Vigilantes al acecho

Los Vigilantes de la novela gr��fica m��s importante de todos los tiempos llegan a XBLA, PSN y PC. Un juego de acci��n intenso, con muchos gui?os a los cl��sicos de los beat'em up callejeros de los 90, que satisfar�� a los aficionados del g��nero pese a no ser excesivamente largo.

Ram��n M��ndez

Actualizado a 24 de septiembre de 2014 11:43 CEST

Pocas veces un subt��tulo es tan ir��nico como en el caso que nos ocupa. Watchmen es la novela gr��fica m��s importante de todos los tiempos, y pese a tener m��s de dos d��cadas de antig��edad, sigue siendo un punto de referencia inevitable para los amantes de los c��mics de todo el mundo. La repercusi��n de la obra de Alan Moore (gui��n) y Dave Gibbons (dibujo) es tal que, a lo largo de todo este tiempo, Hollywood ha estado luchando por conseguir llevar a buen puerto una adaptaci��n cinematogr��fica, aunque esta fue total y completamente imposible hasta la fecha. La grandiosidad de los personajes, lo intenso de sus situaciones, y lo profundo de sus razonamientos convierten a Watchmen en una obra que, seg��n palabras del propio Moore, no puede representarse en una pantalla.

Esto no detuvo a la industria del cine, que acab�� sali��ndose con la suya, pese a la negativa de Moore de aprobar esta adaptaci��n y a las disputas legales entre los diferentes estudios que tuvieron en alg��n momento los derechos. Parece que el resultado est�� siendo del agrado de cr��tica y p��blico, y este viernes llegar�� a nuestros cines. Pero si ya es dif��cil adaptar Watchmen a una pel��cula, peor todav��a es crear una adaptaci��n jugable; los densos, constantes y profundos di��logos de la obra original lo convierten en algo ��nico, dif��cil de plasmar en un mando de control. Tal vez por eso, se haya optado por ofrecernos una secuela, una historia ambientada antes de los sucesos narrados en la novela gr��fica.

The End is Nigh
El fin est�� cerca es una precuela a los eventos acontecidos en el c��mic y la pel��cula. La historia comienza el 13 de octubre de 1972, en la ��poca de los Crimebusters (antes de la ley que prohib��a los enmascarados), y nos narra una colaboraci��n entre Rorschach y B��ho Nocturno, en la que van a Sing Sing en medio de un mot��n, y una vez all�� descubren que el Jefecillo, un criminal al que detuvieran ya con anterioridad, se hab��a escapado. Se trata de una situaci��n que se menciona de pasada en el c��mic, trat��ndolo como un rival menor, pero que es la excusa perfecta para mostrarnos a estos dos h��roes en acci��n.

Durante nuestro avance, visitaremos lugares reconocibles de la novela gr��fica (aunque debidamente adaptados, ampliados y perfeccionados) como son la c��rcel inicial, los callejones y bares, y la zona portuaria. Entre cap��tulos, la historia se nos ir�� narrando con unas secuencias, de estilo c��mic animado; son bastante interesantes y atractivas para los amantes de Watchmen que quieran saber m��s de la historia de los h��roes protagonistas antes de que llegasen al punto narrado en la novela gr��fica, y dan coherencia a lo que acontece en la aventura. Ser�� durante estos momentos cuando podremos ver, en peque?os cameos ef��meros, a otros de los vigilantes, como Dr. Manhattan, Espectro de Seda u Ozymandias. Una pena que su aportaci��n sea tan escasa, dado que todos ellos son personajes muy interesantes.

This city is afraid of me. I've seen its true face
Watchmen es un juego de acci��n en tercera persona; un 'yo contra el barrio' al m��s puro estilo Streets of Rage o Final Fight, pero completamente en tres dimensiones. En ese aspecto, el juego consigue salir mucho m��s airado que esas dos franquicias, cuyas versiones 3D fueron canceladas o un sonoro fracaso, respectivamente, haciendo pensar a muchos que se trataba de un g��nero imposible de representar con acierto en las nuevas tecnolog��as. Lo cierto es que, sin ser tampoco especialmente brillante, Watchmen consigue ofrecer un estilo de juego s��lido y divertido, un espejo en el que mirarse a la hora de que las compa?��as preparen nuevas incursiones en el g��nero. Eso s��, es un estilo que, a priori, se antoja muy poco 'Watchmen'.

No nos enga?emos: cualquiera que haya le��do la novela gr��fica sabe que hubo una ��poca en la que los protagonistas pelearon por la paz y la tranquilidad, pero nunca se les ha visto en esas situaciones. Eran un vestigio de una ��poca anterior, de anta?o, como una visi��n borrosa perdida en el olvido e imposible de visualizar en todo su esplendor. El fin est�� cerca nos presenta precisamente eso: una ��poca que la que los enmascarados estaban en activo, y recorr��an los bajos fondos de la ciudad en busca de informaci��n, tratando de apresar a los criminales y de acabar con las bandas. Un grado de acci��n que desentona un poco con el esp��ritu al que estamos acostumbrados de la novela gr��fica, pero al que parecen adaptarse bien los protagonistas.

De hecho, el juego intenta ser lo m��s fiel posible al original, o mejor dicho, al film que se estrena esta semana. Cierto es que la pel��cula mantiene toda la fidelidad posible a la obra de Moore y Gibbons, pero se permite algunas puestas al d��a en lo que respecta a ambientaci��n, estilo visual y ritmo, que el juego se ha apropiado. Eso s��, el esp��ritu sigue siendo el del c��mic original, y eso se representa en la forma de actuar, pensar y comportarse de los personajes, que no cesan de hablar dejando patentes sus motivaciones y la filosof��a de vida que les gu��a. Una forma curiosa de evitar enajenar mucho el producto readapt��ndolo a un g��nero que se aleja mucho del que originalmente concibiera Moore, lleno de grandes conversaciones y viajes internos de los protagonistas.

We're society's only protection
El juego est�� pensado para disfrutarlo tres veces: una como Rorschach, otra como B��ho Nocturno, y una tercera en el modo cooperativo. La diferenciaci��n entre los tres es tal, que, por ejemplo, si nos acabamos el juego con Rorschach, podemos seleccionar cap��tulo, pero al empezar con B��ho debemos volver a empezar de cero, e incluso si jugamos en grupo. Una forma de intentar alargar el juego, ya que de por s��, los seis cap��tulos que nos ofrece esta entrega de Watchmen duran aproximadamente unas cuatro horas de juego. Desde el punto de vista del g��nero, es una duraci��n t��pica de los grandes cl��sicos, pero carece del encanto de aquellas obras de anta?o.

Jugar con uno u otro enmascarado ser�� muy diferente, ya que cada uno cuenta con sus propias habilidades. Los botones b��sicos ser��n los mismos: tenemos un ataque normal, un ataque fuerte, un agarre, un bot��n de esquiva y un gatillo para t��cticas especiales. Al principio del juego, tendremos ataques muy b��sicos, pero a medida que avanzamos y recogemos las fichas de cada uno de los personajes, ir��n ampliando su repertorio. Los combos comenzar��n a ser cada vez m��s elaborados, dando lugar a combinaciones de botones que tendr��n distintos efectos como aturdir a los personajes o contraatacar. Posteriormente, cada uno de los personajes tiene sus propias t��cnicas.

Por ejemplo, Rorschach tiene un ataque de embestida que consume su barra de furia, mientras que B��ho Nocturno lanza una granada s��nica que aturde a los enemigos y consume su barra de carga. Esta barra es la misma, s��lo que se adapta a las caracter��sticas de cada uno de los personajes. Otra diferencia marcada es que Rorschach puede coger objetos y usarlos como arma, y en los contraataques, si el enemigo est�� armado, se la quita a este y le golpea con ella. B��ho Nocturno, por su parte, no utiliza armas, y si contraataca y se la quita al rival, la tira antes de golpear con ella. No obstante, utiliza un zapper para acabar con los enemigos que han ca��do al suelo.

Otras habilidades pueden ser, por ejemplo, dar patadas a los enemigos ca��dos; y los que est��n aturdidos, encima pueden aparecer botones del mando que, si pulsamos cerca de ellos, desencadenar��n ataques finales bastante intensos y espectaculares. El abanico parece bastante variado, ya que hemos visto un buen n��mero de estos ataques para cada uno de los personajes. Otra diferencia es que Rorschach puede subir por canalones y saltar hacia abajo, adem��s de abrir cerraduras con ganz��a (un minijuegos muy divertido y bastante m��s complejo de lo que parece, que recuerda ligeramente al visto en Oblivion), mientras que B��ho usa una pistola gancho para acceder a secciones elevadas, y puede subir verjas con su fuerza para que su compa?ero se cuele por debajo de ellas.

Adem��s, cada personaje da su propia personalidad al interfaz del juego: en las notificaciones, jugando con Roschach veremos los textos como si fuese su propio diario, mientras que con B��ho Nocturno tendr��n el aspecto de planos y dise?os. Sin embargo, la jugabilidad puede llegar a hacerse un poco pesada, principalmente por culpa de los enemigos, que por momentos parecen ser m��s superh��roes que nosotros mismos. Sus ataques son mort��feros, y en algunos casos, con un par de golpes podr��an llegar a acabar con nosotros; si intentamos huir (la barra de vida se recupera sola, as�� que es algo a lo que recurriremos habitualmente), ser��n infinitamente m��s veloces, haciendo f��tiles los intentos de reorganizarnos.

The existence of life is a highly overrated phenomenon
Sin lugar a dudas, teniendo en cuenta que hablamos de un juego para descargar, el nivel t��cnico es muy bueno. Entornos tridimensionales bien representados y s��lidos, con un gran motor de f��sicas que permite que el choque de los personajes con los distintos elementos del escenario (ruedas, conos, botellas?) tenga verdadera repercusi��n ralentiz��ndonos mientras los empujamos. Del mismo modo, el escenario nos ofrece varias oportunidades, como lanzar a los enemigos al mar; no son grandes cosas, pero son peque?os detalles que a?aden variedad y evitan el estancamiento del t��tulo. Las animaciones de personajes est��n bastante elaboradas, con detalles atractivos como que Rorschach meta las manos en los bolsillos al caminar.

Existen algunos peque?os errores, bastante habituales de los juegos tridimensionales, como una c��mara que en alguna ocasi��n se dedica a atravesar el escenario, o situaciones de agarre y t��cnicas especiales en las que los modelos de personajes y enemigos se fusionan brevemente. Nada especialmente grave, no obstante, luciendo un buen aspecto en l��neas generales. Eso s��, la iluminaci��n no es todo lo satisfactoria que cabr��a desear, y la oscuridad predominante en los entornos se convierte m��s en una molestia que en un recurso estil��stico de calidad; se agradecer��a algo m��s de brillo en secciones concretas, aunque es posible jugar sin mayores problemas en este aspecto.

El apartado sonoro es discreto por lo general, destacando especialmente y sobre todo el trabajo de doblaje, tanto por parte de los protagonistas como de los enemigos. La mec��nica es sencilla, avanzar por los escenarios acabando con las oleadas de enemigos (poco variados, s��lo un par de tipos en cada cap��tulo) que nos asaltar��n, abriendo algunas puertas cerradas en momentos concretos. Si bien el avance en solitario se puede hacer algo pesado, ya que la m��quina no nos apoya demasiado al eliminar las mareas de enemigos, jugando con un amigo la experiencia es mucho m��s satisfactoria, aunque sea a pantalla partida. Incomprensiblemente, no hay posibilidad de juego online, que hubiese dado mucha vida al t��tulo.

Pero no se trata de un juego excesivamente largo, con unas pocas horas de juego que, tranquilamente, se pueden hacer muchas menos (con logros asociados a terminarlo en menos de 80 minutos). El precio es un poco elevado, pero los aficionados del g��nero y de los Vigilantes har��n el desembolso de buen gusto para disfrutar de un juego de acci��n como la de anta?o, con ese toque a?ejo que le propicia tanto el g��nero al que pertenece como el propio esp��ritu de la novela gr��fica en la que se basa.

Correcto

No es lo ��ltimo ni lo m��s original, tampoco cuenta con la mejor ejecuci��n, pero puede divertir si te gusta el g��nero. Bien, pero mejorable. C��mpralo si te gusta el g��nero y te gusta tenerlos todos.