Moon, Impresiones
La Luna ha dejado de ser un astro desconocido para convertirse en un punto de referencia para los terr赤colas, una zona donde la humanidad ha depositado las esperanzas de futuro ante el inminente cataclismo del planeta Tierra. El descubrimiento de vida extraterretre es s車lo una peque?a pincelada de la 迆ltima obra de Renegade Kid, Moon, uno de los t赤tulos mejores valorados por los medios especializados en lo que llevamos de 2009.
La Luna ha dejado de ser un astro desconocido para convertirse en un punto de referencia para los terr赤colas, una zona donde la humanidad ha depositado las esperanzas de futuro ante el inminente cataclismo del planeta Tierra. El descubrimiento de vida extraterrestre es s車lo una peque?a pincelada de la 迆ltima obra de Renegade Kid, Moon, uno de los t赤tulos mejores valorados por los medios especializados en lo que llevamos de 2009.
Hay desarrolladoras que se han especializado en llevar la capacidad de Nintendo DS m芍s all芍 de sus l赤mites, en demostrar que la peque?a port芍til de Nintendo es capaz de representar motores gr芍ficos de asombro en contra de lo que demuestran algunos cartuchos de p谷sima calidad que distan mucho de las posibilidades reales de la consola. Renegade Kid es un estudio relativamente nuevo, fundado en 2007 con Dementium: The Ward como principal y 迆nico abanderado de la compa?赤a hasta la fecha. No obstante, se trata de un t赤tulo particularmente notable en el que se empleaba un s車lido sistema visual en primera persona que a d赤a de hoy comparte la hegemon赤a del g谷nero con Metroid Prime: Hunters.
Dementium es uno de los ejemplos m芍s tristes de c車mo la ausencia de hype y de una campa?a publicitaria de peso contribuyen a que las editoras se planteen dos veces el exportan un t赤tulo de estas caracter赤sticas, sea cual sea el feedback obtenido por la prensa a nivel estatal, que en el caso de Estados Unidos se sald車 con cr赤ticas descaradamente positivas. Renegade Kid se destapaba como una compa?赤a pionera en NDS con un futuro prometedor, principalmente debido al buen sabor de boca resultante tras disfrutar su opera prima. Lo realmente sorprendente de Dementium no era tanto su aspecto t谷cnico como la suavidad y fluidez con la que se realizaban las acciones b芍sicas de un FPS, que con la ayuda de la pantalla t芍ctil y el stylus parec赤a haber encontrado la f車rmula id車nea para triunfar en un g谷nero que rara vez ha sido explotado en las port芍tiles de Nintendo.
Evoluci車n natural?
El siguiente paso de la compa?赤a fue embarcarse en un proyecto m芍s ambicioso para el que comenz車 a desarrollar una versi車n mejorada del motor gr芍fico de Dementium, que ser赤a bautizado con el nombre de Renegade Engine 2.0. La evoluci車n natural de cualquier FPS pasa por un sistema de juego que involucre al jugador en la partida, un hecho que hemos podido comprobar a lo largo y ancho de estos primeros a?os a los mandos de la next-gen, con t赤tulos como Bioshock a la vanguardia de lo que se espera ser芍n los videojuegos dentro de algunos a?os. La propuesta de Renegade deb赤a cumplir dos requisitos primordiales: por un lado mejorar el entorno gr芍fico -algo que parec赤a se iba a lograr gracias al nuevo engine-; por el otro elaborar un argumento con m芍s profundidad, en la l赤nea de los pesos pesados del g谷nero.
De este modo, Moon comenz車 a tomar forma paulatinamente. El pasado mes de diciembre ve赤a la luz en el mercado estadounidense para destaparse como uno de los t赤tulos revelaciones de la temporada, uno de los tapados a los que la poca popularidad de Renegade le hab赤a vuelto a relegar, de un modo u otro, al ostracismo. Por suerte la prensa especializada ha sabido valorar adecuadamente un cartucho que explota perfectamente sus virtudes -ambientaci車n, control, texturas de alta definici車n- y conoce sus defectos -escenarios repetitivos, mec芍nica mon車tona-, con una nota media que ronda el notable, aunque obviamente todo depende del medio y de las preferencias de cada analista.
El caso es que Moon se perfilaba como una de las propuestas m芍s interesantes de cara a 2009, incluso pese a las pocas posibilidades que existen de que alg迆n d赤a logre pisar suelo europeo, exactamente igual que sucedi車 en el caso de Dementium. La propuesta del cartucho, tal y como el t赤tulo del cartucho da a entender, tiene mucho que ver con la Luna y un posible futuro no muy lejano que nos traslada hasta el a?o 2058, cuando el gobierno de Estados Unidos ha logrado instalarse en la Luna con la posterior apertura de centros de investigaci車n, gracias a los cuales se descubre la presencia de varias instalaciones no identificadas en las que un equipo especializado ha de irrumpir con el fin de obtener toda la informaci車n posible. Como podr谷is imaginar, esta aventura esconde un secreto que cambiar芍 el futuro de la humanidad dr芍sticamente, aunque para descubrirlo no queda m芍s remedio que llegar hasta el final.
El comandante Kane mira a su alrededor para descubrir que se encuentra completamente solo, perdido en la inmensidad del recinto en el que se encuentra. El equipo encargado de la investigaci車n de los recintos extraterrestres ha sufrido numerosas bajas tras la desaparici車n de parte del escuadr車n Alpha-1, que a las 車rdenes del general Lambert se ven sorprendidos en una emboscada en la que casualmente Kane no se encuentra presente. Por suerte o por desgracia para nuestro comandante, la misi車n ha pasado a depender de 谷l por motivos ajenos a su voluntad. Ahora cuenta con dos objetivos que prima sobre cualquier otro: investigar las instalaciones y descubrir a los compa?eros de equipo que han desaparecido sin dejar rastro.
Poco tardamos en tomar contacto con la interfaz de juego. Antes tenemos oportunidad de apreciar diversas escenas cinem芍ticas, perfectamente recreadas, donde los personajes debaten los principales aspectos sobre la misi車n, antes de que comience la cat芍strofe que est芍 a punto de suceder pr芍cticamente a todo el grueso del equipo. A partir de este momento contemplamos el motor gr芍fico aut谷ntico del juego, que por su tem芍tica recurre a la ciencia ficci車n y los cl芍sicos interiores neo-futuristas con m迆ltiples paneles, cableados y espacios laber赤nticos, no en vano estamos recorriendo una especie de ruina aborigen que al parecer goza de un violento instinto de supervivencia.
El comandante Kain se ve forzado a emplear los objetos que descubre a medida que se adentra en las instalaciones, con un punto de partida totalmente devastado por los combates iniciales. Cada episodio se centra en un nivel, al que a su vez accedemos de forma interactiva, recorriendo los mismos escenarios de un lado a otro hasta encontrar el punto exacto que estamos tratando de localizar. El primero de ellos nos traslada hasta un recinto amplio, en el que previamente obtenemos un mapa que servir芍 de gu赤a imprescindible de aqu赤 en adelante. Aqu赤 descubrimos los conceptos b芍sicos del sistema de control, enteramente centrado en la pantalla t芍ctil, con la superior mostrando la acci車n.
Movi谷ndote con stylus
El sistema de control apenas ha variado respecto al de Dementium. La cruceta digital desplaza al personaje, mientras que con el stylus fijamos el punto de mira y el lugar hacia donde se dirige la visi車n del protagonista. El bot車n L hace las veces de gatillo; los botones y el resto de posibilidades permanecen desactivas, sin la posibilidad de variar este sistema de control (salvo en el caso de que seamos zurdos). No existe posibilidad para saltar ni para realizar cualquier otro tipo de movimiento ajena a correr y a disparar, entre otras cosas debido a que el objetivo de Renegade Kid, seg迆n declaraciones de la compa?赤a, era el de ofrecer al jugador una experiencia completamente centrada en un ?shooter', como tambi谷n en el modo individual, lo que explica la ausencia de un modo multijugador.
Sin embargo, la mec芍nica s赤 que ha experimentado un cambio dr芍stico en comparaci車n a lo que ofrec赤a Dementium. Quiz芍s a ra赤z de esa fijaci車n por hacer de este cartucho una experiencia centrada en los disparos, aqu赤 la exploraci車n pasa a un segundo plano a medida que avanzamos (pese a que el tama?o de los mapeados es cada vez mayor), para asistir a una sucesi車n de enfrentamiento con monstruos de diferentes tama?os que nos atacan de forma inteligente, desplaz芍ndose 芍gilmente por los escenarios, y en resumidas cuentas retando al jugador a esforzarse para dar caza a los enemigos que salen a nuestro paso. Para ello contamos con un arsenal relativamente amplio, con un total de siete armas, de las cuales al menos cinco se basan en la tecnolog赤a descubierta dentro de las instalaciones.
Es inevitable percibir cierto aire de Metroid en el desarrollo de Moon. De hecho, podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que la mec芍nica es un calco a la de las aventuras de Samus, con la necesidad de hallar nuevas armas y objetos que permiten ampliar la vitalidad o la capacidad de los cargadores de las propias armas. Incluso la m迆sica, uno de los apartados que m芍s contribuyen a mejorar la ambientaci車n, tiene un aire contrastado que en el mejor de los casos logra que nos sintamos inmersos en una dif赤cil peripecia espacial. Exactamente igual que en Metroid, aqu赤 el factor es secundario y dependiente a la interpretaci車n de cada jugador, no un factor esencial con el que se pretenda sorprender.
Hay que ser conscientes de lo complejo que resulta transmitir miedo o terror a trav谷s de una consola port芍til y de la buena sensaci車n que Moon logra transmitir en este aspecto, principalmente debido a una ambientaci車n que se ampara en la soledad y en alg迆n que otro susto producido por los espor芍dicos enemigos que pululan por los escenarios. Enemigos rob車ticos cuya procedencia desconocemos pero que nos complican la vida bastante m芍s de lo que puede aparentar a primera vista. Ellos son el 迆nico impedimento por el que tendremos que sudar para avanzar por el argumento, con la aparici車n estelar de un enemigo de peso al alcanzar el final de los cap赤tulos centrales.
Solos en la oscuridad
Moon es un t赤tulo que plantea diversi車n pura y dura desde el primer instante, sin perder mucho el tiempo con el argumento, que avanza de sencillos mandatos de nuestro jefe, sea cual sea, que nos obliga a ir de punto Y a X pasando por Z, para regresar al punto de partida, recobrar energ赤as y volver a retomar el camino al d赤a siguiente. Si hay una puerta que luce un color especial, esa es la que tendremos que atravesar minutos m芍s tarde cuando hayamos obtenido la llave espec赤fica que abre el camino. El mecanismo no carece de sentido: el comandante Kane est芍 pr芍cticamente solo en una estaci車n alien赤gena en la que descubre diversos artefactos que le trasladan hacia nuevos parajes, en los que obtenemos m芍s informaci車n y mapeados con los que seguir avanzando.
La acci車n es el plato fuerte, de eso no cabe la menor duda. A poco de comenzar la aventura descubrimos un peque?o ciborg con el que sortear recovecos y activar interruptores de paneles de energ赤a o cualquier otro obst芍culo por el estilo, con la potestad de emplear armas para inutilizar a los enemigos por un breve periodo de tiempo. Cuando manejamos al peque?o robot presenciamos un cambio de perspectiva con la que nos deslizamos por huecos imposibles, aunque a la hora de la verdad lo m芍s aconsejable es avanzar lo m芍s r芍pido que sea posible para evitar perder energ赤a. No debemos preocuparnos por el tiempo ni por otros factores externos a la exploraci車n pura y dura. Sin duda, Renegade Kid ha hecho un buen trabajo de cara a optimizar los controles de la consola y a exprimir todo el jugo de la consola en este campo.
Pero no deja de transmitir la sensaci車n de que todav赤a queda un plus de esfuerzo que realizar para que todo cobre sentido, para evitar la sensaci車n de realizar 車rdenes sin una raz車n verdadera. El argumento es un clich谷 en s赤 mismo al que le cuesta un horror avanzar, y que va de m芍s a menos a medida que transcurren los cap赤tulos. No es un juego que podamos considerar especialmente longevo, aunque no deja de ser evidente que ofrece unos atributos muy caracter赤sticos y que dif赤cilmente encontraremos en un juego de este estilo, a falta de que la propia Renegade Kid demuestre si realmente es capaz de mejorar lo visto en este Moon, un cartucho que nos ha gustado y llamado la atenci車n que cuenta con pocas posibilidades de ver la luz en Europa.
- Acci車n
Los creadores de Dementium: The Ward vuelve a la carga en Nintendo DS con otro juego que exprime el apartado t谷cnico de esta plataforma. Nos encontramos en una estaci車n espacial en la Luna y hemos de afrontar diversas misiones en un cl芍sico FPS con ciertos toques originales.
