Elite Forces: Unit 77
- PlataformaDS6
- G谷neroAcci車n
- DesarrolladorAbylight Studios
- Lanzamiento27/02/2009
- EditorDeep Silver
Rescates a la espa?ola
Las desarrolladoras espa?olas Gammick Entertainment y Abilight se propusieron hace unos a?os recuperar el honor de la industria patria y con este af芍n impl赤cito recala en la peque?a port芍til de Nintendo 'Elite Forces: Unit 77', un decente t赤tulo de acci車n cargado de tiros, p車lvora, uniformes y un particular aroma espa?ol. ?Est芍 preparado, soldado?
La colaboraci車n entre dos desarrolladoras espa?olas no es algo que veamos muy a menudo y de lo que la industria espa?ola pueda presumir en demas赤a, pero en este caso en particular Gammick Entertainment y Abilight han decidido aunar fuerzas para desarrollar el juego que ahora llega a nuestras manos y que hemos saboreado profundamente para determinar qu谷 clase de producci車n es, si un delicioso manjar o el peor de los desagrados. En este caso, la obra, producto del buen hacer de desarrolladoras espa?olas, se queda entre las dos aguas: sin llegar a ser la peor de las obras tampoco destaca especialmente dentro de su g谷nero. Podemos hablar de 谷l, pues, como un juego m芍s de acci車n, pero con un peculiar sabor espa?ol que no nos hemos querido perder.
La Unidad 77 al rescate.
La historia de 'Elite Forces: Unit 77' comienza con el rapto de m芍s de treinta de las personalidades m芍s relevantes del mundo. Se trata de un hecho sin precedentes en la historia mundial y de un calado tan profundo y delicado que s車lo puede ser resuelto por un equipo con una cualificaci車n tan brillante y ardua como la que posee la famosa Unidad 77. Esta unidad est芍 formada b芍sicamente por cuatro miembros excepcionales: Kendra Chase, especializada en ataque a larga distancia; Dag Hammer, experto en artiller赤a pesada; William Matic, un coco al que no se le resiste ning迆n bloqueo inform芍tico ni ninguna tecnolog赤a existente; y T. K. Richter, el maestro de la demolici車n y la conducci車n. Ellos, a pesar de no haberse enfrentado a una situaci車n parecida jam芍s, representan la m芍xima esperanza para el mundo entero. Por ello, juntos tendr芍n que bastarse para sortear los diversos escenarios haciendo uso de sus respectivas especializaciones y cumplir su misi車n principal: la neutralizaci車n de los complejos de los supuestos malhechores y el rescate de los secuestrados.
Aunque en un primer momento la historia promete por su peculiaridad, entendida siempre dentro de los temas que generalmente se tocan en el g谷nero de la acci車n, su desarrollo posterior a nivel argumental es paup谷rrimo. Tanto que nuestro avance por el juego, apenas basado en la superaci車n de misiones tremendamente lineales y elementales que nos encomiendan al comienzo de cada fase, se convierte en una sucesi車n de objetivos insustanciales que hemos de batir sin preguntarnos la raz車n real.
Desafortunadamente como decimos el transcurso de nuestra aventura llega a un punto cr赤tico en el que desconocemos por qu谷 llevamos a cabo determinadas misiones y qu谷 correspondencia tienen estas con el hilo principal. Todo el entramado relativo a la historia parece estar hilvanado sin atenci車n alguna y con la 迆nica meta de resolver lo m芍s esquem芍ticamente posible las misiones, siempre asequibles y simples, dejando muy atr芍s una posible profundizaci車n en el argumento. Esto, pese al g谷nero, es un error grave.
?Tiros a gog車!
El apartado jugable es el m芍s destacable de todos los que componen este t赤tulo, pues se adapta realmente bien a las cualidades de la dimensi車n t芍ctil de la port芍til. Ambas pantallas tendr芍n su respectiva utilidad, la superior mantendr芍 un mapa en el que estaremos se?alados por peque?os puntos, pudiendo hacerlo descender a la pantalla inferior, la t芍ctil, desde la cual, en condiciones normales, controlaremos a nuestros protagonistas a golpe de 'stylus' desde una visi車n cenital. Con un toque se?alaremos a cualquiera de nuestras unidades y con otro en cualquier parte del escenario haremos que comience a moverse, otro ligero toque en el enemigo nos bastar芍 para que nuestro personaje le dispare, aumentando la cadencia si repetimos la acci車n varias veces. Pero tambi谷n podremos seleccionar varias unidades, acerc芍ndolas y pulsando el bot車n que encontraremos en la parte derecha inferior que simboliza la sombra de los hombros y la cabeza de varios personajes siempre y cuando vayamos a la seleccionar a m芍s de uno, si por el contrario solo podemos seleccionar solamente a uno de ellos se representar芍 una sola sombra. Este control t芍ctil puede ser combinado con los botones para agilizar determinadas acciones, como el cambio al arma secundaria que posteriormente comentaremos.
La IA de nuestros enemigos es tan mejorable como la de los personajes aliados que nos acompa?an. Mientras que nuestros adversarios no supondr芍n una amenaza excesiva, los miembros de la Unidad 77 que tengamos seleccionados seguir芍n al personaje principal que manejemos. Si disparamos con este, el otro/los otros integrantes de nuestro grupo disparar芍n al mismo objetivo. No tenemos opci車n a cambiar manualmente el modo de actuaci車n de los personajes controlados por la m芍quina pero, por otra parte y dada las flaquezas de nuestros enemigos, tampoco es necesario. Si bien es cierto, en algunos momentos los miembros de la Unidad 77 que siguen al personaje que controlemos impactar芍n contra rejas, edificios u otros obst芍culos que encuentren por el camino teniendo que volver, a nuestro pesar, a por ellos, pues en m迆ltiples ocasiones su tosca e inflexible secuencia de seguimiento provocar芍 que terminen bloque芍ndose.
Pero hay m芍s. Adem芍s de su arma principal con balas infinitas, cada uno dependiendo siempre de su especializaci車n posee un tipo de arma secundaria que activamos o bien utilizando el 'stylus' con un toque sobre ella o bien haciendo uso de los botones horizontales 'L' o 'R'. Kendra, por ejemplo, podr芍 utilizar su francotirador para batir a los enemigos m芍s lejanos mientras que Dag, con su potente bazuca, har芍 trizas a todo aquel adversario que quiera encararnos. Sin embargo, la munici車n de estas armas secundarias s赤 se agota, por lo que no podremos malgastarlas si no queremos vernos obligados a buscar alg迆n paquete de munici車n.
Ser芍n precisamente estos paquetes de munici車n los que palien el uso desmesurado de las armas secundarias; normalmente estos paquetes estar芍n en el interior de las cajas que encontremos en zonas anexas a nuestro trayecto, f芍cilmente destruibles con las armas primarias, as赤 como en determinadas zonas no excesivamente escondidas. A su vez, la recolecci車n de botiquines nos permitir芍 recuperar la vida de los personajes que deseemos con tan solo seleccionar a uno de ellos y posteriormente tocando en el botiqu赤n situado en la parte inferior de la barra de acciones vertical de la derecha de la pantalla t芍ctil donde se recogen todos aquellos que hayamos conseguido. L車gicamente, no podremos almacenar demasiados botiquines ni excesiva munici車n para las armas secundarias, estos tendr芍n unos l赤mites que intentar芍n dificultar un poco m芍s nuestra progresi車n. Como las cajas, tambi谷n ser芍n interactuables los bidones con l赤quido inflamable que con unos disparos saltar芍 por los aires creando una peque?a explosi車n.
Tambi谷n podremos, con la inestimable colaboraci車n de T. K., conducir distintos veh赤culos como camiones, tanques o helic車pteros, que nos ser芍n de gran ayuda a la hora de derrotar a nuestros enemigos y de avanzar en nuestros objetivos. Aunque hemos de apuntar que maniobrar con la mayor赤a de los veh赤culos, sobre todo con el cami車n, es ocasionalmente engorroso, principalmente cuando queremos dar marcha atr芍s, asistiendo a una reacci車n an車mala o, a迆n peor, a una no reacci車n.
Pautas mon車tonas.
La estructura de las fases que tendremos que ir superando hasta terminar el juego es extremadamente lineal. Con los personajes que nos habiliten en cada misi車n deberemos derrotar a todos los enemigos que se interpongan en nuestro camino y recoger toda la munici車n y los botiquines para poder sobrevivir hasta que lleguemos a su t谷rmino; as赤 se resume, en pautas generales, el desarrollo hasta el final del t赤tulo. Esta linealidad se cimienta en una dificultad demasiado asequible basada esencialmente en nuestra precisi車n con el 'stylus' y nuestro temple en zonas claves con abundantes enemigos, as赤 como la capacidad que tengamos para ser lo menos herido y contar con la m芍xima munici車n posible en nuestras armas secundarias para destruir a los jefecillos que nos esperan en la recta final de cada misi車n. Estos jefecillos son excesivamente duros en comparaci車n con los soldados de a pie, que con menos de una r芍faga se doblegar芍n ante los miembros de la Unidad 77.
El avance por estos escenarios es riguroso, apenas son grandes y no contamos con misiones secundarias s車lidas que nos permitan ahondar m芍s en los parajes que recorramos. S車lo determinadas zonas cerradas que normalmente funcionan como dep車sitos de munici車n y botiquines presentan un m赤nimo de inter谷s por la b迆squeda de su apertura, pero cuando observamos que con proseguir nuestro camino basta para que se abran en la mayor parte de las ocasiones, el resultado acaba siendo desalentador.
Si nos hemos encari?ado especialmente de una fase y queremos volver a rememorarla no tenemos que temer por la idea recurrente de tener que volvernos a hacer el juego para llegar a ella ya que podremos hacerlo desde el men迆 principal accediendo a la opci車n 'partida r芍pida'. Desde aqu赤 tendremos a nuestra entera disposici車n todas aquellas fases que hayamos superado pudiendo repetirlas cuando queramos. El men迆 principal tambi谷n nos permite el acceso a la 'galer赤a', donde podremos echar un vistazo a los 'elementos ocultos' que hayamos logrado desbloquear mediante nuestro avance en las misiones claves.
La duraci車n de 'Elite Forces: Unit 77' es escasa, 迆nicamente unas doce fases nos opondr芍n una d谷bil resistencia para acabar por completo este t赤tulo. Este problema podr赤a haber sido sencillamente solucionado con la inclusi車n de otros modos que permitieran alargar la vida del juego. Lo cual, a nuestro entender, es una falta rese?able si tenemos en cuenta las limitaciones que ofrece esta obra, m芍s inclinada hacia la acci車n directa y el entretenimiento 'sin traumas'; un entretenimiento que se ve coartado a causa de la falta de un s車lido sistema de puntuaci車n que permitiera tanto en multijugador como en solitario batir nuestros registros las veces que fu谷ramos capaces.
Sin novedades, capit芍n.
Su aspecto visual ha de ser diferenciado en dos partes: por un lado las escasas secuencias de v赤deo y por otro el rodaje directo del juego. Las secuencias de v赤deo se asientan en un dise?o art赤stico que lejos de ser magn赤fico se mantiene dentro de la correcci車n como correcto es, a nivel t谷cnico, el desarrollo del juego en movimiento, aunque con un cambio notable en lo art赤stico. En este 迆ltimo nos encontramos con escenarios de diversa 赤ndole (desierto, selva, zonas heladas?) siempre te?idos de elementos b谷licos buscando una ambientaci車n adecuada a la historia. Las animaciones no son excelentes, pero mantienen una relativa dignidad, mientras que la visi車n cenital antes citada nos impide atisbar con claridad los detalles de nuestros personajes por lo que apenas podemos valorar su dise?o; con los adversarios y los jefecillos ocurre lo mismo, con la diferencia de que la repetici車n continua del modelado y su simpleza, especialmente la referente a los soldados comunes, resta credibilidad al esfuerzo art赤stico. Los escenarios, por su parte, se encuentran gr芍ficamente por encima de los personajes, incluyendo todos los elementos que los componen: peque?as monta?as, altos 芍rboles, los efectos de iluminaci車n procedentes del sol, etc.??
En cuanto al aspecto sonoro apuntamos que, simplemente, cumple sin alardear en ninguno de sus flancos, ni en el de los efectos, ni en el de la m迆sica que acompa?ar芍 constantemente a nuestras haza?as. Sin embargo la BSO est芍 claramente por encima en calidad y en diversidad de los efectos sonoros, realmente pobres.
Correcto
No es lo 迆ltimo ni lo m芍s original, tampoco cuenta con la mejor ejecuci車n, pero puede divertir si te gusta el g谷nero. Bien, pero mejorable. C車mpralo si te gusta el g谷nero y te gusta tenerlos todos.