Gottlieb Pinball Classics
- PlataformaPSP7
- G¨¦neroAcci¨®n
- DesarrolladorFarSight Studios
- Lanzamiento17/02/2006
- TextoEspa?ol
- VocesIngl¨¦s
- EditorCrave Entertainment
Seis d¨¦cadas de pinballs en la palma de tu mano
FarSight Studios debuta en el g¨¦nero de los pinballs en la port¨¢til de Sony con una recopilaci¨®n de las mejores m¨¢quinas de la marca Gottlieb. Once mesas llenas de flippers, rampas, luces y la posibilidad de hasta cuatro jugadores con un solo UMD. Prepara la bola y ?l¨¢nzala!
A pesar del considerable descenso de los salones recreativos en nuestra sociedad y, por consiguiente, de la presencia de las conocidas m¨¢quinas de pinballs, este tipo de entretenimiento posee un buen n¨²mero de seguidores fieles frente otras tendencias. Desgraciadamente la situaci¨®n no es muy propicia: hace veinte a?os la relaci¨®n entre ¨¦stas y las m¨¢quinas de azar estaba al 50%, hoy en d¨ªa ya es raro encontrarse una de ellas en un bar y han sido casi suprimidas de las zonas de ocio.
No obstante, este tipo de entretenimiento creado por primera vez hace m¨¢s de setenta a?os sigue siendo una perfecta fuente de inspiraci¨®n para las compa?¨ªas de videojuegos, tanto para crear nuevas ideas y combinarlas con otras existentes (como es el caso de Odama, en GameCube), adaptar una conocida franquicia (Sonic, Mario, Pok¨¦mon?) o recopilar pinballs existentes y/o de marcas conocidas, tal y como ocurre en esta ocasi¨®n con Gottlieb Pinballs Classics, el debut en nuestro continente de dicho g¨¦nero en la port¨¢til de Sony. Once m¨ªticos pinballs de uno de sus primeros creadores reunidos en un s¨®lo UMD.
Introducci¨®n
En esta ocasi¨®n FarSight Studios (con la supervisi¨®n de System 3), ha sido la encargada de adaptar las m¨¢quinas m¨¢s cl¨¢sicas de la marca Gottlieb desde los a?os 30 del pasado siglo hasta 1995, con algunas que se quedaron en meros prototipos. Realmente nos encontramos con una adaptaci¨®n del hom¨®nimo juego que sali¨® para PlayStation 2 y Xbox hace dos a?os en Estados Unidos (con el t¨ªtulo Hall of Fame: Gottlieb Classics Pinballs) pero con el doble de mesas y algunas nuevas opciones cuyo conjunto forman un t¨ªtulo mucho m¨¢s notable.
Existen en total tres modos de juego: Desaf¨ªo Gottlieb, Torneo y Layout, ¨¦ste ¨²ltimo muy parecido a la opci¨®n de Sala de Juego. ?sta y la anterior nos permiten probar cada una de las once m¨¢quinas disponibles siempre y cuando tengamos cr¨¦ditos para ello (aunque algunas son gratuitas). Dichos cr¨¦ditos los conseguimos en las otras modalidades y se pueden utilizar para comprar c¨®digos secretos, que nos desbloquean nuevas opciones de juego, como observar las zonas de entradas a mini-juegos, records, estrategias, etc.
Dentro del modo Desaf¨ªo, la principal modalidad para un s¨®lo jugador, disponemos de hasta tres oportunidades por mesa para conseguir un determinado n¨²mero de puntos, aumentando progresivamente la dificultad con cada una superada. Hay determinados momentos en los que es bastante complicado resolver el objetivo concreto de cada m¨¢quina pero para ello contamos con inestimables ayudas durante el men¨² de la misma, como ver la Meta, las cinco puntuaciones m¨¢ximas, varias instrucciones interactivas de cada zona y una completa historia junto al folleto de publicidad original. Algo que sin duda agradecer¨¢n los m¨¢s nost¨¢lgicos.
La principal apuesta del UMD es el modo multijugador para un m¨¢ximo de cuatro usuarios con s¨®lo una copia del juego, pudiendo 'enviar' la mesa a sus respectivas consolas y conservarla hasta que la apaguen (los pinballs Tee'd Off y Victory no se pueden pasar, al parecer por lo que ocupan).
Solo hay dos modos de juego: Torneo, en el que cada jugador va pasando por todas las mesas en orden y sumando puntos, y crear nueva partida, pudiendo determinar las m¨¢quinas, recorrido, tiempo, puntuaci¨®n u otras variables. Adem¨¢s tambi¨¦n podemos realizar torneos en la propia consola, con hasta un m¨¢ximo de cuatro jugadores, altern¨¢ndose el control de la misma entre los diferentes rivales.
Gottlieb Pinball Classics (PSP) |
Las mesas son realmente muy variadas, aunque algunas cuentan con un mejor dise?o. En orden cronol¨®gico son las siguientes: Play-Boy (1932), Ace High (1957), Central Park (1966), Big Shot (1974), Genie (1979), Black Hole (1981), Goin' Nuts (1983), El Dorado (1984), Victory (1987), Tee'd Off (1993) y Strikes and Spares (1995). El t¨ªtulo tambi¨¦n incluye dos sencillos entretenimientos habituales de los locales de estos arcades: el adivino Xolten, que nos descubre el signo del zodiaco y predice nuestro destino, y una m¨¢quina Love Meter, en la que tras introducir un cr¨¦dito nos revela como de bueno somos en el amor.
Gottlieb Pinball Classics (PSP) |
Entrando en detalles, cada mesa est¨¢ representada milim¨¦tricamente, destacando algunas por su originalidad o dise?o. Por ejemplo, una de las m¨¢s curiosas es Play-Boy, que no posee Flippers (los mandos que se pulsan con los botones laterales) ya que fue una de las primeras del g¨¦nero y la bola se maneja golpeando la tabla hasta insertar diez de ellas en unos agujeros que representan cartas, pudiendo realizar pareja, tr¨ªo, full, escalera de color u otras combinaciones de Blackjack y p¨®quer.
Otras mesas, en cambio, consisten en varios mini-p¨¬nballs (Black-Hole), mini-juegos de precisi¨®n (como es el caso de Genie -una de las mejores tablas- o Big Shot, cuya mec¨¢nica recuerda a una mesa de billar), planeamientos parecidos a los de una bolera (Strike and Spare) u otras en las que incluso lanzan tres bolas directamente (Goin' Nuts) con las que acumulamos tiempo y puntos hasta que s¨®lo quede una esfera, momento en el que empieza un cronometro y al terminar bloquea los flippers.
Una de las principales peculiaridades del juego es la opci¨®n de girar la consola para jugar verticalmente, manejando los flippers con tri¨¢ngulo y X en vez de con los botones superiores. No obstante, en ambas posiciones se utiliza el stick anal¨®gico para golpear la mesa en cualquier direcci¨®n y en la posici¨®n vertical es ligeramente inc¨®modo, si bien la perspectiva es mucho m¨¢s realista. En ambas opciones contamos hasta con seis c¨¢maras para observar la acci¨®n, algunas mejores para determinados pinballs y otras cuyo uso es m¨¢s que discutible.
Gr¨¢ficos
A pesar de la gran fidelidad respecto a los pinballs hom¨®nimos, el t¨ªtulo cuenta con algunos defectos en el apartado visual, destacando sobre todo el aspecto de 'pl¨¢stico artificial' de la gran mayor¨ªa de m¨¢quinas, junto a unos reflejos y juego de luces poco trabajados.
El ambiente de sala recreativa est¨¢ muy conseguido, de hecho el men¨² del juego es sencillamente una de ellas, con sus globos, mu?ecos y luces fosforescentes. Los dos mini-juegos cuentan con im¨¢genes foto-realistas de gran nivel aunque se sit¨²an en un segundo plano debido a su baja interactividad.
Las c¨¢maras, si bien son muy numerosas, ninguna ayuda realmente a observar perfectamente los diferentes elementos de la mesa, entre otras razones por las simples texturas utilizadas. La gran variedad entre las mesas es uno de los puntos a favor pero existen en ocasiones peque?as ralentizaciones de la acci¨®n, normalmente cuando hay varias bolas en juego. Los efectos gr¨¢ficos brillan por su ausencia aunque tampoco se echan en falta.
Sonido
En este aspecto FarSight Studios ha hecho un notable trabajo ya que nos encontramos con sonidos grabados de las m¨¢quinas reales, con diferentes melod¨ªas y perfectamente ambientadas, aunque quedan en un segundo plano con el juego en movimiento por los efectos de los elementos de la mesa.
Tambi¨¦n existe un sonido de sala recreativa de fondo, que ayuda bastante a aumentar el ambiente pero que se repite continuamente. Los men¨²s cuentan con unas pocas melod¨ªas de rock ligero con guitarras el¨¦ctricas: son un poco reiterativas y poco variadas. Por ¨²ltimo, cada mesa cuenta con voces en perfecto ingl¨¦s que nos narran el origen, consejos y secretos de cada una pero pueden ser un peque?o lastre para algunos jugadores debido al idioma.
Jugabilidad
Independientemente del modo elegido controlar las diferentes mesas es realmente sencillo contando con dos modos de visualizaci¨®n de la acci¨®n (horizontal y vertical) aunque en uno de ellos la accesibilidad al stick anal¨®gico afecta al control y comodidad del usuario. Las doce c¨¢maras disponibles son muy variadas aunque algunas de ellas no siguen la acci¨®n correctamente.
Los controles se limitan a los botones superiores para activar los flippers (o tri¨¢ngulo y X en posici¨®n vertical) y el stick para mover la mesa y retener el muelle lanzador. Los dem¨¢s botones los utilizamos para acceder a diferentes opciones dentro de la m¨¢quina o durante los men¨²s. Sencillo y directo aunque en ciertas ocasiones el dise?o de la port¨¢til de Sony incomoda tras algunas horas de juego.
El comportamiento de la bola es m¨¢s que correcto, pudiendo incluso variar su tama?o y peso de una m¨¢quina a otra y con ello su forma de actuar ante los golpes. El n¨²mero de flippers (excepto en el caso de Play-Boy) puede variar de dos a cuatro, lo que aumenta en ocasiones la dificultad del juego, aunque realmente no es muy alta.
A pesar del abultado n¨²mero de pinballs, los mini-juegos no son muy numerosos o variados, lo que limita en ocasiones la rejugabilidad del t¨ªtulo. En cambio la duraci¨®n es bastante alta, llegando a casi las 40 horas de juego en el modo Desaf¨ªo, si bien la suerte siempre juega un papel fundamental. A pesar de encontrarnos con los pinballs m¨¢s famosos se echan en falta algunos m¨ªticos de la compa?¨ªa, como Humpty Dumpty que en 1947 inaugur¨® los flippers.
Sin embargo la opci¨®n 'Game Sharing', con un solo UMD, es el principal aliciente del t¨ªtulo ya que siempre podremos compartir el juego con cualquier amigo y hasta el momento otros t¨ªtulos s¨®lo permit¨ªan jugar algunos niveles con diversas limitaciones.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podr¨ªan haberlo llevado a cotas m¨¢s altas. C¨®mpralo sin miedo.