Crash se estrena en Wii

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El marsupial recogemanzanas m¨¢s famoso de los videojuegos vuelve a la escena multiplataforma con un t¨ªtulo cargado de acci¨®n y brincos. Crash tambi¨¦n ha saltado sobre Wii aunque no con demasiada destreza. Los a?os empiezan a not¨¢rsele y sus apariciones, aunque siempre divertidas, no alcanzan las valoraciones a las que este bandicoot aspiraba en otros tiempos.

Varios a?os han pasado ya desde que la franquicia Crash Bandicoot pasara a manos de Vivendi y sus subfiliales. Naughty Dog abandonaba as¨ª al que fue considerado por muchos como la mascota de la primera PlayStation. Los entramados de las plataformas m¨¢s arcade pasaron a estar mezclados con constantes dosis de acci¨®n, un cambio que por algunos fue muy valorado pero que no gust¨® nada a otros. Crash: Lucha de Titanes es un nuevo ejemplo de este h¨ªbrido acci¨®n-plataformas. La versi¨®n de Wii aprovecha considerablemente las capacidades de su mando aunque presenta una jugabilidad general muy cl¨¢sica, con poca innovaci¨®n.

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Nina Cortex y sus planes

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Bajo la est¨¦tica caracter¨ªstica de la saga, se nos plantea la nueva historia que encierra este juego. Para empezar, ya en las primeras secuencias de v¨ªdeo, se observa que las m¨¢scaras fraternas Aku-Aku y Uka-Uka han cambiado levemente su apariencia, cosa que no han hecho el carism¨¢tico doctor Neo Cortex, su fiel secuaz Tiny Tiger, o Coco Bandicoot, la hermana de Crash. La historia funciona como siempre: Cortex crea un problema y Crash debe resolverlo.

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Pero por sorpresa aparece Nina Cortex, una allegada del doctor que no tarda en sustituirlo. Sus m¨¦todos son tan malignos como los de su antecesor y ahora ella pretende terminar de una vez por todas con Crash. Para ello, Nina comienza por mandar enemigos al protagonista, convierte animalillos de la selva en enormes titanes preparados para las batallas m¨¢s bruscas.

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La pericia de Crash consistir¨¢ en llegar hasta la c¨²pula de los malos recorriendo diversos y vistosos escenarios infestados de ¨¦stas y otras criaturas, subi¨¦ndose a sus lomos para controlarlas y derribar cualquier obst¨¢culo que se interponga en su camino. La variedad y duraci¨®n del juego no son precisamente rese?ables caracter¨ªsticas de este Lucha de Titanes pero, sin duda, s¨ª que es un t¨ªtulo bastante divertido y ameno.

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Esta versi¨®n para Wii, como otras, se divide en episodios, que en realidad son las distintas fases de la aventura. Todas presentan una estructura y posibilidades de juego similares. Predominan los momentos de acci¨®n a los de plataformas, lo que lo hace severamente repetitivo, pues los combos y las posibilidades de lucha no son todo lo profundos que deber¨ªan.

La selva, sus terrenos accidentados y sus criaturas

En los niveles, adem¨¢s de saltos por columnas, piedras, troncos y dem¨¢s terrenos de extrema irregularidad, encontraremos monstruos de muchos tipos y diferenciadas habilidades. Hay criaturas que atacan con disparos, otras que optan por el combate cuerpo a cuerpo? Cuando Crash monte en una o en otra, las habilidades de ¨¦sta pasar¨¢n a ser las nuestras, pudiendo ejecutar los ataques que nos toc¨® sufrir momentos antes. Est¨¢ muy conseguida la sensaci¨®n de controlar totalmente a cada monstruo, con sus animaciones de movimiento, su gran peso, su movilidad poco ¨¢gil, etc.

En determinadas situaciones el ritmo de juego se detiene y se forma una batalla multitudinaria, t¨ªpica de juegos de acci¨®n pura, de la que no podremos salir hasta que derribemos a un n¨²mero exigido de criaturas. Crash pasar¨¢ de los lomos de una a los de otra con facilidad, bastar¨¢ con pulsar la cruceta. As¨ª, repartir¨¢ las habilidades de los diferentes monstruos para acabar con todo lo que se mueva en pantalla y salvar su barra de vida, la que rellenar¨¢ con las pocas manzanas que encontrar¨¢ en los escenarios.

Manejar a Crash y a los titanes no es tarea dif¨ªcil, y m¨¢s si tenemos en cuenta que todo se hace con 5 botones escasos. El Wiimote y el Nunchuk servir¨¢n de controladores una vez m¨¢s en este tipo de juegos. Con A saltamos, con B y Z pegamos, con C sacamos la m¨¢scara Aku-Aku y con la cruceta interactuamos con algunos objetos, personajes y los titanes. As¨ª de sencillo es el manejo b¨¢sico del marsupial en Wii.

En los momentos de plataformas podemos incluir los descensos sobre la m¨¢scara Aku-Aku. Ciertas localizaciones contienen toboganes y ra¨ªles por donde deslizarnos como si de una bajada en monopat¨ªn o tabla de snowboard se tratara. No son tramos dif¨ªciles, ni que supongan demasiado reto, al igual que ocurre con el resto del juego, que resultar¨¢ f¨¢cil y sencillo para los jugadores m¨¢s experimentados en el g¨¦nero.

La implementaci¨®n del sensor de movimiento y el puntero la encontramos en muchos momentos a lo largo de la aventura. Por ejemplo, con los titanes que disparan podremos apuntar directamente a la pantalla y dirigir los proyectiles que ¨¦stos emiten. En cambio, los titanes m¨¢s forzudos realizar¨¢n distintos ataques demoledores si levantamos el Wiimote y el Nunchuk, si los movemos en una determinada direcci¨®n o si los agitamos con fuerza. Son usos espor¨¢dicos y no muy justificados, pero dan cierta frescura y diversi¨®n al t¨ªtulo.

Al acabar cada nivel se har¨¢ una estad¨ªstica del Mojo (sustancia m¨¢gica central del argumento del juego) recolectado, enemigos derrotados, artilugios Wumpa destruidos, etc. Con estas cifras se nos permitir¨¢ desbloquear extras como cambios de apariencia para Crash, galer¨ªas de arte o descripciones de enemigos. Conseguirlo todo aumentar¨¢ la corta durabilidad b¨¢sica del t¨ªtulo, pues no hay m¨¢s modos de juego a parte del Historia. Por otro lado est¨¢n las mejoras de Crash, que se suceder¨¢n poco a poco en la aventura para ir consiguiendo nuevos combos, o aumentos de la barra de vida o el tiempo de giro de nuestro protagonista.

Color y detalle

Gr¨¢ficamente, Crash: Lucha de Titanes para Wii es un juego vistoso pero no deslumbrante. Sus entornos est¨¢n muy detallados y sorprende ver tanto colorido y dise?o art¨ªstico a lo largo de los niveles. No es un t¨ªtulo que explote las capacidades de Wii, pero s¨ª nos har¨¢ disfrutar y deleitarnos con cada nuevo paraje. Soporta sin ralentizaciones un buen n¨²mero de personajes y enemigos en pantalla, tanto los protagonistas como los enemigos est¨¢n bien dise?ados y animados. Tiene, en definitiva, muy buena apariencia gr¨¢fica.

Su sonido es tambi¨¦n muy notable. Para empezar, no podemos dejar de valorar su completo doblaje al castellano, cargado de humor y divertidas expresiones coloquiales. Sus efectos de sonido son bastante variados, al igual que ocurre con las m¨²sicas, representativas de la saga Crash y bien diferenciadas unas de otras. Cada enemigo tiene su plantel de gemidos y hasta algunas frases habladas.

En lo que respecta al sistema de c¨¢maras, en ning¨²n momento podremos moverlas. ?ste s¨ª es un punto negativo de Crash: Lucha de Titanes, las fases son lineales, rectas, y sin posibilidades de exploraci¨®n, pues las c¨¢maras no la permiten. En ciertos momentos esta estabilidad de la c¨¢mara provoca dificultades jugables, haciendo m¨¢s complejo un determinado salto o no dejando ver a alg¨²n enemigo que nos ataca.

Conclusiones

A Crash no le termina de encajar el g¨¦nero en el que ha sido encorsetado. Quiz¨¢ los incansables saltos de sus primeras aventuras le funcionaban mejor. Un juego con tanta acci¨®n debe estar respaldado por una cuantiosa variedad de situaciones, muchas habilidades, combos y movimientos, aspectos que Crash: Lucha de Titanes no muestra en ning¨²n momento. La adaptaci¨®n a los mandos de Wii funciona bien, pero suena demasiado a excusa para trasladarlo a la exitosa consola.

Sin embargo, no podemos dejar de decir que es un juego muy divertido, r¨¢pido, ameno y vistoso gr¨¢ficamente. Crash y los que le rodean siguen teniendo su carisma a pesar de los a?os. Estas nuevas aventuras han perdido trascendencia pero s¨ª han ganado algo de originalidad al permit¨ªrsenos controlar a todos los grandes enemigos del juego. En definitiva, una leve brisa de aire fresco para esta mezcla de g¨¦neros que lleva alg¨²n tiempo flojeando en calidad.

Lo mejor:

Lo peor: