Grand Theft Auto IV
- PlataformaPS31036010PC10
- G¨¦neroAcci¨®n, Aventura
- DesarrolladorRockstar North
- Lanzamiento29/04/2008 (PS3, 360)03/12/2008 (PC)
- TextoEspa?ol
- VocesIngl¨¦s
- EditorTake 2
"La vida es complicada"
Poco meses despu¨¦s de su exitoso y rompedor lanzamiento para consolas, Niko Bellic aterriza en nuestros ordenadores. Lo hace a mayor resoluci¨®n que la vida real, adem¨¢s, con un apartado t¨¦cnico que nos deja ver Liberty City de una manera que nos imagin¨¢bamos, un editor de video que har¨¢ las delicias de cualquier amante del 'machinima' y un multijugador con capacidad para el doble de jugadores. Una Obra Maestra que se mueve por nuestros monitores como pez en el agua.
Parece ir¨®nico que a d¨ªa de hoy se asocie a la saga Grand Theft Auto con madurez, reflexi¨®n y cr¨ªtica social, cuando precisamente en sus inicios era poco m¨¢s que un arcade donde se nos invitaba a jugar con una metr¨®polis creando todo el caos posible. Definitivamente, Liberty City ha evolucionado: sus calles inspiradas en Nueva York dicen m¨¢s de lo que a primera vista parece, m¨¢s all¨¢ de un aumento progresivo de resoluci¨®n y detalle. Y con ello su gente, sus protagonistas, nosotros.
tanto en su campa?a como en sus modos multijugador, aseveramos sin ninguna duda que Rockstar ha llevado a su saga m¨¢s representativa -y una de las m¨¢s aclamadas de la historia del videojuego- por un proceso lento e inexorable. Como si hubiese dejado a un lado el acn¨¦, el humor f¨¢cil y los tropiezos propios de un p¨²ber y se estuviese adentrando poco a poco en la fase adulta. Una fase adulta en la que se toman enormes sacrificios y riesgos, pero con la confianza de toda una vida de experiencia como bandera.
Como siempre, Rockstar North no se olvida del usuario de PC, plataforma donde naci¨® la saga, y como siempre, procura hac¨¦rnosla llegar lo antes posible para este entorno ¨²nico con sus propias cualidades, m¨¢s all¨¢ de ports de dudosa calidad que otros triple A han disfrutado. M¨¢s de medio a?o ha pasado desde entonces, pero poco o nada se puede a?adir respecto al texto que se hizo en su momento, porque los contenidos en base son similares. Existen a?adidos, sin duda, alguno m¨¢s que interesante, pero son los menos. En todo caso, esto no resulta de ning¨²n modo un handicap: cuando se desvela una Obra Maestra, en ocasiones es mejor dejarla intacta, o simplemente mejorar los cimientos, hacerlos m¨¢s s¨®lidos. Este es el caso de Niko Bellic y su sue?o americano.
Despertando del sue?o
Un barco atraca en el puerto de Liberty City. De ¨¦l, salen conversando dos personas, hablando sobre los motivos que les trajeron all¨ª. Probablemente durante todos los meses que estuvieron conviviendo apenas se conoc¨ªan, ni quer¨ªan conocerse. Nadie quiere saber los motivos por los que te fuiste de tu pa¨ªs en estas condiciones. Es mejor no saberlo. No obstante, mientras va a encuentro de su primo Roman, al que espera en un descapotable lujoso, surge ese momento de sinceridad. A los pocos minutos de esperar llega un coche modesto, un modelo de taxi, y de ah¨ª sale su familia. No tardar¨ªa en comprender que el sue?o americano que le describ¨ªa en todos esos e-mails no exist¨ªa. Que todo aquello de lo que hu¨ªa acabar¨ªa persigui¨¦ndole al otro lado del mundo. Que la Am¨¦rica que conceb¨ªan no pod¨ªa estar en otro lado que no fuese su imaginaci¨®n.
Es en ese comienzo donde se ponen las premisas de GTAIV: a los mandos de Niko Bellic toda esa enorme extensi¨®n de edificios, calles asfaltadas, personas que hacen su d¨ªa diaria, se hacen algo enorme, demasiado grande para un s¨®lo individuo. Una sensaci¨®n transformada en realidad en cuanto tratamos con la cr¨¦me de la cr¨¦me del hampa internacional. Est¨¢ en el tino de Dan Houser y su equipo el hilvanar una experiencia con personalidad, que se r¨ªe tanto de estereotipos ya vistos en otros filmes como de algunos creados dentro de la propia saga. Sus casi 40 horas de campa?a principal esconden sorpresas, elecciones, traiciones, mezcladas con un sentimiento que se queda en lo m¨¢s profundo del jugador cuando averiguamos que, definitivamente, el destino del protagonista est¨¢ marcado desde el primer momento en el que pisa el pa¨ªs de las oportunidades.
La recompensa para tanto aquel que haga la inversi¨®n m¨¢xima como el que tenga un equipo medio se nota. Y es que la mano maestra de Rockstar North en este sentido pone de manifiesto todas las bondades de ese combo de motores gr¨¢ficos, Euphoria y Havok, como no se pod¨ªa apreciar en consolas. Si bien el horizonte al que se pod¨ªa llegar en aqu¨¦llas era m¨¢s que incre¨ªble, aqu¨ª se sobrepasan todos los l¨ªmites: podemos ajustar desde la densidad de tr¨¢fico -un dato: el n¨²mero por defecto, 30, es el que se vio en PS3 y 360- hasta el propio detalle de los edificios. Verlo todo al m¨¢ximo es una maravilla, un redescubrimiento de todo lo que se nos pudiese pasar por alto en su momento.
Tampoco hay que obviar la calidad de ciertos elementos m¨¢s sensibles a la f¨ªsica y a ciertos efectos, como los ¨¢rboles -quienes reciben efectos m¨¢s realistas-, las explosiones, mucho m¨¢s vistosas y que resienten menos la tasa de frames por segundo cuando se suceden varias simult¨¢neamente, o los propios viandantes de cualquier barrio, con menos diferencias visibles compar¨¢ndolo con el propio Niko. Estos detalles quiz¨¢s no sean significativos, pero ayudan a crear la mejor experiencia GTAIV posible. Adem¨¢s, si por ejemplo aumentamos el n¨²mero de coches que circulan, esto repercute directamente en la jugabilidad a la hora de hacer persecuciones o carreras a contrarreloj, por ejemplo. En lo que se refiere a la radio, una selecci¨®n digna del mayor de los mel¨®manos, podremos, como ha sido tradici¨®n en la saga, a?adir temas propios siempre que lo deseemos. Un detalle muy importante que no pocos agradecer¨¢n.
Al abrir nuestro m¨®vil no tardaremos en encontrar una nueva opci¨®n: Editor de Video. A partir de ah¨ª, y mediante una sencilla interfaz, se nos da un amplio terreno con el que jugar a ser Martin Scorsese. Travellings, cambios de plano, de tonalidad, de centro de la acci¨®n -pasando de Niko a Roman, por ejemplo, en la misi¨®n del rescate, y teniendo el suficiente tino, se puede crear una secuencia de acci¨®n impresionante-... El tr¨¢mite para poder editar los clips se hace mediante una ¨²nica pulsaci¨®n de bot¨®n, F6, a posteriori de haber realizado esa secuencia ideal, dato muy importante que nos ayuda a disfrutar c¨®modamente de la partida y no agobiarnos por hacer -los movimientos perfectos- mientras se ha pulsado el bot¨®n de REC. Tener una ciudad y tales momentos recreados para poder jugar con ellos se hace una experiencia id¨®nea para cualquier amante del fen¨®meno 'machinima' -es decir, de hacer cine utilizando metraje de videojuegos.
Por supuesto, tiene limitaciones: no se puede grabar audio para las voces, ni se pueden activar las animaciones manualmente; tampoco nos dejan utilizar canciones de fondo m¨¢s que la gran mayor¨ªa de las que est¨¢n en el soundtrack por defecto, y ni siquiera todas. Pero como ya sabemos, la comunidad 'mod' es grande hasta el punto de que nos ilusiona lo que puede llegar a ser esta poderosa herramienta. Aun sin ella, su acceso tan sencillo como complejo seg¨²n queramos -cuenta con opciones automatizadas o hechas a mano seg¨²n nuestro criterio- lo convierten en un a?adido de acierto que s¨®lo tiene sentido cuando usamos teclado y rat¨®n.
Las vertientes de esta parte competitiva son conocidas ya por todos: tenemos desde el original "encargo de la Mafia" hasta el "GTA Race", pasando por los t¨ªpicos modos "todos contra todos" o "conquista de territorios". La virtud en este caso es que la cantidad implica m¨¢s calidad. Es decir, que cuando se nos da el barrio de Algonquin entero para pegarnos tiros unos a otros, se hace mucho m¨¢s disfrutable tener m¨¢s objetivos a los que disparar. Con las carreras pasa lo mismo, haciendo el sistema tan divertido y alocado como si de un Mario Kart se tratara -s¨¢lvense las diferencias, por supuesto-.
Obra maestra
Una obra maestra que ha dominado su g¨¦nero para colocarse en la cima del mismo. Un coloso de su generaci¨®n que seguir¨¢ siendo comentado y recordado en el futuro. La nota m¨¢xima no implica perfecci¨®n, sino que es usada para se?alar a un referente absoluto en el que los dem¨¢s pueden y deben mirarse. C¨®mpratelo incluso si no te gusta el g¨¦nero (Nadie podr¨¢ decir que no tuviste Quake, Ultima Online o Grand Theft Auto III de turno).