El Padrino 2
Ser un pe車n de la mafia 赤talo-americana en los a?os 60 nunca ha sido f芍cil: necesitas escalar en la jerarqu赤a familiar, hacer el trabajo sucio, demostrar continua lealtad y cumplir las 車rdenes del Don a rajatabla. Por eso EA nos propone en esta ocasi車n asumir el papel del Don desde el principio, cargando sobre los hombros la ardua tarea de hacer valer el nombre de la familia Corleone desde la emergente Nueva York, hasta la revolucionaria Cuba.
Ser un pe車n de la mafia 赤talo-americana en los a?os 60 nunca ha sido f芍cil: necesitas escalar en la jerarqu赤a familiar, hacer el trabajo sucio, demostrar continua lealtad y cumplir las 車rdenes del Don a rajatabla. Por eso EA nos propone en esta ocasi車n asumir el papel del Don desde el principio, cargando sobre los hombros la ardua tarea de hacer valer el nombre de la familia Corleone desde la emergente Nueva York, hasta la revolucionaria Cuba.
Tras una primera parte un tanto agridulce, que provoc車 amores y odios por igual entre seguidores de la novela de Mario Puzo, la pel赤cula de Francis Ford Coppola y los videojuegos en general, am谷n de serios quebraderos de cabeza a Electronics Arts por los retrasos sufridos, el juego se convirti車 en un 谷xito de ventas, motivo m芍s que suficiente para realizar esta secuela que, lejos de convertirse en un nuevo sandbox (siguiendo la estela de obras tan relevantes como Grand Theft Auto o Mafia), pretende desmarcarse tocando diferentes g谷neros y combin芍ndolos entre si.
Es probable que, si os pregunt芍ramos qu谷 g谷nero elegir赤ais para crear un juego que concentrase la esencia de la mafia, nos responder赤ais con propuestas tales como el tan manido sandbox para recorrer la ciudad a tu aire, la acci車n pura y dura contra las familias rivales de la cosa nostra, la estrategia con el fin de controlar las bandas que rigen el crimen organizado, un manager que permitiera gestionar los turbios negocios y el dinero negro, o incluso el rol que desarrollara a los personajes a lo largo de la trama. Pues eso mismo debi車 pensar la gente de EA cuando se pusieron manos a la obra para realizar El Padrino II, pero fusionando g谷neros tan dispares como los comentados. Hemos tenido la oportunidad de probar esta interesante mezcla a menos de dos meses del lanzamiento, y ahora os lo contamos con todo lujo de detalles.
Nuestra historia toma lugar en La Habana a finales de la d谷cada de los 50, la noche anterior a la Revoluci車n Cubana. La Familia se ha reunido con otros capos de la mafia y peces gordos del gobierno para hacer negocios, y nuestro papel pasa por acompa?ar a Aldo Trapani (protagonista de la primera parte, ya convertido en Don) en calidad de confidente y guardaespaldas, pero la revoluci車n estalla y el ej谷rcito rebelde toma la ciudad, oblig芍ndonos a huir desesperadamente hasta un aer車dromo cercano, el objetivo es tomar un avi車n que pondr芍 nuestro mafioso trasero a salvo. Esta hu赤da sirve a la vez de tutorial, inici芍ndonos en el arte de disparar y el combate cuerpo a cuerpo. A diferencia de la anterior entrega, ahora podremos apuntar libremente, as赤 si queremos abatir al enemigo sin matarlo, un certero tiro a su rodilla ser芍 la mejor elecci車n (para luego ejecutarlo a sangre fr赤a), si no, podemos acabar con 谷l de un certero disparo a la cabeza, o tambi谷n disponemos de opciones tan interesantes como tirar a su mano para que deje caer el arma.
Centr芍ndonos en el combate a corta distancia, la capacidad de machacar a un oponente a base de pu?etazos se queda corta si la comparamos con las posibilidades que ofrece desarmarlo y reducirlo (tan sencillo como apretar los gatillos del pad simult芍neamente cuando te acerques a 谷l), y una vez sujeto poder usarlo a modo de escudo humano, romper su cuello, estamparle contra el mobiliario urbano, e incluso luxar o partirle alguna extremidad, un recurso muy a tener en cuenta si queremos sonsacar informaci車n o hacer cambiar de parecer a quien quiera que se interponga en nuestro camino, ya sean simples matones de una familia rival, o un tendero que se resiste a aceptar lo bien protegido que estar赤a de encontrarse bajo el amparo de los Corleone, para este tipo de situaciones, la senda del dolor es la mejor opci車n.
Ya a salvo en el charter y camino de Nueva York, descubrimos que Trapani ha sido gravemente herido y no sobrevivir芍 al viaje, siendo sus 迆ltimas palabras para nosotros, otorgando al jugador todos los poderes de la mafia para que dirija los negocios de La Familia con el mejor de nuestro criterio. Y es a partir de este punto donde comienza la verdadera salsa del t赤tulo que tenemos entre manos. A partir de ahora debemos poner en orden a la organizaci車n, ya que algunos integrantes no ver芍n con buenos ojos que ahora seamos el Don, y a su vez realizar los trabajos propios de nuestro cargo para prosperar a base de mantener el control en las diferentes zonas de la ciudad. Una vez llegados a este punto, tenemos claro que la similitud entre el juego y la pel赤cula hom車nima apenas tienen relaci車n, aunque las historias se cruzaran en determinados momentos durante el desarrollo de los acontecimientos de esta historia paralela.
Antes de entrar en faena, y echando un r芍pido vistazo a las armas recogidas mediante un men迆 desplegable, comprobamos que cada arma tiene sus propias estad赤sticas y niveles, de esta forma, un revolver de nivel 2 ocasionar芍 mucho m芍s da?o que otro de nivel 1 por poner un ejemplo. Tambi谷n evolucionar芍n los secuaces a nuestro cargo (siempre que los mantengamos vivos, claro), desarrollando sus capacidades y personalidad, hasta el punto de poder enviarlos solos a otra ciudad para que cumplan nuestra voluntad. As赤 pues, decidimos escoger a un par de rufianes para que nos acompa?aran en la primera excursi車n que realizamos por las calles de Nueva York, uno de ellos capaz de desactivar alarmas, y otro un pir車mano deseoso de prender fuego a la sede de cualquier organizaci車n enemiga. Elegir a nuestros compa?eros es un factor clave, ya que se precisa de disponer de un grupo equilibrado que nos acompa?e en nuestras fechor赤as planificadas con anterioridad.
Desplegando el mapa comprobamos hasta d車nde llega nuestra influencia, y d車nde la de las familias rivales, establecemos un objetivo neutral y nos dirigimos hacia all赤 con el fin de ofrecer nuestros servicios como un buen capo. Como sab谷is, la mafia realiza una cadena de favores con el fin de que la gente 'le deba una' al Don, y en El Padrino II realizar esta pr芍ctica a menudo es de vital importancia, ya que con este tipo de submisiones completadas luego podremos pedir que nos devuelvan el favor cuando lo estimemos oportuno. Una vez pisamos la acera, se nos recuerda que debemos mantener nuestros negocios con buena salud, as赤 que nos encaminamos a una peque?a panader赤a que se encuentra a un par de manzanas. Lejos de ser un simple despacho de pan, resulta una tapadera bajo la que se esconde un burdel, as赤 que recogemos nuestras ganancias y continuamos con la misi車n.
Es de vital importancia mantener los negocios y hacer que prosperen, por ejemplo dedicarnos al contrabando de armas permitir芍 gozar de mejor equipamiento para los sicarios que tengamos en n車mina, en cambio el tr芍fico de drogas generar芍 ping邦es beneficios r芍pidamente, y los negocios tapadera contribuir芍n a que el dinero negro salga limpio como una patena. Con el dinero contrataremos nuevos secuaces, matones y mercenarios, esenciales para mantener a raya a los enemigos. Con todo lo que hemos hecho cae la noche y decidimos volver al cuartel general, no sin antes pasar por un edificio propiedad de una familia rival en un barrio vecino. Con sigilo nos acercamos al mat車n que custodia la puerta y lo ejecutamos por la espalda sin piedad, acto seguido indicamos a nuestro esbirro que desactive la alarma para evitar ser descubiertos, y una vez con la puerta abierta, es el turno del pir車mano para que prenda el local. Hemos de decir que la cosa no sali車 bien, nos descubrieron y tuvimos que poner pies en polvorosa perdiendo por el camino a nuestro subalterno incendiario (al que todo hay que decirlo, hab赤amos tomado cari?o).
Impresiones
Tras comprobar de primera mano las posibilidades de la nueva entrega de El Padrino, nos hemos quedado con ganas de m芍s, sobretodo de visitar la ciudad de Miami o volver a La Habana. Sin duda la nueva propuesta de EA supone un soplo de aire fresco al aunar el sandbox con la estrategia e incluso el rol, lo que le permite desmarcarse de los grandes referentes de su g谷nero, en vez de intentar competir contra ellos como ya ocurriera con la primera parte. Ahora dispondremos de dos bloques bien diferenciados: el modo Gangster para realizar las misiones de a pie, recorriendo la ciudad repleta de vida en la cual encontramos una enorme cantidad de actividades delictivas a realizar, y sobre todo con un elenco de acciones variado y amplio, haciendo especial hincapi谷 en la las numerosas formas que dispondremos para acabar con cualquiera que ose enfrentarse a nosotros. Otro detalle a tener en cuenta es que, si bien los compa?eros controlados por la m芍quina no dispongan de una inteligencia artificial portentosa, evitan molestar y pueden ser comandados mediante 車rdenes de diferente rango a trav谷s de un sencillo men迆.
Por otra parte tenemos el modo Visi車n del Don, mediante el cual controlaremos la organizaci車n y los negocios familiares, desde este modo de juego podremos incluso enviar a una escuadrilla a cumplir un objetivo a un extremo de la ciudad (u otra ciudad), y luego nosotros ir a cumplir otro simult芍neamente, pero ser芍 mejor asegurarse que la gente que env赤as cobra un buen sueldo, van bien equipados y es de fiar para que no nos traicionen. En el caso de comprobar que alguno de los negocios no va todo lo bien que debiera gracias a este modo, podremos volver al modo Gangster y darnos un paseo hasta all赤 para solucionar personalmente las cosas.
El Padrino II produce buenas vibraciones desde el momento en que nos damos cuenta de que no nos encontramos ante el en谷simo clon de Grand Theft Auto, detalle por el que ya merece la pena estar pendiente del juego a la espera de evaluar la versi車n final. Adem芍s desaparece el recelo con el que siempre se prueba por vez primera un juego basado en una licencia cinematogr芍fica, situ芍ndonos en una historia paralela que poco tiene que ver con su versi車n de celuloide, m芍s all芍 de alg迆n momento puntual y la excelente banda sonora. Con todo ello, a?adido a un apartado t谷cnico que cumple muy bien con su cometido y la promesa de una duraci車n considerable, el juego de EA crea la expectaci車n suficiente para no dejarlo pasar e incluirlo en nuestra lista de futuribles para este 2009.
- Acci車n