True Crime 2: New York City

El crimen llega ahora a las calles de Nueva York. Sin embargo, Marcus Reed estar¨¢ all¨ª para impedirlo... o no. Decide tu propio camino, de ti depende la evoluci¨®n del crimen en la ciudad en la segunda parte de True Crime.

Activision vuelve a explotar la f¨®rmula de un juego que le ha proporcionado bastante ¨¦xito. True Crime era un m¨¢s que interesante juego de acci¨®n que hizo las delicias de un gran n¨²mero de aficionados al g¨¦nero por todo el mundo. A pesar de no poder hablar de un t¨ªtulo realmente rompedor, s¨ª que gozaba de elementos m¨¢s que suficientes para satisfacer las necesidades de aquellos que buscaban acci¨®n y aventura a raudales.

El juego ofrec¨ªa al jugador la posibilidad de acabar con el crimen urbano a trav¨¦s de las calles de Los ?ngeles. Sin embargo, esta no es la ¨²nica ciudad que sufre las terribles consecuencias del crimen, y en esta ocasi¨®n la acci¨®n se sit¨²a en otra capital americana acosada por las malas compa?¨ªas: Nueva York. La acci¨®n se traslada, pero mantiene toda su esencia en esta secuela que ofrece mejoras a la f¨®rmula que ya tuvo su ¨¦xito en la primera parte.

Ampliar

Ampliar

En esta secuela, el protagonista ser¨¢ Marcus Reed, un antiguo criminal que se ha reconvertido en polic¨ªa. Su deber ser¨¢ mantener las calles que se encuentran bajo su supervisi¨®n libres de la escoria a la que ¨¦l mismo perteneci¨® y que detesta, mientras sigue el rastro del asesino de su mentor. Las ansias de venganza ser¨¢n llevadas al extremo, mientras intenta mantenerse dentro de los m¨¢rgenes de la ley.

El juego promete ofrecer una realista experiencia de Manhattan, con unas representaciones lo m¨¢s reales posibles de la ciudad, con calles fieles a las que componen la gran manzana. De este modo, se podr¨¢ disfrutar de recreaciones detalladas de zonas tan emblem¨¢ticas y mundialmente conocidas como Times Square.

Reed, en su papel de polic¨ªa, podr¨¢ acabar con los criminales que pueblan las calles de Nueva York o dejar que el crimen florezca, dando al jugador libertad en ese aspecto. Las acciones realizadas por el usuario influir¨¢n en el desarrollo del juego, afectando por ejemplo al n¨²mero de criminales que pueblan las calles, y del mismo modo, en el aspecto gr¨¢fico, se ver¨¢n reflejadas en las distintas zonas de la ciudad, con mayor o menor ¨ªndice de destrucci¨®n.

Adem¨¢s, la interacci¨®n con los escenarios ser¨¢ total, y pr¨¢cticamente cualquier objeto a nuestro alrededor podr¨¢ ser empleado como arma para acabar con los enemigo. Esta variedad de armas se unir¨¢ a una amplia gama de estilos de combate callejero, adem¨¢s del arsenal de armas de fuego. Sin olvidar los tiroteos en coche a altas velocidades. Sin duda, las opciones del juego en este aspecto, son numerosas.

Los desarrolladores del juego prometen un t¨ªtulo mucho m¨¢s grande que la primera entrega, y lo cierto es que por lo visto hasta la fecha, y con todo lo prometido, es m¨¢s que factible creer que van a cumplir su promesa. Gr¨¢ficamente, el juego parece estar a la altura de lo que se espera de un t¨ªtulo de PlayStation 2 a d¨ªa de hoy, e incluso parece intentar llegar m¨¢s all¨¢, ofreciendo unos escenarios muy realistas.

La gran variedad de opciones de combate hacen todav¨ªa m¨¢s interesante a este t¨ªtulo, ya que si la jugabilidad est¨¢ finalmente a la altura y las diferentes posibilidades de juego son llevadas a cabo sin mayores problemas, True Crime: New York City se convertir¨¢ en un juego lleno de posibilidades que ofrecer¨¢ muchas horas de juego y atraer¨¢ a un gran n¨²mero de usuarios que ya disfrutaron de una idea similar pero desde el otro lado con la saga Grand Theft Auto.

Todav¨ªa no se han desvelado muchos m¨¢s datos de un t¨ªtulo que, pese a las dispares cr¨ªticas de su primera parte, ha conseguido sobreponerse y promete superarla en todos sus aspectos, consiguiendo despertar incluso el inter¨¦s de los m¨¢s esc¨¦pticos. True Crime: New York City llegar¨¢ a finales de a?o a PC, PlayStation 2, XBOX y GameCube, y ser¨¢ entonces cuando veamos si se convierte en una m¨¢s que agradable sorpresa o nos llevaremos un nuevo chasco.

Ampliar

Ampliar