Namco Museum

Namco repite colecci¨®n con sus cl¨¢sicos m¨¢s celebrados. ?Qu¨¦ novedades ofrece este nuevo recopilatorio? Prep¨¢rate para volver a disfrutar con tus fantasmas del pasado.

Desde luego hay algunos juegos por los que no pasa el tiempo, o, mejor, a los que la edad les sienta muy bien. Sucede lo mismo que con el buen vino o las grandes novelas, en general con todo aquello que no tiene tanto que ver con lo estrictamente f¨ªsico, sino m¨¢s bien con su qu¨ªmica o esp¨ªritu.

A todos los que llevamos cierto tiempo so?ando en este mundo, tambi¨¦n a los ne¨®fitos bien avenidos, nos vienen a la cabeza decenas y decenas de videojuegos que cabr¨ªan perfectamente en esa categor¨ªa de cl¨¢sicos atemporales, incluso siendo absolutamente modernos estas joyas se nos multiplican, nos asaltan el recuerdo, qui¨¦n no ha suspirado rememorando esas carreras, esas m¨²sicas, esa pantalla n¨²mero siete.

Las compa?¨ªas, casi exclusivamente japonesas, que en su d¨ªa crearon tales obras de arte, han colaborado extensamente en este recuerdo com¨²n, reuniendo absolutamente todo lo que en su d¨ªa fue y a¨²n hoy puede ser comprado. Tal af¨¢n recaudatorio nos permitir¨¢ disfrutar en breve de un nuevo recopilatorio de los chicos de Namco, esta vez en formato UMD para la negra port¨¢til de Sony y con el t¨ªtulo completo Namco Museum Battle Collection. Veamos qu¨¦ nos ofrece.

Namco Museum Battle Collection para PSP fue lanzado en Jap¨®n a finales de febrero de este a?o. En el UMD se reproducen conversiones perfectas de las famosas recreativas, incluyendo los juegos originales Pac-Man, Ms. Pac-Man, DigDug, Galaga, Galaxian, Rally-X y New Rally-X, y actualizaciones o versiones "arregladas" (literalmente, con la coletilla Arrangement) de Pac-Man, DigDug, Galaga y New Rally-X, a?adiendo efectos gr¨¢ficos, nuevos niveles, m¨²sicas y diversos artefactos para disfrute del ni?o y la ni?a.

Lo cierto es que no se puede criticar la inclusi¨®n de ninguno de estos juegos, algo que supone una refrescante novedad en las recopilaciones de sus juegos antiguos por parte de Namco. Todos ellos, sin excepci¨®n, comprenden un magn¨ªfico recorrido por las primeras trayectorias tanto de la compa?¨ªa como del mundo del videojuego.

Ah¨ª est¨¢ Pac-Man. El ejemplo (y reclamo) perfecto no puede ser otro. ?Qui¨¦n se puede resistir a echarse una partidita al Pac-Man? No ser¨¦ yo, desde luego. En esta versi¨®n incluso podremos rotar 90 grados la pantalla para tener la misma visualizaci¨®n que en el original (posibilidad habilitada tambi¨¦n para Ms Pac-Man, Galaga, Galaxian, y Dig Dug). Con Pac-Man se inici¨® el g¨¦nero del Sigilo, del que despu¨¦s tratar¨ªa de apoderarse Metal Gear. Si por algo se hizo famoso fue por la depurada Inteligencia Artificial de los cuatro fantasmas encargados de atraparnos. Cada uno con su propio comportamiento: el que trata de alcanzarnos por la v¨ªa m¨¢s directa, el veloz, el que huye, el que planta malvas. Todo tan simple pero tan adictivo que uno no puede parar de perder vidas por ese peque?o despiste y volver a intentar completar la misma pantalla una y otra vez, una y otra vez, desde hace tantos a?os...

O Ms Pac-Man, versi¨®n depurada del anterior que incluye las frutas para conseguir puntos, nuevos dise?os de pantallas y una IA mucho m¨¢s refinada. En Pac-Man los fantasmas siempre reaccionan de la misma manera a los movimientos del jugador, de forma que siguiendo un patr¨®n determinado siempre puedes acabar los niveles de la misma manera. En Ms Pac-Man esto ya no es posible: los enemigos ya no siguen rumbos fijos ni act¨²an siempre seg¨²n las mismas coordenadas, el desaf¨ªo aumenta.

Siguiente: Dig Dug, el juego del astronauta que se dedica a las perforaciones y a acabar con los simp¨¢ticos animalitos terrestres infl¨¢ndolos con sa?a. Juego realmente adictivo, cuyas ¨²nicas lacras son el pobre y f¨¢cilmente identificable patr¨®n por el que se puede eliminar a cualquier enemigo, y una curva de dificultad que se detiene al cabo en un punto determinado en el que puedes permanecer para siempre (y no sentirte solo nunca jam¨¢s).

Galaga supuso el culmen en los arcades estilo Space Invaders. Un juego variado, de movimientos suaves y agradables m¨²sicas que presentaba aquel punto de originalidad que se convirti¨® en su se?a de identidad: la extraordinaria posibilidad de recuperar la nave que anteriormente te hab¨ªan capturado, reagrup¨¢ndola con la nave activa, de forma que pod¨ªas disponer de dos naves y el doble de poder destructor. Nada del otro mundo, tal vez, desde el punto de vista actual, pero una innovaci¨®n dentro del g¨¦nero y una magistral forma de mantener la tensi¨®n en los momentos cumbres. Galaxian no deja de ser su hermano mayor.

Rally-X es una especie de Pac-Man con veloces coches recorriendo inmensas pantallas en busca de banderitas que recolectar, tratando de mantener el combustible para lograr alcanzar cada objetivo, y pudiendo 'humear' los coches enemigos quemando parte de tu propia gasolina. Salvar los obst¨¢culos mientras atiendes al radar para conseguir las banderas, b¨¢sicamente se trata de conseguir eso. Como en New Rally-X, exactamente el mismo juego con leves mejoras.

Las versiones Arrangement de Pac-Man, DigDug, Galaga y New Rally-X nos proponen los mismos desaf¨ªos ya comentados para los juegos originales, con alg¨²n a?adido jugable (por ejemplo teletransportadores en el Pac-Man, o diferentes terrenos en el New Rally-X), mejores gr¨¢ficos, animaciones, m¨²sica, o los inevitables a?adidos en 3D sin efectos en el juego pero que consiguen aportar cierta modernidad est¨¦tica.

No pod¨ªamos pasar por alto el hecho de que Namco Museum es el primer t¨ªtulo en aprovechar el prometedor modo Game Sharing de PSP. ?Qu¨¦ significa esto? A partir de un solo juego, podremos descargar partes de ¨¦l para poder disfrutar en otras PSP sin necesidad de contar con otras copias del mismo. De esta forma, podremos disfrutar de cualquiera de los juegos originales que contiene este UMD (no se incluyen para la descarga las versiones Arrangement) sencillamente acerc¨¢ndonos a un amigo que posea la copia del juego y seleccionando las opciones de descarga espec¨ªficas del modo Game Sharing. Por desgracia, s¨®lo tendremos la opci¨®n de jugar un nivel de cada juego. En el futuro esperamos ver esta opci¨®n mucho m¨¢s desarrollada en otros t¨ªtulos.

Esta compilaci¨®n, ya de por s¨ª atractiva con los juegos que incorporaba la entrega japonesa, se vuelve casi imprescindible con los nuevos a?adidos. La salida al mercado occidental de Namco Museum Battle Collection est¨¢ prevista para verano de este a?o en Norteam¨¦rica. En Europa tenemos complicado ver el lanzamiento para esas fechas, dada la ausencia territorial de la port¨¢til de Sony hasta septiembre. Para entonces esperamos poder contar con todos los t¨ªtulos que deseamos desde la distancia y la fe. Y entre ellos ¨¦ste y sus m¨¢s de veinte perlas jugables de sabor a?ejo.