
Copa Mundial de la FIFA Sud¨¢frica 2010
Zakumi
El mundial de Sud¨¢frica asoma a la vuelta de la esquina, y como no pod¨ªa ser de otra manera, tambi¨¦n el videojuego oficial del campeonato. EA Sports sigue en Wii la tendencia del resto de consolas de sobremesa, lanzando al mercado un t¨ªtulo que se centra exclusivamente en un evento que re¨²ne a 200 selecciones, torneos varios, gr¨¢ficos ligeramente mejorados y la jugabilidad arcade de la que ya hiciera gala FIFA10 hace unos cuantos meses. Pocos cambios para justificar una inversi¨®n que se costear¨¢ el jugador ac¨¦rrimo o el que busque un producto id¨®neo para compaginar con la magia del f¨²tbol veraniego.
F¨²tbol. Una palabra que describe un deporte. Un deporte que describe la pasi¨®n de millones de seguidores. La inagotable fuente de diversi¨®n para los forofos de ¨¦ste o aqu¨¦l equipo, el sempiterno tema de debate de los lunes, la discusi¨®n acalorada acerca del penalti que el se?or vestido de negro, pito en mano, se tragaba probablemente para beneficiar a alg¨²n otro equipo que ha pactado con las altas esferas del campeonato. Si existe una prensa rid¨ªcula, ¨¦sa es la deportiva. Si existe una afici¨®n que se deje la piel en el campo, ¨¦sa es la del f¨²tbol. Dicen que en tiempos de crisis el deporte es un b¨¢lsamo para distraer a la gente, un divertimento tan necesario como imprescindible que ayuda a relajar tensiones. No explica esto que todos los d¨ªas de la semana se someta al telespectador a la tortura que supone tener siempre un partido crucial para el futuro de no se sabe muy bien qu¨¦ equipo regional, pero igualmente es un dato que explica por qu¨¦ los videojuegos de corte futbol¨ªstico (sean muy malos o muy buenos) se empachen anualmente vendiendo cientos de miles de unidades alrededor del planeta.

Quiz¨¢s el espectador que no entiende del deporte rey en cierta parte de Europa se pregunte qu¨¦ importancia puede tener para ¨¦l la Liga espa?ola, la Champions League o la Copa del Rey, competiciones que generalmente se convierten en el mayor atractivo de la edici¨®n con la que cada a?o EA Sports y Konami invaden el mercado. De qu¨¦ forma le afecta que el F.C Barcelona haya sido eliminado por el Inter de Mil¨¢n, o que un multimillonario al que le sobra el dinero haya revalorizado el mercado otorgando un protagonismo inusitado a los medios de comunicaci¨®n gracias a sus fichajes estratosf¨¦ricos empleando el nombre del Real Madrid como bandera. Puede que incluso el lector ac¨¦rrimo se pregunte qu¨¦ diablos tiene todo esto que ver con el lanzamiento del videojuego oficial del Mundial de Sud¨¢frica 2010 que tendr¨¢ lugar este a?o, que pese a su importancia todav¨ªa no ha alcanzado las cotas de popularidad que se le presupone a una licencia del carisma de la FIFA.
El Mundial tiene una esencia distinta. Poco importa lo mucho que se deteste o adore el deporte balomp¨¦dico, tarde o temprano acaba inundando la vida de aquellos que acuden a los medios de comunicaci¨®n durante los meses estivales. Tiene que ser un evento significativo por fuerza mayor que 32 selecciones, te¨®ricamente las mejores del mundo, se re¨²nan en un pa¨ªs africano que tiene una cita doblemente importante con la historia. No s¨®lo se logra romper con uno de los estandartes futbol¨ªsticos del torneo (pese al auge del f¨²tbol en zonas poco beneficiadas econ¨®micamente, la FIFA parec¨ªa haber ignorado este hecho sin tapujos), sino que adem¨¢s se cumple el sue?o de un continente al albergar por primera vez un torneo de esta ¨ªndole en sus adentros. La publicidad est¨¢ asegurada, el escaparate mundial, inmejorable, aunque para muchos jugadores las condiciones clim¨¢ticas no sean las m¨¢s adecuadas para la pr¨¢ctica del deporte de alto nivel.

S¨ªmiles futbol¨ªsticos
Un mundial tiene, efectivamente, la esencia de las grandes competiciones. EA Sports es consciente de este hecho y por ello se lanzaba directamente al desarrollo de la licencia oficial, perteneciente a Electronic Arts desde tiempos inmemoriales, tan pronto se terminaba de pulir los ¨²ltimos detalles del considerado mejor simulador futbol¨ªstico de todos los tiempos. Por el camino se toma la base en la que se ha trabajado durante varios a?os, sustituyendo la amalgama de clubes a la que tradicionalmente nos tiene acostumbrados FIFA por un t¨²rmix de selecciones que dejar¨¢ impresionado al jugador con af¨¢n coleccionista. EA ha logrado reunir a 199 selecciones de las 204 que pidieron permiso para participar en la fase clasificatoria del mundial de un total absoluto de 208. En t¨¦rminos comparativos, lo que ha logrado el equipo de programaci¨®n ser¨ªa semejante a meter en un mismo DVD a tres cuartas partes de los clubes de f¨²tbol oficiales que existen a lo largo y ancho del planeta, s¨®lo a que a nivel local.

Esto es m¨¦rito del equipo general que se encargaba de los preparativos relacionados con el paquete central del que har¨ªa gala la licencia independientemente de la consola para la que fuese desarrollado el t¨ªtulo, pr¨¢cticamente id¨¦ntico entre PS3 y Xbox 360. La ¨²nica diferencia radica en el resto de ediciones, o m¨¢s concretamente en la que aparec¨ªa conjuntamente a las anteriormente mencionadas en la sobremesa de Nintendo, dejando temporalmente al margen la edici¨®n de PSP, que por cierto tambi¨¦n tiene su miga. Para Electronic Arts lo importante es llegar a todo el p¨²blico por igual, sin excepciones, y para ello se utiliza la base de FIFA 10 con los cambios de marras que hemos venido comentando a lo largo de esta introducci¨®n. Lo que el lector no debe perder de vista es el esp¨ªritu de FIFA en Wii, que se aleja de la simulaci¨®n proponiendo un estilo eminentemente arcade, que muy a pesar de su calidad sigue sin hacer gracia al gran p¨²blico. La cuesti¨®n es, llegados a este punto, si esta edici¨®n sabr¨¢ convencer a los esc¨¦pticos de su calidad, o si por el contrario se mantiene la esencia de su antecesor.
Una cuesti¨®n relativamente f¨¢cil de contestar, en tanto las se?as de identidad de este Mundial de Sud¨¢frica quedan expuestas desde los primeros minutos de juego. Como dec¨ªamos, los clubes han sido omitidos en pos de las 199 selecciones de siempre, entre las que destacan las m¨¢s poderosas en cuanto al reconocimiento popular se refiere. As¨ª pues, Espa?a, Brasil, Holanda, Alemania, Argentina o Portugal se han de enfrentar contra las que te¨®ricamente tienen menos posibilidades de alcanzar la gran final, que ser¨¢ disputada en la denominada ?ciudad del f¨²tbol', Johannesburgo. Si el c¨®mputo total de selecciones que aparecer¨¢n en el torneo se limita a las 32 que mencion¨¢bamos anteriormente, el juego permite que cada usuario tome el escudo que m¨¢s le apetezca en un amplio abanico de posibilidades. Es una l¨¢stima que las m¨¢s conocidas sean las ¨²nicas que cuenten con un m¨ªnimo parecido a nivel est¨¦tico con la realidad (e incluso con el f¨²tbol que practica cada una).
Junto a la presencia de las tan cacareadas 19 selecciones oficiales encontramos 10 estadios oficiales que han sido reproducidos al dedillo para transmitir la sensaci¨®n de estar jugando un partido en Sud¨¢frica, con la ambientaci¨®n tradicional de esta clase de competiciones (estadios abarrotados de p¨²blico, que aqu¨ª es poco menos que un pegote insignificante que no logra transmitir ninguna clase de emoci¨®n durante los partidos. Es otra de los pegas que no se han solucionado respecto a la edici¨®n de FIFA10 que analiz¨¢bamos hace unos cuantos meses, otra se?al de que son pocos los cambios que se han realizado al margen de la inclusi¨®n de nuevas selecciones, estadios y, lo que es m¨¢s importante, modos de juego. La jugabilidad tampoco ha cambiado un ¨¢pice, como tendremos ocasi¨®n de comprobar a continuaci¨®n.

Esencia Arcade
Los cambios de Mundial de Sud¨¢frica est¨¢n relacionados principalmente con los nuevos modos de juego, siendo la jugabilidad un calco id¨¦ntico de lo visto en la pasada edici¨®n. EA Sports se ha decantado por exprimir la esencia del f¨²tbol, sin grandes estrategias ni otros menesteres que obliguen al jugador a tener un gran conocimiento sobre la materia que est¨¢ trabajando. Esto se traduce en la presencia de pases de f¨¢cil ejecuci¨®n, tiros imposibles con los que es posible anotar goles desde el centro del campo, faltas imparables que ejecutadas por el jugador de clase mundial son sencillamente pasto para las redes de la porter¨ªa. Es muy f¨¢cil dominar el sistema de juego, hacernos con los controles (donde EA ha permitido varios estilos en los que se incluye el mando cl¨¢sico, la mejor opci¨®n, el wiimote y nunchuk?) y comenzar a ganar campeonatos sin el menor esfuerzo.
Existen distintas dificultades que de buenas a primeras lograremos superar, como decimos, sin tener que despeinarnos. Esto en parte se debe a la elecci¨®n del estudio canadiense a la hora de simplificar al m¨¢ximo los controles, para ellos la llave del entretenimiento. Este FIFA no requiere horas de experiencia como s¨ª necesita PES (que sigue enfrascado en la simulaci¨®n pura, con un nivel de calidad sobresaliente pese a las pocas ganas de evolucionar en Wii), aunque esto conlleve una profundidad cien veces m¨¢s limitada y menos profusa de lo que estamos acostumbrados a ver en el resto de la sobremesa. Para incentivar este hecho cada jugador cuenta con una barra de explosi¨®n que le permite realizar regates imposibles, tiros sin parang¨®n y otras acciones imparables para el portero. Por otro lado, el contrario se puede aprovechar de esta situaci¨®n si roba la pelota, si bien lo m¨¢s normal llegados a cierto nivel de experiencia es anotar goles a chorrillo desde cualquier lugar del campo.
Es la esencia arcade de la que viene haciendo gala la licencia en Wii desde hace unos a?os, que sigue convenci¨¦ndonos pese a que esta vez se ve frenada por la falta de novedades en este sentido, lo mismo que sucede a nivel gr¨¢fico. Se ha mejorado la fluidez de las animaciones, los jugadores son ahora m¨¢s parecidos a los que encontramos en la realidad (siempre con su aspecto caricaturizado, a medio camino entre la realidad y el dibujo animado), los estadios lucen un aspecto sin pega alguna que poner de relieve (son 10 los Sudafricanos, a los que hay que a?adir los presentes en otros pa¨ªses), exactamente igual que el dise?o de los men¨²s, el colorido de las presentaciones o la banda sonora de la que hace gala el t¨ªtulo, sin duda uno de los puntos fuertes del paquete. La puesta en escena del juego transporta al jugador autom¨¢ticamente a un mes vista, a espuertas de que d¨¦ comienzo el mundial, principal objetivo de este Mundial de Sud¨¢frica a juzgar por las novedades que se han introducido.

Ahora que ya conocemos todo lo relacionado con el aspecto jugable y gr¨¢fico, es un buen momento para centrar la atenci¨®n en los modos de juego, como dec¨ªamos principal novedad de esta edici¨®n. La mayor novedad que encontramos en el torneo es la posibilidad de crear un equipo personalizado a medida denominado Equipo de Ensue?o, llevado a escena bajo la representaci¨®n de las siglas Zakumi, t¨ªtulo que se le otorga oficiosamente al mundial. Este es el modo estrella del DVD tanto por las opciones que ofrece (basadas en la obtenci¨®n de logros por cumplimiento de determinadas caracter¨ªsticas durante la partida, ganancia de nuevos jugadores como si de un manager al uso se tratase, sin llegar a suplantar al modo que ech¨¢bamos de menos en la edici¨®n original), especialmente en torno a los retos que se proponen durante los partidos.
Lograr superarlos todos es una tarea relativamente sencilla que los expertos cumplimentar¨¢n en cuesti¨®n de horas, otro aspecto que habla de forma elocuente sobre las intenciones b¨¢sicas del juego (centradas en los partidos r¨¢pidos entre varios jugadores, con un total de 4 al un¨ªsono, como tambi¨¦n del Online, que sigue contando con una presencia muy marcada y un funcionamiento excelente). El modo Zakumi consigue enganchar durante bastante tiempo sin ofrecer nada nuevo a efectos pr¨¢cticos, especialmente durante los primeros compases del mismo, donde conviene poner atenci¨®n a las novedades que se incluyen en este sentido.
Por supuesto, al margen de esta opci¨®n encontramos la competici¨®n central propiamente dicha, aquella en la que prima ir superando fase a fase del campeonato hasta llegar a la gran final, que se cerrar¨¢ con la t¨ªpica animaci¨®n de los jugadores levantando el trofeo por el que han luchado durante varios a?os. Existe posibilidad a controlar a una selecci¨®n que no est¨¢ clasificada o directamente hacerlo con alguna de las que est¨¦ peleando por llegar de cabeza a la gran final, aunque como decimos existen notables diferencias seg¨²n el conjunto que hayamos seleccionado (lo que, por consiguiente, facilita bastante el camino a todo aquel que quiera pegar palizas con Espa?a a un equipo menor). EA Sports deber¨ªa centrar su atenci¨®n en mejorar el balance entre jugadores para no perder el equilibrio que s¨ª mostraba el t¨ªtulo anterior, al menos entre los clubes m¨¢s destacados del panorama futbol¨ªstico. Quiz¨¢s esto sea interesante cuando se habla de simulaci¨®n, pero el arcade se rige bajo otros par¨¢metros en los que prima la igualdad entre jugadores.

Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.