Invierno entre estrellas

Si hay una f¨®rmula que funciona, en los tiempos que corren, es cuesti¨®n de tiempo que se vuelva a explotar en otro producto de las mismas caracter¨ªsticas. Hace un par de a?os, SEGA se hizo con la licencia de los juegos ol¨ªmpicos de Beijing, con la cual desarroll¨® un completo t¨ªtulo deportivo para 360, PS3 y PC; no obstante, para las plataformas de Nintendo se reservaba una sorpresa que muy pocos se esperaban: una adaptaci¨®n mucho m¨¢s amena y desenfadada de las Olimpiadas, protagonizada por los dos grandes iconos de los videojuegos, que por primera vez un¨ªan sus fuerzas. Mario y Sonic dirim¨ªan sus diferencias en una competici¨®n deportiva que demostr¨® bastante calidad, y que estaba claro que era s¨®lo el principio.

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No hizo falta esperar cuatro a?os a las siguientes Olimpiadas. El gran ¨¦xito de ventas de la combinaci¨®n de Mario y Sonic provoc¨® que en dos a?os estemos disfrutando de nuevo de un enfrentamiento entre dos de los universos m¨¢s ic¨®nicos de los videojuegos; la excusa, en esta ocasi¨®n, son los juegos ol¨ªmpicos de inviernos de Vancouver, una competici¨®n con menos seguidores, pero perfecta para dotar de un nuevo aire al juego. En este caso, las versiones de Wii y DS son radicalmente diferentes, y no ya s¨®lo en cuanto a jugabilidad, sino en lo que respecta a su planteamiento y presentaci¨®n; Mario y Sonic protagonizan una aventura con tintes de RPG, que es un peque?o vistazo al tipo de juego en el que muchos desean ver a sus personajes favoritos.

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Estas pruebas se puedes disfrutar en modo de partidas r¨¢pidas, o bien crear un peque?o torneo con varias rondas en distintas disciplinas, v¨¢lido tanto para un jugador como para varios a trav¨¦s de la conexi¨®n wi-fi de la port¨¢til de Nintendo. Tambi¨¦n podremos competir contra fantasmas, ya sean los nuestros propios que hayamos ido guardando, o bien contra los que descarguemos de otros usuarios. Completan esta oferta unos cuantos minijuegos extra, en forma de bingo, rueda de la fortuna o un juego de cartas. Son peque?os a?adidos que completan un poco m¨¢s la jugabilidad, pero que no nos alejan del verdadero encanto del t¨ªtulo, que son las pruebas deportivas.

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De hecho, ni siquiera a pesar del atractivo del modo aventura, este tan s¨®lo hace las veces de hilo conductor entre las diferentes competiciones. La excusa para este viaje conjunto es que Bowser y Robotnick han robado los esp¨ªritus del invierno y, como consecuencia, toda la nieve desaparece del mundo, dej¨¢ndonos con bellos parajes y paisajes primaverales. De este modo, se hace imposible la competici¨®n invernal, pero no cuentan con que uno de los esp¨ªritus se haya escapado en el ¨²ltimo momento; ser¨¢ este quien llegue junto a Mario y Sonic y les pida ayuda para recuperar a sus compa?eros y poder devolver la nieve al mundo, pudiendo tener lugar esta competici¨®n ol¨ªmpica invernal. Nuestros h¨¦roes no dudan en aliarse para luchar contra sus archienemigos.

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Lo har¨¢n adentr¨¢ndose en un mundo tridimensional por el que podr¨¢n vagar y hablar con otros personajes, as¨ª como explorar y descubrir objetos y zonas secretas, donde pueden conseguir vidas extra y dem¨¢s. Toda la presentaci¨®n es muy sencilla, con secciones de avance bastante lineal y simples en su presentaci¨®n, pero nos deja una muy agradable sensaci¨®n de ver, por primera vez, lo que muchos deseamos desde la generaci¨®n de los 16 bits: a Mario y Sonic en un RPG, compartiendo un protagonismo muy satisfactorio. Para avanzar, nuestros h¨¦roes deben ir superando diversas pruebas, propuestas por otros personajes o, simplemente, anunciadas en carteles. Obviamente, estas pertenecer¨¢n a la lista anteriormente mencionada, y deberemos o bien batir la marca indicada, o bien vencer a nuestro adversario en un enfrentamiento.

Es un planteamiento extremadamente sencillo, pero que funciona, dotando de una vitalidad extra al juego, y d¨¢ndonos una excusa para disfrutar de las distintas pruebas ol¨ªmpicas en una progresi¨®n bien trabajada y cuidada. El plantel de personajes b¨¢sico para las competiciones son Mario, Sonic, Wario, Knuckles, Bowser, Vector, Donkey Kong, Bowsy, Blaze, Amy, Luigi, Shadow, Daisy, Yoshi, Metal Sonic, Silver, Waluigi, Robotnick, Peach y Tails. Cada uno tiene sus propias caracter¨ªsticas dentro de los par¨¢metros de velocidad, salto, potencia, t¨¦cnica y resistencia, por lo que son m¨¢s o menos propicios para cada tipo de prueba. A mayores, no faltar¨¢n algunos cameos en la aventura, como Toad o los Chaos, que conseguir¨¢n hacernos sentir dentro del universo de ambas franquicias.

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Este buen trabajo visual est¨¢ acompa?ado de un apartado sonoro un tanto limitado, ya que tenemos melod¨ªas b¨¢sicas que son un buen complemento a la jugabilidad y las pruebas que deberemos superar, pero que no destacan especialmente, y en cierto modo se pierde la oportunidad de explotar las tonadas cl¨¢sicas de ambas franquicias. Hay un poco de doblaje bastante satisfactorio, aunque tampoco es muy numeroso en cuanto a l¨ªneas de di¨¢logo; buena labor y una l¨ªnea que se est¨¢ siguiendo de forma habitual en la consola port¨¢til de Nintendo, cada vez con mejores resultados.

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Pero si por algo destaca esta nueva incursi¨®n jugable de Mario y Sonic es por su excelente sistema de control, que consigue sacar todo el partido a las funciones de la port¨¢til de Nintendo, ya sea con la pantalla t¨¢ctil o con los botones normales. La mayor¨ªa de las pruebas ol¨ªmpicas (y fant¨¢sticas) dependen de lograr controlar bien los tiempos, de ser capaz de seguir el ritmo de pulsaciones, o de ser precisos en los giros; no obstante, no es complejo llegar a dominar las diferentes din¨¢micas de las pruebas, y la competici¨®n puede ser f¨¦rrea contra otros usuarios. Hay bastantes modos de juego, personajes, pruebas y minijuegos como para tenernos entretenidos durante horas.

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