Mass Effect

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Una nueva odisea espacial

En Mass Effect, la acci¨®n se desenvuelve en pleno siglo XXIII, ¨¦poca en que la humanidad por fin consigue alcanzar la tecnolog¨ªa que permitir¨¢ explorar recodos del universo hasta entonces inalcanzables para el g¨¦nero humano. Antes de lanzarnos a un viaje entre constelaciones -en calidad de alto oficial de una nave de reconocimiento-, ser¨¢ mejor asumir que nuestro paseo por el mar espacial no nos har¨¢ sufrir ning¨²n trastorno derivado del vac¨ªo y la soledad inmensas. Se sabe que hay algo ah¨ª fuera, pero s¨®lo de ti depende averiguar el qu¨¦. As¨ª pues, en nuestra misi¨®n interplanetaria tendremos por fin la oportunidad de entrar en contacto con seres y civilizaciones nunca concebidos, y como podr¨¦is adivinar, en muchos planetas no nos recibir¨¢n con los brazos abiertos.

Con el salto generacional, Bioware ha concebido un juego de proporciones colosales, ambientado en un futuro "realista" que pasa por una ¨¦poca de indagaci¨®n espacial, en donde viajaremos por los lugares m¨¢s rec¨®nditos de nuestra galaxia no s¨®lo para investigar, sino tambi¨¦n para defender la paz (ya que formamos parte de una alianza que tiempo atr¨¢s jur¨® proteger la justicia y la armon¨ªa del universo). Adem¨¢s, cuando uno de nuestros compa?eros se rebele y lance una ofensiva contra mundos indefensos, la misi¨®n de frenar sus delirios coloniales caer¨¢ sobre nuestras espaldas y supondr¨¢ el arranque de nuestras misiones espaciales menos id¨ªlicas.

Buscas respuestas, pero encuentras m¨¢s preguntas

De todas formas, parece ser que la trama principal del juego girar¨¢ en torno al conflicto derivado de la disputa entre las formas de vida artificiales contra las org¨¢nicas, que estar¨¢n presentes tanto en el nuestro bando como en el alien¨ªgena. La biotecnolog¨ªa y la cibern¨¦tica nos han dotado de unos poderes que, si bien han permitido el progreso de la humanidad y la conquista gal¨¢ctica, nos har¨¢n pensar acerca de si estamos perdiendo nuestra faceta m¨¢s humana a la par que descubrimos horrorizados como cada vez nos parecemos m¨¢s a las criaturas espaciales, a las que en muchas ocasiones debemos aplacar.

Y ya que estamos tocando el tema del argumento, sabed que ser¨¢ tan extenso como el universo que abarca, pues Mass Effect, aunque con final cerrado, ser¨¢ el primer juego de una trilog¨ªa, la segunda que hospeda la 360 despu¨¦s de Too Human. Dicho sea de paso, las odiosas comparaciones de ¨¦sta con el t¨ªtulo de Bioware no se han hecho esperar.

Uno de los pilares del juego se dice que ser¨¢ el cuidado con el que debemos dotar a nuestras acciones, sin olvidar en ning¨²n momento las obligaciones de embajador de nuestro mundo, ya que absolutamente todo lo que hagamos quedar¨¢ reflejado en el porvenir de la humanidad. La carga ¨¦tica y moral que desprende la aventura puede ser un condicionante que influya en nuestra toma final de decisiones?

Acoples de un mundo real

La mayor¨ªa de los responsables del proyecto Mass Effect est¨¢n ya curtidos en el g¨¦nero del rol espacial, pues proceden de los equipos de desarrollo encargados en su d¨ªa del KOTOR original. A buen seguro que m¨¢s de una similitud del esqueleto de ambos juegos saltar¨¢ a la vista. Sin embargo, el sistema de combate, que ser¨¢ en tiempo real, mezclar¨¢ el shooter con la estrategia que deberemos decidir para nuestro tr¨ªo combatiente. Ser¨¢ reminiscente de KOTOR por las ¨®rdenes que damos en batalla, aunque seg¨²n el equipo de desarrollo, 'Mass Effect se juega como un shooter pero avanza como un RPG', con lo cual la mezcla de g¨¦neros quedar¨¢ patente en los enfrentamientos contra alien¨ªgenas. En combate, nuestro peque?o escuadr¨®n har¨¢ uso de habilidades potenciadas por la biotecnolog¨ªa, consiguiendo unos ataques y unas armas que se prestar¨¢n al espect¨¢culo.

Uno de los puntos fuertes del juego ser¨¢ sin duda el excelente nivel gr¨¢fico del que se har¨¢ alarde, que poco a poco vamos viendo c¨®mo se asemeja cada vez m¨¢s a pel¨ªculas digitales como Advent Children. Tan en serio se han tomado en Bioware la posibilidad de difuminar los l¨ªmites entre cine y videojuego, que los NPCs que encontraremos en el universo de Mass Effect ser¨¢n actores con un nivel de detalle alucinante. Tan s¨®lo con mirarles a la cara bastar¨¢ para saber que disposici¨®n tienen hacia nosotros, es decir, si estar¨¢n de humor para hablarnos...y esto no es todo: dependiendo de c¨®mo interactuemos con ellos, la charla seguir¨¢ unos derroteros u otros. Imaginad la siguiente situaci¨®n: das una orden, tu compa?ero asiente sin decir nada pero se va con el ce?o fruncido? ?te fiar¨ªas de ¨¦l? Esperemos que realmente todo el trabajo que supondr¨¢ implantar este sistema (montones de esc¨¢ners faciales y de capturas de movimiento) no agote a los chicos de Bioware y decidan darle un nuevo rumbo a este proyecto, que de momento a¨²na la esencia que sabe imprimir a todos sus juegos con todas las posibilidades emocionales que reporta ser testigos de un mundo que parece respirar.

El desarrollo de Mass Effect se basar¨¢ en rutas espaciales. De entre los caminos que se van abriendo ante nosotros conforme nos adentramos m¨¢s y m¨¢s en los confines interestelares, habr¨¢ algunos optativos cuya exploraci¨®n ir¨¢ encaminada ¨²nicamente a abastecernos de cualquier material y energ¨ªa. Estas v¨ªas alternativas no formar¨¢n parte del arco argumental y lo que encontremos en ellas puede que nos sea de gran utilidad durante nuestra odisea espacial. Los caminos habituales nos conducir¨¢n a planetas hostiles en donde el ser humano no ha puesto el pie nunca, aunque buena parte del juego puede consistir en misiones militares que llevaremos a cabo con nuestro grupo de tres. Y para empezar con buen pie repartiendo le?a, nada mejor que contar con armas e influencia desde el principio, un factor nunca antes incorporado a un juego de Bioware.

Mass Effect sacar¨¢ partido del servicio Live de Microsoft gracias a descargas que ampliar¨¢n el argumento del juego una vez que lo terminemos, para quedar as¨ª perfectamente ligado a su posterior entrega y de paso refrescarnos la memoria. Del mismo modo accederemos a nuevos contenidos, a¨²n no revelados por Bioware. Los que sufran pensando en que pasar¨¢ con los personajes que tanto nos har¨¢n sudar el mando, que dejen ya de hacerlo, pues continuar¨¢n la historia con la misma equipaci¨®n y habilidades que en su anterior entrega.

A¨²n queda mucho para la cuenta atr¨¢s

Si todo esto a¨²n no has puesto los dientes largos, enhorabuena. Los que hayan le¨ªdo hasta aqu¨ª y que por culpa de la impaciencia ya empiecen a dar con el pie golpecitos en el suelo, calma. Un juego de estas caracter¨ªsticas mejor que vaya lento pero seguro, y aunque a¨²n no haya fecha de salida, si se retrasa m¨¢s de lo previsto est¨¢ m¨¢s que justificado. Si no, que le pregunten a George Lucas lo que cuesta llevar a la vida una saga espacial.  

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