Drakengard 2, Impresiones

La secuela del juego de acci¨®n de Square-Enix nos transportar¨¢ 18 a?os despu¨¦s de lo acontecido en el primer juego. El t¨ªtulo lleva disponible en Jap¨®n desde el mes de junio y en el segundo trimestre del 2006 llegar¨¢ a nuestro pa¨ªs. Descubrimos lo que encierra este juego y te damos nuestras impresiones a continuaci¨®n.

Observa Drakengard 2 en movimiento en este v¨ªdeo.

Tras hacernos con una versi¨®n japonesa del juego hemos podido probarlo intensivamente y constatar que, tal y como ya avanzamos, mantiene la l¨ªnea de su predecesor de forma muy fiel. De hecho las diferencias reales entre ambos son bastante escasas si quitamos el cambio de protagonistas y de hilo argumental. Todo aquel que haya jugado a Drakengard no podr¨¢ evitar que el desarrollo de las misiones y los combates de la precuela le vengan a la mente al ir avanzando en este segundo cap¨ªtulo. La lista de novedades es bastante corta, aunque contiene elementos interesantes como los nuevos ataques especiales del drag¨®n o la posibilidad de manejar a los personajes aliados en cualquier momento. Comentaremos esta lista al completo un poco m¨¢s adelante, por ahora basta con decir que el juego realmente se asemeja m¨¢s a una puesta al d¨ªa de lo que hay que a una entrega totalmente nueva.

Como en la anterior ocasi¨®n , la historia contiene una fuerte carga de di¨¢logos y escenas intermedias, lo que pone de relevancia el peso que se le ha querido dar sobre la jugabilidad. Uno de los baluartes de su predecesor fue su interesante y elaborado hilo conductor, algo que se va a mantener y a mejorar en esta ocasi¨®n, reforzado adem¨¢s con numerosos videos CG de calidad notable. Se nota que la inversi¨®n en tecnolog¨ªa es bastante superior a la de la primera parte, cosa que favorece a la espectacularidad. Para no desentonar, el motor gr¨¢fico se ha puesto al d¨ªa y la mejor¨ªa es evidente, a pesar de no llegar a ser un t¨ªtulo que despunte visualmente en la negra de Sony.

Lo que m¨¢s llama la atenci¨®n es la mejor¨ªa en la distancia de visionado, que se ha alargado considerablemente, y en el que se ha dejado bastante de lado el socorrido recurso de la niebla para ocultar las zonas lejanas. Por otro lado los modelos tienen una carga poligonal mucho m¨¢s alta y las texturas han ganado en definici¨®n y tama?o, a pesar de que los escenarios siguen siendo tremendamente simples, al menos en las zonas de campo abierto. El repertorio de efectos visuales tambi¨¦n ha recibido mejoras y veremos una gran gama de cortes, explosiones y magias perfectamente representadas en pantalla.

En el caso del combate exclusivamente a¨¦reo, las fases durar¨¢n menos por norma general, aunque la abundancia de enemigos puede ponernos las cosas complicadas si no nos movemos r¨¢pidamente. Al igual que en la mayor¨ªa de las misiones a pie, nuestro objetivo ser¨¢ destruir a todos los enemigos en pantalla, para posteriormente dirigirnos a un punto determinado del mapa desde el que continuaremos nuestro avance por la historia. Esta mec¨¢nica resulta algo mon¨®tona inicialmente hasta que los desaf¨ªos se van haciendo mayores y la dificultad aumenta considerablemente.

Sali¨¦ndose un poco de la t¨®nica mata-mata que envuelve a la mayor¨ªa de misiones encontraremos algunos objetivos secundarios que cumplir, como proteger a nuestros soldados, o la pura exploraci¨®n de los extensos mapeados. Esto en la mayor¨ªa de los casos nos reportar¨¢ experiencia y suculentos objetos para a?adir a nuestro inventario. Lamentablemente los enemigos no presentan ning¨²n desaf¨ªo, al menos los que encontraremos en tierra firme, adem¨¢s de ser tremendamente repetitivos por el uso de un n¨²mero muy limitado de modelos y por su reutilizaci¨®n para formar aut¨¦nticos ej¨¦rcitos de clones.

Como hab¨ªamos comentado, el n¨²mero de novedades no es demasiado grande pero las existentes vienen a pulir detalles negativos?de su predecesor.?La principal novedad est¨¢ en el sistema de control que se ha mejorado respecto el anterior junto con el control de la c¨¢mara. Lo cierto es que han acertado de pleno en el control de ¨¦sta, ya que a penas tendremos que moverla durante la acci¨®n para contemplar lo que pasa a nuestro alrededor. Siempre tendremos una buena perspectiva sin tener que preocuparnos de moverla, cosa que podremos hacer sin problemas con el stick anal¨®gico derecho. El control de Nowe es muy sencillo y se ajusta a los patrones cl¨¢sicos en el mundo de los beat'em up. Contaremos con dos botones de ataque, uno fuerte y otro d¨¦bil, con los que realizar combinaciones al golpear. Estas combinaciones se nos ir¨¢n ense?ando cuando nuestras armas suban de nivel al ganar experiencia.

Adem¨¢s de los botones de ataque, contaremos con el conocido salto y la posibilidad de lanzar ataques especiales, similares a hechizos, que necesitar¨¢n de una barra de energ¨ªa m¨¢gica cargada. Tambi¨¦n contaremos con la posibilidad de bloquear y esquivar ataques mediante movimientos laterales o una voltereta trasera. Los controles una vez estemos en el drag¨®n ser¨¢n similares en cuanto a las esquivas, aunque perderemos el bot¨®n de salto como es l¨®gico. En caso de que estemos jugando una misi¨®n que se desarrolle tanto en tierra como en el aire, podremos montar o desmontar de nuestro drag¨®n mediante la pulsaci¨®n del bot¨®n de SELECT de nuestro pad. De esta forma podremos desplazarnos por el campo de batalla r¨¢pidamente y lanzar a nuestro personaje al combate directamente en el centro del conflicto.

El combate recuerda mucho a los?t¨ªtulos de acci¨®n multitudinaria como la mentada serie de Koei, tanto por n¨²mero de enemigos en pantalla como por el tiempo que tardan en morir ¨¦stos, que suele ser ¨ªnfimo. Esto conlleva que nuestro personaje sea una aut¨¦ntica picadora de carne, capaz de mandar al otro barrio a cientos de enemigos sin despeinarse. Si nos montamos en el drag¨®n la cosas mejoran a¨²n m¨¢s para nosotros ya que la gran mayor¨ªa de enemigos ni siquiera podr¨¢ contestar nuestros ataques al estar nosotros fuera de su alcance. Afortunadamente hay ciertos enemigos que nos supondr¨¢n mayor desaf¨ªo, como en el caso de los gigantes. Estas moles nos golpear¨¢n con enormes trozos de piedra y lo har¨¢n tanto si estamos en el suelo como si vamos montados en nuestra mascota, lo que a la postre resultar¨¢ en interesantes duelos.

Se ha mantenido el interfaz y el sistema de experiencia del primer cap¨ªtulo aunque con alguna variaci¨®n en ¨¦ste ¨²ltimo, como la posibilidad de subir de nivel durante una misi¨®n y no solamente entre ellas. El inventario sigue siendo el anillo que se sit¨²a en la parte superior izquierda y resulta muy r¨¢pido de acceder y consultar. Adem¨¢s estar¨¢ dividido en categor¨ªas y agrupar¨¢ los objetos del mismo tipo, todo un acierto. Destacable tambi¨¦n la posibilidad de controlar a cualquier aliado con solo pulsar un bot¨®n, y no teniendo que esperar a eventos muy espec¨ªficos como se estableci¨® en el primer Drakengard. En principio el n¨²mero de personajes ser¨¢ escaso, pero en cuanto avancemos un poco tendremos un buen n¨²mero de h¨¦roes disponibles, cada uno con armas de un tipo. Esta especializaci¨®n los convertir¨¢ en adecuados para unas situaciones pero in¨²tiles en otras, de nuevo aqu¨ª se introduce un componente estrat¨¦gico al desarrollo del juego.

Adem¨¢s de los h¨¦roes, en muchas misiones combatiremos junto a personajes manejados por la IA, que si bien no gozan del mismo poder destructivo que nosotros, har¨¢n lo que puedan para eliminar a las hordas enemigas. La posici¨®n de estos aliados la conoceremos en todo momento gracias al minimapa que se sit¨²a en la esquina superior derecha de la pantalla. Este mapa es ampliable para mostrar todo el extenso territorio y tener controlado todo lo que ocurre en las batallas, as¨ª como cualquier imprevisto que pueda surgir. Por si acaso, es m¨¢s que recomendable tenerlo bien visible y acostumbrarnos a mirarlo a menudo para llevar a buen puerto las misiones.

Al igual que en la primera parte, en Drakengard 2 nuestro personaje ganar¨¢ puntos de experiencia que nos permitir¨¢n hacerlo m¨¢s destructivo, as¨ª como a nuestro drag¨®n. De la misma forma las armas tambi¨¦n ganar¨¢n sus propios niveles, como ya hemos dicho, que nos llevar¨¢n a un desarrollo mejor de sus capacidades destructivas. Como vemos el componente de RPG es muy escaso, pero sirve para a?adir algo de profundidad al sistema de ataques y armas. El drag¨®n no ser¨¢ capaz de aprender nuevos tipos de ataque pero s¨ª que mejorar¨¢ el da?o que realiza con su ataque b¨¢sico y con los especiales.