Expansi¨®n olvidada

Tras Gothic 3, muchos aficionados esperaban este Forsaken Gods como el t¨ªtulo que les ayudara a sobrellevar la espera hasta la siguiente entrega de la serie. Sin embargo, la cesi¨®n del desarrollo de Piranha Bytes al estudio hind¨² Trine Games y las disculpas de los mismos por lanzar el juego tan poco depurados hace tan solo una semana no presagiaban un resultado demasiado alentador. Finalmente Forsaken Gods ha llegado a nuestras manos y hemos podido constatar lo que nos tem¨ªamos, se trata de un pobre intento de expandir la licencia. M¨¢s a¨²n, los numerosos problemas de toda ¨ªndole hacen que consiga desesperar al jugador. Aunque hablaremos de ello a continuaci¨®n, estamos ante un producto nada recomendable, ni siquiera para fans de la saga.

La trama nos lleva a encarnar de nuevo al h¨¦roe sin nombre, justo despu¨¦s de los acontecimientos ocurridos en Gothic 3. Por diversas causas nuestro protagonista pierde todo su potencial de combate y olvida todo lo que sab¨ªa, as¨ª que nos tocar¨¢ comenzar de nuevo desde cero, gestionando la progresi¨®n y el desarrollo del mismo. El contexto pol¨ªtico nos sit¨²a en una Myrtana dividida en facciones, que conspiran y batallan por hacerse con el control de la tierra. Unas m¨¢s y otras menos, todas desean establecer su potencial por encima del resto, ya sea por la fuerza de las armas o por las de la palabra. En cualquier caso, nosotros tendremos la llave de esta contienda, y actuaremos como el eje sobre el que giran las alianzas y los conflictos. Un argumento tan ¨¦pico como trillado y que servir¨¢ para introducirnos de nuevo en el universo de la serie.

S¨®lo hace falta entrar en el mundo de Myrtana para apreciar los primeros problemas de Forsaken Gods. La tasa de im¨¢genes es tremendamente inestable, en la mayor¨ªa de momentos arrojando cifras rid¨ªculas y haciendo casi imposible jugar de forma correcta. El equipo de pruebas, un Intel Core 2 Duo a 2.65MHz con una GeForce 8600 GT y 2GB de memoria RAM DDR-800, no es capaz de manejar el juego en las configuraciones media ni alta. Situando los gr¨¢ficos en su opci¨®n mas modesta si que es posible una tasa de im¨¢genes decente, aunque el aspecto del juego se aleja mucho de lo deseable, e incluso as¨ª, no conseguimos desterrar los continuos tirones. La mala optimizaci¨®n del motor de Gothic 3, converge aqu¨ª con tremendos problemas de clipping, modelos que se superponen o atraviesan el escenario o cuerpos que flotan en el aire.

Pese a que el apartado visual, sobre todo los escenarios, resulta notable, la imposibilidad de disfrutar de ¨¦l de la forma correcta hace que r¨¢pidamente pierda todo su inter¨¦s. Desde Gothic 3 se han mejorado los personajes, que cuentan ahora con modelos algo m¨¢s detallados, aunque se sigue abusando de la repetici¨®n de aldeanos. Como dec¨ªamos, los escenarios y la representaci¨®n del entorno es de lo poco que consigue salvarse de la quema. La distancia de dibujado impresiona, mostrando la orograf¨ªa m¨¢s lejana, aunque la aparici¨®n repentina de objetos seg¨²n nos acercamos a ellos consiguen llamar la atenci¨®n negativamente. Desde luego, esta expansi¨®n bien puede servir como campo de pruebas para los benchmarks de tarjetas gr¨¢ficas, puesto que ni los equipos m¨¢s potentes consiguen desarrollar la potencia que el juego requiere para funcionar correctamente.

La banda sonora es uno de los pocos puntos en los que esta expansi¨®n consigue mantener un nivel decente. Las melod¨ªas, muy del estilo de la serie, acompa?an bastante bien la acci¨®n y ofrecen un fondo muy correcto para el desarrollo de la aventura. Las diferentes sinton¨ªas y la alternancia de las mismas no aburren, resultando uno de los puntos m¨¢s agradables de este t¨ªtulo. Por otro lado, los efectos sonoros rayan a un nivel bastante distinto, destacando negativamente por lo simple y lo poco detallados. El doblaje, ¨ªntegramente en ingl¨¦s, resulta bastante tosco y las p¨¦rdidas de sincronizaci¨®n son alarmantes.

Ciertamente, no estamos frente a un trabajo de doblaje que destaque por su calidad, y se podr¨ªa haber logrado un mucho mejor resultado invirtiendo menos esfuerzo en localizar todas y cada una de las frases en pos de una mayor calidad de las mismas. El conjunto final destaca en lo musical y flojea en el doblaje, que con un m¨ªnimo esfuerzo podr¨ªa haber llegado a alcanzar cotas de mayor correcci¨®n. Sin duda, se nota nuevamente la marcha forzada para poner el t¨ªtulo en circulaci¨®n lo antes posible.

Jugabilidad

El primer punto a rese?ar es que esta expansi¨®n es independiente de Gothic 3 y por tanto no es obligatorio contar con dicho juego para que funcione. En este nuevo contenido viajaremos por las tierras que ya se exploraron anteriormente, con a?adidos nuevos a la geograf¨ªa, nuevas localizaciones y puntos de inter¨¦s, pero sin que se descubran territorios completamente novedosos, algo que queda reservado para la cuarta entrega de la serie. Es al comenzar a jugar, y con el paso de los minutos cuando, los problemas de Forsaken Gods empiezan a hacer acto de aparici¨®n en el apartado jugable. Para empezar, no hay rastro alguno del nuevo sistema de combate mejorado con el que se publicita. El interfaz, algo remodelado, tampoco aparece con grandes novedades, y desde luego resulta igual de usable que en el t¨ªtulo anterior.?

El sistema de juego se mantiene inalterado, ofreciendo al jugador una buena variedad de capacidades hacia las que orientar al h¨¦roe sin nombre invirtiendo puntos de desarrollo. En este sentido, esta expansi¨®n no modifica el conjunto de habilidades del t¨ªtulo, y se limita a ampliar el n¨²mero de objetos y tesoros disponibles, haciendo crecer un apartado ya de por s¨ª extenso. El conjunto de nuevos monstruos y criaturas con las que enfrentarse ha crecido bastante, poblando las tierras de Myrtana con un buen n¨²mero de especies nuevas. Por ¨²ltimo, el resto del contenido de Forsaken Gods va orientado a ofrecer un nuevo volumen de misiones y objetivos alternativos, de diversa escala, con los que ayudar a los habitantes en su vida diaria o lograr la unificaci¨®n de los territorios.

Lamentablemente, estas nuevas misiones no se ven exentas de los omnipresentes problemas, y nos hallaremos a menudo con tareas que no se pueden finalizar, personajes principales que rechazan hablar con nosotros o que simplemente no est¨¢n donde deber¨ªan estar. Este tipo de fallos hacen que la experiencia de juego sea simplemente frustrante, y convierte en un ejercicio de paciencia el progresar por la aventura. A nadie le gusta invertir sus horas realizando una tarea que ning¨²n NPC va a reconocer a posteriori. Como dec¨ªamos, desde el lanzamiento del juego han surgido dos parches, que actualizan la versi¨®n del ejecutable y solventan numerosos bugs. Esto no tendr¨ªa m¨¢s importancia de no ser por que, incluso con ellos, todav¨ªa nos encontramos con un producto inacabado y lleno de problemas.