Grand Theft Auto IV: The Ballad of Gay Tony
- Plataforma3609
- G¨¦neroAventura, Acci¨®n
- DesarrolladorRockstar North
- Lanzamiento29/10/2009
- EditorRockstar Games
La noche es nuestra
Los Episodios de Liberty City se cierran con una segunda entrega que entra de lleno en el submundo de la noche y sus peligros; clubes, chicas, drogas, dinero y mafiosos en una historia de lealtad llevada al extremo. Como Luis L¨®pez, consigue pasta para cubrir deudas y s¨¢lvale el cuello a tu mentor y padrino, la vieja gloria de la vida nocturna ochentera 'Gay' Tony Prince, antes de que sea demasiado tarde. The money doesnt dance...
No estamos acostumbrados a que los videojuegos traten tem¨¢ticas totalmente adultas sin pudor y con la libertad, naturalidad y seguridad que muestra Rockstar a cada t¨ªtulo que lanza. Dejando de lado Manhunt y en menor medida Bully, Grand Theft Auto es el recipiente habitual de traiciones, robos, crimen organizado, violencia, asesinatos, tr¨¢fico de drogas o sexo, contenidos tan recurrentes como autorizados en la serie. Pero lo cierto es que en este segundo de los Episodios de Liberty City, el estudio de los Houser ha conseguido legitimar, todav¨ªa m¨¢s, el videojuego para adultos sin tab¨²es. Con un directo acercamiento a la vida nocturna de su propia visi¨®n de Nueva York, Rockstar ha integrado temas como la homosexualidad, la promiscuidad, los excesos de la noche y las conexiones de este tipo de negocios con redes mafiosas, en un gui¨®n con un resultado magistral, de los m¨¢s maduros y documentados que se recuerdan.
Noche en Studio 54. Desayuno en Tiffany's
El protagonista de esta balada es el tercero en discordia tras Niko Bellic y Johnny Krebitz, el dominicano Luis L¨®pez, asistente personal y guardaespaldas de la leyenda de la noche Gay Tony, propietario de los clubs m¨¢s de moda de Liberty City, El Maisonette 9 -hetero- y el H¨¦rcules -gay-,?desde?hace m¨¢s de una?d¨¦cada. Todo comienza ese d¨ªa en el que Bellic y los irlandeses deciden atracar el banco m¨¢s importante de la ciudad. All¨ª estaba Luis, realizando unas gestones para su jefe. No ser¨¢ el ¨²nico momento en el que los caminos de los protagonistas se crucen, ya que el estudio se ha asegurado que durante los tres t¨ªtulos haya situaciones comunes siguiendo la trama de los diamantes, uno de los hilos conductores de esta historia. Pero volviendo a Luis y a Tony, el arranque del juego muestra uno de tantos d¨ªas en la agenda de un empresario de la noche y su asistente. B¨¢sicamente levantarse a las tantas, acudir a los locales, controlar que todo vaya bien, cuidar de los vips, hacer de relaciones p¨²blicas, visitar los servicios en compa?¨ªa de se?oritas de moral distra¨ªda y especialmente, asegurarse?que no decaiga la fiesta.
As¨ª ha sido la vida de Tony Prince durante m¨¢s de dos d¨¦cadas. Y as¨ª se hubiera perpetuado si el negocio del ocio nocturno no estuviera en crisis; ante los malos resultados de sus clubes, Tony termina asoci¨¢ndose con los peores inversores posibles en ese sector; la mafia. Y lo que es peor, vende a por partida doble acciones superiores al valor real de los locales. L¨®gicamente, la situaci¨®n termina destap¨¢ndose cuando los gangsters reclaman su parte del pastel. Entrampado, sin salida y apunto de tirarlo todo por la borda, Tony recibe el apoyo incondicional de L¨®pez, quien acepta realizar los 'encargos' que estos asociados de su jefe le ir¨¢n demandando a cambio de ir pagando la deuda contra¨ªda y as¨ª, no terminar, con Gay Tony durmiendo con los peces y con los clubes incendiados hasta los cimientos. Ballad of Gay Tony muestra c¨®mo en este submundo, la amistad y la leatad tienen un precio, ya sea en d¨®lares o en gramos. Aunque en el caso de nuestro protagonista, ¨¦stos sentimientos son f¨¦rreos e inquebrantables.
Liberty City cuando cae el tel¨®n...
Y as¨ª, arranca un nuevo recorrido por la ciudad que nos asombr¨® en GTAIV. Gay Tony sigue la misma estructura habitual de los Grand Theft Auto para su desarrollo; determinados personajes importantes en la trama nos llamar¨¢n al tel¨¦fono para ofrecernos encargos que cumplir en forma de misiones, en las que ganaremos dinero y respeto. Debido a la importancia que el gui¨®n tiene en esta entrega y cierre de la trilog¨ªa, y a la petici¨®n de Rockstar de omitir los m¨¢ximos detalles al respecto, omitiremos las menciones directas a personajes o situaciones.
Valorando las 12 horas aproximadamente que ofrecen las 26 misiones principales envueltas en la historia del juego -sin incluir las actividades secundarias que pueden multiplicar su duraci¨®n-, se puede apreciar que elevan un pelda?o m¨¢s la escalada de violencia que hemos visto en GTAIV y en TLAD. El dominicano es un protagonista ind¨®mito, y el arsenal que se ha puesto a su mano, el m¨¢s destructivo de los tres vistos en este a?o. En consonancia, el ritmo de las misiones es m¨¢s parecido a las de San Andreas. Tendremos el repertorio habitual de fechor¨ªas; extorsiones, robos, rescates, intercambios, asaltos por las bravas, hu¨ªdas, persecuciones, vigilancias y hasta preparar trampas.
Fuego, fuego... fuego que me quemo
En estas misiones est¨¢ muy presente el repertorio de nuevas armas que se han a?adido a esta expansi¨®n:?pistola del calibre 44, escopeta cargada con balas explosivas, rifle de asalto P90 -la elecci¨®n por defecto-, una uzi hecha de oro macizo cortes¨ªa de Yusuf, ametralladora avanzada, pesada, pero capaz de disparar 900 balas por minuto, un nuevo rifle de francotirador con alcance en largas distancias y las bombas lapa, que se lanzan en el objetivo y se activan una vez en posici¨®n segura. Tambi¨¦n aparece el repertorio habitual de GTAIV que podremos comprar en los puntos de venta habituales, como armer¨ªas y llamando a Armando y su cami¨®n de traficante de armas, con todas las novedades del mercado. Y como dec¨ªamos las misiones est¨¢n planteadas para que utilicemos este nuevo repertorio, especialmente las bombas lapa y?la escopeta con munici¨®n explosiva, devastadora.
Lo mismo sucede con el regreso del paraca¨ªdas. Se le ha echado de menos, pero en TBOGT vuelve con un importante protagonismo. Obteni¨¦ndolo completando misiones o compr¨¢ndolo, el paraca¨ªdas nos permitir¨¢ disfrutar de ic¨®nicos descensos desde el cielo de Liberty City, y participar en otras actividades, como el salto BASE, donde deberemos trazar unos puntos a¨¦reos determinados en el menor tiempo posible, o los Triatl¨®n, competiciones que comienzan con un descenso en paraca¨ªdas, contin¨²an por mar, como una carrera de lanchas y finalizan en tierra, con una prueba de velocidad al volante. Igualmente el paraca¨ªdas es punto de arranque de una misi¨®n -para infiltrarnos en la zona por aire sin ser detectados o evitar un enfrentamiento con la seguridad- o de salida -saltando desde las alturas para aterrizar en un veh¨ªculo donde un compinche nos estar¨¢ esperando para iniciar la hu¨ªda-.
Y hablando de los elementos a¨¦reos, no podemos olvidarnos de los helic¨®pteros, tanto el helic¨®ptero de combate Buzzard como el Swift de transporte comercial son nuevas adiciones de este cap¨ªtulo. Su control es francamente bueno como ya coment¨¢bamos en las impresiones, ya que se ha a?adido la posibilidad de rotarlos con los botones LB y RB lo que facilita la tarea. Ambos tienen presencia importante en las misiones de la historia principal, con momentos de combate a¨¦reo y rescate. En los veh¨ªculos tambi¨¦n se han realizado adiciones. como la motocicleta Faggio, la lancha Smuggler y los deportivos de gama alta F620 y Super Diamond, m¨¢s otros 6 veh¨ªculos m¨¢s donde se encuentra el cochecito de golf favorito de Tomy Vercetti y el NOOSE, un blindado propiedad de seguridad nacional que adem¨¢s cuenta con una torreta maniobrable 360 grados.
El resto de se?as de identidad de los GTA y especialmente GTAIV siguen intactas. Los taxis para llevarnos de un lado a otro de la ciudad si no queremos conducir, las persecuciones policiales tras haber cometido alg¨²n delito detectado y que pueden ir con las estrellas in crescendo hasta terminar lidiando con varios equipos SWAT, la forma en la que nos arrestan o perdemos la vida -teniendo que invertir en cuidados m¨¦dicos-, los bares y clubes que podemos visitar -para jugar al billar, dardos, bolos o air hockey-, la posibilidad de recoger a prostitutas de las calles o invertir ese dinero en indigentes, y el tel¨¦fono m¨®vil como centro neur¨¢lgico para recibir las misiones, repetirlas directamente cuando perdemos una vida, o acceder a los modos multijugador, de los que hablaremos m¨¢s adelante, siguen intactas.
Incluso la posibilidad de ver la TV en el apartamento de Luis, lugar donde guardar la partida, cambiarnos de ropa -aunque entre varias combinaciones predefinidas sin esas opciones de personalizaci¨®n del personaje que tanto gustaron en San Andreas-, que presenta nuevos a?adidos a la parrilla: Princess Robot Bubblegum, una parodia de Rockstar a las series de anime con toques Hentai, junto a nuevos episodios de las series que debutaron en GTAIV como Republican Space Rangers, The Men's Room, y I'm Rich.
Divertimentos y otros escarceos sexuales.
Pero donde The Ballad of Gay Tony brilla, y aumenta considerablemente sus horas de juego, es en el contenido adicional m¨¢s all¨¢ del hilo argumental, en las misiones secundarias y otros divertimentos. Gestionar los clubes, bailar, beber chupitos, competir en batallas?a?beber?champ¨¢n, quedar con sus ligues con prop¨®sitos indecentes, jugar al golf, participar en carreras ilegales, el mencionado salto BASE, y echar una mano a sus colegas Armando y Henrique, traficantes, y adem¨¢s participar en la guerra que ¨¦stos mantienen con otros camellos en el negocio de las drogas. Ayudar a estos personajes fortalecer¨¢ la relaci¨®n con ellos, tal y como vimos en episodios anteriores.
Adem¨¢s, tambi¨¦n veremos que por el mapeado aparecen otros personajes secundarios de forma inesperada, pidiendo nuestra ayuda para alguna actividad, como por ejemplo, un turista franc¨¦s interesado en que le llevemos a un sal¨®n de?masaje er¨®tico chino, o una ex amiga que ante la promiscuidad de Luis y el poco caso que le hace, se toma un bote de pastillas para llamar su atenci¨®n. Otro a?adido son las peleas en la jaula, que ya se vieron en el tr¨¢iler y que aqu¨ª se presentan en los primeros minutos de juego como una forma de saldar la deuda que contrae la madre de Luis. B¨¢sicamente es utilizar el combate cuerpo a cuerpo -con un bot¨®n para guardia, dos para pu?etazo?y otro para patada- para enfrentarnos a lo m¨¢s granado del barrio y hacernos con una buena tajada?en las apuestas dej¨¢ndolos KO.
La noche me confunde
El mundo de la noche queda perfectamente retratado en todo lo relacionado con los clubs. Desde la gesti¨®n del local, donde ya de buenas a primeras Luis comienza la jornada laboral teniendo relaciones en la oficina del Maisonette, a las actividades de vigilancia en el mismo, donde velaremos por la integridad y el buen ambiente del club, echando a clientes pasados de alcohol y otras sustancias, a camellos que aprovechan para pasar drogas en los ba?os, al t¨ªpico listo que no quiere pagar las copas o al salido de turno que aprovecha para meter mano a las chicas. Dado lo elitista del Hercules y del Maisonette 9 de vez en cuando recibiremos la visita de clientes VIP, de los que tendremos que tener especial cuidado para que los paparazzi y bloggers no desvelen sus infidelidades o su tendencia homosexual. Y esto incluye hacerse cargo de los susodichos despu¨¦s de la jornada laboral. En la pr¨¢ctica es a¨²n m¨¢s divertido de c¨®mo suena.
Y cuando Luis tiene algo de tiempo libre, puede tomarse sus taponazos en la barra, o beber champ¨¢n como un fiera -si nos pasamos y pillamos un buen pelotazo, el personaje se vuelve incontrolable, tendr¨¢ lagunas y desconexiones y podr¨¢ aparecer en el lugar m¨¢s rec¨®ndito de LC pregunt¨¢ndose que sucedi¨® en las horas anteriores-. Pero sin duda la m¨¢s divertida y pol¨¦mica es la opci¨®n de flirtear con las chicas de la pista y echarse unos bailes cada vez m¨¢s subidos de tono, o en grupo -todo llevado a cabo mediante un sencillo minijuego de ritmo-?y finalmente, enrollarse con ella para terminar d¨¢ndole placer en los lavabos del club. As¨ª es la vida de noche.
Dancing free until the morning comes
Respecto a la banda sonora, aut¨¦nticamente impresionante. Rockstar ha conseguido que GTA: Ballad of Gay Tony se sit¨²e muy cerca de la emblem¨¢tica BSO de Vice City, y a pesar de no llegar a la extensa cantidad de horas de radio que nos brindaron esos a?os 80 en Miami, este segundo episodio hace sonar temas que est¨¢n pinch¨¢ndose actualmente en los mejores clubes de todo el mundo. Aquel Pjanoo de Erick Prydz sonando en el tr¨¢iler debut -por cierto, y en nuestra opini¨®n, el mejor v¨ªdeo del a?o- fue una declaraci¨®n de intenciones respecto a lo que ¨ªbamos a encontrar en el juego final. Electrochoc, K109, Vice City FM y Vladivostok son las emisoras que se han visto ampliadas en su repertorio o bien debutan, pero especialmente esta ¨²ltima, con una calidad alt¨ªsima: desde el Bahama Mamas DJ Paul nos trae una sesi¨®n en directo de estilo house y perfecta ejecuci¨®n que encaja como un guante en la tem¨¢tica del juego. Y de nuevo a petici¨®n del estudio no ahondamos m¨¢s en la tracklist, para permitir a los aficionados a la buena m¨²sica gozar al descubrir cada uno de sus temazos sonando por primera vez en nuestra emisora.
En cuanto al aspecto multijugador del t¨ªtulo, estamos ante una continuaci¨®n de lo que ya vimos en t¨ªtulos anteriores, alg¨²n nuevo modo, pero repitiendo el grueso de los ya conocidos, para un m¨¢ximo de 16 jugadores. Reaparecen los incombustibles Deathmatch y Team Deatchmatch, con nuevas localizaciones y modificaciones como las asistencias o las rachas de muertes. Tambi¨¦n se repesca el modo carrera, donde competir en los m¨¢s veloces coches del repertorio del juego en variantes normales -sin armas- o GTA -donde todo vale-, adem¨¢s ahora podremos usar nitros. Por ¨²ltimo, se introduce un modo libre multijugador donde podemos hacer el cabra en grupo tanto como nos venga e gana: realizar saltos BASE en grupo o locuras como abrir un paraca¨ªdas cuando vamos en una moto a toda velocidad. Al final el multijugador resulta un peque?o a?adido, no tan completo como en GTAIV, pero que puede ser interesante para casos puntuales. La conexi¨®n a Xbox Live se utiliza tambi¨¦n para insertar nuestras mejores puntuaciones en el Rockstar Social Club. All¨ª aparecer¨¢n las calificaciones obtenidas en las misiones en su correspondiente r¨¢nking.
Excelente
Un t¨ªtulo referente en su g¨¦nero, que destaca por encima de sus competidores y que disfrutar¨¢s de principio a fin, seguramente varias veces. Un juego destinado a convertirse en cl¨¢sico con el paso de los a?os. C¨®mpralo sin pesta?ear.