Una aventura de cine

Mientras el resto de g¨¦neros gozan de un alto n¨²mero de lanzamiento a lo largo del a?o, las aventuras gr¨¢ficas se cuentan relativamente con cuentagotas, m¨¢s concretamente en nuestro pa¨ªs. Por ello la llegada de un nuevo t¨ªtulo es siempre motivo de celebraci¨®n para los m¨¢s fieles del g¨¦nero, m¨¢s cuando el t¨ªtulo a priori parece haber sido producido con esmero como es el caso de Lost Horizon. El pasado verano, Lost Horizon se presentaba como el nuevo t¨ªtulo de Animation Arts, quienes ya nos sorprendieron junto a Fusionsphere Systems con Secret Files. En septiembre del pasado a?o ya pudimos disfrutar de una primera, aunque completa, beta del juego que directamente nos maravill¨®, tal como queda reflejado en el texto y reiteramos con las ¨²ltimas impresiones del pasado mes.

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Lost Horizon nos sit¨²a en Hong Kong, en el a?o 1936. Encarnamos a Fenton Paddock, un ex soldado del ej¨¦rcito brit¨¢nico que fue la cabeza de turco ante una revuelta popular y expulsado con deshonor del ej¨¦rcito. No obstante, su estancia con los militares le sirvi¨® para hacerse con la amistad de varios personajes, destacando a su mejor amigo: Richard Weston, a quien controlamos en el peque?o pero relevante pr¨®logo de la aventura. Dicha introducci¨®n nos sit¨²a en una expedici¨®n al T¨ªbet, en la que Weston se ve perseguido por el tercer Reich, que est¨¢ tras la pista de la ciudad perdida de Shambhala. El ¨²ltimo de los sacerdotes con vida le confiere, antes de fallecer, la llave de acceso a Shambhala, finalizando el pr¨®logo con el compa?ero de Paddok desapareciendo bajo una misteriosa luz que presumiblemente le lleva a la deseada localizaci¨®n de los nazis. Lord Weston, padre del desaparecido, se aprovecha de la fuerte amistad de su hijo con Paddock para organizar un rescate encubierto del que Paddock ser¨¢ el ¨²nico responsable.

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Si bien la aventura se inicia en Hong Kong, de aquella colonia inglesa, y contin¨²a en el T¨ªbet, Lost Horizon nos llevar¨¢ a visitar otras regiones del globo como Marruecos, Alemania o la India. Ser¨¢n siete largos cap¨ªtulos los que forman la aventura y que dan una m¨¢s que suficiente variedad y originalidad de situaciones a la aventura en su m¨¢s o menos decena de horas de juego. La puesta en escena ha sido uno de los aspectos a los que m¨¢s mimo se ha dado en el desarrollo y la prueba de ello es la cuidada ambientaci¨®n de cada uno de los escenarios, fieles reflejos de la realidad de la ¨¦poca. El aspecto cinematogr¨¢fico tambi¨¦n ha sido fundamental, haciendo de Lost Horizon lo m¨¢s parecido a una pel¨ªcula de acci¨®n cl¨¢sica: di¨¢logos, persecuciones, batallas; con una gran capacidad de inmersi¨®n.

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Como aventura gr¨¢fica, Lost Horizon recuerda a cl¨¢sicos del g¨¦nero tanto por sus situaciones como por sus formas: Indiana Jones and The Fate of Atlantis, Broken Sword o a Flight of the Amazon Queen, todos con un m¨ªnimo com¨²n aventurero bastante destacable. Lost Horizon combina relajadas situaciones en las que nos podremos tomar las cosas con tranquilidad y otras que, aunque el tiempo no sea un problema, nos har¨¢n experimentar m¨¢s acci¨®n y tensi¨®n de lo normal. Un ejemplo de ello ser¨¢ la persecuci¨®n en coches en los ¨²ltimos momentos del primer cap¨ªtulo, del que ya hablamos en nuestras primeras impresiones, pero dichos momentos se repetir¨¢n tambi¨¦n en momentos puntuales de alguno de los otros cap¨ªtulos.

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El sistema de juego es el m¨¢s tradicional en el g¨¦nero: el point'n'click, siendo por tanto el rat¨®n el perif¨¦rico por excelencia del juego, aunque tambi¨¦n tendremos algunos peque?os atajos de teclado para determinadas opciones o ayudas de juego. Dichas ayudas servir¨¢n para resaltar los diferentes objetos a interactuar en pantalla o incluso dar¨¢n ciertas pistas para resolver ciertos puzles. Como siempre, recomendamos encarecidamente bien desactivar el sistema de pistas o bien no utilizarlo de forma manual, pues mermar¨ªan el encanto en jugabilidad tan propio del g¨¦nero. Volviendo a los controles, el rat¨®n como hemos dicho ser¨¢ la herramienta fundamental. Con ella desplazaremos a Fenton por el escenario y tambi¨¦n nos permitir¨¢ interactuar con los objetos en pantalla: con el bot¨®n izquierdo usaremos y cogeremos objetos, a la par que hablaremos con otros personajes, mientras que el bot¨®n derecho nos permitir¨¢ observar, una acci¨®n que ser¨¢ muy importante a lo largo de toda la aventura. La raz¨®n de ello, y quiz¨¢s una de las pegas del t¨ªtulo, es que aunque algunas soluciones parezcan triviales y sean las correctas, no podremos resolverlas hasta que hayamos mirado cierto objeto, aunque a priori pareciese innecesario.

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En general los puzles son bastante l¨®gicos y hasta cierto punto realistas, aunque habr¨¢ situaciones que se escapan de lo trivial, protagonizadas por las cl¨¢sicas combinaciones surrealistas de objetos que nos obligar¨¢n a utilizar el tan manido y eficaz m¨¦todo del ensayo y error. Una de las grandes bondades del t¨ªtulo es la alt¨ªsima variedad de puzles distintos tanto de uso de objetos c¨®mo de di¨¢logos. De hecho, el juego da lugar a que en ocasiones nuestras acciones influyan levemente en la historia, permitiendo resolver ciertos puzles de una forma u otra. Quiz¨¢s un gran problema del juego, y de muchas aventuras en general, es la excesiva linealidad del juego. Todo est¨¢ encadenado y tendremos que realizar acciones en un orden determinado e invariable si queremos alzarnos con la victoria sobre el puzle.  Por otra parte, Lost Horizon incluye puzles m¨¢s cl¨¢sicos en forma de minijuegos, no son retos extremadamente dif¨ªciles pero nos dar¨¢n la opci¨®n de seleccionar un nivel de dificultad m¨¢s complicado si queremos una experiencia m¨¢s completa.

Pero uno de los mejores puntos de Lost Horizon en materia jugable, aunque no es ninguna novedad en el g¨¦nero, es la posibilidad de controlar a dos personajes a la vez, haciendo que cooperen entre s¨ª. Si bien no todos los cap¨ªtulos del juego gozan de este tipo de situaciones, las que hay est¨¢n notablemente bien planteadas y dise?adas. En estas ocasiones, los dos personajes podr¨¢n no s¨®lo ser controlados de forma independiente, sino tambi¨¦n podr¨¢n pasarse objetos o cooperar para llegar por ejemplo a zonas elevadas d¨®nde el otro no podr¨ªa. El s¨²mmum de ello se alcanza en el extraordinario cap¨ªtulo final, resultando soberbio. Si bien el t¨ªtulo, como muchas aventuras, no se presta a ser rejugado tras ser finalizado en un tiempo, el juego desbloquea contenidos especiales tras ser terminado: un peque?o minijuego que ofrecer¨¢ pistas sobre el nuevo juego del estudio y la primera versi¨®n beta del juego que se us¨® para la presentaci¨®n y que difiere bastante del juego final.

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En el apartado gr¨¢fico, Lost Horizon entra por los ojos con un sobresaliente trabajo en los escenarios. El juego mezcla fondos dibujados 2D con personajes 3D. La combinaci¨®n es buena, pero el minimalista grado de detalle y perfeccionismo de los escenarios resaltan los problemas de los toscos modelos en 3D, que ni de lejos llegan al nivel art¨ªstico de los fondos o de detalle. Nos encontraremos desde peque?as callejuelas hasta amplios exteriores, pasando por interiores muy bien detallados y con variedad de vistas seg¨²n el escenario: laterales o cenitales. El resultado es sobresaliente, apoyando como no por el ya comentado excelente trabajo 2D. Un peque?o problema es que tal cantidad de detalles y objetos en pantalla se ve limitado en ocasiones por la poca libertad para observar objetos, siendo interactivos en su mayor¨ªa aquellos que podamos coger o usar.

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Los escenarios 2D se complementan con capas de efectos climatol¨®gicos muy bien conseguidos y que realzan el acabado final del juego: desde nieve en las heladas tierras del T¨ªbet a una tormenta cerca de Berl¨ªn. Volviendo a los modelados, nos encontramos con una gran variedad de personajes bien recreados pero con un nivel de detalle que se antoja bastante escaso. Por el lado de las expresiones tambi¨¦n bastante limitadas y toscas, aunque cumplen. No obstante en cuanto a los movimientos, decir que los personajes se mueven con bastante naturalidad y fluidez sobre los escenarios 2D. Por otra parte, ciertas escenas clave del juego ser¨¢n representadas totalmente en videos CGI completamente en 3D, cuya calidad y nivel de compresi¨®n no parecen ser los adecuados.

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Respecto al audio, tenemos que destacar de forma notable el excelente uso tanto de la m¨²sica ambiental y de fondo como de los efectos de audio. Est¨¢n muy bien escogidos dependiendo del escenario y la localizaci¨®n, no agobian ni resultan repetitivos. Son los que tienen que ser y cumplen con creces su funci¨®n. Respecto al doblaje, nos tendremos que conformar con un acertado elenco de voces en ingl¨¦s y subt¨ªtulos en castellano, pero como siempre lo que exigimos es que se ofrezca siempre la opci¨®n de escoger al usuario el idioma con el que quiere jugar y por supuesto contar con un doblaje en condiciones a nuestro idioma. Un detalle curioso, que resta cierta inmersi¨®n en el juego, es que el protagonista, brit¨¢nico de nacimiento, entabla conversaciones con los alemanes sin ning¨²n tipo de distinci¨®n en el doblaje. Ya que nos perdimos el doblaje, haber mantenido voces en ingl¨¦s para los personajes brit¨¢nicos y alemanas para los nazis hubiera quedado sencillamente de lujo, favoreciendo la ambientaci¨®n del juego.

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