Borderlands: La Isla Zombie de Dr. Ned

 A finales de mes har¨¢ aparici¨®n tanto en PlayStation Network como en el Bazar de Xbox Live un nuevo episodio de las aventuras de Mordecai, Roland, Lilith y Brick, protagonistas de Borderlands, que regresan a Pandora tal y como anunci¨® 2K, v¨ªa descarga digital. El precio aproximado de esta primera expansi¨®n ser¨¢ de unos 10 d¨®lares, o de 800 Microsoft Points, unos 9,99 €. Gearbox asegura entre seis y diez horas de juego extra, en esta nueva ¨¢rea, de aspecto muy diferente al resto de los escenarios de Borderlands. No en vano estamos hablando de un reclamo que nunca falla: zombies. Ya se sabe, donde hay zombies, hay alegr¨ªa, b¨¢sicamente por el festival gore en el que acaban convirtiendo poco despu¨¦s. Y eso con el arsenal de Borderlands es m¨¢s cierto que nunca. Se han a?adido alrededor de cincuenta nuevas misiones de b¨²squeda, una nueva gama de oponentes, algunos nuevos jefes finales y cinco nuevas mazmorras. No habr¨¢ cambios en el sistema de juego: seguiremos ganando experiencia e ¨ªtems a medida que derribemos a nuestros rivales.

Como apunt¨¢bamos, la mayor¨ªa de cambios vendr¨¢n dados por las caracter¨ªsticas de la nueva localizaci¨®n: en lugar de los ¨¢ridos ca?ones rocosos en los que se desarrolla la acci¨®n del contenido f¨ªsico, en esta expansi¨®n nos encontraremos en un entorno pantanoso poblado por chozas de madera, Jack O'Lanterns -las t¨ªpicas calabazas de Halloween- y ¨¢rboles retorcidos y cubiertos de musgo. No observaremos ning¨²n tipo de progresi¨®n en el ciclo diurno, imperar¨¢n la penumbra y la niebla en todo momento.

El argumento de esta expansi¨®n nos transporta a Jakob's Cove, un lugar ocupado mayoritariamente por ciudadanos de clase trabajadora, donde un tal Dr. Ned, por medio de extra?os experimentos con los que pretend¨ªa mantener con vida a los obreros de su ciudad, ha terminado por zombificar a la poblaci¨®n. La naturaleza de los enemigos afectar¨¢ al modo en que debemos hacerles frente: dado que los muertos vivientes no usan armas, supondr¨¢n un verdadero desaf¨ªo cuando nos salgan al paso en grupo y nos sobrepasen en n¨²mero.

Estos cad¨¢veres ambulantes podr¨¢n atacarnos de diferentes maneras; nos encontraremos con el t¨ªpico zombi que avanza tambale¨¢ndose lentamente e intenta morder a todo el que se encuentra por delante. En modo cooperativo este tipo de enemigos ser¨¢ realmente numeroso y no bastar¨¢ con abatirles: mientras cuenten con extremidades con las que moverse seguir¨¢n aproxim¨¢ndose, por lo que ser¨¢ conveniente asegurarse de que conseguimos mutilarlos por completo para garantizar que permanecen inm¨®viles donde les hemos dejado.

Nos encontraremos tambi¨¦n con zombis escupidores, capaces de lanzar ataques a distancia. Sus esputos nos da?ar¨¢n y oscurecer¨¢n nuestra visi¨®n, por lo que deberemos encargarnos de estos tipos antes que de ning¨²n otro enemigo. Tambi¨¦n nos veremos las caras con los Tankenstein, verdaderas moles de aspecto grotesco y con reminiscencias de las versiones cinematogr¨¢ficas del Moderno Prometeo de Mary W. Shelley encarnado por Boris Karloff, y de los que podremos observar distintas variedades. Una de ellas lleva a la espalda un enorme cofre de tesoro y lanza orbes el¨¦ctricos. Nos ser¨¢ muy dif¨ªcil terminar con estos monstruos, pero una vez lo consigamos podremos hacernos con las riquezas que porten. Habr¨¢ otro tipo de gigantes que cargaran contra nosotros con barriles explosivos, y ser¨¢ un verdadero reto batirles y esquivar sus proyectiles mientras nos hallemos rodeados de zombis renqueantes en el campo de batalla.

Tambi¨¦n nos toparemos con zombis suicidas, que explotar¨¢n tan pronto como se acerquen a nosotros. Deshacernos de este tipo de enemigos a distancia y mientras se encuentren entre otros monstruos nos permitir¨¢ hacer volar por los aires a varios enemigos a la vez, por lo que afinar la punter¨ªa ser¨¢ un factor estrat¨¦gico importante. Nos sobrevolar¨¢n enemigos voladores con aspecto de cuervo, la versi¨®n aut¨®ctona de los Rakks que habremos ido encontrando durante el modo principal de juego. Tambi¨¦n se nos acercar¨¢n zombis psic¨®ticos que mover¨¢n en vaiv¨¦n sus brazos perezosamente hasta que les provoquemos, momento en el que sus ojos adquirir¨¢n un brillo rojizo y embistir¨¢n contra nosotros. Entre los nuevos jefes finales destaca un ser con una calabaza gigante por cabeza que vomita fuego a cualquier cosa a la que nos acerquemos.

Algunos de los primeros encuentros en la isla nos llevar¨¢n al pueblo principal, ah¨ª podremos poner en marcha una serie de torretas que penden de un sistema de pasarelas colgantes suspendido sobre Jakob's Cove. Una vez activado, la artiller¨ªa disparar¨¢ continuamente sobre cualquier zombi que entre en el ¨¢rea protegida, lo que nos permitir¨¢ resolver nuestra misi¨®n de b¨²squeda y revisar tranquilamente las m¨¢quinas de vending.

Al adentrarnos en otras zonas al principio del juego revelaremos el escondite del Dr. Ned, que vive en una casa sobre un ¨¢rbol a la que s¨®lo se puede acceder por medio de un ascensor. Como en cualquier pel¨ªcula de terror que se precie, el montacargas se toma su tiempo para llegar al nivel del suelo, por lo que mientras esperemos a poder subir en ¨¦l tendremos que aguantar el embate de oleadas de seres de ultratumba.

Es de suponer que, adem¨¢s de La Isla Zombi del Dr. Ned, Gearbox lanzar¨¢ pronto nuevos episodios descargables para Borderlands, lo que redundar¨¢ en favor de la pol¨¦mica que habitalmente suscita que sean lanzados contenidos de pago para un t¨ªtulo que a penas acaba de salir a la venta. En todo caso, por lo que hemos podido ver hasta ahora, para los fan¨¢ticos de los zombis y para quienes est¨¦n disfrutando del juego el contenido descargable se antoja como una adquisici¨®n a considerar seriamente.