Una nueva trama
El lanzamiento de Perseus Mandate est芍 destinado a cubrir las necesidades de los fieles m芍s ac谷rrimos del mejor juego de acci車n del 2005. En esta expansi車n, la segunda tras Extraction Point y que se puede jugar de forma independiente al t赤tulo original, deberemos encarnar de nuevo a un miembro del equipo F.E.A.R, en lo que es una trama totalmente alternativa a las de episodios anteriores.?En este caso, nos personaremos en un complejo industrial con el fin de investigar unos hechos relacionados con la vuelta de Paxton Fettle al bando de las r谷plicas. Sabemos que un equipo F.E.A.R se encuentra desaparecido en dicha zona,?y se nos?indica que podemos encontrar resistencia armada por parte de los mercenarios de la ATC. Una vez en marcha, la misi車n da un vuelco y nos deja aislados del resto de nuestro equipo, empezando aqu赤 el desarrollo real de la aventura. Heredando las se?as de identidad de la primera entrega, en Perseus Mandate mantendremos combates fren谷ticos contra enemigos reales e imaginarios, en una buena demostraci車n de c車mo la mente puede jugarnos una mala pasada en ciertas ocasiones.
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As赤, seremos testigos de escenas irreales que tratan de manipular nuestras emociones, en lo que es una vuelca de tuerca m芍s a la mec芍nica habitual del original. Las ilusiones y los fantasmas del protagonista se mezclan con los peligros reales al adentrase en el complejo, ofreciendo algunos momentos bastante sorprendentes y otros que, literalmente, te har芍n saltar de la silla. Envolvi谷ndolo todo, la posibilidad de utilizar nuestros reflejos mejorados para ralentizar el tiempo y ganar una ventaja t芍ctica en los fren谷ticos tiroteos. Como expansi車n, se introducen tres armas nuevas, una trama totalmente original y un nuevo tipo de enemigos, del que os hablaremos posteriormente. La historia rompe bastante con el conflicto con la ni?a Alma, que tantos malos momentos nos ha hecho pasar en los anteriores juegos. Aun as赤, no llega al punto de estar tan desligada como la de Extraction Point, siendo un intento de volver a las ra赤ces digno de alabar en este aspecto. Pese a todo, se deja notar el paso del tiempo en aspectos como el t谷cnico, que luce un poco vetustos por el paso de los a?os.
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Gr芍ficos
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Lo primero que notamos al iniciar partida en Perseus Mandate es que el motor gr芍fico y f赤sico de F.E.A.R permanece inalterado, lo que dota al juego de curiosos contrastes en este sentido. Decimos curiosos por que, mientras que gr芍ficamente se deja notar la huella del tiempo en los modelos y texturas, la iluminaci車n y el uso de los efectos visuales constituyen un buen espect芍culo para el jugador. Mas all芍, la f赤sica, muy correcta y el uso de la ralentizaci車n temporal, nos deparar芍n m芍s de un momento cumbre en pantalla. L芍stima que los personajes tengan?una construcci車n bastante simple y unas texturas que solo se pueden calificar de insuficientes en cuanto a definici車n. Por otro lado, las animaciones son cre赤bles y reflejan poderosamente las capacidades de los enemigos, que nos sorprender芍n en ocasiones al atacarnos desde posiciones elevadas cayendo en acrob芍ticos movimientos.
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Mas all芍, los escenarios tampoco llegan a ofrecer la variedad que uno podr赤a esperar despu谷s de dos t赤tulos anteriores. Se vuelve a reutilizar la f車rmula de espacios cerrados, variando entre pasillos, zonas espaciosas repletas de tuber赤as y ocasionalmente alg迆n cruce exterior. Estos entornos est芍n totalmente desprovistos de cualquier tipo de vida, y resultan fr赤os y sosos, aunque ofrecen un buen repertorio de coberturas y obst芍culos tras los que parapetarnos. As赤, nos encontraremos r芍pidamente corriendo entre oficinas y cub赤culos de trabajo, mientras no dejamos de apretar el gatillo frente a las grandes cantidades de enemigos que nos ir芍n abordando. Los sustos, en forma de enemigos que desaparecen, ilusiones que se materializan detr芍s nuestro o elementos del escenario que se rompen, recuerdan mucho a los del F.E.A.R original. Por 迆ltimo, la crudeza del juego es elevada, con enemigos que se desmiembran al recibir impactos de recortada a corto alcance, dejando un reguero de sangre en las paredes y techos de alrededor.
El apartado sonoro? resulta clave para ofrecer las sensaciones que el t赤tulo propone con su planteamiento. La banda sonora, una mezcla de ritmos electr車nicos, percusiones y cantos tribales, va variando entre los momentos de exploraci車n y los de combate. Resulta f芍cil anticipar cuando vamos a encontrar resistencia, ya que la m迆sica hace acto de aparici車n en dichos momentos. Esto hace que se pierda parte de la emoci車n al avanzar anticipando qu谷 vamos a encontrarnos, pero tambi谷n nos pone tensos por desconocer cuando y c車mo van a empezar las sorpresas. En muchos momentos tambi谷n se prescinde totalmente de la banda sonora, dejando 迆nicamente audibles los sonidos propios del entorno, algo que da al juego una carga dram芍tica bien acusada y hace m芍s propicios los sustos para el jugador. Como nota negativa, el cambio entre melod赤as de combate y exploraci車n no es lo fluido que se podr赤a esperar, ocurriendo a veces que hayamos acabado un combate y transcurran entre uno y dos minutos m芍s donde la canci車n de ritmo acelerado siga sonando para acto seguido acabar abruptamente y dejar paso a una tranquila, aunque inquietante melod赤a.
Por otro lado, el cat芍logo de efectos sonoros raya a un muy buen nivel, destacando las voces de los enemigos, que se avisar芍n unos a otros en caso de peligro y nos increpar芍n para desconcertarnos. Las conversaciones de nuestro equipo tambi谷n aportan interesante informaci車n y resulta conveniente el prestarles atenci車n. Las armas ofrecen asimismo un enorme elenco de ruidos, variando cada una en el tipo de audio que producen al ser disparadas y sonando cada casquillo que toca el suelo. Esto se transforma en una gran cantidad de sonidos que se dar芍n lugar durante los combates, ofreciendo un caos premeditado para tensar las emociones. Hay que destacar tambi谷n positivamente el efecto logrado al entrar en modo de reflejos mejorados, donde todos los sonidos se distorsionar芍n adecuadamente para lograr un mejor acompa?amiento a dicho modo. En conjunto, un apartado muy cuidado que resulta fundamental para la inmersi車n en la trama y para buscar la sorpresa y provocar la inquietud y desconfianza del jugador en todos y cada uno de los pasos que se van dando a trav谷s de los mapas.
Jugabilidad
Como dec赤amos, las ra赤ces de F.E.A.R se dejan sentir claramente en Perseus Mandate, que se acerca mucho m芍s al concepto del original de lo que lo hizo Extraction Point. La campa?a del juego, bastante moderada en cuanto a horas de duraci車n, nos ofrecer芍 el acceso a misiones adicionales tras ser completada, lo que alarga un poco la vida 迆til del producto. En ella, deberemos infiltrarnos inicialmente en un complejo industrial para descubrir el paradero del anterior equipo F.E.A.R asignado a dicha zona. Tras hacerlo descubriremos un interesante conflicto ente las fuerzas ATC y las r谷plicas, enemigos ya habituales e n la serie. En el centro de un fuego cruzado, deberemos investigar sobre el llamado elemento Perseus, un misterioso nombre para un proyecto oculto. Con esta l赤nea argumental, iniciamos nuestra andadura por las alcantarillas del complejo, viviendo en primera persona la intensidad y frenetismo de la que el t赤tulo de Monolith ha hecho gala desde su primera entrega. Un arsenal extenso, aunque con armas bastante similares, nos permite elegir la forma de acabar con nuestros enemigos seg迆n vayamos descubriendo nuevas herramientas de destrucci車n.
Las tres novedades en este aspecto son el rifle energ谷tico, el rifle mejorado y el lanzagranadas. No suponen grandes cambios en la forma de afrontar los combates, siendo el 迆ltimo bastante descartable por su poca potencia y su imprecisi車n. Junto al arsenal de armas podremos utilizar las ya cl芍sicas granadas de varios tipos, as赤 como las torretas desmontables que se adherir芍n a cualquier superficie plana hacia la que las enviemos. Los enfrentamientos con los enemigos est芍n cargados de violencia y cuentan con un aspecto t芍ctico bastante elevado, fundamentalmente por la espectacular IA que todav赤a mantiene su vigencia a d赤a de hoy. Nos enfrentaremos a soldados que gozan de capacidades de reacci車n veros赤miles y cre赤bles, y que no resultan nada predecibles. Se esconder芍n si utilizamos fuego de supresi車n, huir芍n al ver una granada o cambiar芍n su posici車n continuamente si la cobertura se lo permite. Estas son algunas de las acciones que veremos, y que constituyen uno de los puntos clave para que los tiroteos sigan teniendo la intensidad y el atractivo que ya destilaba el juego original.
Por ello, se echa en falta algo m芍s de inter谷s en la historia, que puede resulta f芍cilmente prescindible, incluso siendo un aficionado ac谷rrimo al modelo de juego que propone Monolith. Mas all芍 del modo para un jugador y las misiones adicionales, el multijugador provee de una peque?a selecci車n de mapeados y varios tipos de juego. Destaca la variante del deathmach con la posibilidad de utilizar los reflejos mejorados activada, que acompa?a a las modalidades habituales de deathmach y capturar la bandera. En nuestras partidas, el t赤tulo funcionaba bastante fluido con entre ocho y diez jugadores simult芍neos, acus芍ndose poco el retardo de red y siendo el rendimiento de nuestra m芍quina el principal limitador para la diversi車n. En este ultimo aspecto, todos aquellos con configuraciones de un PC de gama media podr芍n disfrutar con casi la totalidad de opciones gr芍ficas activadas, a resoluciones superiores a 1024 x 768. El motor gr芍fico acusa su veteran赤a pero tambi谷n posibilita la escalabilidad de posibilidades t谷cnicas.