El retorno del Pr¨ªncipe

Esta semana, el Live Arcade de Xbox 360 recibe un cl¨¢sico de los videojuegos que marc¨® una ¨¦poca, un t¨ªtulo obligado para todo aquel aficionado a los videojuegos que se preciase. Cabe destacar que, a diferencia de otros t¨ªtulos, Prince of Persia regresa de la mejor forma posible: una puesta al d¨ªa acorde con la m¨¢quina de Microsoft y que justifica de forma holgada su compra.

Ubisoft y Gameloft lo han vuelto a conseguir. Una compa?¨ªa cuyo principal mercado es el de los juegos para m¨®vil que encuentra en el Live Arcade su plataforma ideal para ofrecer un t¨ªtulo sencillo cuyo inter¨¦s radica en su gran capacidad de diversi¨®n y su amplia rejugabilidad que incita al usuario a repetir una y otra vez los complejos niveles hasta llegar a superarlos.

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Hablamos de un t¨ªtulo que, pese a sus aspecto visual completamente adaptado a los gr¨¢ficos HD, tiene la friolera de dieciocho a?os. En aquella ¨¦poca de finales de los a?os ochenta, los videojuegos no destacaban por su complejo entramado argumental ni por sus numerosas opciones de control, sino que se tend¨ªa a obras sencillas pero muy jugables, que llegasen de forma directa al usuario.

Pero pese a ello, Prince of Persia consigue ofrecer una puesta en escena muy elaborada y atractiva que sigue funcionando tan bien ahora como en el t¨ªtulo original. Ambientado claramente en el mundo persa, claramente influenciado por Las mil y una noches, el juego nos pone, en su primera entrega, en la piel del Pr¨ªncipe, un hu¨¦rfano al estilo de Aladdin.

La gran innovaci¨®n que supuso Prince of Persia, que se mantiene inalterada en esta reconversi¨®n para Xbox Live Arcade, es que esa hora transcurre en tiempo real, y es el tiempo m¨¢ximo que se ofrece al jugador para conseguir cumplir este objetivo. Puede parecer a priori escaso tiempo, pero hablamos de uno de los juegos m¨¢s dif¨ªciles de la historia, que nos obliga a volver a empezar desde el primer nivel mejorando tiempos.

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La idea es la de ensayo y error, pero con una importante diferencia: cuando fracasamos y reiniciamos desde un punto de control, por ejemplo, el tiempo sigue corriendo inexorablemente. Por tanto, ese l¨ªmite temporal supondr¨¢ un reto importante para todo usuario que se atreva a demostrar sus habilidades, incluso a pesar de que se han a?adido esos puntos de control que no aparec¨ªan en el original y simplifican un poco la aventura.

Toda la puesta en escena es la cl¨¢sica, ya que hablamos de un remake muy fiel al original que reproduce cada pantalla y cada trampa que se encontraba en aquel. Eso s¨ª, se le han realizado algunos peque?os a?adidos en forma de m¨¢s enemigos, que suponen un mayor n¨²mero de enfrentamientos con espada, as¨ª como algunos movimientos para el pr¨ªncipe heredados de sus recientes aventuras tridimensionales.

Subir por las paredes y saltar hacia atr¨¢s son algunos de los m¨¢s destacados, a los que se le une la m¨¢s interesante ralentizaci¨®n al bloquear un ataque enemigo para poder contraatacar. Por lo dem¨¢s, se mantienen los pinchos, las cuchillas, los saltos imposibles, as¨ª como las puertas que se abren y cierran a traici¨®n y que exigir¨¢n que el usuario se d¨¦ prisa para llegar a los sitios.

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De este modo, el protagonista goza del dise?o de Las Arenas del Tiempo, mientras los escenarios, al ser m¨¢s gen¨¦ricos y adaptados del cl¨¢sico, introducen algunos elementos de dicho juego, pero se limitan m¨¢s a hacer gala de gr¨¢ficos de nueva generaci¨®n en alta definici¨®n. Agua que corre, una mariposa que deja su estela a su paso, enemigos variados y con distintos trajes, losas que se caen o trabajadas escenas cinem¨¢ticas ; todo con animaciones excelentes y perfectamente orquestrado.

En el apartado sonoro no se puede decir mucho, ya que es el m¨¢s simple de todos los apartados del juego, con unas pocas melod¨ªas de corte cl¨¢sico que ofrecen esa ambientaci¨®n ar¨¢biga tan atractiva. Pero lo mejor de todo es la soberbia jugabilidad, sencilla, directa, que permite realizar todo lo que se quiera sin mayores dificultades ni imprecisiones.

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Eso s¨ª, el propio usuario tiene que ser muy consciente de lo que hace y aprender, mediante muchas e inevitables muertes, a calcular las medidas de los saltos, los tiempos de las trampas o incluso las distancias con los bordes para poder saltar hacia arriba y abajo. Y es que el menor error de c¨¢lculo puede suponer una muerte r¨¢pida para el Pr¨ªncipe.

El sistema de combate consta s¨®lo de dos botones, defensa y ataque, pero que con las distintas direcciones del control anal¨®gico permite realizar diversos movimientos diferentes. Eso s¨ª, al igual que en el original, el sistema es algo complicado de llegar a dominar y, hasta que se consigue ese punto de habilidad necesario, los enfrentamientos contra los enemigos pueden ser m¨¢s duros de lo que cabr¨ªa esperar.

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Pese a ser, en teor¨ªa, s¨®lo una hora de juego real, lo cierto es que el juego dura mucho m¨¢s gracias a la dificultad del mismo, aunque esta no llega a ser desesperante e incita a volver a intentarlo de una forma muy natural. Adem¨¢s, una vez superado, se podr¨¢n repetir los niveles por separado para mejorar nuestros tiempos, con la posibilidad de cargar nuestro 'fantasma', as¨ª como competir por el primer puesto en los r¨¢nkings online y desbloquear logros de cierta complejidad.

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