Al asedio!

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Tras haber escapado de los vientos de la isla Flotsam y volviendo sobre la pista de Elaine y LeChuck, The Screaming Narwhal (el nuevo barco de GuyBrush) es asediado por Morgan LeFlay, una cazapiratas que va tras los pasos de GuyBrush bajo las ¨®rdenes del lun¨¢tico cient¨ªfico del episodio anterior. El comienzo del cap¨ªtulo no pod¨ªa ser m¨¢s intenso, con una batalla de espadas sobre la cubierta del barco que, lejos de ser resuelta por el noble arte de la esgrima, lo har¨¢ a trav¨¦s de un divertido puzle y con alg¨²n que otro insulto por medio, pero sin llegar a ser un duelo de insultos como tal.

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Tras el combate, el joven Guybrush pierde su mano infectada que es amputada y robada por Morgan, y es remplazada por un garfio que nos ser¨¢ extremadamente ¨²til a lo largo de la aventura. Despu¨¦s de este peque?o contratiempo, seremos libres de navegar por todo el nuevo archipi¨¦lago, llamado Golfo de Melange, formado por las islas de Flotsam, Jerkbait y las peque?as Ewe, Boulder Beach, Gelato y Brillig. No obstante, la ¨²nica a la que no podremos acceder es precisamente Flotsam Island, que visitamos en el primer cap¨ªtulo de esa nueva serie.

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Nuestros pasos, guiados por los consejos de la se?ora del Vud¨², se dirigen hacia las islas de Jerkbait formadas por Spinner Cay, habitado por una raza acu¨¢tica que responden al nombre de Merfolks, y otras dos islas: Roe Island y Spoon Isle. A diferencia del cap¨ªtulo anterior, totalmente centrado en la isla de Flotsam, ahora somos libres de viajar de isla en isla, aunque por contra ¨¦stas son mucho m¨¢s peque?as que la ya citada Flotsam, y las islas peque?as del archipi¨¦lago est¨¢n pr¨¢cticamente formadas por un ¨²nico escenario.

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El objetivo de GuyBrush es encontrar tres artefactos de oro que, seg¨²n cuenta la leyenda, son capaces de invocar a legendarias criaturas de oc¨¦ano que nos llevar¨¢n hacia "La Esponja Grande", el ¨²nico objeto capaz de restaurar al Caribe de la maldici¨®n que naci¨® al convertir Guybrush a LeChuck en humano.

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Spinner Cay, la localizaci¨®n central de este segundo episodio, est¨¢ formada por varias zonas y habitada por los Merfolks. Desafortunadamente, se repiten los problemas de modelado del cap¨ªtulo anterior y los personajes secundarios vuelven a ser repeticiones con modificaciones de un mismo personaje base, aunque la introducci¨®n de esta nueva raza de personajes le da cierta variedad frente al cap¨ªtulo anterior en el que s¨®lo nos encontr¨¢bamos con humanos.

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Los puzles de este segundo cap¨ªtulo son mucho m¨¢s parecidos a los de las entregas cl¨¢sicas con gran importancia en la exploraci¨®n entre diversas localizaciones, dejando atr¨¢s los laber¨ªnticos puzles en la selva del primer cap¨ªtulo. No obstante, tambi¨¦n habr¨¢ selva en esta entrega (demasiado calcada a la del anterior juego), pero puramente como exploraci¨®n de escenarios. La intensidad del divertid¨ªsimo puzle en el laboratorio de Marquis De Singe en el capitulo anterior, no tiene su r¨¦plica en el presente y la dificultad en general de los puzles no resulta demasiado alta.

La duraci¨®n de este segundo cap¨ªtulo es pr¨¢cticamente similar a la del anterior, situ¨¢ndose en torno a 3 o 4 horas. Adem¨¢s, como coment¨¢bamos, el nivel de los puzles dif¨ªcilmente pondr¨¢ en aprietos a un jugador medio del g¨¦nero y muchos de ellos pecan de ser demasiado evidentes e intuitivos. Aun as¨ª, tambi¨¦n hay lugar para puzles divertidos como el que nos har¨¢ cooperar con cierto personaje de gran relevancia en la serie para conseguir uno de los m¨ªsticos artefactos.

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En materia de control m¨¢s de lo mismo, con el sistema h¨ªbrido que nos permitir¨¢ jugar tanto ¨²nicamente con el rat¨®n para realizar todo tipo de acciones y movimientos, como con teclado y rat¨®n, este ¨²ltimo sistema mucho m¨¢s intuitivo y f¨¢cil para explorar de forma m¨¢s ¨¢gil los escenarios. El control con rat¨®n, aunque interesante, sigue pecando de poca exactitud y poco tardaremos en usarlo exclusivamente como puntero, dejando el movimiento de Guybrush relegado al teclado.

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