Siempre impresionante

A estas alturas, seguramente muchos de los que est¨¢n ahora leyendo esto ahora ya conocen perfectamente Oblivion y saben de que se trata de uno de los grandes de esta j¨®ven generaci¨®n tecnol¨®gica. Hace poco m¨¢s de un a?o, su lanzamiento en 360 y PC cosech¨® algunas de las mejores cr¨ªticas especializadas, encumbrando la obra de Bethesda como un imprescindible dentro del g¨¦nero y del cat¨¢logo general de cada sistema. Un a?o despu¨¦s, Bethesda se asoma por primera vez a una plataforma Playstation con una conversi¨®n bajo el brazo de su gran ¨¦xito, dispuesta a conquistar al incipiente p¨²blico de la plataforma de Sony.

Para aquellos que ya hayan le¨ªdo anteriores an¨¢lisis del juego, no hay demasiado que a?adir. The Elder Scrolls IV: Oblivion en PS3 es una conversi¨®n del mismo t¨ªtulo aparecido en los formatos mencionados, m¨¢s la ampliaci¨®n "Caballeros de los Nueve", que viene incorporada por defecto. Por capricho del destino, t¨², un pobre diablo encerrado en una celda, es testigo del asesinato del emperador Uriel Septim VII y depositario del objeto m¨¢s poderoso del imperio: el Amuleto de los Reyes.

S¨®lo un descendiente imperial puede realmente usar el amuleto, que sirve para mantener selladas las puertas a Oblivion, un plano m¨¢s all¨¢ de los reinos mortales, donde la raza conocida como los Daedra tiene su "hogar". Considerados como dioses (o demonios), los Daedra est¨¢n regidos por diferentes pr¨ªncipes, cada uno amo y se?or de su propio reino dimensional. De entre ellos, Mehrunes Dagon, Pr¨ªncipe Daedra de la Destrucci¨®n, tiene un especial inter¨¦s en el reino mortal. Sin la protecci¨®n del Amuleto de los Reyes, Dagon es libre de mandar sus huestes al plano mortal y sembrar el caos. La misi¨®n principal del juego es encontrar a un heredero hasta ahora desconocido de Uriel Septim, la ¨²nica persona capaz de usar el Amuleto de los Reyes y mantener el Imperio a salvo. Pero la principal caracter¨ªstica de este t¨ªtulo reside en la gran libertad que se ofrece para que cada uno haga lo que le plazca.

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La historia principal siempre est¨¢ ah¨ª, pero en Tamriel, la regi¨®n donde se encuentra la capital del Imperio, hay centenares de misiones secundarias esperando a que alg¨²n h¨¦roe le preste atenci¨®n. No s¨®lo es un juego que ofrezca libertad para ir y venir, sino que la entramada telara?a de misiones, la existencia de clanes espec¨ªficos en los que puedes entrar y subir rangos y la variedad que presentan los diferentes eventos, forman una convincente ilusi¨®n de un mundo que vive y respira, mucho m¨¢s que en otros t¨ªtulos que han acu?ado esa definici¨®n como GTA.

Gr¨¢ficos y Audio

Ha pasado un buen tiempo desde que apareciera la versi¨®n de PC y 360, por lo que resultaba especialmente interesante c¨®mo hab¨ªa evolucionado el bello mundo de Elder Scrolls 4 en este periodo. El resultado es muy satisfactorio y se nota que el estudio no ha perdido el tiempo. Lo m¨¢s notable es una reducci¨®n considerable de los tiempos de carga con respecto a 360 -aunque no han desaparecido-, a lo que sigue detalles como un nuevo sistema de iluminaci¨®n -tambi¨¦n disponible mediante parche en la versi¨®n 360-, una mayor distancia de visionado y una mejora en los detalles que se pueden ver desde lejos, pero todo en peque?a medida, por lo que las diferencias no resultan demasiado obvias en ning¨²n caso . La comparaci¨®n con la versi¨®n de PC es m¨¢s complicada, ya que los usuarios de compatible cuentan con decenas de parches que mejoran ampliamente el aspecto visual del t¨ªtulo.

Olvid¨¢ndose de las consideraciones sobre qu¨¦ plataforma maneja mejor el juego, el ¨²nico hecho que realmente es importante es que Oblivion es uno de los t¨ªtulos gr¨¢ficamente m¨¢s impresionantes del cat¨¢logo de PS3. Una vez que superes la primera mazmorra-tutorial y contemples por primera vez el espacio que te rodea, posiblemente impresione. Pero es al dar los primeros pasos en libertad, ver c¨®mo el cielo empieza a cubrirse poco a poco de nubes y observar como una tormenta azota la vegetaci¨®n, dejando r¨¢fagas de agua a tu paso... es en ese momento cuando muchos no podr¨¢n reprimir cierto sentimiento de emoci¨®n genuina, algo que se acerca incluso a las sensaciones que puede dejar el mundo real -obviamente no con la misma intensidad, pero ya se empieza a ver como los videojuegos consiguen calar m¨¢s y m¨¢s en nuestros sentidos-.

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T¨¦cnicamente hay poco que discutir a Oblivion en alguna de sus versiones, incluyendo la de PS3. Con sus 720p como m¨¢xima resoluci¨®n y sus detalles depurados, es una aut¨¦ntica delicia que merece ser contemplada con admiraci¨®n y detenimiento. Aquellos jugadores que se sienten c¨®modamente en su sof¨¢ con todo el tiempo del mundo tendr¨¢n el privilegio de descubrir el detalle de los peque?os rincones, el excelente acabado de los n¨²cleos urbanos y el placer de ver el atardecer y la noche de Tamriel. Para aquellos que quieran seguir un buen consejo, es mejor olvidarse de la opci¨®n de "viaje autom¨¢tico" y moverse por el vasto terreno a pie o a caballo; a algunos les parecer¨¢ una p¨¦rdida de tiempo, pero seguro que m¨¢s de un jugador disfrutar¨¢ el doble.

Y no es que Oblivion est¨¦ exento de fallos visuales, que los tiene. En particular destaca la aparente incapacidad de Bethesda para crear personajes con un m¨ªnimo sentido de la belleza. La mayor¨ªa de los NPCs que encontrar¨¢s, especialmente en el caso de las mujeres, tienen unos rasgos tan extra?os como repelentes. Tampoco aspectos como la animaci¨®n est¨¢n todo lo trabajados que podr¨ªan estar y en ocasiones se produce cierta sensaci¨®n de desconexi¨®n entre el suelo y los personajes. Pero m¨¢s que defectos en s¨ª, el aspecto gr¨¢fico de este t¨ªtulo es tan espectacular en general que dichos aspectos quedan como detalles a mejorar en un futuro.

En cuanto a la m¨²sica, se trata de una soberbia composici¨®n de Jeremy Soule (otra m¨¢s) que combina sabiamente los momentos ¨¦picos con aquellos m¨¢s calmados, haciendo gala de una excelente transici¨®n entre piezas seg¨²n diversos momentos del juego. La ¨²nica pega es que trat¨¢ndose de un juego tan largo, se echan en falta m¨¢s piezas que a?adan m¨¢s variedad a la rotaci¨®n. Pero la calidad de las composiciones y los ricos efectos sonoros consiguen que la experiencia no desluzca.

Jugabilidad

La idea de Elder Scrolls gira entorno a la libertad total del jugador, que empieza desde el mismo comienzo. Con un potente editor, con el que se puede controlar infinidad de aspectos faciales, es posible crear una gran variedad de avatares masculinos y femeninos, lo que unido a las 10 razas disponibles, conforman un gran abanico de posibilidades. Tambi¨¦n existe esa libertad en la elecci¨®n de tus habilidades y en c¨®mo desarrollarlas; nada de t¨®picos tipo 'si eres un hechicero no puedes llevar armadura pesada' que parecen que han sido grabadas en piedra desde los tiempos del primer D&D. En Oblivion podr¨¢s ser un poderoso hechicero y adem¨¢s llevar armadura pesada y una imponente arma a dos manos, si trabajas en tus habilidades.

En el comienzo es posible especializarte en una serie de campos para empezar a definir a tu protagonista. Pero cualquier campo es proclive de ser desarrollado con pr¨¢ctica, ya que para subir las habilidades no requieres de puntos de apariencia, sino de pr¨¢ctica. Correr y saltar subir¨¢n tu atletismo, nadar subir¨¢ tu nataci¨®n, caminar sigilosamente aumenta tu capacidad de sigilo, el uso de hechizos de una escuela de magia mejora el nivel para esa escuela? Tambi¨¦n hay niveles y puntos de experiencia, pero quedan reservados para los rasgos generales como Fuerza o Inteligencia. El resultado final es un h¨¦roe que realmente puedes sentir como tuyo, ya que se desarrolla seg¨²n la clase de acciones que quieras desarrollar con ¨¦l.

Y eso lleva a una l¨®gica conclusi¨®n: libertad de acci¨®n. No hay una forma prefijada, inamovible de manejar a tu personaje en combate -ciertamente, una de las actividades principales- Unos preferir¨¢n acercarse sigilosamente y usar un pu?al para descargar letales golpes, otros preferir¨¢n el arco y la flecha, mientras que no faltar¨¢n los que se decidan por el cl¨¢sico enfoque directo? pero, ?qu¨¦ tal un mago que ataque desde el sigilo? ?o un guerrero que use la magia para potenciar sus habilidades? Gracias a la gran variedad de objetos m¨¢gicos, armaduras, armas y hechizos, la evoluci¨®n del personaje se siente como satisfactoria y ser¨¢ uno de los principales argumentos para mantenerte pegado a la pantalla.

Hay m¨¢s detalles que hablan del grado de libertad que se respira en el juego. Por ejemplo, uno de los grandes 'entretenimientos' que ofrece Tamriel son sus clanes, organizaciones m¨¢s o menos secretas en las que puedes entrar bajo ciertas condiciones. Algunos clanes son muy accesibles como el de los Guerreros, pero hay otros m¨¢s elusivos, como el de los Ladrones o Asesinos. Una vez que entres en un clan, te espera una larga aventura si quieres llegar a los niveles m¨¢s altos de la organizaci¨®n, con decenas de misiones, incluyendo algunas de las mejores planteadas y m¨¢s originales. Adem¨¢s, hay que pensar en decenas de misiones secundarias repartidas por todo el mundo, las mazmorras, las puertas hac¨ªa el plano de Dagon que van apareciendo espor¨¢dicamente? horas y horas de contenido.

Hay aspectos discutibles del dise?o de Oblivion. Seguramente uno de los m¨¢s importantes reside en la forma en la que los enemigos y los objetos que puedas encontrar se ajustan a tu propio nivel, por lo que los combates nunca resultan sencillos. Mientras en el nivel uno encontrar¨¢s bandidos desarrapados que apenas aguantar¨¢n tus embestidas, en el nivel 20 aparecer¨¢n aut¨¦nticos mercenarios equipados con armadura pesada y armas de calidad. El lado bueno es que nunca el personaje estar¨¢ demasiado evolucionado -un problema en Morrowind, en el que unos pasos concretos conduc¨ªan a tener en poco tiempo a poco menos que un dios col¨¦rico capaz de reducir una ciudad entera a cenizas- En el lado negativo, quita algo de misterio y de sentido de peligro el saber que no importa cu¨¢n rec¨®ndito sea el lugar en el que te encuentres, que no aparecer¨¢ ning¨²n drag¨®n rojo capaz de reducirte a fosfatina con un bufido.

Pero ese, al igual que otros detalles como la inclusi¨®n de una 'br¨²jula m¨¢gica' que indica la localizaci¨®n de los objetivos en las misiones, o la posibilidad de teletransportarte  a cualquier punto del mapa que ya se haya visitado, son aspectos ya discutidos hasta la saciedad y sobre los que todav¨ªa hay pol¨¦mica -atenuada en parte gracias al uso de mods por parte de la comunidad alrededor de la versi¨®n para compatibles- Son decisiones de dise?o que no hacen a Oblivion un peor o mejor juego, s¨®lo diferente, y seguramente m¨¢s adecuado de cara a personas que consideren t¨ªtulos similares como demasiado intimidantes por su complejidad y por lo f¨¢cil que resulta perderse sin tener experiencia previa en el g¨¦nero o carecer de la meticulosidad con la que los aficionados de toda la vida siempre se han aproximado a cada t¨ªtulo.

Oblivion es accesible, pero no por ello tonto o simple. Hace un gran trabajo abriendo algunas de las oscuras mec¨¢nicas del g¨¦nero a un p¨²blico novel e inexperto, pero con ganas de aprender. Sus cualidades como juego, su rica mec¨¢nica, variedad y calidad de contenido, lo convierten en uno de los ya grande en esta generaci¨®n por derecho propio, y eso se mantiene as¨ª en esta versi¨®n para la consola de Sony.

Ahora bien, hay un aspecto negativo importante. A lo largo de todo el a?o desde su lanzamiento original, Bethesda ha lanzado nuevos contenidos, desde cosas simples como armaduras para tu caballo, a cosas m¨¢s complejas como expansiones. En el proceso han aparecido mazmorras, nuevas misiones, estructuras especiales que puedes habitar como una torre de hechicero. Ha sido un contenido de pago, e incluso los usuarios de PC han tenido que pasar por ah¨ª, no con poca pol¨¦mica por cierto.

Nada de este contenido aparece aqu¨ª, a excepci¨®n de la primera expansi¨®n: Caballeros de los Nueve, que si bien es bienvenida, no es ni comparable con la segunda expansi¨®n, el excelente Shivering Isles. No hay ninguna explicaci¨®n racional que justifique la no presencia de todo ese contenido en la versi¨®n de PS3, mucho menos sabiendo de la capacidad de los discos Blu-Ray. Desde el estudio se ha asegurar que se est¨¢ trabajando en a?adir ese nuevo contenido a trav¨¦s del servicio online -y seguramente no de forma gratuita- Es una pena que no se aprovechara el momento para lanzar una versi¨®n completa con todo el contenido oficial, estando disponible como est¨¢ en otras plataformas.

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