Tenchu: Shadow Assassins
- PlataformaPSP7
- G¨¦neroAcci¨®n
- DesarrolladorAcquire Inc.
- Lanzamiento01/04/2009
- EditorUbisoft
Asesinos de port¨¢til
Rikimaru y Ayame se enfundan el mono de trabajo para ofrecer una de sus mejores aventuras tamb¨ªen en PSP. Tras su debut en Nintendo Wii, Shadow Assassins se pasa a la port¨¢til para ofrecer un port 1:1 en el que cambia el sistema de control, pero no la forma de realizar los asesinatos. Acquire ha hecho un buen trabajo que sin duda agradecer¨¢n los usuarios de la consola en estos tiempos tan poco prol¨ªferos para la negra de Sony.
Acquire se las ha arreglado para elaborar una sorpresa doble en apenas dos meses de diferencia, al menos en el mercado occidental. Despu¨¦s de que Tenchu: Shadow Assassins hiciese acto de aparici¨®n en Wii obteniendo un resultado medianamente aceptable -lejos de la primera impresi¨®n que transmiti¨® el producto a su salida en Jap¨®n-, ahora le toca el turno al port 1:1 de la edici¨®n de Nintendo, esta vez para PlayStation Portable. Cuando se anunci¨® que el t¨ªtulo ver¨ªa la luz en esta port¨¢til fue dif¨ªcil cuadrar cuentas, aunque a estas alturas nada nos sorprende cuando hablamos de adaptaciones, remakes y extra?os ports aparecidos de la nada. Lo m¨¢s l¨®gico era pensar que la intenci¨®n de la compa?¨ªa japonesa era sacar algo de tajada con un producto t¨ªpicamente deficiente, uno de esos tapados que a duras penas se hacen un hueco en nuestro mercado.
Dice el dicho que rectificar es de sabios y qu¨¦ duda cabe que nosotros nos equivocamos. Quien piense que este Tenchu es una simple conversi¨®n de Wii, est¨¢ en lo cierto, pero no en el sentido literal de la palabra. Shadow Assassins recoge todo lo bueno del producto original, lo convierte a las virtudes de PSP toda vez que aprovecha el potencial de la consola de Sony para dar rienda suelta a una historia de traici¨®n y venganza a la que no le falta absolutamente nada que estuviese presente en el producto original. De hecho muchos usuarios han llegado a pensar que la versi¨®n original que se plante¨® en un principio fue precisamente la de PlayStation Portable, y pese a que no faltan motivos que sostengan tal afirmaci¨®n lo cierto es que en nuestras manos queda valorar justamente el esfuerzo de la compa?¨ªa sin entrar en camisas de once varas.
Para que quede claro, Shadow Assassins es en PSP exactamente el mismo producto que en Wii con un acabado gr¨¢fico inferior y un sistema de juego que obviamente no recurre a un sensor de movimientos sino al tradicional sistema de pulsar botones en el momento indicado para llevar a cabo los terribles asesinatos que se llevan a cabo hasta alcanzar a la misteriosa raptora de la princesa de Lord Gohda. Para ponernos en situaci¨®n, nos metemos de lleno en el siglo XIII, con los dos h¨¦roes habituales de la franquicia como el pilar principal sobre el que transcurre el argumento. Rikimaru es un ninja fiel a sus principios, incapaz de traicionar a su se?or, mientras que Ayame es una joven muchacha m¨¢s impulsiva pero con una terrible capacidad para inmiscuirse entre las sombras y terminar con la vida de aquel que se cruce en su camino.
Por lo tanto nos encontramos ante dos personajes radicalmente opuestos en concepto cuyas diferencias se plasman en el sistema de control. Rikimaru es un h¨¦roe lento, tosco, aunque bastante poderoso, mientras que Ayame es la otra cara de la moneda. En Shadow Assassins prima el no ser descubiertos a toda costa, y por primera vez en la historia de la franquicia el camino para obtener la respuesta al problema que se ha planteado se perfila como uno especialmente lineal, en el que no es necesario encaramarnos a tejados ni realizar extra?as filigranas para pasar desapercibidos. La esencia es la misma pero cambia de la forma de ser llevada a la pr¨¢ctica. El resultado tambi¨¦n es satisfactorio a su paso por PSP.
Hay pocos cambios incluso en este sentido. Los m¨¢s visibles radican en los decorados, que han perdido profundidad y calidad. La niebla aparece en momentos puntuales, aunque no tenemos que preocuparnos por ralentizaciones ni otros problemas habituales en estas circunstancias. La fluidez del juego es un hecho m¨¢s que contrastado que puede presumir de mover un motor gr¨¢fico que nada tiene que envidiar a los pesos pesados de la consola. Precisamente por este motivo llama poderosamente la atenci¨®n que el sistema de juego se haya adaptado perfectamente a las necesidades de la consola, ya que en reglas generales esta adaptaci¨®n de Shadow Assassins mantiene exactamente la misma din¨¢mica que pudimos disfrutar hace unos meses.
S¨®lo que esta vez hablamos de una conversi¨®n para port¨¢til que dif¨ªcilmente puede ofrecer m¨¢s que este t¨ªtulo. A saber, los controles se han adaptado para cumplir todas las funciones del wiimote con la sola necesidad de apretar un bot¨®n concreto en el momento justo. Esta explicaci¨®n describe sin necesidad de m¨¢s rodeas pr¨¢cticamente el resto de la mec¨¢nica, ya que a excepci¨®n de la lucha con espadas, el resto del sistema de juego se ha puesto en escena sin grandes traumas ni complicaciones que deban tenerse en cuenta a la hora de la verdad. Si acaso la c¨¢mara nos dar¨¢ alg¨²n que otro problema en situaciones muy puntuales, lo que no deja de ser uno de los problemas que arrastra el t¨ªtulo de la versi¨®n ?adulta'.
Contamos con distintos lugares para escondernos, siempre en pos de las zonas de oscuridad que se reparten por el escenario, as¨ª como de un tercer ojo con el que visualizar el campo de cubren los guardas y, por ende, la mejor forma de avanzar. Cada cap¨ªtulo de la historia se divide en varias misiones que generalmente nos llevan a eliminar a alg¨²n se?or feudal, y pese a que contamos con diversas maneras de alcanzar a nuestra v¨ªctima en ¨²ltima instancia el recorrido apenas var¨ªa. A todo esto hay que a?adir los objetos arrojadizos con los que contamos para producir una muerte instant¨¢nea, as¨ª como el peculiar gato ninja que tanta popularidad ha cobrado en algunos medios especializados. De nuevo, una fiel adaptaci¨®n de lo que pudimos descubrir en Wii.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.