[Pre E3] Tiger Woods PGA Tour 10, Impresiones
Es un deporte de masas pese al poco auge del que disfruta en Espa?a. EA Sports es consciente de ello y seguir¨¢ apostando por el t¨ªtulo hasta que las ventas dicten lo contrario. Tiger Woods y el golf vuelven a la palestra de la actualidad con una edici¨®n que destaca principalmente por sus novedades t¨¦cnicas, m¨¢s all¨¢ del uso de Wii MotionPlus que pudimos probar en Inglaterra hace unas pocas semanas. Esta vez m¨¢s que nunca, ser un golfista va a tener recompensa doble.
Es un deporte de masas pese al poco auge del que disfruta en Espa?a. EA Sports es consciente de ello y seguir¨¢ apostando por el t¨ªtulo hasta que las ventas dicten lo contrario. Tiger Woods y el golf vuelven a la palestra de la actualidad con una edici¨®n que destaca principalmente por sus novedades t¨¦cnicas, m¨¢s all¨¢ del uso de Wii MotionPlus que pudimos probar en Inglaterra hace unas pocas semanas. Esta vez m¨¢s que nunca, ser un golfista va a tener recompensa doble.
Muchos alaban el trabajo que EA Sports ha realizado en los ¨²ltimos a?os con muchas de sus franquicias. S¨®lo hay que ver el resultado actual de FIFA, Fight Night o NHL para comprobar c¨®mo el paso del tiempo parece haber ayudado a la compa?¨ªa a comprender mejor las querencias de un p¨²blico siempre exigente. No es sencillo volver a empezar, pero lo cierto es que este enorme grupo de desarrollo cuyas oficinas est¨¢n a caballo entre Norteam¨¦rica y Canad¨¢ ha peleado duro por colocarse de nuevo en la ¨¦lite de los deportes interactivos apostando por un sistema de juego tan intuitivo como accesible para toda clase de jugadores sin necesidad de grandes esfuerzos.
Tanto es as¨ª que son varias las franquicias que recientemente han cobrado m¨¢s popularidad entre los aficionados, sean o no practicantes del deporte en s¨ª. Una vez m¨¢s -ya quedan pocas-, viajamos en el tiempo hasta el showcase de Electronic Arts en Londres, pasando por la zona recreativa que se habilitaba para la secci¨®n deportiva de la compa?¨ªa. Ah¨ª, entre otras disciplinas, descubrimos un peque?o ?green' en el que, c¨®mo iba a ser sino, se presentaba en exclusiva la nueva edici¨®n del simulador deportivo que lleva como bandera a Tiger Woods, el tigre americano que ha logrado un sinf¨ªn de premios, elogios y felicitaciones por parte de los entendidos en la materia.
Tres son las versiones de las que disponemos. En primera plana se encuentra el binomio Xbox 360/PlayStation 3, un poco m¨¢s a la derecha, en un peque?o estante sin apenas espacio para disfrutar de sus posibilidades, el tal esperado Wii MotionPlus acompa?ado por la edici¨®n de la consola de Nintendo. Antes de pasar a disfrutar de las virtudes de sendos videojuegos nuestra mente recuerda los sucesos vividos horas antes durante la presentaci¨®n general, con un nervioso Reza Elghazi que, consciente de lo que se juega en esta edici¨®n, trata de mostrar paulatinamente las novedades sin aburrir al personal. Es dif¨ªcil saber a ciencia cierta en qu¨¦ plano andaba la imaginaci¨®n de los compa?eros de oficio, pero a buen seguro que muchos, unos pocos, escuchaban atentamente lo nuevo que vamos a encontrar en la versi¨®n de 2010.
Las consolas punteras tecnol¨®gicamente hablando se centran como hemos comentado hasta el momento en la inclusi¨®n de nuevos modos de juego, as¨ª como de algunas novedades relacionadas con el ambiente que se puede vivir en los alrededores del torneo que el jugador est¨¦ disputando en un momento dado. A esto se refieren con el manido eslogan de 'feel the drama', ya que del mismo modo que la asistencia de p¨²blico se ver¨¢ doblada -si no triplicada-, las condiciones atmosf¨¦ricas var¨ªan en funci¨®n de las reales, que se comprueban a trav¨¦s de la conexi¨®n a Internet de los tres sistemas mostrados hasta el momento. Esto conlleva l¨®gicamente a variar el estilo de juego en funci¨®n del viento, la lluvia o cualquier otro efecto medioambiental, de los que pudimos dar buena fe en la demostraci¨®n.
Asimismo se coment¨® muy por encima uno de los anunciados nuevos modos de juego; el Tournament Challenge, llamado a recorrer las situaciones m¨¢s emblem¨¢ticas de Tiger Woods bajo el peso de la presi¨®n, bien sea clim¨¢tica, ambiental -con los v¨ªtores o abucheos de la grada-, adem¨¢s de pelear contra condiciones adversas dentro de la pista en lo que respecta a la jugabilidad. Curiosamente no se ha hablado de la posibilidad de que el jugador se ponga nervioso, de su resistencia o cansancio, otros aspectos largamente rumoreados en la franquicia que hasta el momento nunca han hecho acto de aparici¨®n. El propio Woods ser¨¢ el encargado de narrar sus jugadas m¨ªticas para dar m¨¢s trasfondo a los sucesos que estamos viviendo.
A cada jugador corresponde valorar el inter¨¦s que puede despertar esta nueva modalidad, exactamente igual que la inclusi¨®n de un Online en condiciones del que hasta el momento se conoce albergar¨¢ a cuatro jugadores disputando un torneo al un¨ªsono, as¨ª como una carrera de evoluci¨®n de personajes que como de costumbre en estos casos apenas se ha dejado entrever, por lo que es poco menos que imposible emitir un juicio coherente sobre ella. Lo que s¨ª se conoce es el n¨²mero de circuitos con los que contamos en Wii -27-, un n¨²mero ligeramente superior al de sus hom¨®nimos en X360 y PS3. El realismo con el que estas pistas han sido adaptadas es sencillamente impresionante. Desde el efecto de la hierba hasta el m¨¢s simple movimiento con el palo de golf es suficiente para que todo lo que rodea al jugador se vea distorsionado de s¨²bito.
Lo mismos sucede con los efectos del agua, del barro y del resto de superficies mostradas en la demostraci¨®n, un simple bot¨®n en comparaci¨®n al n¨²mero real que el jugador podr¨¢ disfrutar en la versi¨®n definitiva del simulador, que por cierto ver¨¢ la luz a principios del mes de julio, principalmente para darle salida en el mercado antes de que finalice la ¨¦poca estival. De nuevo demostraci¨®n en mano podemos hablar de la suavidad de movimientos del personaje principal -obviamente Tiger Woods, uno de tantos que podremos controlar-, aunque b¨¢sicamente recogen la gama de habilidades que ya conocemos de ediciones pasadas, por lo que no existe ninguna novedad realmente llamativa en este sentido.
A nadie se puede enga?ar en este aspecto; la inclusi¨®n m¨¢s interesante de esta versi¨®n, dejando por un momento de lado las novedades anteriormente mencionadas (que tambi¨¦n se aplican a Wii, como era de esperar), el Wii MotionPlus es el protagonista m¨¢s interesante de esta edici¨®n, una de las primeras con Grand Slam Tennis en aprovechar las funciones de este peque?o aparato que por el momento transmite buenas sensaciones en todos los sentidos. Si en el caso del juego de tenis apenas tuvimos oportunidad para hablar con propiedad de las mejoras del perif¨¦rico, no suced¨ªa lo mismo en Tiger Woods, que pese a los pocos minutos de demostraci¨®n ofrecidos proporciona dos razones para centrarnos en su desarrollo. Una, las sensaciones a la hora de poner en pr¨¢ctica el swing. Y dos, la inclusi¨®n de la modalidad 'disc golf', un peque?o frisbee oculto en una entretenida forma de entender el deporte.
Esta vez pasamos a la demostraci¨®n de Wii, dejamos a un lado los consejos de Reza Elghazi para medirnos con un asistente canadiense, fuerte acento franc¨¦s al hablar, que sin demasiado entusiasmo nos recibe para comenzar a explicar los pormenores del t¨ªtulos minutos m¨¢s tarde. Pasamos directamente al green para aprender de qu¨¦ forma debemos ejecutar un sencillo swing, Wii MotionPlus a?adido al pad de la consola de Nintendo. En primer lugar medimos la precisi¨®n del golpe en una disciplina nada compleja, para luego hacer acopio de nuestros mejores reflejos al establecer la fuerza del golpe. El primero de ellos, un aut¨¦ntico fiasco. La pelota pasa de largo del agujero central y se pierde en un bosque. Apenas hay rastro del p¨²blico tan cacareado en la introducci¨®n, lo que nos hace formular irremediablemente la primera pregunta.
'?Las novedades de otras versiones son tambi¨¦n aplicables a las de Wii?'. La respuesta ya la conocemos dado que se ofrec¨ªa unos p¨¢rrafos atr¨¢s, aunque el rostro de nuestro asistente podr¨ªa pasar a la historia por la sorpresa que reflejaba. 'La intenci¨®n es adaptar el juego al nuevo sistema de control, a?adiendo las posibilidades clim¨¢ticas al jugar online, el Tournament Challenge?' Nada de la apariencia gr¨¢fica, que te¨®ricamente en la demostraci¨®n no mostraba el aspecto definitivo del juego cuando llegue a las estanter¨ªas de las tiendas especializadas. No obstante s¨ª que podemos dar fe de la nueva conducta de los -pocos- espectadores que se daban cita en los alrededores del green.
Dejamos de lado la apariencia gr¨¢fica y volvemos a fijar nuestra atenci¨®n en las virtudes del Wii MotionPlus, esta vez ya no dentro de un escenario normal y corriente, sino en un especialmente habilitado para el disc golf, esa disciplina que emplea un frisbee como utensilio principal. 'Este modo se ha implementado principalmente para probar las posibilidades del perif¨¦rico', comenta el peculiar asistente, con unas palabras muy acertadas que no hacen otra cosa que reflejar la pura verdad. Una mano virtual, un disco y un aparato que reconoce al dedillo pr¨¢cticamente todas las indicaciones que queremos darle. El objetivo es introducirlo dentro de un peque?o cesto, propinando cada vez un golpe mayor al disco que permita alcanzarlo con el menor n¨²mero de lanzamientos posibles.
Por suerte la edici¨®n de Wii trata de ampliar este concepto gracias al Wii MotionPlus, que ha dejado entrever sus cualidades durante el breve tiempo que se nos ha permitido disfrutar de la demostraci¨®n de esta consola. No deja de ser una versi¨®n ampliada del resto de la sobremesa, pero las posibilidades que ofrece el control a buen seguro har¨¢n las delicias de los aficionados del g¨¦nero. Pronto podr¨¢n poner sus manos con esta nueva edici¨®n del simulador de golf, a principios de julio, momento ideal para salir al green y disputar unos hoyos.
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