Operation Flashpoint: Red River

Queda poco para que haga un a?o de la publicaci¨®n de Operation Flashpoint: Dragon Rising, pero sus desarrolladores no han dejado de trabajar en todo este tiempo. La saga volver¨¢ a nuestros ordenadores y consolas de la mano de Operation Flashpoint: Red River, y aunque tendremos que esperar al a?o que viene para ver el resultado final de este t¨ªtulo, a fecha de hoy podemos ir adelantando unas cuentas caracter¨ªsticas del mismo. Volved a cargar vuestras armas porque la guerra m¨¢s realista e intensa se encuentra a la vuelta de la esquina una vez m¨¢s.

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Para los que nunca hayan entrado en profundidad dentro de la saga Operation Flashpoint, solamente diremos que se trata de una serie de simuladores b¨¦licos donde se podr¨ªa destacar el realismo y la libertad de acci¨®n. El juego cuenta con dos predecesores: Cold War Crisis y Dragon Rising, que hicieron las delicias de muchos usuarios. Y es que habiendo pasado tan poco tiempo desde que se pudiera ver una nueva entrega de uno de sus m¨¢ximos competidores, ArmA II, era cuesti¨®n de tiempo que Codemasters hiciese p¨²blica la intenci¨®n de continuar explotando esta saga? Y nosotros no podemos decir que no estemos la mar de contentos con esta noticia.

La acci¨®n se desarrollar¨¢ en la naci¨®n de Tajikist¨¢n, y es que incluso el mundo de los videojuegos no puede dejar de buscar inspiraci¨®n en los acontecimientos contempor¨¢neos m¨¢s sonados. El escenario se calcula en torno a 200 kil¨®metros entre el punto m¨¢s occidental y el m¨¢s oriental, dejando a nuestra disposici¨®n una vasta extensi¨®n de terreno en la que trabajar. De nuevo tendremos a nuestras manos el destino de un grupo de marines de los Estados Unidos de Am¨¦rica, que en esta ocasi¨®n se las tendr¨¢n que ver contra un enemigo del centro de Asia fuertemente golpeado durante a?os por la influencia sovi¨¦tica y que ahora es v¨ªctima de numerosos jefes locales y guerrillas internas.

Para ello se nos proporcionar¨¢n tres campa?as distintas, y aunque todas ellas estar¨¢n ubicadas en este mismo entorno, existir¨¢n suficientes diferencias entre las mismas como para apasionar a los fieles seguidores de este g¨¦nero. La idea general es que las primeras impresiones de los jugadores sean de familiaridad, dejando poco a poco que las circunstancias vayan cambiando para encontrarnos inmersos en unos eventos completamente distintos a lo que hemos podido ver en anteriores entregas de la saga. La rica variedad geogr¨¢fica de Tajikist¨¢n permite que podamos encontrarnos inmersos en acciones dentro de frondosos bosques, o bien en altas cumbres, y nuestra forma de adaptarnos ser¨¢ vital.

Por ellos, los desarrolladores han definido las campa?as de forma similar a los actos de una obra dram¨¢tica, puesto que en esta ocasi¨®n han puesto todo su empe?o en crear un trasfondo que sea capaz de capturar la atenci¨®n del jugador y mantenerlo pegado a la pantalla con ganas de seguir avanzando en el juego. Eso no quiere decir que nos vayamos a encontrar con un t¨ªtulo donde se haya antepuesto el argumento a la acci¨®n, pero el peso narrativo ser¨¢ importante en comparaci¨®n con otros representantes del g¨¦nero, y se traducir¨¢ en un intento por crear un clima de humanidad alrededor de nuestras acciones, el trato con nuestros compa?eros e incluso las piezas de equipo que portamos.

Otra de las novedades en Operation Flashpoint: Red River ser¨¢ la inclusi¨®n de un sistema muy b¨¢sico de clases para los personajes, de manera que cada uno de ellos se pueda diferenciar de los dem¨¢s tanto en la eficacia a la hora de realizar ciertas acciones como en el equipamiento concreto que puedan llevar. Esto nos permitir¨¢ llevar a cabo t¨¢cticas m¨¢s complejas y especializadas a la vez que nos hace plantearnos los puntos fuertes y desventajas de nuestro escuadr¨®n. Por otro lado la combinaci¨®n del trabajo de individuos de distintas clases nos permitir¨¢ lograr acciones de forma m¨¢s r¨¢pida y eficiente, gracias en parte a las mejoras en la inteligencia artificial que hemos comentado anteriormente.

Esto se traduce en un sencillo sistema de experiencia mediante el cual se ir¨¢n mejorando las capacidades de nuestros soldados. Esta posibilidad, aunque no sea una mala incorporaci¨®n para el modo de un solo jugador, se orienta de forma muy definida hacia las partidas cooperativas. De hecho, y teniendo en cuenta el ¨¦xito de los juegos de acci¨®n cooperativos que han ido llegando en los ¨²ltimos a?os, Codemasters ha puesto un especial ¨ªmpetu en gestionar de forma adecuada todos los aspectos relativos a las partidas online. En sus propias palabras se recoge la intenci¨®n de que Operation Flashpoint: Red River se convierta en un t¨ªtulo donde destaque el modo cooperativo para varios jugadores.

Y es que al igual que en el caso de su antecesor, el t¨ªtulo se encontrar¨¢ disponible tanto para Xbox 360 como para PlayStation 3 y PC, sin haberse comentado la posibilidad de que existan modos multijugador compatibles entre todas las plataformas. S¨ª que es cierto que el juego contar¨¢ con un modo cooperativo que nos permitir¨¢ unir fuerzas con otros 3 amigos con los que tratar de superar las distintas misiones que se nos ir¨¢n planteando durante las campa?as contenidas en el mismo. El juego carecer¨¢ completamente de un modo competitivo y se nos alienta a disfrutar ¨²nicamente de las distintas posibilidades de colaboraci¨®n junto con las mejoras y novedades que hemos venido repasando a lo largo del avance.

Desde luego los seguidores de la acci¨®n b¨¦lica tienen muchas razones para esperar con inquietud la nueva entrega de Operation Flashpoint, que pretende ser una alternativa realista a los juegos de acci¨®n en primera persona de tem¨¢tica similar. Y es que aunque muchos encuentren una dificultad excesiva dentro de la complejidad de esta clase de t¨ªtulos, no son pocos los que aprecian debidamente el gran trabajo de los desarrolladores por crear simuladores b¨¦licos lo suficientemente completos como para saber transmitir la sensaci¨®n de hallarse en zona de guerra. Eso s¨ª, habr¨¢ que esperar al a?o que viene para empezar nuestra campa?a en Tajikist¨¢n.