Tales of Symphonia: Dawn of the New World, Impresiones

La esperada continuaci¨®n de Tales of Syphonia llegaba al mercado de Norteam¨¦rica el pasado mes de noviembre precedida por una gran expectaci¨®n. Retomamos los sucesos vividos en la aventura de Loyd y Colette  para comprobar cu¨¢l es el devenir del mundo despu¨¦s de la heroica epopeya vivida en GameCube. Un RPG s¨®lido y consistente que sin muchas pretensiones sumerge al jugador en una carism¨¢tica historia de amor entre dos personajes que luchan por su propio destino.

Han pasado cinco a?os desde que Tales of Symphonia apareciese en el mercado, exclusivamente para Game Cube. Por primera vez los europeos tuvimos el placer de poder disfrutar de la saga de Namco sin recurrir a la importaci¨®n o a la emulaci¨®n, de sumergirnos bajo una forma distinta de entender el g¨¦nero. Llegaba en un momento crucial para la consola de Nintendo, en una ¨¦poca en la que se vislumbraban grandes lanzamientos, l¨¦ase el caso de Baten Kaitos, con los que la gran N confiaba devolver parte de la popularidad perdida hasta ese momento. Tales of Symphonia logro abrirse un hueco entre el p¨²blico de la consola para pasar a la historia como uno de los mejores RPGs del sistema, adem¨¢s de ser considerado una de las ediciones m¨¢s completas basadas en un ?Tales of'.

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El devenir de la franquicia ha pasado principalmente por las port¨¢tiles, con sendos remakes de Tales of Eternia y Tales of Phantasia para PSP y GBA respectivamente, mientras que las ediciones que han aparecido para la sobremesa no han pasado en la mayor parte de los casos de tierras norteamericanas. Por el camino que han quedado piezas del valor de Tales of the Abyss o Tales of Tempest -este ¨²ltimo para NDS-, que pese a contar con unos valores de producci¨®n muy por encima de la media no han entrado en los planes europeos de Namco Bandai, por motivos supuestamente comerciales.

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La popularidad de la saga ha ido en aumento en los ¨²ltimos tiempos; hoy d¨ªa sorprenden comentarios tan tajantes como los de un directivo de la compa?¨ªa que afirmaba rotundamente que los ?Tales of' de Nintendo DS -cartuchos que atesoran una gran calidad y que merecen sobradamente abrirse al mercado occidental- nunca ver¨¢n la luz fuera de Jap¨®n, una suerte que esperamos no corren los dos juegos basados en el saga que han aparecido para la nueva generaci¨®n; Tales of Vesperia y este Dawn of the New World que hoy nos ocupa. Dice el dicho que la esperanza es lo ¨²ltimo que se pierde y a ¨¦l nos aferramos con fuerza, ya que ambas ediciones han aparecido en Estados Unidos obteniendo resultados que a buen seguro no pasar¨¢n desapercibidos para los mismos directivos que han decidido privarnos de Tales of Hearts, del que os ofreceremos un primer contacto en cuesti¨®n de d¨ªas.

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Sea como fuere no hemos podido resistir la tentaci¨®n de hacernos con una copia de este Knights of Ratatosk (tal y como se le conoce en la versi¨®n japonesa) y comprobar qu¨¦ trabajo ha realizado el equipo de Daigo Okumura con una continuaci¨®n que nos sit¨²a dos a?os despu¨¦s de los acontecimientos vividos en el primer Symphonia, introduciendo un nuevo plantel de protagonistas entre los que hay que destacar a dos de ellos, Emil y Marta, que desde el comienzo de la aventura dejan bien patente que todo el peso del argumento recae sobre sus hombros, del mismo modo que en el anterior lo hac¨ªa sobre los ya mentados Lloyd y Colette, sin olvidar al resto de personajes secundarios que complementan el producto.

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Es imposible describir este t¨ªtulo sin recurrir a la historia. El hecho de estar hablando de una continuaci¨®n hace que inevitablemente tengamos que referirnos a algunos detalles que en ning¨²n caso estropean la experiencia de disfrutar del Tales of Symphonia original, pero en los que evidentemente se da por sentado el triunfo de los elegidos para restablecer la paz en el mundo y alejar el mal. Precisamente este es el punto de partida de Dawn of the New World, el amanecer de un nuevo mundo en el que un introvertido protagonista descubre ser una pieza fundamental en el futuro que aguarda al planeta. Curiosamente su peor enemigo, su n¨¦mesis personal no es otro que el propio Lloyd, un personaje irreconocible que a modo de enga?o se presenta como un ser desp¨®tico e insensible incapaz de comprender las emociones humanas m¨¢s b¨¢sicas.

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La pesadilla en cuesti¨®n nos sirve de introducci¨®n r¨¢pida para tener una ligera idea de los acontecimientos. Tras la epopeya de los elegidos, las dos partes en las que se divid¨ªa el mundo -Sylvarant y Tethe'alla-  se unen, con los consiguientes conflictos entre ambas civilizaciones. La supuesta paz que reinar¨ªa en el mundo se agota a los pocos meses de ser reinstaurada, y poco a poco los ciudadanos de Sylvarant comienzan a sentirse atacados y humillados por los de Tethe'alla, quienes se consideran en una posici¨®n privilegiada gracias a los avances tecnol¨®gicos, algo que autom¨¢ticamente convierte a los miembros de Sylvarant en brutos incultos incapaces de adaptarse a los tiempos que corren.

Los acontecimientos se precipitan y los habitantes de Sylvarant deciden crear una alianza denominada ?The Vanguard' con la que plantar cara a la Iglesia de Martel -otra instituci¨®n que vela por los intereses de Tethe'alla- , y por consiguiente a todo aquel que atente contra la libertad de los nacidos en este continente. Debido a esta situaci¨®n, el planeta comienza a sufrir y con ¨¦l desaparecen los recursos naturales m¨¢s importantes de los que dispone el ser humano, con sequ¨ªas, tragedias y otras desgracias que oscurecen el destino de una humanidad que parece abocada al fracaso. Con todo lo expuesto cuesta creer que Lloyd y el grupo de los Elegidos sean los supuestos causantes de una situaci¨®n irreversible, en la que la Iglesia de Martel controla a los ciudadanos a base de infligir temor y miedo all¨¢ por donde pasan sus tent¨¢culos.

Emil soporta las ri?as de su t¨ªa sin quejarse, excus¨¢ndose una vez tras otra hasta que finalmente abandona su casa siguiendo el aullido de un extra?o animal. La vida del muchacho no es sencilla, ha de enfrentarse a diario a las burlas de sus compa?eros y de los ciudadanos, que le repelen por negarse a contribuir en la causa de Lloyd y compa?¨ªa. Emil tiene claro que nunca apoyar¨¢ al asesino de sus padres, pero no cuenta con el valor suficiente para defenderse por s¨ª solo hasta que aparece una figura pelirroja, de gran inteligencia, que responde al nombre de Richter. Es ¨¦l el primero en preguntar acerca del paradero de una muchacha con una joya roja en la frente, que en ese justo instante no es m¨¢s que una desconocida a nuestros ojos. Se trata de Marta, quien nos salva la vida pocos minutos m¨¢s tarde y a la que por supuesto tendremos que devolverle el favor.

Richter nos inicia en el fundamento de los combates, haciendo acopio siempre de un protuberante mal humor y sordidez que no obstante ayudan enormemente a cultivar la personalidad de Emil. Buscamos a la chica pero no sabemos los motivos hasta que finalmente encontramos a Richter apuntando una espada directamente hacia su sien, acus¨¢ndola de tratar de despertar al Se?or de los Demonios, el tambi¨¦n mencionado anteriormente rey Ratatosk. Precisamente a ¨¦l le debemos la transformaci¨®n de Emil en un Caballero de Ratatosk, tras descubrir a Tenebrae, un Centurio que a partir de este momento se convierte en nuestro inseparable compa?ero de aventuras y que paulatinamente nos ofrece ¨²tiles consejos para comprender no s¨®lo el complejo argumento, sino tambi¨¦n los fundamentos del sistema de combate.

Emil vaga por el pueblo a sus anchas hasta que lo abandona y se traslada a la primera mazmorra, en la que Richter nos comenta grosso modo c¨®mo realizar un ataque y defendernos, adem¨¢s de resumir muy brevemente el concepto en el que se basa la susodicha mec¨¢nica. Los combates emplean lo que Namco Bandai ha querido denominar 'Flex Range Element Enhanced Linear Motion Battle System', o lo que viene a ser lo mismo, una mezcla heterog¨¦nea  entre el sistema de Tales of the Abyss y Tales of Destiny. Los enemigos pululan tranquilamente por el escenario, siguiendo siempre la misma ruta, hasta que chocamos con ellos para entrar directamente en combate.

La imagen se rompe y pasamos a un entorno tridimensional al estilo t¨ªpico de la franquicia. Podemos avanzar sin dilaci¨®n hacia el enemigo en l¨ªnea recta o correr hacia cualquier direcci¨®n manteniendo el bot¨®n Z pulsado. No tenemos control sobre los compa?eros de batalla m¨¢s all¨¢ de la colecci¨®n en el campo y algunos imperativos muy sencillos en la l¨ªnea de limitarnos a lanzar hechizos curativos, es decir, emplearlos como soporte para evitar riesgos innecesarios frente a los enemigos, o simplemente para preservar puntos m¨¢gicos (aqu¨ª conocidos como TP) para los combates m¨¢s importantes. El grueso de los ataques se realiza con la A, mientras que las habilidades especiales requieren pulsar la B y el stick del nunchuk hacia una direcci¨®n en concreto.

Manejamos equipamiento, las ya mencionadas Artes y otras habilidades de apoyo durante el combate, adem¨¢s de los habituales ¨ªtems. La novedad m¨¢s interesante a tener en cuenta es la importancia del elemento caracter¨ªstico de cada personaje (oscuridad, luz, etc¨¦tera), que rige en gran medida la posibilidad de hacer pactos con determinados monstruos, o dicho en otras palabras, de convencerlos para que se unan a nuestro grupo. Es una faceta que nos permite manejar a los enemigos como aliados en el combate, con la posibilidad de hacerles subir de nivel e incluso aprender nuevas habilidades. Alrededor de 200 criaturas cada una con sus correspondientes virtudes y defectos que juegan un papel fundamental en el desarrollo de la aventura. Honra decir que los enfrentamientos son din¨¢micos y transcurren a una velocidad considerable, a los que s¨®lo afecta la dr¨¢stica variaci¨®n de la dificultad en momentos puntuales.

Este aspecto resulta tan importante como el uso del humor para explicar m¨²ltiples parajes de la trama, entre los que destacan las recurrentes conversaciones espor¨¢dicas entre personajes, en las que discuten acerca de cualquier suceso reciente que haya tenido lugar en nuestro recorrido. Algunos son realmente c¨®micos y otros no pasan del absurdo, pero no cabe duda de que es un recurso ¨²til que ameniza el transcurso de la exploraci¨®n en las mazmorras. El dise?o de las mismas es tan sencillo como funcional, a veces mon¨®tono, lo que inevitablemente nos lleva a analizar las primeras sensaciones con el apartado gr¨¢fico, que podr¨ªamos considerar una evoluci¨®n del de Tales of the Abyss.

La banda sonora tambi¨¦n colabora a mejorar la ambientaci¨®n de un t¨ªtulo que centra su atenci¨®n principalmente en zonas rulares, y en el que desaparece el mapamundi y cualquier otra posibilidad de exploraci¨®n para desplazarnos a una pantalla en la que ¨²nicamente podemos seleccionar el destinado deseado para viajar hacia ¨¦l sin m¨¢s dilaci¨®n. La mayor¨ªa de las composiciones han sido extra¨ªdas del primer Tales of Symphonia, por lo que no nos ser¨¢ dif¨ªcil reconocer la mayor¨ªa a poco de comenzar a escucharlas.

Es pronto para sacar conclusiones, aunque de hacerlo es m¨¢s que evidente, y a juzgar por la l¨ªnea de este texto, que el resultado final es, como m¨ªnimo, satisfactorio. Namco Bandai ha realizado un buen trabajo con esta continuaci¨®n, que la prensa especializada norteamericana ha valorado de forma dispar, resaltando en cualquier caso el buen hacer de la compa?¨ªa en cuanto al resultado final del DVD. Tales of Symphonia: Dawn of the New World es uno de esos RPGs que enganchan de principio a fin, y lo logra gracias a sus personajes y un apartado t¨¦cnico en el que se respeta tanto el aspecto gr¨¢fico como el sonoro -pr¨¢cticamente todos los di¨¢logos del t¨ªtulo est¨¢n doblados-, ambos rayando un nivel notable. Ser¨ªa una l¨¢stima que no diese el salto hacia el viejo continente, que seg¨²n los rumores se producir¨ªa en el primer cuarto del pr¨®ximo a?o. Esperamos que as¨ª sea.