Bajando el list¨®n

Electronic Arts se adentra en el hogar de la familia m¨¢s famosa de los ¨²ltimos a?os. Los Simpson se estrenaron en la televisi¨®n norteamericana a finales de los 80, y su ¨¦xito se ha mantenido, si no aumentado, hasta llegar a nuestros d¨ªas, en los que han llegado a estrenar hasta su propia pel¨ªcula. Y desde luego, parece que su final est¨¢ lejos de ser factible, al menos mientras el fil¨®n siga siendo fruct¨ªfero.

Lejos de analizar lo que es la serie y centr¨¢ndonos en nuestro campo, el de los videojuegos, la familia Simpson ha contado con muchas y muy numerosas adaptaciones jugables a lo largo de los a?os. Estas han sido de todo tipo y para casi todas las plataformas, pero el resultado casi siempre ha sido el mismo: una sonora decepci¨®n poco divertida o carente de personalidad.

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A¨²n cuando hasta ahora est¨¢bamos acostumbrados a que los juegos multiplataforma de nueva generaci¨®n fuesen adaptaciones de la versi¨®n de PlayStation 2, en este caso se ha dado la tendencia inversa que, a buen seguro, empezar¨¢ a ser cada vez m¨¢s habitual. El problema radica en que un buen t¨ªtulo para las nuevas m¨¢quinas se queda demasiado corto en sus recortes para PS2.

El juego empieza con un sue?o de Homer que hace las veces de tutorial, aunque posteriormente empezar¨¢ de verdad la aventura. Bart se compra el Grand Theft Rasca, pero su protectora madre se lo quita de las manos, reci¨¦n salido de la tienda de videojuegos. En su enfado, vaga por los callejones cuando de repente cae del cielo un manual de instrucciones de? el juego de los Simpson.

Gracias a dicho libreto, Bart, y posteriormente todos los miembros de la familia, sabr¨¢n qu¨¦ habilidades especiales tienen y las empezar¨¢n a poner en pr¨¢ctica para objetivos diversos: sea ganar un concurso de tragones, detener un robo a un museo, acabar con una invasi¨®n alien¨ªgena o salvar a sus antepasados de 8 bits, por poner s¨®lo algunos ejemplos.

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Springfield ha desaparecido totalmente. A¨²n cuando su presencia no era m¨¢s que anecd¨®tica, permitiendo pasearlo libremente y disfrutar de las numerosas pistas de di¨¢logo con chistes, gracias y gui?os varios, recogiendo distintos objetos, le a?ad¨ªa gracia, inter¨¦s y longevidad al t¨ªtulo, que en esta versi¨®n no pasa de ser una simple sucesi¨®n de niveles.

Si tenemos en cuenta que dichos niveles no resultaban del todo divertidos, el hecho de que el juego se centre ¨²nica y exclusivamente en ellos nos deja algo fr¨ªos. Adem¨¢s hay que tener en cuenta que se han eliminado movimientos y objetos especiales de los personajes, por lo que el juego se limita todav¨ªa m¨¢s a unos pocos ataques y cae con mayor facilidad en la repetici¨®n y el aburrimiento.

Todo el juego se ha adaptado a la desaparici¨®n de elementos, como los puzzles relacionados con Robo Bart ya en el segundo nivel del juego, de un modo sencillo que pierde mucho encanto. Gran parte del cual tambi¨¦n se pierde por la menor cantidad de pistas de voz y, por tanto, de gui?os humor¨ªsticos que alimentaban el t¨ªtulo. Aunque eso s¨ª, las secuencias de animaci¨®n se han mantenido.

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T¨¦cnicamente nos encontramos con un cel-shading bastante pobre, no tan definido como cabr¨ªa esperar dentro de las capacidades de PS2. En determinados momentos se nota la sensaci¨®n de recorte m¨¢s que de adaptaci¨®n y los escenarios vac¨ªos no convencen, as¨ª como esos elementos que se han recortado pero siguen estando presentes a¨²n cuando no hacen falta, resultando algo il¨®gicos.

Por lo dem¨¢s, se mantiene la misma jugabilidad mejorable, los mismos escenarios par¨®dicos de distintos cap¨ªtulos de la serie y de otros juegos, as¨ª como esas escenas que mencion¨¢bamos antes y que se convierten en el principal atractivo del juego. A¨²n cuando no pasa de ser un juego mediocre, seguramente los aficionados a la serie que no dispongan de una consola de nueva generaci¨®n sabr¨¢n disfrutar de ¨¦l.

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