Imperivm Online
- PlataformaPC7.5
- G¨¦neroEstrategia
- DesarrolladorHaemimont Games
- Lanzamiento24/11/2009
- TextoEspa?ol
- VocesEspa?ol
Emperadores por todo el mundo
La nueva entrega de Imperivm llega a nuestra tiendas. ?Volver¨¢s a alzarte como emperador del imperio?, ?defender¨¢s tus territorios del ataque de los hostiles b¨¢rbaros?, ?sabr¨¢s mantenerte a salvo de las pu?aladas y ardides pol¨ªticos? Si cre¨ªas que era demasiado f¨¢cil, imagina competir contra jugadores de todo el mundo...
Despu¨¦s de tres entregas de estrategia en tiempo real, y otras tres orientadas a la construcci¨®n y desarrollo de ciudades, la saga Imperivm vuelve a hacer aparici¨®n en el panorama del mundo del videojuego. Sin embargo, en esta ocasi¨®n nos ofrece un nuevo estilo de juego multijugador, pensado para que usuarios de todas las partes del mundo puedan poner a prueba sus habilidades como gobernadores de Roma. Prep¨¢rate para crear tu propio ciudadano del imperio Romano y organiza tus legiones para convertirte en la familia m¨¢s poderosa dentro de las intrincadas reyertas pol¨ªticas que dominaron a una de las civilizaciones m¨¢s grandes de la antig¨¹edad.
Con Haemimont Multimedia como desarrollador y publicado por FX Interactive, Imperivm Online ya se encuentra a la venta en algunos pa¨ªses del mundo, entre ellos el nuestro. Las referencias con las que el nuevo t¨ªtulo se presenta son muy esperanzadoras, pues nos encontramos ante una nueva entrega de uno de los t¨ªtulos de estrategia que m¨¢s han sonado durante los ¨²ltimos a?os, gracias a las exhaustivas labores de promoci¨®n con las que la distribuidora siempre acompa?a sus lanzamientos. Es justo decir que, a primera vista, nos encontramos ante un juego muy similar a los dos ¨²ltimos representantes de esta saga, Imperivm Civitas. El objetivo principal de estos t¨ªtulos es construir una ciudad de la mejor manera posible, donde satisfacer las necesidades de nuestros ciudadanos.
El aspecto puramente t¨¢ctico siempre jug¨® un papel secundario en los t¨ªtulos que hemos nombrado, si bien en Imperivm Online se promete algo m¨¢s de protagonismo para nuestras valerosas legiones. Sin embargo, la mayor parte del tiempo nos encontraremos realizando labores de arquitectura y dise?o de nuestro enclave romano, con el fin de mantener una ciudad de prestigio dentro de los par¨¢metros que defin¨ªan los ciudadanos de Roma. Si buscamos otros juegos de corte similar, muchos recordar¨¢n t¨ªtulos como Caesar, digno simulador estrat¨¦gico con 4 entregas, y otros t¨ªtulos sat¨¦lite como Pharaoh, Zeus, Poseid¨®n o Emperor, donde bajo las mismas premisas se nos pon¨ªa al frente de las civilizaciones egipcia, hel¨¦nica, atlante o incluso china.
Imperivm Online cuenta con dos modos ?offline', Las victorias de Augusto y Ciudades del imperio. El primero trata una campa?a hist¨®rica basada en acontecimientos hist¨®ricos preestablecidos, donde nuestra misi¨®n es llegar a gobernar Roma partiendo de nuestra posici¨®n como meros gobernadores de una provincia menor. El segundo nos permite elegir alguna de las 20 ciudades m¨¢s destacadas del territorio imperial, y as¨ª vernos con las dificultades de controlar una provincia ya desarrollada, que incluso puede encontrarse en territorio hostil. De esta manera, se nos ofrecen distintas alternativas para disfrutar del t¨ªtulo incluso si no es posible acceder a alguna partida multijugador, en lugar de relegar la diversi¨®n a la posibilidad de encontrarnos con otro jugador.
Por otro lado, el modo online cuenta con 6 tipos de partidas diferentes. El modo ?40000 Denarios' trata de lograr la mayor fortuna en el juego, mientras que los enfrentamientos de tipo ?Rey de la Colina' basan su ¨¦xito en la necesidad de conquistar ciertas ubicaciones de importancia t¨¢ctica en el mapa. ?El ?ltimo B¨¢rbaro' nos enfrentar¨¢ ante hordas de hostiles enemigos del imperio, y ?La Ley del m¨¢s Fuerte' nos har¨¢ tomar las armas para atacar a nuestros oponentes dentro de los l¨ªmites de sus propias murallas. En ?Ciudad Monumental', el jugador que consiga construir m¨¢s monumentos se alzar¨¢ con la victoria, mientras que las partidas de ?Desaf¨ªo Total' mezclan varios componentes de los modos anteriores, y es posible ganar la confrontaci¨®n de varias formas distintas.
La ubicaci¨®n en la que se desarrolla la acci¨®n se antoja amplia, y en ella podemos observar el espacio donde vamos a construir nuestra ciudad y otros tantos elementos alrededor. Para poder tener una vista general de la provincia es necesario alejar la c¨¢mara hasta su l¨ªmite, de manera que tendremos que guiarnos por las distintas banderas para ubicar la posici¨®n de nuestra poblaci¨®n y los enemigos. No existe un paso directo entre provincias, o control sobre varias de las mismas, por lo que podemos asegurar que nuestras labores administrativas y militares se limitar¨¢n a un ¨²nico territorio cada vez, como viene siendo habitual en la saga. Habr¨ªa sido interesante contar con la posibilidad de controlar un par de provincias para poder abastecernos, comerciar o mandar tropas.
El primer paso para obtener la victoria es conseguir que nuestra ciudad funcione perfectamente. Las ciudades se definen por un edificio principal, Fundus, que debe mantenerse intacto si no queremos ser derrotados. Lo siguiente m¨¢s importante es la construcci¨®n de Insulas, donde los habitar¨¢n las distintas personas que acudan a vivir a nuestra provincia. Con estas dos nociones b¨¢sicas, podremos ir abriendo paso por el entramado de construcci¨®n que nos ofrece Imperivm Online, ya que si no contamos con habitantes que se dediquen a la edificaci¨®n, no podremos avanzar para conseguir una ciudad de calidad suficiente como para suponer una amenaza para nuestros rivales en la lucha por llegar a lo m¨¢s alto del imperio.
En el mapa veremos marcados distintos recursos naturales, como canteras, minas de hierro y m¨¢rmol, ampos de cultivo, que deben ser aprovechados para que nuestra ciudad avance. Para ello hay que construir los edificios correspondientes y necesarios para hacer uso de dichas materias primas, de manera que nuestros habitantes puedan obtenerlas e incluso transformarlas. Para este segundo es obligatoria la construcci¨®n de talleres de artesan¨ªa, que hacen uso de los recursos recogidos para dar lugar nuevos productos y materiales. Eso s¨ª, por muchas minas y serrer¨ªas que tengamos, los picos y las sierras no van a cogerse solos, y si no tenemos habitantes sanos capaces de trabajar, ya nos podemos ir olvidando de la recolecci¨®n de los elementos necesarios para nuestra expansi¨®n.
A diferencia de Imperivm Civitas, donde en la mayor¨ªa de las partidas el juego se basa en un sistema de objetivos a cumplir que ven¨ªan dados en forma de tablillas. En Imperivm Online tendremos mucha m¨¢s libertad para tomar las decisiones convenientes para que nuestra ciudad evolucione. No hay un sistema de encargos ni recompensas, pero se ha creado un m¨¦todo para que a la hora de alcanzar ciertos estados tengamos alg¨²n tipo de ventaja. A la hora de crear nuestra primera ciudad, y hasta la llegada de nobles y soldados a la misma, tendremos la posibilidad de crear campamentos de trabajadores para aumentar la velocidad de edificaci¨®n, gracias a encontrarnos en una ciudad plebeya. Esta ventaja ir¨¢ disminuyendo conforme lleguen Equites y se?ores nobles.
Atraer habitantes de mayor nivel social, Patricios y Equites, es necesario para poder construir nuevos edificios o adquirir mejores tropas. Pero cuanta m¨¢s opulencia exista en nuestra ciudad, mayores ser¨¢n las exigencias de nuestro pueblo, por lo que tendremos que esforzarnos en complacer todas las peticiones de nuestros conciudadanos, si no queremos que estalle una rebeli¨®n y arda Roma. Lo principal es conseguir agua, para lo que tendremos que dise?ar las rutas de nuestros acueductos. El punto de partida ya est¨¢ creado, y nosotros iremos marcando por donde deben extenderse. Con ellos, podremos crear pozos, y as¨ª aplacaremos la sed de nuestro pueblo. Con esas necesidades b¨¢sicas realizadas, construiremos aserraderos, alfarer¨ªas, granjas y campos de trigo.
Conforme los paladares de nuestros ricos ciudadanos se van haciendo m¨¢s exquisitos, nuevas y ex¨®ticas formas de gastar su dinero se van haciendo necesarias. Carnicer¨ªas, vino o sastres, ser¨¢n importantes para que los terratenientes romanos puedan hacer alarde de su posici¨®n, mientras que son los esclavos los que trabajan y se agotan en los campos de labranza. Si nos quedamos sin trabajadores, siempre podemos seguir empleando m¨¢s esclavos, construyendo mercados para que sean accesibles. Sin embargo, llegar¨¢ un momento en el que la seguridad de nuestro pueblo se vea amenazada por los b¨¢rbaros colindantes, y es entonces cuando necesitaremos armeros, herreros y cuarteles de infanter¨ªa, caballer¨ªa o arqueros. Roma no era amada en todas partes.
Si decidimos entrenar un batall¨®n, previo desgaste de nuestra popularidad debido a la obtenci¨®n de voluntarios, contaremos con una fuerza entrenada para el combate, que podremos ir mejorando mediante sucesivas ¨®rdenes de entrenamiento. Ser¨¢ posible dirigir nuestras tropas contra los enemigos para destrozar sus aldeas y crear la seguridad que tranquilice a nuestra poblaci¨®n. Podemos movilizar nuestras legiones y agruparlas en un punto de mapa para, mediante sencillas ¨®rdenes, comenzar las acciones de guerra contra los b¨¢rbaros, o simplemente disuadir a otros jugadores de que se acerquen a ese territorio. Tambi¨¦n deben utilizarse para adquirir el control de ciertas zonas del mapa, como cruces de caminos que nos permitan mantener comercio y comunicaci¨®n con el resto del imperio.
Para entrenar mejores tropas tendremos que haber comprado los edificios necesarios. Si contamos con caballerizas, talleres o herrer¨ªas, conseguiremos tropas montadas, m¨¢quinas de guerra o armamento de mejor calidad. Las tropas regulares se componen de Hastati, Arqueros, Equestri o Gladiadores, pero podremos conseguir tropas de ¨¦lite como Secutores, Pretorianos, Triarii o Balistas. Si en alguna ocasi¨®n nos vemos cortos de recursos militares, mediante un extenso desembolso de nuestras tesorer¨ªas podremos adquirir mercenarios de todo el mundo: Highlanders, Celtas, Teutones, N¨²midas, Bereberes, Amazonas e incluso Elefantes de guerra. Algunas tienen ataques especiales, como Gritos de guerra o Ataque con Pilum, que pueden ser activados antes o durante el combate.
Las voces, perfectamente dobladas al castellano, est¨¢n al nivel de todos y cada uno de los lanzamientos de FX Interactive, que siempre destaca por sus magn¨ªficos trabajos de localizaci¨®n. As¨ª mismo, los efectos de sonido y avisos auditivos nos ayudan a mantener la atenci¨®n sobre la acci¨®n de la pantalla, acompa?ados por un hilo musical de buena calidad. Por supuesto, los textos en pantalla est¨¢n perfectamente traducidos, y aunque no sea nada nuevo en la serie Imperivm, sigue siendo de agradecer que con cada entrega se siga promoviendo el acercamiento para todos los usuarios, independientemente de sus capacidades a la hora de entender otros idiomas. El conjunto t¨¦cnico es de una calidad notable, sin llegar a lo excepcional, y que cumple a la perfecci¨®n.
El modo multijugador, si bien no cuenta con opciones m¨¢s extendidas que el modo tradicional, es una nueva y apasionante forma de explotar las bondades de Imperivm. Las partidas pueden ser amistosas o puntuadas, de forma que se mantiene una clasificaci¨®n con las puntuaciones de cada uno de los usuarios del juego. As¨ª mismo, adquirir experiencia en las partidas nos permitir¨¢ ir comprando nuevas capacidades para nuestro gobernador, de forma que mejoremos nuestra capacidad de construir edificios, adquirir recursos o entrenar tropas, mediante un ¨¢rbol de habilidades disponible en la ficha de nuestro personaje. Por otro lado, los perfiles del modo online son compatibles con las partidas para un solo jugador, aunque en las segundas no iremos acumulando puntos.
Ahora bien, la visi¨®n general es que Imperivm Online no ofrece nada que no tuviera Imperivm Civitas, exceptuando, l¨®gicamente, el modo online. El sistema de juego es casi exacto, as¨ª como las tropas disponibles. Lo ¨²nico que encontramos realmente nuevo es la creaci¨®n de perfiles, hecho que viene asociado a la nueva forma de juego multijugador. Definir si esto es algo bueno o algo malo depender¨¢ directamente de los gustos de cada usuario, pero lo que no podemos negar es que era una necesidad para muchos jugadores, ya que la creaci¨®n de nuevas campa?as en la saga Imperivm no pod¨ªa durar mucho m¨¢s tiempo? al fin y al cabo, el Imperio Romano ya cay¨®. La duda es si esta capacidad se podr¨ªa haber incluido sobre una expansi¨®n o actualizaci¨®n, en lugar de sobre un producto 100% independiente.
Solamente podemos concluir afirmando que, si te gust¨® Imperivm o Imperivm Civitas, sin duda encontrar¨¢s largas horas de diversi¨®n en Imperivm Online. Incluso si la posibilidad de jugar online no te atrae demasiado, contar¨¢s con una campa?a y 20 partidas adicionales para poner a prueba tu astucia y capacidad de organizaci¨®n. Sin embargo, si nunca te viste atra¨ªdo por esta serie, la nueva entrega no va a ofrecerte nada que vaya a conseguir que te decidas por jugarla. Los amantes del g¨¦nero encontrar¨¢n un buen juego, con largas horas de diversi¨®n y un nuevo modo multijugador para alargar su vida ¨²til. Ahora, la suerte est¨¢ echada.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.