Springfield a dos pantallas

Tras una notable incursi¨®n en las consolas dom¨¦sticas con el t¨ªtulo hom¨®nimo, la familia m¨¢s conocida de Springfield se adentra en la port¨¢til de doble pantalla de Nintendo recuperando toda la grandeza de dichas versiones e incluso el mismo esquema jugable.

Hasta ahora, los t¨ªtulos para port¨¢tiles basados en la obra de Matt Groening hab¨ªan sido bastante mediocres, especialmente los surgidos del paso de sistema de sobremesa a m¨¢quina de bolsillo. Como ejemplo podr¨ªamos citar el mediocre 'The Simpsons: Road Rage'; por suerte, hablando de juegos originales, tenemos alg¨²n representante bastante digno remont¨¢ndonos a los tiempos de Game Boy, como el divertid¨ªsimo 'Escape from Camp Deadly'.

Las tornas han cambiando y por fin encontramos un t¨ªtulo digno de ser jugado. La base tanto jugable como argumental es invariable con respecto al juego analizado la semana pasada en su versi¨®n para Xbox 360: Bart va a la tienda de videojuegos a comprar el 'Grand Theft Rasca', pero su madre le caza 'in-fraganti' y se lo quita, considerando que es un juego demasiado adulto y violento.

Bart, cabizbajo y resentido, vuelve camino a casa por un callej¨®n en el instante en el que cae del cielo un manual, ir¨®nicamente el de 'Los Simpsons: El videojuego'. Ley¨¦ndolo, Bart descubrir¨¢ que tanto ¨¦l como los miembros de su familia disponen de superpoderes, por lo que todos ellos decidir¨¢n probarlos en varias alocadas fases que parodian no s¨®lo a pel¨ªculas, sino tambi¨¦n videojuegos como Pok¨¦mon o Super Mario Bros. ?Absurdo? S¨ª. Pero tambi¨¦n realmente divertido.

Jugabilidad
El juego de Los Simpsons no s¨®lo parodia a Super Mario Bros., sino que adem¨¢s tambi¨¦n recoge su mec¨¢nica cl¨¢sica, que a su vez puede encontrarse en infinidad de t¨ªtulos del g¨¦nero. Es decir, que nos encontramos con un plataformas de avance lateral donde tendremos que saltar de un lado a otro, acabando con enemigos que salen al paso y que van desde los m¨¢s ic¨®nicos personajes de Springfield (Barney, Moe, Willie) hasta otros gen¨¦ricos creados para la ocasi¨®n.

As¨ª, todo el t¨ªtulo consiste en lo que hemos visto mil y una veces, sin aportar nada nuevo a una mec¨¢nica que se ci?e r¨ªgidamente a 'si algo funciona, ?para qu¨¦ cambiarlo?'. Visitaremos localizaciones como un museo de arte natural, un bosque, una f¨¢brica, la central nuclear o la mism¨ªsima ciudad en un entorno libre. B¨¢sicamente el desarrollo es el de siempre: pasarse el nivel uno para ir al segundo, etc¨¦tera.

En este sentido estamos ante un plataformas sin ning¨²n elemento que asombre. Por suerte, la diversi¨®n se dispara cuando hacemos caso al argumento del juego: la familia Simpsons tiene poderes que puede usar para avanzar en las fases, y las explotaremos continuamente para ello.

Bart por ejemplo puede convertirse en Bartman, lo que le permite, adem¨¢s de planear, poner su capa a modo de globo e impulsarse mediante chimeneas o conductos de ventilaci¨®n. Homer es capaz de convertirse en una bola a costa de calor¨ªas, para lo cual encontramos un gr¨¢fico en la zona inferior de la pantalla. Lisa, por su parte, es capaz de utilizar su 'zen' para levitar mientras que, con su poder, mueve objetos de un lado a otro.

Los niveles est¨¢n provistos de elementos interactivos que requerir¨¢n del uso de varios personajes para avanzar. Por ejemplo, a una zona alta s¨®lo podr¨¢ acceder Bart planeando, y s¨®lo Homer podr¨¢ destrozar obst¨¢culos de gran tama?o hecho una bola. Marge y Maggie podr¨¢n entrar en zonas peque?as, mientras que Lisa abrir¨¢ el camino con su previamente comentado poder.

Las fases son, as¨ª, bastante divertidas por el hecho de tener que usarlo todo a nuestro alcance para no fallar. Esto se ve arropado por una curva de dificultad muy buena, que hacen el t¨ªtulo accesible para todo el mundo. La diversi¨®n est¨¢ garantizada tanto a nivel de gui¨®n -brillante, en la l¨ªnea de los mejores cap¨ªtulos de la serie-, como por los numerosos gui?os y referencias a otros juegos/pel¨ªculas. Sin ir m¨¢s lejos, uno de ellos es un esqueleto de Yoshi -con la lengua roja incluida- que puede encontrarse en el museo.

El modo historia es, de todas formas, bastante corto, pudiendo pasarse en dos-tres tardes sin mayor problema. El hecho de incluir numerosos checkpoints en cada fase hace que superarlo sea bastante m¨¢s sencillo, y lo mismo puede decirse del hecho de que disponga de vidas infinitas. Pese a todo, los minijuegos que pueden disfrutarse mediante varias DS con un solo cartucho animan un poco la funci¨®n.

Apartados t¨¦cnicos
Gr¨¢ficamente estamos ante un juego realmente cuidado, haciendo uso de unas Cel Shading bastante notables. Son totalmente diferentes a las que nos mostr¨® Zelda Phantom Hourglass hace unas semanas, apostando ¨¦stas por acercarse al m¨¢ximo al dibujo original, pero en cualquier caso luce realmente bien.

Los escenarios son sencillos, pero cuentan con algunos detalles dignos de remarcar -de nuevo, los gui?os-, y los efectos? de luz tampoco le andan a la zaga. Ciertamente a nivel general es un t¨ªtulo cuidado, mas de lo habitual en productos de licencia, siendo bastante s¨®lido en conjunto. Se le une adem¨¢s un apartado sonoro brillante, con voces -las mismas de la serie- y FX simples, pero dignos.