Hearts of Iron 2: Doomsday (HoI2:DD para los amigos) es un t¨ªtulo un tanto peculiar, empezando por su mera concepci¨®n. Sus programadores, la compa?¨ªa sueca de Paradox, siempre ha tenido por costumbre el realizar juegos de cero y, en caso de necesitar retoques, mejoras o ampliaciones (de m¨¢s a menos frecuente), realizarlos a trav¨¦s de un constante bombardeo de parches y actualizaciones para sus distintos t¨ªtulos, rehuyendo de un elemento bastante t¨ªpico en el mundo del PC, que son las expansiones de pago.
Pero esto, parece ser, se ha terminado, y si bien los parches de correcci¨®n de errores se mantienen ah¨ª, desde Paradox han apostado por una nueva pol¨ªtica de lanzar expansiones de pago que a?adan cambios de cierta magnitud para varios de sus juegos. Empezando por este Doomsday, al que le ha seguido otro para Victoria, Revolutions, si bien el caso de Doomsday es m¨¢s peculiar, dado que se ha puesto a la venta con la intenci¨®n de sustituir completamente al Hearts of Iron 2 original, al no ser necesario disponer de ¨¦l ya que se incluye dentro del mismo paquete, manteni¨¦ndose a¨²n as¨ª un precio de venta menor.
De este modo, se podr¨ªa calificar a HoI2:DD tanto como una expansi¨®n como una reedici¨®n del juego a precio reducido, una especie de remake con varios a?adidos de cierta importancia y mejoras en un buen n¨²mero de elementos del juego, y si bien algunos aspectos pecan de cierta falta de refinamiento y la habitual precipitaci¨®n de Paradox, el resultado global y la experiencia resultante es sin lugar a dudas superior al Hearts of Iron 2 base.
El Oso contra el ?guila y el Le¨®n
Pese a todos los cambios que aporta Doomsday respecto al original, la base del juego se mantiene intacta en todo su esplendor, y si bien comentaremos con detalle las variaciones que se han introducido, vamos a pasar de puntillas por los aspectos generales que se mantienen intactos, que se detallan de forma excelente en el an¨¢lisis del Hearts of Iron 2 , dado que no har¨ªa m¨¢s que repetir, con otro estilo, los comentarios del compa?ero Daniel Herrero.
A¨²n as¨ª, y para qui¨¦n le d¨¦ cierta pereza leer el an¨¢lisis anterior, diremos que Hearts of Iron 2 es un excelente juego de los llamados de Estrategia Total en el que nos haremos con el control de cualquier pa¨ªs del mundo en distintos escenarios y campa?as dentro de un periodo de tiempo concreto y muy turbulento (de 1936 al 1948), que abarca aspectos de los m¨¢s variados, desde el m¨¢s puro y estricto elemento militar a nivel de divisi¨®n, escuadr¨®n y barcos individuales, hasta las relaciones pol¨ªticas, diplom¨¢ticas y comerciales con nuestros amigos y enemigos, pasando por el control absoluto de la econom¨ªa y producci¨®n del pa¨ªs.
Todo ello con gran fidelidad hist¨®rica y en un sistema de tiempo real que permite modificar a voluntad la velocidad a la que avanza el juego, o, directamente, pausar cuando lo necesitemos, resultando en un sistema muy din¨¢mico, especialmente en las apasionantes partidas multijugador.
Doomsday mantiene estas premisas casi intactas, si bien introduce un cambio bien interesante en el concepto global, a?adiendo una nueva campa?a principal con un interesante planteamiento: ?Y si las pol¨¦micas entre la URSS y Occidente tras ganar la Segunda Guerra Mundial hubieran terminado estallando en conflicto abierto? Un conflicto con un uso m¨¢s o menos habitual de armamento nuclear, que enfrentar¨ªa a medio mundo contra la otra mitad, y sin duda dejar¨ªa buena parte del mismo arrasado, ganase quien ganase. El d¨ªa del juicio final, Doomsday.
Un escenario imaginario, pero que acaba resultando un punto de inicio para una campa?a realmente divertida y estresante, y sobre todo, distinta a las partidas que planteaba el Hearts of Iron 2 original. Y si bien en su antecesor las partidas ten¨ªan la posibilidad de llegar a un nivel de conflicto parecido al que plantea Doomsday, era algo no demasiado habitual, sobre todo por el tiempo que se tardaba en hacerlo, y generalmente al llegar a ese punto no sol¨ªa durar mucho m¨¢s, dado que habitualmente el jugador humano ser¨ªa el dominador en la mayor¨ªa de aspectos militares de forma decisiva. Por otro lado, la aparici¨®n de este escenario provoca un prolongamiento del periodo de juego, alarg¨¢ndose hasta 1954, tanto en esta campa?a como en las anteriormente existentes.
Inteligencia, artificial y humana
Campa?a aparte, la otra gran novedad que incorpora Doomsday es el intento de trasladar de forma jugable uno de los elementos clave tanto en la Segunda Guerra Mundial como en la Guerra Fr¨ªa que la sigui¨®... la Inteligencia y el uso y abuso de esp¨ªas y acciones encubiertas. Para ello, se ha habilitado una nueva ventana en la interfaz del juego en el que hallaremos todas las opciones que tenemos a nuestra disposici¨®n que ata?en a este aspecto.
As¨ª pues, a priori tendremos un buen n¨²mero de elementos para intentar conseguir ventajas durante la partida y perjudicar a nuestros rivales, desde? el intentar provocar revueltas en territorios concretos a robar planos de nuevas tecnolog¨ªas, pasando por eliminar ministros, sabotear su industria, laboratorios de investigaci¨®n o armamento nuclear, as¨ª como intentar realizar un golpe de estado, o simplemente, hacer una campa?a de difamaci¨®n para afectar la imagen del pa¨ªs en cuesti¨®n, pudiendo acarrear consecuencias en sus acuerdos comerciales o diplom¨¢ticos. Pero eso s¨ª, cuidado si te pillan con las manos en la masa, que las relaciones se ver¨¢n afectadas irremediablemente y podr¨ªan tener consecuencias bastante graves.
Adem¨¢s, la introducci¨®n de los esp¨ªas ha significado la erradicaci¨®n de las tablas de comparativas de unidades entre pa¨ªses, apareciendo ahora en ellas ¨²nicamente los pa¨ªses con los que eres aliado, siendo los tama?os y formaci¨®n de los ej¨¦rcitos de naciones hostiles o neutrales todo un misterio, salvo que mandes los correspondientes esp¨ªas a hacer su trabajo. Y a¨²n en ese caso, las cifras que se te facilitan son aproximadas y nunca del todo explicativas, con lo que debes tomarte las cifras mostradas como una gu¨ªa m¨¢s que una verdad. Si bien, cuantos m¨¢s esp¨ªas logres colar en una naci¨®n, m¨¢s cercana a la realidad ser¨¢ la informaci¨®n indicada, adem¨¢s de tener acceso a sus posibles investigaciones o el conocer hacia donde se orienta actualmente su producci¨®n (aunque de nuevo, no tiene que ser veraz).
A¨²n as¨ª, el sistema tiene un gran 'pero'. Pese que en las partidas de un jugador es un elemento interesante y curioso, sobre todo en esas ¨¦pocas de paz en las que te da algo por hacer aparte de controlar las investigaciones y producci¨®n, no est¨¢ excesivamente depurado, y en concreto la IA es incapaz de responder de forma coherente a las acciones que podamos realizar, resultando en que b¨¢sicamente hacemos lo que queramos a quien queramos.
Algo que, en principio, tendr¨ªa que cambiar en las partidas multijugador, pero al final acaba resultando que entre pa¨ªses humanos es imposible realizar nada ante la facilidad con que se monta la infraestructura de contraespionaje, y aparte de proteger tu pa¨ªs de ojos humanos, acabas haciendo lo mismo que en las campa?as de un solo jugador: abusar de la IA y su ineficacia para protegerse, con lo que queda un tanto en segundo plano, algo que los altos costes de las misiones (entre mandar los esp¨ªas necesarios y la misi¨®n en s¨ª) contribuye, siendo pocos los pa¨ªses que puedan usar de forma habitual el sistema.
Por otro lado, hay otra Inteligencia que ha mejorado de forma notable respecto a Hearts of Iron 2, y es nada m¨¢s y nada menos que la Inteligencia Artificial, que si bien no es que fuera especialmente mala anteriormente, a la que le ten¨ªas cogidas sus rutinas y formas de hacer habituales dejaba de ser un desaf¨ªo y se convert¨ªa en un 'sparring' para el verdadero reto del HoI2: el multijugador.
En Doomsday eso ha cambiado, y aunque sigue siendo netamente inferior a un jugador experimentado, el salto de calidad que ha dado es notable, mejorando en todos los aspectos, desde la m¨¢s b¨¢sica producci¨®n y uso de los recursos de cada pa¨ªs a las netamente militares, repleg¨¢ndose ahora con cierta cabeza, realizando contraataques en las l¨ªneas m¨¢s d¨¦biles del frente, moviendo de forma no-suicida las flotas... demonios, si hasta es capaz de organizarte un desembarco a lo Overlord en condiciones, algo que anta?o era una utop¨ªa. Una sorprendente y excelente mejora, sin duda.
Otras variaciones
Otros cambios a destacar son el l¨®gico crecimiento del ¨¢rbol tecnol¨®gico para abarcar los nuevos a?os disponibles, introduciendo elementos como la creaci¨®n de pl¨¢sticos (con sus correspondientes beneficios industriales), la aparici¨®n de versiones m¨¢s modernas de las unidades ya existentes, o directamente nuevas tropas que por marco temporal se hab¨ªan quedado fuera del HoI2, como pueden ser los helic¨®pteros de ataque, misiles ICBM, aviones supers¨®nicos o los portaaviones de escolta, si bien estos ¨²ltimos est¨¢n disponibles de muy temprana fecha, pero no hab¨ªan sido tomados en cuenta en la versi¨®n original. Por contra, Doomsday tambi¨¦n ha significado la desaparici¨®n de alg¨²n que otro elemento, siendo el m¨¢s destacable la eliminaci¨®n de los cazas de escolta como unidad propia y su transformaci¨®n en brigada, la cual podremos a?adir a los distintos bombarderos de nivel y mejorar as¨ª su defensa y ataque a¨¦reos, aunque a costa de un menor alcance.
Por lo dem¨¢s, HoI2: Doomsday (y sus dos parches existentes, el ¨²ltimo de los cuales ya est¨¢ aplicado a la versi¨®n espa?ola) introduce varios cambios menores en el sistema de juego, algunos dif¨ªciles de apreciar pese a ser los m¨¢s numerosos, como pueden ser algunas variaciones de efectos de eventos, alineaciones pol¨ªticas o rendimiento en combate. Tambi¨¦n otros mucho m¨¢s llamativos, como la habilidad de los l¨ªderes militares de aprender nuevas habilidades a medida que vayan combatiendo, o los distintos gr¨¢ficos que nos indican la forma que nuestras tropas gastan los suministros, petr¨®leo y refuerzos, ayudando en su administraci¨®n. Y como no, algunos cambios m¨¢s curiosos que pr¨¢cticos, como los distintos registros de batallas de cada l¨ªder o los historiales de batallas terrestres y navales del pa¨ªs.
Por desgracia, y pese a las m¨²ltiples mejoras y retoques, alg¨²n que otro error se les ha escapado, y hay diversos bugs confirmados que es de esperar sean corregidos en un futuro pr¨®ximo. Algunos son poco importantes, pero otros pueden marcar una partida, como el que provoca la rendici¨®n prematura de Italia con tan s¨®lo invadir Sicilia. Esperemos que desde Parados hayan tomado nota de todos los avisos y quejas de su comunidad, y pongan remedio.
Como ¨²ltima novedad, a destacar el editor que han incluido, con el que podremos no s¨®lo modificar cualquier par¨¢metro de los distintos escenarios y campa?as que trae el juego, si no tambi¨¦n nos da la oportunidad de crear por nuestra cuenta escenarios o campa?as propios, en el contexto que queramos, hist¨®rico o no. Algo que sin duda agradecer¨¢n los aficionados a las modificaciones.
g r ¨¢ f i c o s ?y ?s o n i d o En aspectos t¨¦cnicos, Doomsday apenas tiene variaci¨®n respecto a HoI2, manteniendo la misma simpleza gr¨¢fica y sonora, si bien para algunos, entre los que me incluyo, esto es m¨¢s una virtud que un defecto. Y eso mismo han debido pensar los desarrolladores, dado que el ¨²nico cambio relativo a este tema es la incorporaci¨®n de varios sprites nuevos representando tropas, nav¨ªos y aviones, dando una mayor variedad y permitiendo una diferenciaci¨®n m¨¢s r¨¢pida y ¨²til para todos aquellos que no quieran jugar con las fichas t¨ªpicas de los wargames y pod¨ªan tener queja de la poca variedad de sprites para la tropa que hab¨ªa en anterioridad.
Todo lo dem¨¢s, tanto la interfaz como los distintos gr¨¢ficos que puedan aparecer, as¨ª como todos los efectos sonoros y los excelentes, pero cansinos, temas musicales, se mantienen exactamente igual a su predecesor para bien y para mal.
g u i ¨® n
Tras las rendiciones de Alemania y Jap¨®n, la Segunda Guerra Mundial ha terminado, pero las relaciones entre los grandes poderes restantes, la URSS y los Aliados, no son precisamente buenas. Entre amenazas y provocaciones, la situaci¨®n va empeorando, hasta que finalmente el 2 de Octubre del 45, el gobierno sovi¨¦tico ataca sin previo aviso a las fuerzas aliadas en Europa, Oriente Pr¨®ximo y Corea. Ante tal afrenta, Estados Unidos decide responder con un ataque nuclear a Mosc¨² y Kuybyshev, inici¨¢ndose as¨ª un conflicto de proporciones b¨ªblicas.
?ste es el punto de inicio de la nueva y principal campa?a de Doomsday. El decidir en qu¨¦ bando decides luchar e intentar moldear as¨ª la historia seg¨²n los designios de cada uno, ya es decisi¨®n tuya.
Y si este hipot¨¦tico escenario no te atrae, siempre quedar¨¢n las cinco campa?as cl¨¢sicas, cada una empezando por una fecha concreta (36, 38, 39, 41 y 44) o los 17 escenarios cortos, cada uno representando un campo de batalla o un conflicto en especial, desde la Guerra Civil Espa?ola hasta la Batalla de Midway.
c o n c l u s i ¨® n Hearts of Iron 2: Doomsday se revela como una mejora notable del HoI2, y un t¨ªtulo por s¨ª solo de una solidez y calidad incuestionables. Refiri¨¦ndonos a ¨¦l en su papel de expansi¨®n, cumple su papel a la perfecci¨®n, otorgando unos cambios interesantes al original y nuevos aspectos que ampl¨ªan y mejoran la jugabilidad, aunque algunos de ellos puedan necesitar alg¨²n retoque, como el tema de Inteligencia, siendo en mi opini¨®n un a?adido muy recomendable para qui¨¦n haya disfrutado de HoI2, sobre todo si juega en multijugador. Eso s¨ª, no ser¨¢n pocos los que plantear¨¢n la pregunta de si podr¨ªa haberse hecho todas estas mejoras en un simple parche para descargar y no tener que pagar de nuevo...
Y para los no familiarizados con Hearts of Iron, Doomsday es una oportunidad excelente de adentrarte en su mundo, tanto por calidad como, especialmente, su reducido precio y el incluir de serie el original al instalarlo. Una compra obligada para todo aficionado a la estrategia en todo su esplendor.
m a n u a l El?manual que acompa?a a Doomsday no puede calificarse de otra forma que maravilloso, como ya suced¨ªa con el de HoI2. 138 p¨¢ginas repletas de informaci¨®n y ayudas sobre todos los aspectos del juego, escrito por un jugador y miembro de la comunidad de la saga, haci¨¦ndolo de una forma mucho m¨¢s personal y directa de lo que es habitual, generalmente m¨¢s formales e impersonales. Una lectura obligada para todo jugador que se inicie en la saga con este t¨ªtulo, y recomendable para los ya veteranos, aunque sea ¨²nicamente las secciones sobre las novedades que hay.
El ¨²nico pero, la falta de ¨ªndice, un tanto extra?a.
l o? b u e n o -
La nueva campa?a... estresante y divertida a partes iguales. -La gran mejora de la Inteligencia Artificial. -Algunos aspectos de la Inteligencia como una parte activa, dando muchas opciones de juego. -El aumento del marco temporal, as¨ª como el a?adido de tecnolog¨ªas y unidades correspondientes. -Su precio, y que incluya el HoI2. -El editor de escenarios. -El manual, simplemente perfecto.
l o ?m a l o -Los errores y bugs presentes, algunos de ellos ya identificados en versiones anteriores. -Los aspectos restantes de la Inteligencia, faltos de un refinamiento y utilidad mayor. -Los problemas y continuos retrasos que ha habido con la versi¨®n espa?ola, cuando el resto del mundo ya lo disfrutaba varios meses antes.