La invasi¨®n ha llegado

Los guardianes terrestres.

Finalmente, D3 Publisher ha conseguido lanzar su t¨ªtulo en mercados externos al Japon¨¦s, algo por lo que no se apostaba en un principio. Tras nuestras primeras  impresiones en el pasado Tokyo Game Show, nos sorprendi¨® el estilo y las buenas maneras de las que hacia gala el juego. Sin que todas las premisas que se establecieron para su desarrollo se hayan cumplido al cien por cien, estamos frente a un juego que destila diversi¨®n por los cuatro costados. Y es que, ?qu¨¦ mejor forma de pasar el rato que eliminando unos cuantos cientos de hormigas alien¨ªgenas?

La ambientaci¨®n recoge elementos de pel¨ªculas como Independence Day o La Guerra de los Mundos, fusion¨¢ndolos con una est¨¦tica t¨ªpicamente Japonesa y que recuerda a la serie Ultraman. Nuestro personaje, que ser¨¢ un soldado an¨®nimo m¨¢s, ir¨¢ embutido en un mono blanco y rojo que recuerda seriamente a los vistos en la afamada serie nipona. Junto a un grupo de otros compa?eros, entraremos en cada misi¨®n con una combinaci¨®n de armas elegidas de entre un amplio repertorio de m¨¢s de 150 modelos, sobre las que hablaremos posteriormente con m¨¢s detalle. Las posibilidades multijugador dotan al t¨ªtulo de una dimensi¨®n cooperativa , aunque lamentablemente no exista capacidad para disfrutar de esta opci¨®n mediante Xbox Live!

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Gr¨¢ficos

Toda esta buena impresi¨®n inicial choca de frente, e incluso se desvanece parcialmente, cuando topamos con decisiones inexplicables y que resultan bizarras. El que suscribe ha llegado al punto de no saber si re¨ªrse o llorar al encontrar sprites 2D representando los ¨ªtems diseminados por el campo de batalla. Es casi c¨®mico estar combatiendo a cientos de adversarios, en un entorno totalmente tridimensional y encontrar este tipo de soluciones. Asimismo, la elecci¨®n de ciertos modelos de enemigo no resulta muy acertada, como las hormigas gigantes que m¨¢s parecen juguetes de pl¨¢stico. A esto ayuda el hecho de que al ser eliminadas su comportamiento f¨ªsico cambiar¨¢, pasando a quedare r¨ªgidas cual monolito, para poco despu¨¦s desvanecerse sin rastro alguno.

El repertorio sonoro, sin adolecer los fallos del visual, resulta simplemente correcto. El trabajo se centra sobre todo en los di¨¢logos de los dem¨¢s componentes de nuestro equipo, adem¨¢s de en las indicaciones de la voz en off. Con todo, las melod¨ªas utilizadas acompa?an bien a la acci¨®n, d¨¢ndole tintes ¨¦picos por momentos. La lista de melod¨ªas, pese a no ser extensa, contiene pistas de duraci¨®n elevada, por lo que consiguen acompa?ar bien durante el desarrollo de las misiones sin hacerse repetitivas.

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La IA, aunque no brilla por su calidad, si que nos pondr¨¢ las cosas dif¨ªciles en los niveles de dificultad m¨¢s elevados. La mayor cadencia de fuego de los enemigos unido a su enorme volumen nos har¨¢n sudar la gota gorda si queremos completar los desaf¨ªos y llevarnos las armas que vayan apareciendo. Para completar la tarea, ir¨¢n apareciendo fases en las que deberemos hacer frente a los cl¨¢sicos monstruos de final de fase, bajo el aspecto de aberraciones de tama?o inconmensurable. Gran colof¨®n para cada bloque de misiones, tras lo cual normalmente cambiar¨¢ el tipo de parajes que visitaremos, as¨ª como se ampliar¨¢ el cat¨¢logo de enemigos con los que enfrentarse.