[E3] Operation Flashpoint 2: Dragon Rising
El E3 ha servido para que Codemasters diera m¨¢s detalles sobre uno de los proyectos m¨¢s ambiciosos que tienen entre manos y que intentar¨¢ hacerse un hueco entre los FPS de corte t¨¢ctico con su realismo y su acercamiento al juego de guerra total.
El E3 ha servido para que Codemasters diera m¨¢s detalles sobre uno de los proyectos m¨¢s ambiciosos que tienen entre manos y que intentar¨¢ hacerse un hueco entre los FPS de corte t¨¢ctico con su realismo y su acercamiento al juego de guerra total.
Operation Flashpoint 2: Dragon Rising es la segunda parte del juego que caus¨®, all¨¢ por 2001, un gran impacto entre los usuarios de PC dado su extremo realismo. Pero no con lo que ahora todas las desarrolladoras inciden en que es el "realismo", ese que se limita a una buena f¨ªsica, impactos, iluminaci¨®n... Operation Flashpoint era realista a la hora de mostrar la guerra en s¨ª, tanto en sus t¨¢cticas y armamento como en sus crudos resultados. Al contrario de lo que se est¨¢ convirtiendo en habitual, que nuestro personaje sane sus heridas "m¨¢gicamente", en Operation Flashpoint se muere de un s¨®lo disparo que puede llegar desce centenares de metros. O, con suerte, pod¨ªa s¨®lo herirnos en una extremidad y as¨ª sobrevivir arrastr¨¢ndonos, siempre y cuando alg¨²n m¨¦dico nos atendiese antes de morir desangrados. Todo en aquel juego buscaba ese mismo realismo y la libertad total para el juegador. Se nos encomentaba una misi¨®n y cada uno era libre para cumplirla de uno u otro modo. Si se nos encargaba volar un puente, o bien pod¨ªamos esperar a la noche y colocar con sigilo cargas de demolici¨®n, o bien rob¨¢bamos un turismo en una granja, recorr¨ªamos media isla hasta una base de carros de combate enemigos, rob¨¢bamos uno y volv¨ªamos a destruir el puente con ¨¦l. Libertad absoluta.
Los desarrolladores de aquel juego, los checos de Bohemia Inteactive, lanzaron una segunda parte de su juego, alejados ya de Codemasters, a comienzos de 2007. Dado que Codemasters mantuvo la licencia sobre el nombre de "http://www.merination.com/es" target=_blank>Armed Assault. Ahora, y previsto para 2009, Codemasters recupera la licencia y desarrolla lo que ser¨¢ el asalto de Operation Flashpoint a la actual generaci¨®n -PC, Playstation 3 y Xbox360- con una historia ligeramente distinta a la que contaba en su primer juego. Los enemigos de anta?o ser¨¢n ahora aliados.
China se ha convertido en una de las mayores potencias a todos los niveles del mundo. El pa¨ªs asi¨¢tico encuentra en una peque?a isla dominada por Rusia una fuente imprescindible para su crecimiento: el petr¨®leo. Igual que en los conflictos actuales, el crudo se convierte en el motivo del conflicto de Dragon Rising. Rusia, superada por la amenaza china, pide ayuda a los Estados Unidos para recuperar su terreno. Los, casi siempre, buenos de la pel¨ªcula llegan al rescate para acabar con las intenciones del pa¨ªs oriental. Y con ellos, el jugador toma el mando de la situaci¨®n.
La acci¨®n se desarrollar¨¢ entera en esta isla, que ha sido reproducida fielmente en base a la realidad. Llena de edificios, pueblos, diferentes caminos, valles con monta?as y grandes bosques, el entorno que el jugador tendr¨¢ en cada momento servir¨¢ tambi¨¦n como arma para conseguir superar la misi¨®n. El realismo impregnado en el escenario hace que el modo editor preparado para el juego se base en marcar los objetivos, localizaciones de las tropas, climatolog¨ªa y momento del d¨ªa, ya que el mapeado en s¨ª es inamovible.
Durante la presentaci¨®n del juego, Codemasters mostr¨® un tr¨¢iler basado en cinem¨¢ticas y una serie de im¨¢genes a modo de ejemplo sobre c¨®mo esperan tener acabado el juego para su lanzamiento. Lo visto, si cumple las expectativas, puede convertirse en referencia del g¨¦nero por la cantidad de detalles, enemigos en pantalla y efectos que se pudieron ver. El tr¨¢iler tambi¨¦n sirvi¨® para hacerse una idea de la grandeza de cada una de las batallas en las que el jugador deber¨¢ enfrentarse, con ataques a¨¦reos complicando la misi¨®n, la aparici¨®n decisiva de seg¨²n que veh¨ªculos de guerra y las distintas posibilidades de acabar con los objetivos con ataques lejanos, frontales o emboscadas por ejemplo.
Precisamente el terreno jugar¨¢ un papel fundamental en el desarrollo de las misiones. La climatolog¨ªa har¨¢ que podamos sufrir m¨¢s de la cuenta si nos encontramos en un ataque con veh¨ªculos en medio de un terreno enfangado, afectando a la estabilidad de los coches y tambi¨¦n a la velocidad de las tropas rasas. Todo lo que hay alrededor de esta guerra ser¨¢, en principio, destruible. Edificios, pueblos, bosques? nada queda a salvo en la batalla entre USA y China. A esto se le a?ade el sistema de da?o del jugador, que puede morir lentamente dependiendo del tipo de arma que le haya alcanzado y que tendr¨¢ una muerte segura si no se recupera -lejos de la autorrecuperaci¨®n de vida tan de moda en los shooters actuales.
Codemasters ha dejado claro que en esta ocasi¨®n, los compa?eros de batalla no son meros esclavos de nuestras ¨®rdenes, y pueden dar su opini¨®n sobre una estrategia a su juicio equivocada e, incluso, hacer fracasar la misi¨®n por su disconformidad. Otro de los puntos interesantes es el hecho de poder ordenar distintas cosas a distintas tropas de manera simult¨¢nea, aunque no se especific¨® c¨®mo acabar¨ªa todo implementado en el control, sobre todo en el de consolas.
En total, la trama principal consta de seis d¨ªas de guerra divididos en tres o cuatro misiones cada uno. Este modo contar¨¢ con un cooperativo para dos jugadores, aunque las opciones multi no acaban aqu¨ª. Hasta ocho jugadores estar¨¢n preparados para jugar juntos en misiones especiales. El modo on-line no queda corto de ambici¨®n. Codemasters quiere meter hasta 32 jugadores simult¨¢neos que, adem¨¢s, tendr¨ªan a sus ¨®rdenes decenas de NPC's para montar aut¨¦nticas batallas en la red. De este E3 hasta su salida, el 2009, toca dar forma a las cifras dadas, al aspecto visual prometido y definir un control que puede alzar a lo m¨¢s alto, o en caso contrario hundir el trabajo alrededor del juego, si la implementaci¨®n no est¨¢ a la altura. Tambi¨¦n esperamos que la adaptaci¨®n del juego a las nuevas plataformas no pase factura a uno de los mayores atractivos de la ya saga; su extraordinario realismo y, por extensi¨®n, su dificultad.
Operation Flashpoint: Dragon Rising
- Acci¨®n