El tenis m¨¢s exigente

Cuando hablamos del tenis, ya sea por tradici¨®n recreativa o por antig¨¹edad, Top Spin quiz¨¢s no sea el nombre que a todos se nos venga a la cabeza. Pero lo que est¨¢ claro es que esta joven saga tiene mucho que decir en lo referente al deporte de raqueta. Con este, son tres t¨ªtulos a las espaldas los que proclaman el trabajo de PAM Development como m¨¢s cercano a la simulaci¨®n, al realismo, que al hecho por SEGA y su Virtua Tennis, mucho m¨¢s cercano al concepto arcade, de f¨¢cil acceso. Dos conceptos siempre contrarios pero que no est¨¢n obligados a combatir entre s¨ª; que pueden convivir de forma paralela, como alternativas proporcionadas al usuario, siempre necesitado de, al menos, dos opciones entre las que elegir para poder asegurar una mayor competencia y, en consecuencia, mayor calidad en el producto final.

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As¨ª que despu¨¦s de un Top Spin algo descafeinado en la primera hornada de 360, en lo que parece que fue resultado de m¨¢s prisas que de una mala ejecuci¨®n por parte de la siempre eficiente desarrolladora, aparece esta tercera entrega con nuevas mejoras, pero continuando en la l¨ªnea de intentar simular en lo m¨¢ximo posible al deporte real, eso s¨ª, sin dejar de permitirse licencias algo simp¨¢ticas, sobre todo en lo referente a la creaci¨®n de personajes y a los escenarios, como ya comentaremos m¨¢s adelante. Pero que nadie se lleve a equ¨ªvoco: Top Spin 3 es una experiencia exigente como la que m¨¢s, en ocasiones incluso sacrificando facilidad de manejo para ello.

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Como cualquier juego deportivo, este se vale de licencias para representar con la mayor fidelidad posible a los tenistas m¨¢s representativos. En este caso tenemos a una veintena de jugadores, entre los que se encuentran James Blake, Tommy Haas, Gael Monfils, Andy Murray, Rafael Nadal, David Nalbandian, Andy Roddick, Mark Philippoussis, Tomas Berdych, Mario Ancic, Roger Federer en la zona masculina; Justine Henin, Svetlana Kuznetsova, Amelie Mauresmo, Maria Sharapova, Nicole Vaidisova, Caroline Wozniacki en el plano femenino; y, por ¨²ltimo, tres estrellas cl¨¢sicas como son Boris Becker, Bjorn Borg y Monica Seles. A destacar la exclusividad de Nadal por PlayStation 3, la cual priva a los usuarios de 360 no s¨®lo de un jugador, sino de un exponente patrio importante que a buen seguro ser¨¢ un buen movimiento de marketing, pero que dice poco del trato equitativo al usuario final. El resto del plantel lo componen deportistas 'm¨¢s o menos' ficticios hasta llegar a los 40.

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En lo referente a torneos tambi¨¦n tenemos nuestra raci¨®n de oficiales y no tan oficiales que llegan hasta los 24: Roland Garros, Us Open, Australian Open,  Dublin Open, Pacific Life Open, Sony Ericsson Open,  BNP Paribas Masters, Toronto Open, Madrid Open, Cincinnati Open,  Rome Open,  Hamburg Open,  Moscow Open,  Seoul Open, Casablanca Open, Amsterdam Open, Argentina Open,  Barcelona Open, Houston Open, London Open, Dallas Open, Vienna Open, Massachusetts Open y New Delhi Challenge. Se echa de menos el torneo de Wimbledon, un cl¨¢sico que no ha podido ser incluido en este t¨ªtulo. Una l¨¢stima.

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A nivel t¨¦cnico se ha puesto mucho hincapi¨¦ en este Top Spin 3, no s¨®lo a t¨¦rminos de atractivo visual sino de jugabilidad: los medidores que veremos durante la partida, m¨¢s all¨¢ del t¨ªpico marcador y de un indicador de salud al principio de cada punto, ser¨¢n nulos. Toda la informaci¨®n que tendremos que extraer de la pantalla, desde el nivel de agotamiento del jugador hasta la potencia de cada disparo. Y en eso se ha conseguido un gran trabajo, que exige pero que a su vez recompensa en una delicia para la vista.

Los escenarios, como dec¨ªamos, son producto de dos tendencias; una realista, donde se pone el mayor ¨ªmpetu en proporcionar esas sensaciones de los estadios reales, y por otro lado la inclusi¨®n de otros m¨¢s at¨ªpicos proporciona m¨¢s variedad a la vista. Todos ellos est¨¢n recreados con un gran mimo al detalle; la iluminaci¨®n, proporcionando buenas sombras y efectos visuales; el p¨²blico, de modelado arcaico pero haciendo buen acto de presencia; y la pista, importante factor, proporcionando placer a la vista ya sea de un tipo o de otro. A nivel de c¨¢mara se han solucionado los problemas que daba Top Spin 2, a?adiendo, adem¨¢s, varias opciones para poder elegir a nuestro gusto.

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En cuanto a los tenistas, el trabajo que se ha hecho para representarlos virtualmente es bastante vistoso. Por lo general, en expresividad facial en las peque?as animaciones y seg¨²n les vamos observando y creando en el editor correspondiente, a nivel de imperfecciones se ha hecho un trabajo excelente. Quiz¨¢s sus ojos sean en general algo irreales en algunos casos, o no encajan como deber¨ªan, pero son minucias que no empa?an el buen trabajo al respecto. Tambi¨¦n con el pelo ocurre algo parecido, que en ciertos estilos a veces simplemente no casa con el buen hacer general.

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Las animaciones nos dan, por su parte, una de cal y otra de arena. Es cierto que est¨¢n excelentemente representadas, aprovechando cada momento del partido para representar en qu¨¦ estado de agotamiento se encuentran, y tampoco realizan carreras innecesarias seg¨²n est¨¦ la pelota en una situaci¨®n o en otra. Adem¨¢s, muchos tenistas cuentan con su propia paleta de movimientos personales, que le dan muchos matices a los encuentros no s¨®lo gr¨¢ficos, sino jugables. La pena es que en ocasiones las transiciones entre unas animaciones y otras no s¨®lo no se realizan con fluidez, sino que adem¨¢s parecen algo bruscas, forzadas, rompiendo esa sensaci¨®n de naturalidad que deber¨ªan transmitir.

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A nivel sonoro, m¨¢s all¨¢ de los t¨ªpicos gru?idos cuando la situaci¨®n se pone tensa y del rugir del respetable, no se ha incluido ning¨²n tipo de banda sonora en caso de apetecernos oir algo de m¨²sica. Una l¨¢stima, m¨¢s teniendo en cuenta que durante nuestro paseo por los men¨²s reconoceremos temas de artistas reconocidos como Jamiroquai o Franz Ferdinard, que no se han aprovechado lo suficiente. Por el resto, no hemos encontrado diferencias t¨¦cnicas importantes entre 360 y PS3 m¨¢s all¨¢ de sus particularidades a nivel de hardware; s¨ª que se resiente el motor al cargar los partidos, mientras se van mostrando los estadios, y en las mismas pantallas de carga, que no traspasan la frontera de los diez segundos por lo general.

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Top Spin 3 difiere, cuando nos referimos a su control, a nivel de concepto no s¨®lo compar¨¢ndolo con su competido, sino con muchos lanzamientos en el mercado. Mientras que lo normal es realizar la acci¨®n una vez se pulsa el bot¨®n, aqu¨ª se ejecutar¨¢ al contrario, cuando lo soltemos. As¨ª, el coordinarse y llevar un 'timing' adecuado requiere cambiar nuestras costumbres. Cuanto m¨¢s tiempo tardemos en soltarlo, mayor ser¨¢ el golpe en potencia, y as¨ª nos lo dejar¨¢ indicado la vibraci¨®n del mando -en el caso de Xbox 360, claro-. Es una forma de encararlo es tan at¨ªpica como aprovechable, eso s¨ª, una vez se ha practicado lo suficiente, cosa que costar¨¢ a m¨¢s de uno que incluso haya jugado a los Top Spin anteriores.

Luego, adem¨¢s de esto tenemos los botones superiores. Con LB/L1 y RB/R1, combinados con cada golpe, haremos moverse a nuestro jugador a la linea de fondo o cerca de la red respectivamente para as¨ª ganar algo de terreno y hacer alg¨²n movimiento arriesgado que otro. En segundo lugar tenemos los gatillos, que nos dar¨¢n la oportunidad de dar golpes que pongan la pelota muy cerca de la l¨ªnea para desajustar definitivamente a nuestro adversario. ?stos, como es l¨®gico, no suelen funcionar; de hecho, no lo hacen casi nunca y para a ello el tenista deber¨¢ de estar en una posici¨®n ¨®ptima para ejecutarlo convenientemente, tal es as¨ª que muchas veces quedar¨¢ relegado a ¨²ltimo recurso de cara a una situaci¨®n adversa.

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Por ¨²ltimo, y para aquellos que se atrevan con el reto, podr¨¢n hacer tanto saques como globos con la palanca derecha. Para hacerlo hay que moverla hacia nosotros y, cuando la pelota se encuentre en su punto m¨¢s alto, moverla hacia delante. Parecido ocurre con los globos: se ir¨¢n m¨¢s cerca de la red si primero movemos el stick hacia arriba y cuando est¨¦ la bola cerca hacia abajo; viceversa para ponerlos m¨¢s cerca de la l¨ªnea de fondo. Son posibilidades, en general, complejas, que requieren un alto nivel de dominio a cambio de mayor precisi¨®n a la hora de controlar la pelota, y a la que los ne¨®fitos tardar¨¢n en perderle el miedo.

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Para introducirnos a esta mec¨¢nica tenemos la Top Spin School: un compendio de tutoriales que abarcan desde los movimientos b¨¢sicos hasta algunos m¨¢s avanzados. A¨²n as¨ª, no sirve para acercar al jugador lo suficiente como para darle el apoyo necesario. Son controles muy originales, logrados y con un enorme potencial jugable, pero que m¨¢s all¨¢ de la toma de contacto requieren horas para poder adecuarnos a ¨¦l. Aunque la experiencia sea de simulaci¨®n, y ciertamente cumple su objetivo desde ah¨ª, el usuario final lo paga con bastantes partidas entendi¨¦ndose con el mando.

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El modo estrella para un jugador lo compone el llamado 'Carrera'; esto es, crearte a tu propio tenista y llevarle desde los circuitos amateur hasta a las grandes ligas. Lo haremos a partir del editor que incluye el juego: un editor bastante completo a nivel de opciones pero en el que se echa de menos una forma m¨¢s libre de interactuar con ¨¦l, puesto que s¨®lo hay un n¨²mero limitado de opciones predeterminadas a elegir y no existen desplazadores -como en Oblivion, por ejemplo- donde poder obrar con menos restricciones. A¨²n as¨ª, es elogiable la cantidad de accesorios y extras divertidos para dar un toque de personalidad al tenista.

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Hecho esto, pasaremos a jugar, al principio en tie-breaks a siete puntos con unos cuantos amateurs, luego en peque?os torneos de aspirante, y no tardaremos en llegar a clasificaciones y torneos profesionales. Se echa de menos elegir el continente a empezar, como en anteriores Top Spin, pero por lo general es un modo con mucha vidilla. Por ejemplo, conforme vayamos ganando partidos iremos mejorando al deportista virtual que encarnaremos, pudiendo modificar una serie de par¨¢metros. Tambi¨¦n podremos llevarle de compras para ponerle la equipaci¨®n de grandes marcas deportivas o algunas simplemente m¨¢s simp¨¢ticas. Hemos visto que existe la posibilidad de descargar contenidos via PSN o Xbox Live, si bien no se han anunciado ni caracter¨ªsticas ni precio.

Por otro lado tenemos el modo Torneo, donde competiremos en los Open y dem¨¢s competiciones m¨ªticas encarnando a un tenista profesional y con un enfoque m¨¢s cl¨¢sico, por decirlo de alguna manera. Y el modo Exhibici¨®n, que nos dejar¨¢ la posibilidad de jugar en partidos a dobles y entre varios jugadores. Se echa de menos alguna opci¨®n multijugador local m¨¢s enfocada en ese aspecto; poder disputar torneos de dobles junto a un compa?ero se nos antojaba imprescindible para una experiencia completa.

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El problema de dificultad que entra?a ponerse con Top Spin 3 tambi¨¦n aparece en estas modalidades. Esto significa que si luchamos contra Rafa Nadal o Roger Federer, sea en el modo que sea -f¨¢cil, normal, dif¨ªcil o muy dif¨ªcil-, veremos c¨®mo las pasamos canutas para poder pasar airosos. Tampoco existe una curva adecuada en el modo carrera, donde fracasaremos estrepitosamente en los primeros partidos -cosa que se hace muy frustrante en campeonatos con clasificaci¨®n previa y luego posteriores eliminatorias-. Ya que estamos hablando de un control tan complejo, hubiese sido conveniente establecerlo de una manera menos chocante para el jugador.

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Independientemente de estos fallos que le restan accesibilidad al t¨ªtulo, a pesar de que su calidad sea intachable, el modo estrella nos lo encontramos en el World Tour, accesible ¨²nicamente online via PSN o Xbox Live!. A trav¨¦s de campeonatos de regularidad semanal, accederemos a una serie de clasificaciones donde mediremos nuestro nivel como tenistas -que adem¨¢s, servir¨¢n, como en el resto de modos para un jugador, para mejorar a nuestro personaje seg¨²n completemos partidos-. Accederemos a una serie de torneos junto a otros jugadores y seg¨²n vayamos ganando as¨ª lo reflejar¨¢ nuestra puntuaci¨®n. Hay que destacar el empe?o que la desarrolladora ha puesto en evitar experiencias desagradables; esto es, si en semifinales un jugador abandona, autom¨¢ticamente el sistema buscar¨¢ a alguien de su nivel y le incorporar¨¢ para que haya un partido lo m¨¢s igualado posible. Por otro lado, las clasificaciones se resetear¨¢n -a pesar de que haya rankings, como es normal- cada poco tiempo para as¨ª asegurar que aquellos que decidan incorporarse lo hagan en igualdad de condiciones. Por el momento el servicio tanto en PSN como en XBL no produce un lag que afecte a la jugabilidad durante las partidas. S¨ª hemos visto algunos movimientos m¨¢s bruscos de lo normal debido a nuestra conexi¨®n, pero al parecer son asuntos muy puntuales.

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