Dragon Quest IX: Centinelas del Firmamento, Impresiones
Aunque seguramente hay quien todav¨ªa no se ha enterado, Dragon Quest IX se perfila como uno de los t¨ªtulos m¨¢s importantes (junto a otros pesos pesados como Pokemon) de lo que va de a?o y probablemente tambi¨¦n de lo que resta. Nintendo se ha hecho cargo de ¨¦l en Espa?a y, tras anunciar que ver¨¢ la luz a mediados de julio, ha dejado algo m¨¢s de informaci¨®n para que los aficionados conozcan m¨¢s datos sobre esta obra que ha batido todos los r¨¦cords en Jap¨®n. Se dec¨ªa que la uni¨®n entre DQ y NDS ser¨ªa durante a?os una de las principales fuentes de ingreso de Square Enix y, de momento, va camino de ello. Los centinelas del cielo estrellado, m¨¢s cerca que nunca de hablar castellano.
El tiempo nos ha dado la posibilidad de realizar una intensa cobertura de Dragon Quest IX, al igual que ha sucedido con sus hermanos mayores, los remakes que aparec¨ªan hace unos pocos meses obteniendo cr¨ªticas sobresalientes gracias al trabajo realizado con el motor gr¨¢fico y, muy especialmente, con la dificultad tesitura que supone tener que inventar un t¨ªtulo como este desde cero, empezando desde los cimientos. Square Enix cuenta con experiencia en este campo, de eso deber¨ªa ser consciente todo aficionado que guste de los JRPGs modernos, pero en este caso concreto hay que darle la enhorabuena a Level-5, que ha sido la encargada de llevar a buen puerto proyectos que en un principio no contaban con el aval de los aficionados por aquello de sobreexplotar una franquicia que en Europa y en Estados Unidos no es precisamente un boom de ventas como s¨ª lo es Final Fantasy. Tampoco es nuestra intenci¨®n entrar a debatir estos conceptos, pero es interesante tenerlos en cuenta para comprender por qu¨¦ lo que comentaremos a continuaci¨®n tiene un carisma especial.
Nintendo anunciaba que se encargar¨ªa de la distribuci¨®n del t¨ªtulo a finales del a?o pasado, con la clara intenci¨®n de mejorar el cat¨¢logo de la consola en 2010. No se coment¨® una posible fecha de salida salvo que encajar¨ªa con la tem¨¢tica del periodo estival, es decir, anclado en los tres meses de verano. Dimos por sentado que habr¨ªa que esperar bastantes meses para volver a hablar de Dragon Quest IX, uno de los t¨ªtulos que m¨¢s r¨¢pidamente ha sido capaz de vender antes incluso de llegar al mercado (ah¨ª queda la cifra de dos millones de copias en pre-venta, el enorme revuelo que caus¨® su lanzamiento en Jap¨®n, con tiendas que distribuyeron el t¨ªtulo antes de tiempo bajo la promesa de no jugar con ¨¦l antes del d¨ªa oficial, lo que no impedir¨ªa que se formasen las t¨ªpicas colas kilom¨¦tricas anunciando el esperado ¨¦xito del cartucho). No obstante, la circunstancias en Occidente sin ligeramente distintas, lo que en cualquier caso no ha impedido que la comunidad de seguidores de la port¨¢til haya tomado este juego como referente de lujo para los pr¨®ximos meses.
Lo coment¨¢bamos cuando tuvimos ocasi¨®n de probar la versi¨®n japonesa y poco m¨¢s tarde de apreciar los primeros v¨ªdeos traducidos al ingl¨¦s: DQIX es un t¨ªtulo especial incluso dentro de la franquicia que representa. Lo es no s¨®lo por la uni¨®n de factores econ¨®micos o por el hecho de ser exclusivo de una port¨¢til que se aleja del clasicismo de la serie (tratar siempre de llevar lo m¨¢s lejos posible el apartado gr¨¢fico del juego), sino por basar gran parte de su atractivo en la posibilidad de jugar con tres amigos al un¨ªsono en las misiones que otrora disput¨¢bamos sin la compa?¨ªa de ning¨²n otro compa?ero. El estilo que quiso imponer en su d¨ªa Ken Ishii con Secret of Mana, como se comentaba en el respectivo Regreso al Pasado publicado por esta casa, o que se pondr¨ªa de moda en la actualidad gracias a la proliferaci¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas. Nada ha podido impedir que los peque?os y grandes jugadores vean en las opciones Wi-Fi un valor del que ya no se reniega, sino que se incluye como gran novedad para ofrecer nuevos motivos a los aficionados para su compra.
El h¨¦roe pierde la consciencia y se despierta en el plano terrenal, cerca de una de las cataratas que conoce desde la distancia. No tiene poderes angelicales pero conversa su memoria, lo que le lleva a darse prisa para descubrir que ha sucedido. Al parecer un enorme terremoto ha sacudido los cimientos del pueblo, lo que se llevar¨ªa consigo la desaparici¨®n del Gran ?rbol frutal que proporciona la posibilidad de, comiendo uno de sus frutos, conceder al ser humano el deseo que m¨¢s anhele. Dicho en otras palabras: un acontecimiento hace que los ¨¢ngeles vuelvan a la Tierra y con ellos su principal fuente de suministros. El h¨¦roe descubre esta situaci¨®n y r¨¢pidamente decide tomar medidas para evitarla. Desgraciadamente para ello no podr¨¢ actuar s¨®lo: primero necesita encontrar a quien le ayude y le preste parte de su energ¨ªa.
Lo curioso de este Dragon Quest IX es que, por primera vez desde hace varias entregas, el argumento no es el punto fundamental sobre el que debemos centrar la atenci¨®n, sino el sistema de juego, que a efectos pr¨¢cticos es id¨¦ntico al de anteriores cap¨ªtulos salvo por las diferencias que encontramos en los combates. ?stos dejan de ser aleatorios para mostrar de antemano al monstruo al que debemos combatir, pasando a un sistema que est¨¢ a caballo entre la tradici¨®n (mostrando en primer lugar a los enemigos desde la c¨¢mara en primera persona) para luego mostrar el golpe o acontecimiento que tenga lugar durante el combate haciendo uso del estilo moderno, en tercera persona. Sobre los hechizos y otros objetos no se puede comentar nada realmente nuevo: se esperaba alguna noticia sobre las posibles novedades que ofrezca la versi¨®n PAL en este sentido, pero hasta la fecha no hay nada.
Por suerte s¨ª que se han dado a conocer nuevos detalles sobre el sistema de trabajos o jobs, claramente inspirados en el sistema tradicional de Final Fantasy. En la demostraci¨®n americana el jugador cuenta con la posibilidad de tomar el rol de un trovador (el que comienza de forma est¨¢ndar por defecto), con opci¨®n a evolucionar en otros cinco rangos que pronto se ampl¨ªan hasta diez. El t¨ªtulo se toma su tiempo para arrancar, basando el pr¨®logo en la historia que resum¨ªamos en la p¨¢gina anterior sin dejar ni un detalle por mencionar, lo que ha llevado a muchos usuarios japoneses a criticar duramente el planteamiento que Square Enix ha empleado en esta ocasi¨®n. ?Qu¨¦ pasa con aquellos a los que les interesa una forma de juego m¨¢s directa, menos centrada en el argumento?
No hay que confundir t¨¦rminos: Dragon Quest IX sigue siendo un JRPG tradicional, pero abre las puertas para que los jugadores no s¨®lo puedan crear a sus personajes, sino tambi¨¦n para personalizarlos a medida que obtienen nuevos puntos de experiencia que permiten aumentar o modificar el uso de hechizos y ataques especiales. No es dif¨ªcil imaginar de qu¨¦ forma puede cambiar el devenir del juego en funci¨®n de la clase de personaje que hayamos formado, si bien es necesario tener en cuenta que al cambiar de oficio no se conservan las habilidades que hayamos aprendido hasta ese momento. Es una forma de limitar el crecimiento de un personaje por encima de sus compa?eros, pues no podemos perder de vista que no s¨®lo jugamos en cooperativo, sino que tambi¨¦n se instaura cierto concepto competitivo al desarrollo del t¨ªtulo.
Para fomentar un mejor uso de la capacidad de Nintendo DS se emplea el motor gr¨¢fico que Level-5 ha optimizado ya en varias ocasiones (a base de remakes), de tal forma que los personajes volver¨¢n a lucir el aspecto cell shaded de anteriores cap¨ªtulos, solo que ahora m¨¢s estilizados, de proporciones m¨¢s amplias. Otra de las cr¨ªticas que se ha llevado el juego en Jap¨®n tiene que ver precisamente con el motor gr¨¢fico, que no ha terminado de convencer a la prensa especializada (algo extra?o teniendo en cuenta que Famitsu lo premi¨® con un 40/40, otra se?al de que o bien la revista ya no es lo que era o de que este cartucho est¨¢ destinado a algo muy grande). Algunos comentarios se han hecho eco de que este engine no es capaz de superar al de los remakes, algo que desde aqu¨ª discutimos. Es, no obstante, un aspecto interesante que llevar¨¢ a la reflexi¨®n en el correspondiente an¨¢lisis.
Lo m¨¢s interesante del t¨ªtulo al margen de las posibilidades de juego cooperativo es la profundidad de todos los aspectos, un hecho que cuesta justificar mediante la edici¨®n japonesa (por las limitaciones que supone el idioma), pero que se descubren a poco de comenzar a jugar. Probablemente sea una prueba m¨¢s de la evoluci¨®n que necesita el g¨¦nero para no morir estancado: a la creaci¨®n de una clase concreta hay que sumarle el hecho de poder crear nuevas armas y armaduras por medio de la alquimia, lo que garantiza la necesidad de intercambiar objetos con otros usuarios en funci¨®n de las misiones secundarias que hayan realizado hasta ese momento. Adem¨¢s, de esta logra que aquel estamento de que este Dragon Quest ser¨ªa el m¨¢s dif¨ªcil de toda la franquicia es un hecho ver¨ªdico.
?Por qu¨¦? Sencillamente por la dificultad que entra?a encontrar el objeto necesario para terminar determinadas misiones secundarias, o por lo dif¨ªcil que resulta contar con un personaje habilitado para afrontar toda clase de enfrentamientos, algo bastante poco probable si tenemos en cuenta la distinci¨®n entre oficios. No es especialmente dif¨ªcil entender de qu¨¦ forma ha planteado Level-5 el juego: por un lado se ha querido mantener el estilo tradicional y por el otro a?adir novedades que vayan acorde con los tiempos que corren, empezando por el multijugador, pasando por los oficios para terminar en las opciones de personalizaci¨®n que hemos comentado p¨¢rrafos atr¨¢s.
Para poder profundizar en lo que ofrece el t¨ªtulo habr¨¢ que esperar hasta la segunda semana de julio, fecha en la que se espera que el cartucho vea la luz en Espa?a completamente traducido al castellano y con el uso de una infraestructura que esperemos sepa dar la talla cuando llegue el momento. No parece probable que se alcance la barbaridad de r¨¦cord Guiness con 100 millones de personas jugando al un¨ªsono de forma an¨®nima (seg¨²n lo que podemos leer en la p¨¢gina oficial de la entidad), pero desde luego es de prever que seg¨²n transcurran los meses este Dragon Quest IX se convierta en el cl¨¢sico producto que todo el mundo conoce o al que ha jugado. Va camino de ello.
Dragon Quest IX: Centinelas del firmamento
- RPG
La novena entrega de la saga Dragon Quest cambia los fundamentos de la saga y abraza un nuevo estilo de juego din¨¢mico y cooperativo.