Hellgate: London

Hay g¨¦neros cuyo planteamiento parece tan simple que choca ver el ¨¦xito que cosechan entre el p¨²blico. Sin embargo, la mayor¨ªa de los grandes ¨¦xitos del mundo del videojuego han basado su triunfo precisamente en la sencillez de su planteamiento.

Ese es el origen de Diablo, el alumno aventajado del viejo Gauntlet, un juego que consist¨ªa en llegar a una zona, exterminar todo bicho viviente, ganar experiencia y subir nuestras habilidades para as¨ª poder exterminar a bichos de mayor nivel: los mata-mata (hack and slash) al poder.

Con la garant¨ªa de que detr¨¢s de Hellgate: London est¨¢n los mismos desarrolladores originales de Diablo, pronto nos llegar¨¢ esta versi¨®n revisada de los llamados juegos de acci¨®n y rol. En este caso, Flagship Studios ha querido dotar a su futuro t¨ªtulo de una historia contundente que implique al jugador un poco m¨¢s all¨¢ de lo que la mayor¨ªa de imitadores de Diablo ofrecen en el mercado, para que nos sintamos que el hecho de escoger una clase u otra afecte decididamente a c¨®mo afrontaremos los encuentros en el futuro.

En el a?o 2038, los humanos se han vuelto demasiado dependientes de su propia tecnolog¨ªa; los demonios estuvieron ah¨ª siempre aguardando, esperando el momento propicio para atacar. Y cuando finalmente lo hicieron, poca resistencia encontraron. Sin una cabeza visible de la serpiente, sin ning¨²n cuartel general que atacar, los humanos sucumbieron indefensos ante la ofensiva demon¨ªaca. S¨®lo unos pocos que se hab¨ªan refugiado en las tradiciones arcaicas sobreviv¨ªan utilizando la magia y las armas que ellos mismos hab¨ªan forjado.

Como todo buen mata-mata, Hellgate: London ofrecer¨¢ varias clases a los jugadores para que as¨ª se enfrenten a las huestes del infierno. Hasta el momento se han revelado dos de ellas: los Templar, caballeros que se llevan preparando para este momento desde los a?os oscuros, y los Cabalist, capaces de manipular la energ¨ªa arcana en su favor y usarla de las maneras m¨¢s variopintas contra los propios demonios.

Cada clase podr¨¢ avanzar en su propio ¨¢rbol de habilidades, que en principio ser¨¢n tres (como ya ocurr¨ªa en Diablo) y permitir¨¢n especializar a nuestro luchador en distintas artes. Por ejemplo, en el caso del Templar (que ser¨ªa el equivalente al palad¨ªn de toda la vida) existen los caminos del asalto para aumentar el da?o, las habilidades que aumentan su potencial durante un corto espacio de tiempo o las t¨¦cnicas pasivas que estando siempre activas proporcionan ciertas ventajas tanto al portador como a sus compa?eros.

Los Cabalist ser¨ªan los nigromantes del mundo moderno, vistos como una mezcla de los aparecidos en Diablo junto con los de Champions of Norrath. Tendr¨¢n la capacidad de invocar esbirros infernales y enviarlos contra los de su propia especie, apostar por el camino de la evocaci¨®n, desviando ingentes cantidades de energ¨ªa surgida de la nada y causando terribles cantidades de da?o al enemigo; el camino m¨¢s peligroso para el cabalist, sin embargo, consiste en transformar su forma para irla convirtiendo poco a poco en demonio, mutando partes de su cuerpo en las del enemigo y utilizando sus habilidades.

Mientras que hay cosas que parecen bastante comunes a las de la mayor¨ªa de Action-RPGs, como el hecho de que los personajes creados por los jugadores van a  tener puntos de ataque y defensa, salud, magia, punter¨ªa, etc. hay otras que sin embargo destacan sobre el resto. Por ejemplo, la interfaz; mientras que estamos acostumbrados a la cl¨¢sica isom¨¦trica en tercera persona, que puede funcionar de maravilla como en Titan Quest, en Hellgate London se utiliza la perspectiva como si fuera un FPS.

Eso significa que el juego se maneja con los cl¨¢sicos WASD en la mano izquerda, que sin duda son las teclas m¨¢s gastadas del teclado de un jugador, y en la mano derecha utilizaremos las habilidades que tengamos seleccionadas en los botones del rat¨®n. Dicha perspectiva podr¨¢ cambiarse en cualquier momento a tercera persona cuando llevemos armamento de cuerpo a cuerpo, que tambi¨¦n lo habr¨¢ y mucho, para facilitar la visi¨®n y evitar que maree demasiado.

Como es habitual en ese tipo de t¨ªtulos, habr¨¢ toneladas de armas para usar contra nuestros enemigos y se presume que algunas de ellas muy particulares y especiales. En cualquier caso podremos escoger armas pesadas de asalto, pistolas, rifles de plasma, espadas de todos los tipos y colores, rifles, arpones, bates, etc. Cada arma tendr¨¢ un determinado efecto sobre el enemigo (unas har¨¢n la mayor parte de da?o f¨ªsico, otras causar¨¢n da?o elemental, etc.) y se podr¨¢n combinar entre ellas o incluso llevar una en cada mano, dependiendo del tipo de clase que hayamos escogido.

Ya que existen armas para todos los gustos, ¨¦stas suelen usar tipos de munici¨®n especiales que pueden encontrarse repartidas por el mapa. Desde cargadores de balas est¨¢ndar m¨¢s precisas o con efectos de perforaci¨®n a cohetes especiales para los lanzaproyectiles m¨¢s brutales, pasando por cargas de energ¨ªa sobredimensionadas, tanques de combustible especiales y m¨¢s potentes o incluso reliquias que en las manos adecuadas pueden aumentar el da?o causado a las criaturas que proceden del fondo del Averno.

Los enemigos a encontrarnos tambi¨¦n ser¨¢n numerosos y variados, pasando por decenas de tipos distintos agrupados en demonios mayores y menores; Flagship Studios est¨¢ haciendo un esfuerzo para evitar la excesiva reiteraci¨®n o reciclaje de monstruos, que suele ser una de las lacras de estos juegos, as¨ª que esperamos (y a trav¨¦s de los screenshots parece que puede confirmarse) que el producto final cuente con un elenco importante e imaginativo en cuanto a lo que adversarios se refiere.

Las localizaciones es tambi¨¦n algo en lo que se est¨¢ poniendo mucho ¨ªmpetu por parte de los desarrolladores. Tanto a la hora de presentar una Londres post-apocal¨ªptica, donde los demonios ejercen su total control sobre todo el que se atreva a poner pie en ella, pasando por la legendaria red de metro de la capital brit¨¢nica o la ciudad oculta subterr¨¢nea (al estilo de la Undercity de World of Warcraft) lo cierto es que todas lucen de forma espectacular. Veremos hasta qu¨¦ punto conseguir¨¢n integrar la acci¨®n en los distintos ambientes, pero por los videos que ya circulan por internet el resultado puede ser interesante.

En definitiva, Hellgate: London pinta muy bien. No solamente llega con la etiqueta de venir programado por los ex-Diablo sino que toda la informaci¨®n que nos llega es altamente positiva. Tras un per¨ªodo aciago para los amantes del A-RPG (hasta tal vez la llegada de Titan Quest) y en el que todos los fans esperan como agua de mayo el anuncio de Diablo 3 por parte de Blizzard, tal vez y ojal¨¢ Flagship Studios sea capaz con este Hellgate de hacernos olvidar cualquier otra cosa y sumergirnos de lleno en este Londres que a pesar de su aspecto apocal¨ªptico tan bien nos pinta.