El Se?or de los Anillos: La Conquista, Impresiones
Los creadores de Star Wars: Battlefront, Pandemic, ahora bajo las directrices de su nueva matriz, Electronic Arts, han adaptado esta mec¨¢nica a la trilog¨ªa de El Se?or de los Anillos. Su mayor atractivo: poder formar parte de ambos bandos.
Los creadores de Star Wars: Battlefront, Pandemic, ahora bajo las directrices de su nueva matriz, Electronic Arts, han adaptado esta mec¨¢nica a la trilog¨ªa de El Se?or de los Anillos. Su mayor atractivo: poder formar parte de ambos bandos.
En la compra de Bioware por parte de Electronic Arts ven¨ªa algo m¨¢s en el paquete llamado Pandemic, sin querer que suene de un modo despectivo. Ambos estudios estaban encuadrados bajo el mismo consorcio y EA se hizo con ambas en la misma operaci¨®n. Mientras que Bioware parece que trabaja m¨¢s por libre, con sus propias licencias de momento, Pandemic ya ha recibido el primer encargo desde arriba tras el lanzamiento de Mercenaries 2, El Se?or de los Anillos: La Conquista, como as¨ª se llamar¨¢ en el mercado espa?ol.
Hay al menos un par de similitudes importantes con una saga anterior suya, Star Wars: Battlefront. Ambos est¨¢n ambientados en dos universos pr¨¢cticamente amados por millones de aficionados en todo el mundo, uno nacido en la gran pantalla y otro en los libros, aunque hace no mucho lleg¨® por fin al cine. El segundo parecido, bastante m¨¢s relevante en lo que nos ocupa en este texto, es el sistema de juego, pues ESDLA es una herencia directa de los dos t¨ªtulos basados en los largometrajes de George Lucas.
Adaptar la mec¨¢nica de los Battlefront a la Tierra Mieda, desde luego, es una magn¨ªfica idea, sobre todo para los seguidores de la obra de Tolkien, aunque nuestras primeras horas con ¨¦l no nos hayan dado demasiadas sorpresas. El esquema inicial es muy similar al de sus virtuales predecesores y eso tiene un lado bueno y otro malo. Lo positivo es que se trata de un sistema de juego s¨®lido, que se sabe divertido desde la pasada generaci¨®n. El punto negativo es tan obvio como el otro, no hay mucho lugar para la innovaci¨®n, que nadie espere ning¨²n tipo de revoluci¨®n porque no la encontrar¨¢.
El modo principal consiste en dos campa?as. En una llevamos a los buenos, capitaneados por Aragorn y compa?¨ªa, y en otra a los malos, dirigidos por el innombrable se?or de Mordor. Vamos tomando parte en varias de las batallas m¨¢s significativas de la historia, como en el Abismo de Helm o en Minas Tirith. Aunque si optamos por ser los malos tambi¨¦n tendr¨¢n lugar situaciones no reflejadas en los libros puesto que en ellos ¨¦stos no ganaban y en nuestro caso s¨ª que lo conseguiremos, as¨ª que visitaremos sitios como la Comarca, en los que no hubo realmente ning¨²n enfrentamiento a gran escala.
Cada una de estas fases viene introducida por un fragmento de la pel¨ªcula y la voz de un narrador, en perfecto espa?ol, que nos va metiendo en lo que nos vamos a encontrar a continuaci¨®n. El juego, por tanto, est¨¢ enteramente localizado a nuestro idioma. Otro punto destacable respecto al sonido, claramente, es la banda sonora. En ESDLA: La Conquista se ha hecho uso de las maravillosas melod¨ªas de la pel¨ªcula, que vuelven ¨¦pico cualquier momento en el que las estemos escuchando. Pelear as¨ª te sube la adrenalina por s¨ª sola.
Respecto a los gr¨¢ficos, aunque no conviene hablar antes de tiempo, lo cierto es que no terminan de gustarnos. Hay elementos que s¨ª son propios de la nueva generaci¨®n, como la iluminaci¨®n. En cambio, las texturas no est¨¢n correctamente definidas, los modelados no son nada del otro punto, los efectos de fuego parecen de hace algunos a?os... es decir, no se ha integrado plenamente en lo que pueden dar de s¨ª las consolas actuales. De todos modos, el apartado visual al menos es s¨®lido y se mueve con fluidez, lo que s¨ª es m¨¢s importante.
Tomamos el papel de un guerrero gen¨¦rico entre cuatro posibles: soldado, arquero, mago y escout. Sus habilidades se pueden intuir f¨¢cilmente por el nombre, excepto del ¨²ltimo, que es un caso especial. Tiene la posibilidad de volverse invisible, como si estuviera camuflado, siempre y cuando no ataque, y es capaz de asesinar por la espalda con gran sigilo y de forma que el agredido no tiene tiempo de ver qui¨¦n le ha cogido. El resto, pues es obvio, uno es ducho con la espada, otro lanza flechas con gran precisi¨®n y el tercero es el ¨²nico que puede lanzar hechizos.
Los cuatro son similares en cuanto al control. Tienen un ataque d¨¦bil, otro medio y un ¨²ltimo fuerte, asociados cada uno a un bot¨®n frontal de la consola, variando l¨®gicamente en PC seg¨²n c¨®mo lo juguemos (aunque recomendamos un PAD). Tras haber liquidado a varios enemigos, vamos acumulando energ¨ªa que nos permite activar los ataques especiales, que son igualmente de los tres mismos tipos. Sin ellos resulta imposible acabar con un n¨²mero de enemigos significativo en poco tiempo, que es del que muchas veces dispondremos.
El bot¨®n principal que nos falta es el del salto, ya que aunque no se acerca lo m¨¢s m¨ªnimo a un plataformas, ESDLA nos ofrecer¨¢ algunas ocasiones en las que brincar. El resto de controles son menos relevantes, ya que nos permiten, por ejemplo, lanzar un hacha en el caso de que seamos un guerrero lo cual es relativamente poco ¨²til, o cubrirnos levemente. Al final se trata de aporrear botones con un cierto orden y concierto, no de cualquier forma puesto que de ese modo seguramente no llegaremos muy lejos.
En las diferentes fases se nos van asignando misiones que, en ocasiones, tienen un l¨ªmite de tiempo asociado. Normalmente no vamos solos, aunque nuestros acompa?antes no nos resuelven la papeleta, ¨²nicamente ayudan un poco. El apellido de "La Conquista" no es casual, ya que lo que tenemos que ir haciendo es ganar terreno al enemigo, ocupar zonas, a veces simbolizadas mediante una bandera, debiendo ser m¨¢s que el enemigo en estas zonas de influencia durante un tiempo determinado para hacernos con su control. El tutorial muestra perfectamente c¨®mo funciona este sistema.
Sin embargo, no ser¨¢ el ¨²nico desaf¨ªo que se nos presente. Algunos retos ir¨¢n desde matar a un n¨²mero determinado de enemigos, o incluso uno en concreto, hasta objetivos mucho m¨¢s concretos como tirar abajo los elefantes en los campos de Pelennor antes de que se acerquen demasiado. Seg¨²n los vamos concluyendo satisfactoriamente, van apareciendo otros nuevos, con una variedad y es que se nos suele ofrecer tomar el papel de un personaje importante del libro, el cual, por supuesto, es m¨¢s poderoso de por s¨ª, lo que no quita que pueda perecer igualmente y, en ese caso, nos vuelvan a mostrar los guerreros comunes para elegir otro de ellos.
No sabemos si es el juego so?ado por muchos, no obstante, a los que les gustasen tanto los Battlefront como una de las trilog¨ªas m¨¢s famosas de la literatura, seguramente ver¨¢n en este t¨ªtulo una uni¨®n perfecta. El Se?or de los Anillos: La Conquista llega sin muchas pretensiones, no aporta caracter¨ªsticas significativamente nuevas, pero a cambio ofrece entretenimiento asegurado con un a?adido especial: el poder sentirse como un malo y destruir la Tierra Media. La fecha de salida, tras ciertos retrasos, el mes que viene si nada nuevo lo impide.
El Se?or de los Anillos: La Conquista
- Acci¨®n