Manager modesto

Los juegos de gesti¨®n de f¨²tbol siguen apareciendo temporada tras temporada como complemento a los habituales t¨ªtulos de simulaci¨®n. A la espera del lanzamiento de FIFA Manager, por parte de EA y su habitual contrincante, Football Manager de Sports Interactive, nos llega la actualizaci¨®n de Premier Manager, por parte de Zoo. Siendo como son unos habituales en el g¨¦nero, el t¨ªtulo de este a?o no presenta excesivas novedades y hablamos ya de la decimocuarta iteraci¨®n de la franquicia. Para los que no lo conozcan, se trata de un t¨ªtulo de gesti¨®n futbol¨ªstica de aspecto muy arcade, lo que hace que empezar a jugar sea casi inmediato y no haya que pasar horas leyendo interminables parrafadas sobre los men¨²s.

El punto de partida nos permite crear nuestro perfil, elegir nuestra nacionalidad y seleccionar un equipo de entre seis ligas diferentes: Inglaterra, Escocia, Francia, Alemania, Italia y Espa?a. Cada liga posee sus divisiones inferiores, por lo que el volumen total asciende a unos 500 clubes, eso si, sin licencias oficiales. Veremos por tanto como el Real Madrid se denomina simplemente Madrid, el F.C Barcelona ser¨¢ simplemente Barcelona, y no veremos los escudos oficiales por ninguna parte. Sin embargo, los jugadores si que cuentan, en su mayor¨ªa, con el nombre real y sus iniciales. Choca ver en algunos casos como se han simplificado estos nombres, dejando por ejemplo a Victor Valdes como simplemente Victor.

El apartado visual de Premier Manager no destaca por su brillantez, aunque cumple con su cometido con solvencia. Uno de los puntos m¨¢s destacables del t¨ªtulo es la facilidad que ofrece al usuario para acceder a los diversos men¨²s con tan solo un par de clicks. A pesar de que el n¨²mero de ventanas de gesti¨®n es elevado, la estructura de las mismas, as¨ª como la posibilidad de situar opciones favoritas, agiliza mucho el proceso de navegaci¨®n. Para cerrar con nota este apartado, el men¨² accesible desde la rueda del rat¨®n o la barra espaciadora nos ofrece las opciones de gesti¨®n ubicadas en un mismo panel de control. De esta forma, si queremos consultar cualquier aspecto del club, se su personal o cualquier otra opci¨®n, tan solo tendremos que emplear un par de segundos hasta llegar a ella.

El acabado de los men¨²s, como dec¨ªamos, es bastante arcade, huyendo de la masificaci¨®n de opciones que encontramos en otros simuladores. Tambi¨¦n hay menos aspectos que controlar que en sus competidores, puesto que no podremos actuar sobre algunos aspectos econ¨®micos como la elecci¨®n de patrocinador. De cualquier forma, los menos versados en este tipo de juegos agradecer¨¢n el directo estilo de juego, muy enfocado a avanzar d¨ªas y d¨ªas mientras se huye de cargar al jugador de un abultad¨ªsimo cat¨¢logo de decisiones por tomar. Durante los partidos, una ventana nos mostrar¨¢ el desarrollo de los mismos, utilizando el cl¨¢sico sistema de c¨ªrculos que act¨²an simulando el movimiento de los jugadores y el bal¨®n.

En lo negativo, el t¨ªtulo carece inexplicablemente de cualquier tipo de par¨¢metro de ajuste gr¨¢fico, haciendo que no se pueda disfrutar a pantalla completa, ni seleccionar la resoluci¨®n directamente.Desconocemos el porqu¨¦ de esta dejadez en cuanto a las opciones visuales, pero resulta una decisi¨®n pol¨¦mica a todas luces. Para adaptar el juego a nuestro monitor deberemos arrastrar la ventana y redimensionarla al tama?o que deseemos. Nos ha chocado bastante que el sistema gr¨¢fico deba configurarse de esta manera, pero en ning¨²n lugar existe una pesta?a de opciones gr¨¢ficas para ser manipuladas a nuestro antojo.

M¨²sica y Sonido FX

El repertorio sonoro de Premier Manager destaca por carecer por completo de banda sonora alguna. Ni una canci¨®n de fondo, ni siquiera una breve melod¨ªa de tema principal, nada de nada. Lo ¨²nico que escuchamos desde el momento en que el juego se inicia son los sonidos dedicados a la selecci¨®n de los men¨²s. Estos sonidos, que tampoco brillan por su car¨¢cter espectacular, simplemente cumplen su labor, quedando el repertorio sonoro totalmente falto de algo m¨¢s. Desde luego, una m¨ªnima selecci¨®n de temas musicales hubiera ayudado algo a la ambientaci¨®n, que flojea por completo. Un punto negro bastante importante e incomprensible en un juego que sale al mercado en el a?o en el que nos encontramos.

Tras crear nuestro perfil y elegir club, llegamos a la pantalla de control del equipo, con numerosos accesos directos en el lateral derecho de la misma. Estos accesos directos aparecer¨¢n remarcados con una exclamaci¨®n cuando existan avisos que leer en los diferentes aspectos. Ser¨¢ aqu¨ª donde nos enteremos de las ofertas de otros clubes por nuestros jugadores, o donde el presidente nos env¨ªe mensajes para establecer reuniones. Nuestro papel ser¨¢ el de manager deportivo, por lo que tendremos la figura del m¨¢ximo mandatario por encima, y ¨¦l ser¨¢ el que en ¨²ltima instancia apruebe o revoque nuestras decisiones extradeportivas.

Como responsables del club podremos atender a un gran n¨²mero de decisiones que cubren las meramente deportivas como establecer t¨¢cticas de juego, realizar las alineaciones, o establecer los patrones de entrenamiento de la plantilla. Tambi¨¦n podremos tomar las riendas del fisioterapeuta del grupo, para establecer dietas, ordenar sesiones de relajaci¨®n o citas con el psic¨®logo. Por supuesto, contaremos con personal encargado de estas labores, de forma que estos aspectos se podr¨¢n automatizar, aunque por nuestra experiencia, encargarse de ello resulta una decisi¨®n mucho m¨¢s interesante y efectiva.

El ritmo de juego se estructura en d¨ªas, que iremos avanzando mediante los controles correspondientes. Cada d¨ªa podremos tomar todas las decisiones que queramos, y se actualizar¨¢n los tablones de noticias, los mensajes que los distintos efectivos de nuestro cuerpo t¨¦cnico nos env¨ªan o las listas de jugadores transferibles, por ejemplo. La sensaci¨®n es la de que el entorno del f¨²tbol mundial realmente cambia d¨ªa a d¨ªa, y adem¨¢s no lo hace girando a nuestro alrededor. Los clubes fichar¨¢n jugadores, disputar¨¢n sus partidos y el mercado ir¨¢ cambiando din¨¢micamente, seg¨²n avancen los meses.

Las plantillas est¨¢n actualizadas a la temporada actual, aunque los nombres de los personajes del cuerpo t¨¦cnico no se parecen ni remotamente a los reales. Nuestros empleados tienen una completa ficha t¨¦cnica que nos indica su nivel de experiencia -que va mejorando seg¨²n pasa el tiempo- su fidelidad al club, adem¨¢s de sus datos econ¨®micos y de rendimiento en la presente campa?a. Mejorar la eficiencia de este personal y motivarlos a seguir con nosotros tambi¨¦n es una labor de la que deberemos encargarnos por el bien del equipo. Por supuesto, si no se sienten bien en el club nos lo har¨¢n saber, as¨ª como nos dar¨¢n informaci¨®n de cualquier problema deportivo o extradeportivo que pueda surgir, siempre dentro de sus competencias.

Las relaciones con los distintos personajes y entidades se realiza por medio de di¨¢logos en los que podremos elegir siempre entre varias opciones. Resulta una mec¨¢nica bastante interesante, puesto que podremos llevar las conversaciones por el lado que m¨¢s nos interese en cada momento. Por ejemplo, si el presidente nos pregunta que tal vemos la temporada podremos optar por un enfoque conservador, aprovechar la ocasi¨®n para pedir refuerzos o simplemente declarar que vamos a por todas. Este estilo de conversaciones aporta un punto de profundidad a las conversaciones tanto con personal como con clubes, puesto que tambi¨¦n se utiliza en las negociaciones de traspasos y dem¨¢s acuerdos que dependen directamente de nosotros.

A?nivel t¨¢ctico y de plantilla, podemos elegir diferentes tipos de entrenamiento para los jugadores de diferentes posiciones. Las cualidades de los jugadores se valoran tanto num¨¦ricamente como con habilidades. Cada uno poseer¨¢ un conjunto diferente de ellas, y cada habilidad poseer¨¢ diferentes grados entre uno y ocho. As¨ª, podremos trabajar las habilidades innatas de cada uno para convertirlos en fuera de serie en alg¨²n aspecto concreto, como puede ser la posesi¨®n de bal¨®n, el pase largo, el disparo a puerta, los desmarques sin bal¨®n o los tiros libres. El interfaz facilita mucho la labor en este aspecto y resulta muy intuitivo para acceder a todas estas opciones c¨®modamente.