Cuando este a?o abramos las puertas de Campus Party, entre los m¨¢s de 5.500 participantes que se dirijan a su puesto para instalar su equipo, habr¨¢ desde abuelos mayores de 70 a?os, hasta beb¨¦s de 20 d¨ªas que, en brazos de sus padres, tendr¨¢n su primera experiencia 'campusera'. El dato, en s¨ª, pudiera parecer nada m¨¢s que una curiosidad para el dominical de un peri¨®dico, pero para todos los que hacemos posible este evento significa mucho m¨¢s? Significa que estamos rompiendo barreras para convertirnos en un evento capaz de llegar a todo tipo de p¨²blico. Significa que nuestro objetivo de hacer de la tecnolog¨ªa una herramienta para mejorar la sociedad est¨¢ comenzando a hacerse realidad.
Campus Party ha evolucionado al ritmo de las nuevas tecnolog¨ªas. As¨ª, de aquellos tiempos de Mollina, en los que Internet era una palabra para iniciados, hemos pasado a las redes de alta velocidad en los hogares. Y de los dos centenares largos de pioneros, hemos llegado a los millares de participantes.
Ahora nuestra concentraci¨®n de 'jugones' es un encuentro de apasionados de las nuevas tecnolog¨ªas. Gente que utiliza el ordenador para crear pel¨ªculas, observar el espacio, programar robots o desarrollar aplicaciones. Y, por supuesto, tambi¨¦n gente que juega. J¨®venes, sobre todo, que han entendido que el videojuego es el entretenimiento del futuro. Todos hemos crecido jugando? ?por qu¨¦ no seguir haci¨¦ndolo entonces?, ?por qu¨¦ no continuar aprendiendo a trav¨¦s del juego? En Campus Party hemos entendido que los videojuegos son para todos y, por eso, inauguramos este a?o una zona de ocio que incluye un ¨¢rea musical y t¨ªtulos deportivos. Porque los videojuegos son mucho m¨¢s que la acci¨®n y la lucha.??
Hemos crecido y hemos cambiado. Y estamos orgullosos de ello. Orgullosos de compartir con otros lo que hemos aprendido y de ser referentes. Que sea por muchos a?os?