primera entrega lleg¨® a Espa?a hace relativamente poco y la segunda, The Azoth of Destiny , parece que correr¨¢ su misma suerte en no demasiado tiempo.?Esta saga de RPGs, con una impresionante historia detr¨¢s (repartida en bastantes entregas en consolas como WonderSwan, PSOne o Saturn) ha conseguido hacerse un hueco en la lista de favoritos por una mezcla de clasicismo y?nuevas ideas bastante s¨®lida.
Con Grand Fantasm,?Gust?quiere darle un vuelco completo a la serie,?especialmente a nivel jugable, manteni¨¦ndose por base el motor gr¨¢fico 2D de las?entregas previas. El argumento nos?mostrar¨¢ a Edge Vanhite, un aventurero que forma parte de un grupo denominado Mystruse, un equipo que ha convertido la?exploraci¨®n de los mundos en un negocio. Viajando con su amiga Iris Fortner, Edge tendr¨¢ que ir aceptando misiones para su?grupo y super¨¢ndolas para ganar prestigio. Pero un d¨ªa le encomiendan la?labor de recuperar un set especial de libros m¨¢gicos, y?¨¦l e Iris se separan convirti¨¦ndose en rivales de ah¨ª en adelante.
Ir completando misiones a lo largo de los mundos disponibles (se habla de?cinco totales) ser¨¢ la base del juego. Una vez completadas, obtendremos puntos de quest , que m¨¢s adelante intercambiaremos por ¨ªtems o tesoros. Las misiones ser¨¢n variadas, habr¨¢ algunas simples que nos llevar¨¢n varios minutos, como aniquilar a un determinado n¨²mero de enemigos,? y otras m¨¢s complicadas como explorar mazmorras. Lo t¨ªpico del g¨¦nero.
Un cambio con respecto a entregas previas ser¨¢ la forma de acceder a los distintos mundos o pueblos, y es que se ha eliminado lo de tener que ir caminando por el mapamundi para a?adir un sistema de viajes directos al m¨¢s puro estilo Final Fantasy Tactics Advance, Vandal Hearts o Legend of Dragoon. Es decir, seleccionamos un destino entre una lista y accedemos directamente a ¨¦l.
El?sistema Blaze Master nos permitir¨¢ ir ali¨¢ndonos con los determinados Man¨¢s de cada mundo, aprendiendo sus t¨¦cnicas y utiliz¨¢ndolos para luchar como un Blaze Master, es decir, asociando sus elementos a nuestras armas. Cada maestro contar¨¢ con una apariencia diferente y facilitar¨¢ el uso de armas de varios tipos, las cuales evidentemente poseer¨¢n sus propias habilidades especiales. Las t¨¦cnicas las obtendremos del mismo modo de siempre en la franquicia, es decir, asign¨¢ndoles puntos de experiencia e increment¨¢ndolas poco a poco.
Las batallas han dejado de ser aleatorias. Ahora en los escenarios encontraremos a los monstruos desfilando por el mapa haciendo uso de un c¨®digo de color en base a su dificultad: Azul si son m¨¢s d¨¦biles que nosotros, Blancos si est¨¢n al mismo nivel, y Rojos si evidentemente son m¨¢s fuertes que nosotros. Los enemigos m¨¢s importantes y los jefes de final de fase no contar¨¢n con dichos indicadores. Podremos evadir los enemigos saltando por encima suya.
Y el sistema de batalla, pese a que b¨¢sicamente ser¨¢ como el de AI2, tendr¨¢ jugosas novedades a destacar. La introducci¨®n del Active Cost Card Battle es una de ellas: En la zona superior de la pantalla aparecer¨¢n unas cartas que delimitar¨¢n los movimientos que vamos a ejecutar, como en Kingdom Hearts: Chain of Memories. ?sto con Edge. Iris sin embargo podr¨¢ usar su alquimia para lanzar hechizos, crear objetos, nuevo equipamiento... una maga, vamos.
El sistema de cartas contar¨¢ tambi¨¦n con un modo Burst, una barra que al llegar al m¨¢ximo permite a nuestro personaje encolerizar y explotar en forma de turbo. Dentro de esta modalidad, nos volveremos enormemente poderosos y podemos ampliar nuestra potencia m¨¢s de cinco o seis veces. Los ataques ser¨¢n tambi¨¦n m¨¢s poderosos. Con ¨¦sto se perder¨¢, en base a impresiones, en dificultad. Especialmente en los jefes, que se tornar¨¢n especialmente sencillos.
Gr¨¢ficamente mantendr¨¢ el aspecto retro 2D de las tres entregas previas. Sprites grandes, detallados y majos, aunque ya se empieza a echar de menos un lavado de cara, y es que lo de reciclar enemigos, personajes y fondos ya empieza a ser un poco cansino. Los fondos de todas formas han sido filtrados, como en la serie Tales de Namco. Ahora son completamente est¨¢ticos y, cuando la c¨¢mara hace zoom, un escalado distorsiona a los personajes dejando el fondo intacto. Esto ocurrir¨¢ en batallas?y fuera de ellas, una pena.
Por el momento, Grand Fantasm se antoja bastante interesante. Alcanzar la calidad de la segunda parte va a ser complicado, pero buenas ideas las tiene: Batallas por cartas, m¨¢s dinamismo, dificultad m¨¢s ajustada... El desarrollo por misiones no acaba de sonar del todo atractivo -m¨¢s con antecedentes como Shining Tears-, y la eliminaci¨®n de la dualidad de personajes de AI2 tampoco parece un buen cambio. Con la versi¨®n americana en nuestras manos os ofrecemos unas completas impresiones donde, ya s¨ª, podremos profundizar en las virtudes de lo nuevo de Gust. Hasta entonces, a esperar.