La elegancia del billar ingl¨¦s en el sal¨®n de tu casa

A pesar de que el Snooker no es un juego excesivamente popular en nuestro pa¨ªs, las compa?¨ªas siguen haciendo esfuerzos para acercarnos todos los entresijos de esta modalidad de billar. Esta entrega correspondiente a 2007 es divertida, y un buen reflejo del juego original; aunque carga con el pesado lastre de ser un t¨ªtulo de primera hornada.

El Snooker es un juego de billar, en el que se colocan sobre la mesa 21 bolas: una blanca, que como es f¨¢cil deducir, es la ¨²nica que se golpea con el taco; 15 bolas rojas que vale 1 punto, y 6 bolas de colores cuyos puntos var¨ªan, siendo la negra la m¨¢s valiosa, con 7 puntos.

El objetivo es introducir primero una bola roja, cualquiera, y posteriormente una de color, tambi¨¦n cualquiera, teniendo en cuenta, que cuanto m¨¢s valga la bola, m¨¢s puntos llevaremos. Al final de juego, cuando ya no quedan bolas, gana el jugador que m¨¢s puntos ha reunido. Hay muchas reglas, pero este no es el lugar para extenderse con los detalles.

Ampliar

Como veremos a continuaci¨®n, t¨¦cnicamente estamos ante un juego de la pasada generaci¨®n, con elementos m¨¢s propios de PS2 que de la m¨¢quina en que corre. Tan s¨®lo algunos ligeros detalles, como la alta definici¨®n, lo salvan de la quema. A¨²n por encima, este es un juego destinado particularmente al mercado brit¨¢nico, y por ello el ¨²nico idioma que incluye es el ingl¨¦s. Pr¨¢cticamente todo es hablado, incluido el tutorial, y adem¨¢s no hay subt¨ªtulos en ning¨²n idioma; por lo que se requiere un alto nivel de ingl¨¦s para sacarle partido al juego. Especialmente quien no sepa jugar, y tenga intenci¨®n de aprender.

A pesar de todo lo anterior, es un buen juego de Snooker, y quien ya sepa jugar probablemente pasa por alto cualquier mal detalle, ya que si por una cosa destaca este WSC 2007 es por representar fielmente uno de los juegos de billar m¨¢s populares que existen.

Finalmente, el modo carrera, y el editor de personajes nos permitir¨¢n sacarle mucho partido, paseando a nuestro jugador por todos los torneos importantes de la temporada, subiendo posiciones en el ranking mundial, copado por nombres de jugadores reales, y ganando dinero en funci¨®n de nuestra posici¨®n en los diferentes torneos. Y si nos cansamos del modo carrera, siempre podemos intentar echar alguna partida online, siempre que consigamos encontrar a alguien para jugar.

Ampliar

Para empezar, lo primero que destaca negativamente es la paleta de colores, que da a todo el juego un aire excesivamente irreal. Las bolas y el tapete de la mesa lucen de forma correcta en las repeticiones, y cuando la c¨¢mara se acerca a ellos en general, pero vistos de lejos pierden mucho, pues parece como si los bordes fueran l¨ªneas negras, dando un efecto estilo Cell Shading que no pega nada con un t¨ªtulo que intenta ser realista.

Los jugadores no salen mejor parados. Texturas horrorosas tanto para el traje, el pelo, o las facciones de la cara. Por lo menos se pueden reconocer a los jugadores famosos, pero parecen ser mu?ecos de pl¨¢stico de sus hom¨®nimos reales, m¨¢s que parecer reales ellos mismos. Y para colmo, ni siquiera se mueven con animaciones fluidas, sino que sus movimientos son totalmente rob¨®ticos y artificiales.

Por encima, la resoluci¨®n m¨¢xima es 720p (no llega a 1080 ni siquiera de forma entrelazada), lo que da a entender el nulo esfuerzo que han hecho sus programadores, en todo el apartado visual. Quiz¨¢s se podr¨ªa pensar que un juego de billar no requiere de grandes gr¨¢ficos, pero eso no evita pensar que estamos ante un juego que roza los 70 Euros, y que se mueve en una m¨¢quina que roza los 600? en estas circunstancias se puede pedir m¨¢s, y se debe pedir m¨¢s.

En cuanto a efectos, est¨¢n los justos, que no son muchos, pero al menos est¨¢n bien representados. El golpe de los tacos, el chasquido de las bolas cuando se golpean entre s¨ª? todo correcto. Pero el gran punto a favor del audio en este juego son los comentarios; perfectos, doblados por locutores profesionales, acertados en tiempo y ejecuci¨®n, y sonando cada uno en cada momento ideal.

S¨®lo se les puede achacar dos cosas: Est¨¢n en ingl¨¦s (y con acento) y al cabo de pocas partidas se nota que se empiezan a repetir. A veces es curioso como cuando nos pasamos mucho tiempo pensado como golpear, el comentarista empieza a amenizar la velada hablando de los inicios del Snooker, o cualquier cosa sin importancia.

Ampliar

Para quien haya le¨ªdo hasta aqu¨ª, y no lo sepa, conviene aclarar que el truco cuando se juega al Snooker, no s¨®lo es meter la bola correspondiente, sino colocar la blanca de forma que el pr¨®ximo golpe sea lo m¨¢s f¨¢cil posible. Por ellos, los jugadores siempre tienen que tener en mente el siguiente, o los dos siguientes golpes.

Aqu¨ª sucede lo mismo. Para embocar la bola correspondiente, tenemos una flecha que nos indica en que direcci¨®n va a salir despedida, con lo que es relativamente f¨¢cil dirigirla hacia la tronera a la que queremos que vaya. Y para saber donde va a terminar la bola blanca despu¨¦s de golpear la bola que debemos embocar, veremos una sombra dibujada sobre la mesa. En funci¨®n de lo dif¨ªcil que sea el golpe, la sombra ser¨¢ m¨¢s o menos amplia, con lo que el jugador debe sopesar y valorar las opciones en cada golpe.

Ampliar

Para ajustar el golpe, podemos cambiar la direcci¨®n de la bola, el punto de la bola en que vamos a golpear (para dar diferentes efectos), la fuerza con que golpearemos, y la inclinaci¨®n de taco a la hora de golpear. Cuando todo est¨¦ ajustado, s¨®lo faltar¨¢ ver el resultado final, y ver si es como predecimos en un principio, ya que hay factores que no podremos ver en un principio, como por ejemplo si hay alguna bola obstaculizando el paso que nosotros hemos previsto.

En general, con unos pocos botones cualquier puede convertirse en cape¨®n, aunque eso no quiere decir que estemos ante un juego f¨¢cil. Los rivales, incluso los m¨¢s d¨¦biles, nos dar¨¢n estopa de la buena si les damos la oportunidad. Y es que no s¨®lo hay que intentar ir metiendo las bolas, sino que hay protegerse las espaldas por si fallamos el tiro? un buen rival aprovechar¨¢ nuestro fallo para embocar todas las bolas de la mesa sin darnos opci¨®n de jugar m¨¢s en toda la partida.

Para terminar, el juego tambi¨¦n incorpora la posibilidad de jugar a mesas cl¨¢sicas de 8 y 9 bolas, siendo esta ¨²ltima la m¨¢s caracter¨ªstica en nuestro pa¨ªs, y la que se suele encontrar en casi todos los bares y salones recreativos.

Ampliar

Ampliar

Ampliar