Super Smash Bros. Brawl, Impresiones

Nuestro corresponsal en Jap¨®n juega con Super Smash Bros. Brawl y nos ofrece sus impresiones sobre el juego. ?C¨®mo han sido las primeras horas con este esperad¨ªsimo juego? ?Estamos ante una nueva obra maestra de Nintendo?

Super Smash Bros. Brawl ya est¨¢ a la venta en Jap¨®n y hemos podido jugarlo y sacarle todo el jugo durante nuestras primeras partidas. Evidentemente, el 40/40 de Famitsu pesa mucho a la hora de ser objetivo, pero hemos intentado serlo y hemos preparado estas impresiones para que sep¨¢is lo que realmente os espera. Todav¨ªa no hay fecha oficial de lanzamiento en Europa, pero nuestra apuesta es para principios de verano.

Volviendo a Jap¨®n, el primer contacto con el juego es, c¨®mo no, la secuencia de introducci¨®n. En ella observaremos a la mayor¨ªa de personajes del juego (incluyendo a los nuevos invitados como Sonic o Solid Snake) en medio de fren¨¦ticas peleas a modo de presentaci¨®n de credenciales de lucha. Todo ello amenizado por una contundente y orquestralmente ¨¦pica melod¨ªa de fondo. La verdad es que algunos quiz¨¢s hubieran preferido una m¨²sica m¨¢s acorde con los tiempos que corren, pero ya sabemos que esto es marca de la casa. La melod¨ªa de Smash Bros.

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Estamos en un juego de Wii y, casi instintivamente, nada m¨¢s acabar el v¨ªdeo apuntamos a la pantalla esperando ver el t¨ªpico cursor con el que nos moveremos por las opciones. Pero pronto descubrimos la dura realidad. Ya nos podemos estar olvidando de este tipo de control. Todo el juego se maneja con la cruceta o el mando anal¨®gico. Nada de apuntar a la pantalla.

Por suerte Nintendo ha suplido esta carencia con cuatro formas de control, a saber: mando, mando m¨¢s nunchako, mando de GameCube y mando cl¨¢sico. Cada uno con sus pros y sus contras. Aunque definitivamente el mando de GameCube es el m¨¢s adecuado para sacar el m¨¢ximo provecho a nuestros luchadores, cualquiera de las otras opciones es perfectamente v¨¢lida y no supone un h¨¢ndicap demasiado grande. El manejo con el mando de Wii m¨¢s el nunchako nos ha sorprendido gratamente, por poner un ejemplo.

Una vez dentro del men¨² principal y aparte de las t¨ªpicas opciones de configuraci¨®n, tenemos a nuestra disposici¨®n dos modos principales, el individual y el de grupo, y el modo online. El primero est¨¢ dedicado, por supuesto a los que quieren jugar solos. Aqu¨ª nos encontramos con el evento cl¨¢sico y el modo aventura. El modo de grupo es el m¨¢s interesante a priori, ya que contiene el famoso duelo a cuatro jugadores (en local, ya que mediante el online podemos hacer lo mismo con jugadores de otros lugares del globo). A parte de estos modos, tenemos opciones para revisar los trofeos, las repeticiones grabadas, un museo con juegos pasados de Nintendo, o un completo editor de niveles, una de las opciones m¨¢s esperadas por los fans.

?Y qu¨¦ podemos decir de la lucha en s¨ª? Pura adrenalina. Un juego en el que cada escenario se llena de movimientos fren¨¦ticos de los luchadores que pugnan duramente por el ¨¦xito final. Los aficionados de la saga sabr¨¢n exactamente de lo que estamos hablando. Es la experiencia de Melee llevada a extremos insospechados. La premisa b¨¢sica del juego es bien sencilla: ser el mejor en una lucha fratricida entre dos, tres o cuatro luchadores principales.

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Todos ellos personajes de famosas franquicias de Nintendo como Mario, Donkey Kong, Kirby o Pok¨¦mon, a los que se a?aden invitados como Sonic, Solid Snake o Ike (Fire Emblem). Cada uno con sus habilidades especiales. Cada uno con sus puntos fuertes y sus puntos d¨¦biles. Por ejemplo, Sonic es el personaje m¨¢s veloz, y Ike uno de los m¨¢s fuertes. Pero hacerse con el control del erizo de Sega puede llegar a ser dif¨ªcil. Y Ike es lento, bastante lento. Uno de los personajes que m¨¢s nos ha gustado es Meta Night, el malo mal¨ªsimo de los juegos de Kirby. Es r¨¢pido, muy fuerte y sus ataques especiales son devastadores.

Para conseguir hacernos con la victoria final, no s¨®lo dependeremos de nuestra habilidad en el combate, sino tambi¨¦n de la suerte que nos conceden los objetos que peri¨®dicamente ir¨¢n cayendo sobre el escenario y que tendremos que ir recogiendo. Estos objetos nos permitir¨¢n, por ejemplo, recuperar parte del da?o que nos hayan inflingido nuestros oponentes, lanzarlos contra ellos, y conseguir armas con los que asestar golpes mortales, entre otras acciones. Los hay realmente curiosos, como un plato de curry picante que provoca que el personaje que lo engulla empiece a vomitar fuego de sus entra?as, causando estragos entre sus compa?eros de escenario. Realmente tiene que ser muy picante.

Uno de los objetos m¨¢s importantes es la bola Smash, reconocible porque lleva impreso el logotipo del juego. Esta bola causa que nuestro luchador ponga en marcha su ataque definitivo. Cada personaje tiene su propio ataque definitivo. Unos son m¨¢s curiosos que otros, pero todos son muy divertidos y como hemos dicho, devastadores. Por poner un par de ejemplos, el de Donkey Kong, es un concierto de bongos que causa gran da?o en todos los enemigos que se ponen a su alcance, mientras que el de Samus es un un potent¨ªsimo rayo destructor.

Hay una opci¨®n que permite limitar tanto el n¨²mero de objetos que podr¨¢n aparecer en la lucha (indicando cu¨¢les se quedan fuera en una inmensa lista), como el tiempo de cada combate, as¨ª como establecer los h¨¢ndicaps de los participantes. Sin duda una de las opciones que m¨¢s valorar¨¢n los jugadores expertos.

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?Y los escenarios? Todos los de Melee y m¨¢s. Varios a?adidos que lo hacen mucho m¨¢s variado. Y este es uno de los aspectos de Brawl que m¨¢s nos han gustado. Se nota que Nintendo se ha tomado muy en serio la creaci¨®n de estos entornos en los que se desarrolla la lucha. Nos han encantado los nuevos y la puesta al d¨ªa de los antiguos y cl¨¢sicos. Por ejemplo, en el escenario de Pikmin se pone a llover de repente y algunas de las zonas se convierten en peligrosas corrientes de agua que si nos despistamos nos pueden hacer salir de la pantalla.

Luego tenemos el de Wario Ware, en el que el fondo son las minimalistas pruebas del conocido juego de Wii. En ¨¦l, aparte de estar pendiente de la lucha, lo tendremos que estar de la prueba que tenemos en pantalla en cada momento y hacer el movimiento clave para superarla. Un c¨ªrculo o una cruz delatan la habilidad de los jugadores a la hora de pasarla. Uno de los escenarios m¨¢s curiosos es el dedicado al software de chat de Nintendo DS, Pictochat. ?Cu¨¢l es la particularidad de este entorno? En ¨¦l se ir¨¢n dibujando una serie de formas como si estuviera teniendo lugar una conversaci¨®n gr¨¢fica entre dos usuarios de DS con la gracia de que las l¨ªneas se convierten en plataformas y parte del entorno.

Podremos entonces aprovecharlas para eludir los ataques o subirnos para tener una posici¨®n privilegiada. Tambi¨¦n nos ha gustado, por su calidad, el escenario de Solid Snake donde nos deleitaremos con la maravilla visual de la base de Shadow Moses. La interacci¨®n con los escenarios es total y estos no se limitan a ser meros fondos pintados sino que en ellos suceden cosas, como hemos visto, por lo que hay que estar atentos a ellas si no queremos quedar fuera de la lucha.

En cualquier momento de la fren¨¦tica batalla podemos parar la acci¨®n centrando la c¨¢mara en nuestro personaje y tomar una instant¨¢nea que se quedar¨¢ grabada para la posteridad en el ¨¢lbum creado a tal efecto. Tambi¨¦n podremos grabar repeticiones de combates tanto en este modo como en el online. Como vemos, Brawl es un juego con multitud de opciones y modos.

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Y hablando de modos, el modo aventura es otro gran a?adido al conjunto. En ¨¦l, iremos superando una serie de combates (en los que dispondremos de hasta cuatro personajes con los que luchar en cada uno) y pruebas. Si superamos algunas de ¨¦stas desbloquearemos nuevos personajes. Algunos conocidos, otra sorpresa. Por supuesto, luego podremos utilizarlos en el resto de modos del juego. Al superar cada nivel se nos presentar¨¢ una secuencia cinem¨¢tica que nos ir¨¢ narrando la historia.

?Y el online? Otra de las joyas de la corona. Su funcionamiento es muy sencillo. Accedemos desde el men¨² principal y tras una espera de unos pocos segundos, se nos dar¨¢ un c¨®digo de acceso. A partir de aqu¨ª podremos elegir entre luchar contra amigos o contra desconocidos seleccionados aleatoriamente. Las pruebas que hemos realizado nos han permitido constatar que la experiencia de juego es perfecta. Es como si estuvi¨¦ramos jugando con nuestros amigos al lado. Ni rastro de 'lag' o cortes de conexi¨®n inesperados. De todas formas cabe mencionar que siempre hemos competido contra oponentes en Jap¨®n, porque no hab¨ªa otros. No sabemos si Nintendo ha bloqueado este acceso por pa¨ªs o es por la diferencia horaria.

Los gr¨¢ficos y la m¨²sica tambi¨¦n son aspectos muy cuidados en Brawl. En cuanto al primero, lo diremos directamente: 60 cuadros por segundo sin bajadas en el 'framerate', compatibilidad con pantalla ancha y modo progresivo. Todo un portento en este aspecto. Los modelados son tambi¨¦n de primera categor¨ªa, tanto los de los personajes como los de los escenarios. La m¨²sica, por otra parte, es de lo mejor que ha pasado por Wii. Composiciones de todos los juegos representados en Brawl, tanto originales como en arreglos especiales. Muchos de ellos nos har¨¢n soltar m¨¢s de una lagrimita melanc¨®lica. La calidad del apartado sonoro, en todo caso, de 10.

Todo ello hace del juego algo realmente redondo y nos atrever¨ªamos a decir muy cercano a la inalcanzable perfecci¨®n. Desde que lo probamos no podemos dejar de tener nuestra raci¨®n diaria de Brawl. Es un juego divertido, adictivo y de calidad. Una combinaci¨®n a prueba de bombas. Huele a cl¨¢sico por los cuatro costados.

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