci¨®n del estilo de control, que francamente nos ha sorprendido para bien.

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Cuando termina el interminable pasillo accedemos a un sector en el que varios soldados nos dan la bienvenida. Esta zona se entiende como un espacio de descanso en el que podemos hablar con personajes secundarios para ampliar la informaci¨®n que conocemos sobre la situaci¨®n o sobre alguna relaci¨®n personal que haya de por medio. En realidad hacer uso del verbo ?hablar' no es lo m¨¢s correcto en este contexto, ya que el sistema es b¨¢sicamente el mismo de FFXIII: nos acercamos a un NPC, que comenta cualquier cosa que se le venga a la cabeza sin posibilidad de elegir una respuesta o de entablar algo que se parezca a una conversaci¨®n. Entendemos finalmente que hay poco que hacer en este sentido para, una vez abandonado el ¨¢rea, vernos sorprendidos ante otro pasillo lleno de monstruos.

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Parece que las similitudes con FFXIII son m¨¢s frecuentes de lo que hab¨ªamos imaginado en un principio. Queremos seguir avanzando por finaliza la demostraci¨®n dando por terminada la posibilidad de seguir probando lo que ofrece este 3rd Birthday. Decidimos elegir el primer escenario (dividido en misiones) por ser el que quiz¨¢s mejor explicar¨ªa aquellas im¨¢genes de la famosa boda de la hero¨ªna con -supuestamente- un antiguo compa?ero de trabajo, pero tras ver nuestro puesto relegado de la interminable cola de espera que aguarda su turno en la cabina de Square Enix, nos preguntamos de qu¨¦ forma se unificar¨¢ el argumento para que Parasite Eve sea algo m¨¢s que el en¨¦simo juego de acci¨®n descerebrado que hemos recibido en los ¨²ltimos a?os.

Lo decimos con todo el respeto del mundo para los jugadores que disfruten de las aventuras de acci¨®n a la antigua usanza (poca pregunta y mucho disparo), un perfil que choca con el estilo de juego que ha llevado a colaci¨®n Parasite Eve tradicionalmente. Si por algo destac¨® el primer episodio fue precisamente por combinar un estilo cinematogr¨¢fico con una interfaz magn¨ªfica de juego, novedosa, original, ¨²nica en aquel entonces. Lo que ahora vemos en The 3rd Birthday es que se ha perdido parte de esa originalidad, y sobre todo que la historia no parece tener sentido alguno en comparaci¨®n con anteriores cap¨ªtulos. No quiere decir esto que el t¨ªtulo no valga la pena de forma individual, pero s¨ª cuestionamos su valor como heredero de esa magia de la que hac¨ªa gala la franquicia anta?o.

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A nivel t¨¦cnico es un t¨ªtulo sobresaliente, de lo mejor que hemos conocido en la consola, tanto en lo referente a los CGi como en lo que respecta a las escenas de in-game. Lo mismo sucede con la banda sonora, que toma como base (en este sentido, la ambientaci¨®n supura la esencia de los dos primeros) la caracter¨ªstica melod¨ªa de Parasite Eve.

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Sea como fuere, el valor del juego propiamente dicho rivalizar¨¢ con las mejores obras que ha parido PSP en los ¨²ltimos meses. La mezcla de shooter y aventura made in Square Enix sigue dando sus frutos. El juego ver¨¢ la luz en Jap¨®n el 22 de diciembre (han cumplido su palabra, aunque esta fecha de lanzamiento parece exactamente eso, una forma de no desmentir lo que llevan afirmando durante tantos meses, que 3rd Birthday llegar¨ªa al mercado en 2010), y ya se ha confirmado la posibilidad de que Aya Brea vista los ropajes de Lightning durante la aventura, as¨ª como parte del perfil psicol¨®gico de los compa?eros con los que tendr¨¢ que lidiar la hermosa Aya Brea. Se ha confirmado que llegar¨¢ a Occidente pero no cu¨¢ndo, aunque lo m¨¢s probable es que lo haga antes de mayo/junio de 2011.

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