Rage of the Gladiator
- PlataformaWii7.5
- G¨¦neroAcci¨®n
- DesarrolladorGhostFire Games
- Lanzamiento16/04/2010
Guerrero de casta
La velocidad de crucero a la que avanza WiiWare no deja de regalar al p¨²blico de la sobremesa de Nintendo nuevas e interesantes alternativas cada semana. Si hace poco era Zombie Panic el que saltaba al ruedo con ganas de probar su val¨ªa, ahora le toca el turno a Rage of the Gladiator, que empleando la mec¨¢nica de Punch Out transporta al jugador hacia la mitolog¨ªa romana en las pieles de un gladiador que ha de sobrevivir a diez combates a muerte. Aqu¨ª no hay vencedores o vencidos: s¨®lo muerte. La est¨¦tica catapulta a este t¨ªtulo a la popularidad entre masas, veamos si merecidamente.
Este mes se ha puesto de moda hablar de estudios peque?os que ponen sobre la mesa esfuerzo, l¨¢grimas y sudor para promocionar los desarrollos que han producido con dinero salido de sus propios bolsillos. Puede que Akaoni Studio sea el m¨¢s representativo gracias a la publicidad obtenido con Zombie Panic in Wonderland, pero no es ni mucho menos el ¨²nico que debuta con fuerza en el mes de abril. Por el otro lado, el constante flujo de novedades que recibe WiiWare a cada nueva semana que pasa se encarga de confirmar el buen estado que atraviesa este sistema. Lo hace adem¨¢s en todos los sentidos, tanto a nivel t¨¦cnico como jugable, dos aspectos que pese a las limitaciones del servidor (con un tama?o espec¨ªfico de megas como tope en cada t¨ªtulo que se lanza) han ofrecido joyas a la altura de LostWinds o World of Goo, por citar dos ejemplos entre la amplia amalgama que a d¨ªa de hoy el jugador encuentra nada m¨¢s conectarse a la Tienda Virtual de Nintendo.
Una de las promesas m¨¢s esperadas del momento es precisamente el t¨ªtulo que hoy tenemos entre manos, Rage of the Gladiator, que grosso modo sigue las pautas impuestas por el ¨¦xito de Punch Out, cuyo revival se ha saldado con notas sobresalientes en la prensa especializada, que elogiaba entre otras cosas lo adictivo del concepto. Cuesta entender que s¨®lo Nintendo haya visto en este g¨¦nero un fil¨®n que explotar, especialmente bajo el peculiar sistema de control que ofrece el wiimote, por lo que despu¨¦s de todo no es de extra?ar que un grupo de aficionados se lanzase de cabeza a producir el llamado ?sucesor espiritual? de la obra que recib¨ªamos hace aproximadamente un a?o en el mercado. Hay que tener cuidado con estas palabras porque, si por algo destaca la obra de los chicos de Ghostfire, es por adoptar una mec¨¢nica que bebe de las fuentes de la competencia, toda vez que aporta novedades a tener en cuenta.
El concepto bajo el cual se mueve RotG es b¨¢sicamente el combate 1 contra 1 asentado bajo los cimientos de la ambientaci¨®n cl¨¢sica grecorromana, que har¨¢ que el jugador se sienta dentro de un coliseo batallando por su vida frente a temibles criaturas. Atacar, defenderse o esquivar las embestidas enemigas ser¨¢ el principal objetivo del h¨¦roe al que controlamos a lo largo de 10 combates sin opci¨®n a Online, por m¨¢s que las nuevas tecnolog¨ªas hayan abierto la puerta a que se le d¨¦ un uso adecuado a la Infraestructura que suele habilitar Nintendo en estos casos. Sea como fuere, la propuesta busca indagar no s¨®lo en los reflejos, en la acci¨®n pura, sino tambi¨¦n en ciertos toques de rol que permiten mejorar los atributos del h¨¦roe con la mirada puesta siempre en perfeccionar su rendimiento.
Estamos solos en el ring a efectos pr¨¢cticos, con una multitud que ruge enfebrecida esperando la muerte de uno de los dos contrincantes. La historia queda, por lo tanto, apartada de nuestras miras, por lo que ponemos toda la atenci¨®n en comprender la mec¨¢nica de juego, que como bien coment¨¢bamos anteriormente se centra en el sistema de juego de Punch Out, con la necesidad imperiosa de conocer de antemano los movimientos del rival antes de limitarnos a un intercambio de pu?etazos. El h¨¦roe cuenta con cuatro ataques, dos superiores de izquierda y derecha y otros dos inferiores. Puede esquivar los ataques del enemigo, tomar su escudo para defenderse o saltar para evitar un golpe bajo (un mazazo, por ejemplo) para as¨ª ganar algo de ventaja en el contraataque. Una vez debilitamos al enemigo, este pone toda la carne en el asador con sus mejores golpes y filigranas que debemos contestar con una buena defensa.
Los combates gozan del nivel de adicci¨®n de Punch Out, lo que en otras palabras quiere decir? que una vez comenzamos a jugar es dif¨ªcil terminar hasta el ¨²ltimo combate. La vida ¨²til del t¨ªtulo se reduce bastante por este hecho pese a contar con la presencia del Challenge Mode, en el que es necesario poner todo de nuestra parte para vencer las complejas estrategias que el rival pone en pr¨¢ctica. Es dif¨ªcil de comprender por qu¨¦ Ghostfire no opt¨® por hacer de este modo el principal de la partida, aunque quiz¨¢s la respuesta se encuentre en el target al que va dirigido el t¨ªtulo, que entendemos es el adolescente. La puesta en escena parece querer confirmar este hecho, tanto por el estilo ?cartoon? que se utiliza como por el desenlace de la historia que, repetimos una vez m¨¢s, tiene muy poco de aprovechable.
Todo lo interesante de RotG se centra por lo tanto en el plano jugable, en el que no s¨®lo debemos tener en cuenta los ataques enemigos, sino tambi¨¦n el uso de armas secundarias cuyo uso var¨ªa en funci¨®n de nuestra forma de jugar. La IA de los enemigos es a todas luces uno de los puntos m¨¢s destacados del t¨ªtulo junto a la variedad de ataques de la que hacen gala, lo que en ¨²ltima instancia transmite la sensaci¨®n de que estar ante un t¨ªtulo variado, que no aburre por la monoton¨ªa de su sistema jugable. Es todo lo que se le puede pedir a un juego de WiiWare que tiene que objetivo principal divertir a dos jugadores que deseen pasar un buen rato a los mandos de la consola. Llegados a este punto es interesante comentar el uso del mando en posici¨®n horizontal, que pr¨¢cticamente ofrece mejores resultados que el sensor de movimientos del wiimote.
Si a nivel jugable no desmerece, sucede un cuarto de lo mismo con el t¨¦cnico. Si bien es cierto que la est¨¦tica no se ha cuidado tanto como deber¨ªa (especialmente en lo referente a la presentaci¨®n), a nivel art¨ªstico resulta ser uno de los t¨ªtulos m¨¢s destacados del servicio, tanto por la calidad del motor gr¨¢fico como por lo atractivo del dise?o de los monstruos cl¨¢sicos a los que se ha de enfrentar el jugador. Los escenarios no ofrecen nada rese?able, quiz¨¢s s¨®lo el pobre nivel de ambientaci¨®n que pocas veces hace sentirnos dentro de un combate a vida o muerte. Con un poco de suerte los m¨¢s peque?os de la casa se sentir¨¢n atra¨ªdos, como venimos diciendo, por el estilo de dibujo animado que se utiliza durante la presentaci¨®n de la trama.
Su propio planteamiento lo convierte en un t¨ªtulo extremadamente sencillo a la hora de ser analizado, sin apenas profundidad para pasar varias horas inmersos en las posibilidades que ofrece el martillo m¨¢gico del protagonista o su escudo. Lo m¨¢s probable es que la mayor¨ªa de los combates se resuelvan tras varios intentos, lo que a grandes rasgos describe las tendencias de prueba y error de las que se aprovecha este Rage of the Gladiator.
Es un t¨ªtulo interesante este Rage of the Gladiator, muy al contrario de lo que indicaban las primeras tomas de contacto que se publicaron en la prensa internacional. Es la viva prueba del trabajo que ha volcado Ghostfire Games en un videojuego que no esconde sus similitudes con Punch Out, del que copia descaradamente el planteamiento a?adiendo alguna que otra novedad, sin llegar a ser por ello una copia exacta de la obra que Nintendo devolv¨ªa a la actualidad hace exactamente un a?o. Hay que tener varios aspectos en cuenta a la hora de valorar este proyecto, en primer lugar por el impresionante resultado obtenido a nivel visual, en segundo por el uso que se le ha dado a una mec¨¢nica que todav¨ªa parece llamada a seguir evolucionando con el paso de los a?os.
No se le puede pedir m¨¢s a un t¨ªtulo a nivel t¨¦cnico, de esto ning¨²n jugador debe tener la menor duda, m¨¢s a¨²n si tenemos en cuenta el precio al que se pone a la venta, pese a que tanto las voces como los subt¨ªtulos llegan completamente en ingl¨¦s. No obstante, s¨ª que echamos en falta mayor cantidad de opciones durante la partida, una mec¨¢nica que no limite tanto al usuario que est¨¢ tras los mandos de la consola o que al menos ofrezca un nivel de reto que est¨¦ a la altura de los que cuenten con m¨¢s experiencia en el g¨¦nero. De hecho, este ser¨¢ el principal h¨¢ndicap para todo aquel que se plantee adquirir el t¨ªtulo, dado que se termina tan r¨¢pido como se empieza. S¨®lo el Challenge Mode ofrece algo m¨¢s de profundidad, aunque no entendemos el porqu¨¦ de que no se haya incluido desde la primera vez que accedemos al juego (siendo como es m¨¢s completo que el central).
Al margen de esto hay poco que se pueda criticar, tanto como lo poco que se pueda destacar de un t¨ªtulo que sin m¨¢s expectativas que las de acceder al gran p¨²blico (preferiblemente el m¨¢s joven de la casa). La historia es una mera an¨¦cdota sin ninguna clase de relevancia en la partida, la cantidad de enemigos a los que nos enfrentamos (as¨ª como su dise?o) es a todas luces lo m¨¢s destacado del pack que ofrece Ghostfire Games. Un estudio peque?o que como tantos otros vuelve a poner de manifiesto la calidad que ¨²ltimamente atesoran la mayor¨ªa de los t¨ªtulos que aparecen en exclusiva para la Tienda Virtual de Nintendo. Los que disfruten de acci¨®n en primera persona, de la estrategia de los combates de t¨² a t¨², encontrar¨¢n aqu¨ª un buen motivo por el que encender la consola para pasar un rato entretenido. Al resto del p¨²blico le conviene abstenerse, para eso hay mejores propuestas, aunque tambi¨¦n exijan un golpe mayor a la cartera. Cuesti¨®n de gustos.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.