Puro fuego

?D¨®nde estabas?
Parece que fue ayer cuando Super Nintendo vio nacer un t¨ªtulo que pas¨® sin pena ni gloria para el p¨²blico general, pero no para unos pocos visionarios que apreciaron en ¨¦l las mismas virtudes que el tiempo, por medio de cuatro entregas posteriores, se ha encargado de prolongar. Cinco historias distintas entre s¨ª, pero? todas protagonizadas por un joven poseedor de unos misteriosos poderes relacionados con ciertas bestias aladas?

La segunda entrega de aquel juego tambi¨¦n lleg¨® a salir en nuestro pa¨ªs, pero su repercusi¨®n, en tiempos en los que los RPGs de SNES a¨²n no ven¨ªan en cajas gigantes, fue meramente anecd¨®tica. Quiz¨¢s el hecho de que todav¨ªa estuviese sin traducir le jug¨® a la saga una mala pasada en sus despertares.

Pero algo hab¨ªa cambiado. Desde que los Breath of Fire pasaron por el lavado de cara generacional, sus entregas en Playstation, tanto en la gris como en la negra, no pasaron tan desapercibidas como sus hermanas menores. Fue el ¨¦xito de otra saga, Final Fantasy (a la que los BOF deben mucho de lo que son), el que propici¨® que la cuarta parte ganase en reconocimiento, pero? ?qu¨¦ pas¨® con la tercera?

Ahora, todos aquellos que se la perdieron en su d¨ªa (por un tard¨ªo descubrimiento de las aventuras de Ry?, por inapetencia arrepentida o por lo que sea) tienen la oportunidad de ponerle las manos encima a esta entrega. BOF III marc¨® un punto de inflexi¨®n debido al nuevo tratamiento de personajes y escenarios, los cuales pasaron a desenvolverse en un entorno casi tridimensional sin alterar su esencia: la de conductores de historias que absorb¨ªan y dejaban ensimismados a todos aquellos que sin reservas se sub¨ªan a la grupa del Drag¨®n.

La reedici¨®n de esta tercera parte no es m¨¢s que un port del original que apareci¨® en Playstation, una jugada comercial que se est¨¢ convirtiendo en costumbre para que las compa?¨ªas aseguren ventas por medio de grandes t¨ªtulos, ya consagrados antes de su estreno en la port¨¢til de Sony: muchos pueden achacar estas decisiones, pero gracias a ellas pronto podremos disfrutar tambi¨¦n de Tales of Eternia y, qui¨¦n sabe si alg¨²n d¨ªa, del Suikoden I y II, juegos que permitir¨¢n que el g¨¦nero en PSP pase a ser un cat¨¢logo de mitos vivientes salpicados de prometedoras propuestas como Blade Dancer. Pero vamos a adentrarnos ya en el t¨ªtulo que nos ocupa sin m¨¢s dilaci¨®n, que el encargado de caldear el ambiente y el maestro de ceremonias de todo cuanto ha de llegar aguarda impaciente.

El Fuego se reaviva
La leyenda cuenta que los miembros de un antiguo clan ten¨ªan el poder de transformarse en drag¨®n. Ry? es un chico que, sin saberlo, es heredero de esta habilidad y constituye el ¨²ltimo eslab¨®n de una cadena que se cre¨ªa rota desde tiempos inmemoriales. BOF III es la b¨²squeda de una identidad, de unos amigos perdidos y de un poder que permita erradicar el mal, un mal que se cierne cada vez m¨¢s sobre nuestro protagonista a medida que profundiza en su pasado?